CAPÍTULO 5: A WALK ON THE WILD SIDE
—— A WALK ON THE WILD SIDE ——
—¿Qué estás haciendo aquí?— Preguntó Klaus al ver a su hermana mayor, la cual estaba en una se las habitaciones haciendo yoga.
—Vivo aquí.— Respondió la bruja con obviedad, sin dejar de hacer lo que estaba haciendo.
—Sí, obviamente.— Respondió sarcásticamente el híbrido, el cual estaba cansado del comportamiento que su hermana mayor estaba teniendo. —Lo que me sorprende es que hayas vuelto de donde quiera que hayas estado.— Añadió haciendo reír a Freya por su comentario, ya que no exageraba Rebekah cuando decía que el híbrido era el más sobreprotector de todos. —Tal vez mi desconcierto se deba a la ausencia de caballeros desconocidos rebuscando en mi nevera esta mañana.— Supuso asumiendo que la ausencia de hombres se debía a la ausencia de Freya aquella noche.
—Tu preocupación por mi paradero es conmovedora.— Se burló Freya sarcásticamente.
—Simplemente quiero saber quien esta aquí en un momento dado, no creo que sea mucho pedir.— Pidió su hermano, cansado de los huéspedes nocturnos que solían venir en la noche al complejo.
—Bueno, siempre y cuando pasemos lista.— Intervino en ese momento Yelena, la cual había ido al complejo a buscar a Astrid.
—Vaya, pero si es la encantadora Yelena. Astrid ya sabe que estás aquí, o prefieres evitarla.— Quiso saber el híbrido mientras se daba la vuelta y miraba a la joven, aunque era cierto que la mayoría de los Mikaelson no aguantaban a los primeros de cada estirpe, todos estaban de acuerdo con que Yelena era la excepción, la joven siempre había intentado ayudarles y siempre había estado de su parte, y a diferencia del resto el vampirismo no cambió mucho su actitud, solo la hizo ser más valiente y temeraria de lo que acostumbraba a ser.
—Bueno teniendo en cuenta como de agradable fue la última vez que te vi, he preferido mantener las distancias, por seguridad.— Explicó la vampira recordando que la última vez que se encontró con Klaus, este asumía que ella sabía el paradero de Astrid y aunque no era así, el híbrido no aceptaba el «no» por respuesta, para su suerte Elijah estuvo ahí y evitó que corriera un muy doloroso destino antes de la muerte.
—Y asumo que estas aquí para mantener con vida a tu línea de sangre, o para conspirar en nuestra contra.— Sugirió el híbrido, haciéndola ver que tampoco confiaba del todo en su presencia, a fin de cuentas la profecía decía que uno de ellos caería por un amigo.
—Las guerras entre las estirpes son reales, Klaus. Ya han matado al primero de la línea de Leo, así que asumo que cualquiera podemos ser el siguiente objetivo.— Intervino Astrid en ese momento, viendo que el híbrido todavía era algo reaccio a creerse que las guerras entre estirpes fueran reales, pero para su desgracia eran demasiado reales.
—Y por eso estoy aquí, he venido a ayudar. Teniendo en cuenta que Lucien y Tristan están en la misma ciudad, es muy probable que la desquiciada de Aurora también aparezca, y entre que una está loca y los otros dos se odian a muerte... Supongo que harán de tu maravillosa ciudad un baño de sangre.— Respondió Yelena con obviedad, haciendo que tanto Klaus como Astrid se dieran cuenta de que tenía razón, era extraño que Aurora no hubiera aparecido cuando Tristan era ciego por ella, pero casi era mejor que no estuviera, todos sabían que estando los tres en aquella ciudad las cosas no podrían salir nada bien para ninguno de ellos.
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—Vaya, esas marcas no anticipan nada bueno.— Comentó Leonidas al ver que algunas venas de la espalda de su hermana se estaban poniendo de color negro, y cuando eso pasaba no solía suceder nada bueno, por lo menos para quien las tenía.
—Nunca me salían cuando hacía magia negra.— Murmuró Astrid sin comprender como es que podían haber aparecido, cuando en realidad siempre había sido inmune, de alguna forma, a la magia negra.
—Has vuelto a ella.— Asumió su hermano al ver que su hermana tenía aquellas marcas como indicios de los hechizos que había hecho, lo que quería saber era que clase de hechizos había estado haciendo.
—Busco una solución, alguna pista que pueda llevarnos hasta... bueno, quienes quieren que acabemos muertos.— Explicó su hermana mientras se aseguraba de que Hope siguiera dormida.
—Ya, lo he oído. Dominic esta muerto, me pregunto quien le habrá matado.— Quiso saber su hermano mientras se apoyaba en el marcó de la puerta mientras su hermana cerraba la puerta de la habitación de la niña.
—Los míos y los suyos están en busca de respuestas.— Intervino en ese momento Yelena, haciendo que Leonidas se diera la vuelta para poder ver a la vampira la cual sonrió, al ver a los dos hermanos. Aunque también la hubiera gustado ver de nuevo a Eliana, pero la circunstancias eran muy diferentes.
—Vaya, pero si es Yelena.— Comentó el Original sorprendido de ver allí a la vampira, aunque teniendo en cuenta todo lo que estaba pasando en verdad no debía de sorprenderle tanto. —¿Y tienes alguna pista?— Preguntó yendo directamente al grano, con respecto a quien había matado a Dominic, el primer vampiro que él había convertido.
—De momento no. Pero encontraré al respirable, a fin de cuentas Dominic fue lo más parecido que tuve a un hermano. Y eso me lleva a la siguiente pregunta, ¿quienes creéis que tiene el arma para mataros?— Comentó haciendo que los dos hermanos se mirasen confundidos al no comprender lo que ella estaba insinuando. —He hecho suposiciones, y teniendo en cuenta que si Rebekah muere Aurora lo hará y si Elijah lo hace Tristan se va con él. Asumo que ninguno de los dos quiere perder al otro.— Explicó haciendo que Astrid se diera cuenta de quien podía ser el que seguramente tuviera el arma para acabar con cualquier Original, y asegurarse de que siguiera con vida por otros diez siglos o tal vez muchos más.
—Así que crees que la arma la tienen ellos para usarla en contra de Klaus, de Leo o de mi hermana.— Intervino en ese momento Taylor haciendo que Yelena la mirase confundida, ya que no sabía que Astrid tenía otra hermana.
—¿Quien es esta? ¿Desde cuando tienes una hermana?— Preguntó la vampira confundida, dándose cuenta de que habían estado pasando muchas cosas desde la última vez que había visto a Astrid en una convención en Italia casi diez años atrás.
—Han pasado muchas cosas, entre ellas Taylor, mi hermana pequeña. La cual podría provenir de mi línea de sangre.— Explicó Astrid sabiendo que ya no solo estaban en peligro los Originales y aquellos que venían de ellos, sino también Taylor y la posibilidad que fuera híbrida por ella, pero también había otro factor que corría peligro y era el destino de Hope.
—Bien, otra más al grupo.— Sonrió Yelena orgullosa de que pudiera tener apoyo para poder evitar que Astrid fuera a terminar muerta.
—¿Y cuál es el plan? Esta claro que alguno de esos tres está maquinando algo.— Quiso saber Astrid mientras se cruzaba de brazos, sabiendo que debían de actuar de forma inmediata.
—¿Por qué no sospechais de ella?— Preguntó Taylor al ver que Yelena parecía estar fuera de los posibles sospechosos que querían ver muertos a todos los miembros o al noventa porciento de ellos.
—Yelena le juro a Astrid que siempre la ayudaría y buscaría la forma de mantenerla con vida.— Explicó Leonidas haciendo que ambas recordarán vagamente aquella situación que no solo la llevó a Yelena a jurarla lealtad, sino también que la llevó a volverse un vampiro.
—Lo jure, por lo que en aquel entonces era lo más importante para mí, mi hermano adoptivo. Alguien ha matado a mi hermano, el primer vampiro de la línea de Leonidas, yo no he sido ni tampoco ha sido alguien que venga de Astrid, así que me quedan tres sospechosos.— Sentenció con firmeza, sabiendo que el responsable debía de ser algún vampiro de las otras líneas, y teniendo en cuenta lo que pasaba Yelena tenía tres sospechosos y uno de ellos, era capaz de hacer cualquier cosa con tal de conseguir lo que quería, y esa era Aurora la cual siempre había estado celosa de que Leonidas eligiera antes a sus hermanas que a ella, pero las cosas eran mucho más complicadas que lo que la vampira creía, los tres habían pasado por tanto que se habían prometido mantenerse unidos, pasara lo que pasara y ahora que solo quedaban dos, aquella promesa se había reforzado.
—¿Enserio crees que Aurora ha podido ser?— Preguntó Leonidas sin creerse lo que estaba insinuando la morena.
—Sin duda no recuerdas lo desquiciada que estaba.— Comentó su hermana mientras ponía los ojos en blanco, viendo que su hermano seguía cegado, pero era evidente de que la menor de los De Martel estaba no solo obsesionada con él, sino también loca.
—¿Quien es Aurora?— Preguntó Taylor al no comprender nada, ya que nadie, tampoco, la estaba explicando nada. Apenas sabía de aquellos vampiros que eran los primeros que convirtieron, tampoco sabía sus historias, pero sí sabía que parecían bastante peligrosos y capaces de hacer cualquier cosa.
—Una antigua amiga.— Se limitó a decir el Original, haciendo reír a su hermana.
—Aunque me encantaría escuchar esa fascinante historia, tengo unas cosas que hacer, así que espero que me cuentes esa historia después.— Comentó Taylor, viendo que aquella historia parecía tener mucho más trasfondo de lo que creía.
—Sin duda es tu hermana, se parece a ti.— Observó Yelena después de que Taylor se marchara.
—Y tiene un genio de perros.— Garantizó Leonidas mientras ponía los ojos en blanco.
—¿Mujer lobo?— Preguntó Yelena sabiendo que aquel comentario venía con segundas intenciones.
—Híbrida, una larga historia.— La corrigió Astrid queriendo omitir toda la historia que había detrás, principalmente porque no la gustaba recordar nada lo que pasó aquel día.
—Me estoy dando cuenta de que hay muchas largas historias.— Observó la morena, justamente cuando el teléfono de la rubia comenzaba a sonar de manera incesante.
—¿Qué pasa, Freya?— Preguntó Astrid asumiendo que algo ocurría.
—Necesito tu ayuda.— Se limitó a decir la bruja.
—Claro, ya voy. Enviame la dirección.— La pidió confirmando con el comentario de ella que algo sucedía. —Quedaros con Hope.— Les pidió algo desconfiada de que usarán a su hija contra ellos, después de lo que había pasado se esperaban cualquier cosa.
—Es casi mejor que estar aguantandote.— Comentó Leonidas haciendo que su hermana le mirase con una expresión de pocos amigos por su comentario.
—No te preocupes, me quedare con él.— Intervino rápidamente Yelena, recordando el fuerte carácter que Astrid tenía, y asumiendo que ahora que era una híbrida por completo debía de haberse intensificado.
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—Por favor, estáis en vuestra casa.— Comentó Lucien sarcásticamente justamente cuando abrió la puerta y Freya y Astrid entraron como si nada.
—Agg, huele a sangre seca y a colonia barata.— Se quejó Astrid al percibir el fuerte olor que había, olor que tampoco había pasado desapercibido para Freya.
—Es mi perfume natural, a las mujeres les encanta.— Respondió el vampiro, haciendo que ambas le mirasen con una expresión de pocos amigos.
—Si ya has acabado, tomad esto es de ella.— Intervino Klaus mientras le daba a Freya un objeto de la desaparecida bruja adivina.
—Tu hermano le habrá contado a Tristan sobre la profecía.— Afirmó Lucien sabiendo que había sido obra de Tristan el secuestrar a Alexis. —Como ese sádico mal nacido se la ocurra tocarla un solo pelo...— Empezó a decir con frustración.
—Ya, el pelo de la bruja es lo que menos nos preocupa a todos.— Intervino Freya sabiendo que lo que les preocupaba a todos eran las visiones que podía tener, porque aquello les haría saber lo que estaba apunto de acontecer y tal vez una forma para poder pararlo.
—Sin duda tu chica no se resiste mucho a la hora de repartir visiones.— Afirmó Klaus sabiendo que la bruja se vendería al mejor postor, principalmente porque no había puesto resistencia cuando se la habían llevado.
—Alexis no compartirá sus dones con él, aunque si la tortura, quizá ceda.— Admitió Lucien preocupado por la bruja, pero había algo en todo ello que no era creíble para Astrid. Una vez que las dos brujas terminaron de preparar todo, ambas empezaron a recitar el hechizo, haciendo que las semillas que había sobre el mapa se agruparán para a conocer moverse y rodear un lugar en el mapa.
—La villa dubril, ¿os suena de algo?— Les preguntó Astrid a Klaus y a Lucien asumiendo que alguno sabría porque estaba allí.
—Dónde nuestro amigo Tristan se vio con Elijah la otra noche.— Afirmó Klaus sabiendo que quien se la había llevado era el primer sospechoso de Lucien. —Tus temores estaban justificados.— Le aseguro, aunque aquello era más que evidente. La relación de Tristan y de Lucien no era, en absoluto, una bonita amistad.
—Pero somos los dos vampiros más astutos, poderosos y guapos de todos los tiempos.— Comentó Lucien sabiendo perfectamente como convencer a Klaus de hacer cosas que no debería de hacer, y menos con la profecía que les afectaba a todos.
—Por supuesto.— Dijo el híbrido dándole la razón.
—Narcisistas.— Murmuró Astrid mientras ponía los ojos en blanco, llevándose una mala mirada por parte de los dos, en especial por parte de Lucien.
—Aún así nos superan en número, ¿como propones que luchemos contra toda una asociación secreta de antiguos vampiros?— Quiso saber Lucien, sabiendo que debían de sacar de allí a Alexis, y era evidente de que iban a necesitar ayuda, ya no solo para encontrarla sino para sacarla sin que nadie se diera cuenta de que se la estaban llevando.
—Por suerte tengo un plan.— Le tranquilizó Klaus sabiendo que la forma perfecta para sacar a la bruja de allí era haciendo una distracción, por lo que nadie se daría cuenta de ello.
★★★
Bueno, creo que este capítulo es muy interesante. Principalmente por qué sabemos más de las acciones que llevo acabo Klaus cuando Astrid le abandono, y creo que es interesante mostrar que aunque intento ir en busca de Yelena (a la cual Astrid sí pidió ayuda) fue capaz de controlarse y no matarla, y creo que eso es un avance, además de que si la hubiera matado...
Por otro lado, la escena con Taylor, yo solo puedo decir que ame escribir el personaje de Yelena, y aunque no tiene esa gran relevancia en la historia como tal, será importante, a su manera por supuesto, pero creo que os va a gustar el dúo que van a formar Astrid y ella.
Con respecto la escena con Lucien, mira es que no os podéis imaginar el asco que me genera el personaje porque me hace pensar que es un misogino de los cojones, y eso me hace admirar el trabajo de los guionistas y del actor. Entre todos consiguieron crear un personaje con el que no empatizas en ningún momento, es decir con Mikael lo llegas ha hacer, pero con ¿Lucien y Tristan? En absoluto. En cambio, con Aurora sí lo consiguen, y me encantó verla en Legacies.
Como datos extra os diré varias cosas.
El primero, el hermano adoptivo de Yelena es el primer vampiro que Leo convierte, el cual se llama Dominic.
Segundo, Yelena y Leo tuvieron una especie de relación, y evidentemente seguirá en esta historia, por eso elegí a la actriz, ambos hacen de pareja en la serie Charmed, además de que ella es guapísima y moría por usarla.
Y tercero, la presencia de Taylor no será tan continua en esta primera parte, primero por que va muy rápido todo y mi margen de actuación es limitado, y también su relación con Elijah sigue un poco en pausa, seguirá así siempre, pero ya sabéis que yo con Elijah tengo un amor-odio.
Dicho esto, solo me queda decir que en los próximos capítulos se sabrá como morirá un personaje.
¿Qué os ha parecido el capítulo?
Os leo ♥️
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