—— BROKEN UNION ——

—¿Dónde estamos?— Preguntó Leonidas mientras los cuatro se ponían de pies y se daban cuenta de que estaban en otro lugar.

—¡Qué caras más graciosas ponéis cuando alguien os sorprende!— Rió Aurora haciendo que los cuatro Originales se dieran la vuelta para poder mirarla, observando que la pelirroja estaba acompañada por su hermano mayor.

—Me alegro de volver a veros, sobretodo hoy.— Intervino en ese momento Tristan disfrutando con aquella situación de una forma que ninguno de ellos podía llegar a comprender.

—¿Cómo hemos llegado aquí?— Quiso saber Elijah al no comprender, del todo, donde estaban ni como es que les podían haber encerrado con tanta facilidad.

—Uy, esta me la se yo.— Respondió Aurora sonriendo mientras se aferraba al brazo de su hermano mayor. —Es magia representativa, algo en esta sala nos representa a cada uno de nosotros.— Explicó haciendo que cada uno de ellos paseara la mirada por aquel lugar intentando descubrir cual era aquello que les representaba.

—Es lo que les ha permitido a las brujas de Aya traeros hasta esta Chambre de Chasse que crearon para mi.— Añadió Tristan haciéndoles ver que aquella especie de cárcel que las brujas le habían hecho, era lo que le impedía sufrir conscientemente la misma muerte una y otra vez.

—Perfecto, encontramos lo que nos representa y nos vamos.— Respondió Astrid creyendo que iba a ser más sencillo de lo que podía ser, pero la situación era mucho más complicada que lo que creía.

—Podéis intentarlo, pero entretanto los Strix están preparando un hechizo como nunca antes se ha visto.— Explicó Tristan orgulloso de que los suyos estuvieran todavía de su parte, y se hubieran propuesto llevar acabo la desvinculación. —Vamos a romper el vínculo que unen nuestras vidas a las vuestras.— Les informó mientras sonreía, haciendo que los cuatro Originales mantuvieran una expresión de indiferencia ante su revelación.

—No me digas.— Comentó Elijah fingiendo hacerse el sorprendido. —Nuestro Napoleón de segunda esta intentando dejar huella en el mundo con sus sucias garras.— Añadió con burla intentando hacerles ver que no tenían miedo a que rompieran el vínculo, eso no les detendría para matarlos a todos.

—Aunque al final del todo solo le queda las cicatrices de sus fracasos.— Añadió en ese momento Klaus creyendo que no iban a conseguir su propósito, ya que conseguiría salir antes de que tuviera lugar.

—Funcionará, no te preocupes.— Le tranquilizó Tristan manteniéndose optimista. —Pronto ya no estaremos atados a vosotros.— Añadió soltando un respiro de alivio.

—Y cuando eso ocurra, como vuestros cuerpos estarán indefensos y vuestras mentes seguirán aquí, Aya usará el roble blanco para cumplir la profecía.— Añadió su hermana con seguridad de que tendrá lugar la profecía que anunciaba la caída de toda la familia Original.

—Veréis, hoy morireis. Y puesto que el vínculo se habrá roto, morireis solos. Pero hasta entonces, ¿como podemos pasar el rato?— Garantizó Tristan con seguridad en sus palabras, pero aunque aquello pudiera ser posible la venganza era mucho más dulce de lo que ellos podían imaginar.

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—¿En que piensas?— Preguntó Leonidas mientras se ponía al lado de su hermana.

—¿Recuerdas cuando madre nos castigaba?— Le preguntó Astrid mientras miraba a todas partes con atención, como si estuviera en busca de alguna clase de defecto o de error.

—Nos encerraba en un lugar parecido, para que aprendieramos sobre la paciencia.— Recordó Leonidas mientras reía, al recordar que de los tres la que más veces había terminado allí había sido ella. —Aunque tu fuiste la que más veces terminó aquí.— Admitió haciéndola sonreír, sobretodo por que la hizo recordar que siempre había intentando ir en contra de las normas de los demás, cuando era humana creía que ella era la dueña de su destino, ahora resultaba que su destino estaba a punto de encontrarse con la burlesca muerte.

—Y aprendí que todas tienen una fisura que les ata a la realidad, las brujas que las hacen deben de conocer a la perfección a quienes encierran, pero incluso unas brujas como las de los Strix pueden cometer errores.— Aseguró sabiendo con certeza de que aquella Chambre de Chasse tenía errores, y ella estaba dispuesta a dar con ellos para evitar lo que podría ser una ejecución.

—Puedo asegurarte de que no hay ningún error, esta hecha perfectamente.— Intervino en ese momento Tristan el cual había escuchado, con atención, su explicación sabiendo que, como siempre, Astrid suponía el mayor peligro de todos ellos.

—Siempre tan seguro de tus acciones, Tristan. Pero siempre cometes un mismo error.— Intervino en ese momento Leonidas creyendo ciegamente en la suposicion de su hermana mayor. —Asumir que eres más inteligente que nosotros.— Añadió con obviedad sabiendo que siempre les habían subestimado.

—Puedes intentar huir las veces que quieras, pero no lo vas a conseguir.— Aseguró Tristan sabiendo que ninguno de ellos iba a conseguir salir a tiempo.

—Bueno siempre queda la posibilidad de mataros una y otra vez.— Sugirió Klaus sabiendo que no les podían hacer daño físicamente disfrutarían de una incesante tortura.

—¿Qué tal es el fondo marino, Tristan?— Preguntó en ese momento Astrid mientras sonreía haciendo que los dos hermanos la mirasen de forma amenazante, haciéndoles ver que habían dado con un punto vulnerable.

—Uy, Astrid ha tocado la fibra sensible de la desquiciada de tu hermana.— Intervino en ese momento Elijah disfrutando del simple hecho de hacerles daño verbalmente, puesto que se creían tan invencibles, ¿que pasaba ahora que no podían hacer nada contra aquellos ataques verbales?

—Rápido.— Intervino en ese momento Freya sorprendiendo a todos con su presencia.

—¿Que ocurre?— Preguntó Leonidas confundido.

—Encontrar lo que os representa aquí a dentro.— Les pidió justamente cuando en el cuello de Klaus se abría una herida que empezó a sangrar.

—Klaus.— Astrid le sujetó rápidamente mientras intercambiaba una mirada con su hermano.

—Elijah.— Dijo Leonidas mientras sujetaba al noble, para después ser su hermana y a continuación él quienes recibieran las mismas heridas en sus cuellos.

—Oh, no. Ha empezado.— Murmuró Freya al comprender lo que eso podía significar. —Tengo que concentrarme, decirme que es lo que os representa para sacaros de aquí.— Les pidió mientras se acercaba a los cuatro dándose cuenta de que debían de actuar de prisa o sería demasiado tarde para todos.

—Los reyes.— Dijo Klaus con seguridad.

—Los caballos.— Le corrigió Elijah haciéndoles ver que eran algunas de las piezas de ajedrez, ¿pero cual?

—Tenéis que decidir cuál es.— Insistió Freya sabiendo que debían de tomar una decisión de forma inmediata.

—¿No es perfecto? En este momento tan crucial vuestra ignorancia os ciega, aunque nunca habéis aprendido de vuestros pecados. Al menos morireis por ellos y yo podré verlo.— Sonrió Aurora con diversión haciendo que Astrid se diera cuenta cual era la pieza que les podría sacar de allí.

—Las reinas, las mujeres a las que traicionamos nos representan.— Aseguró Leonidas dándose cuenta, al igual que su hermana, de cual era la pieza que de alguna forma les representaba a los cuatro.

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—Davina, detente.— Le pidió Elijah sabiendo que habían ganado.

—¿Qué está haciendo?— Preguntó en esta ocasión Taylor la cual había ido con Stefan hasta allí para atraer a la cazadora.

—No sólo están desvinculandonos. Están canalizando el poder de mi hermana.— Aseguró mientras se acercaba a Astrid intentando buscar alguna forma de romper aquella unión.

—Has tenido tu momento, atrás.— Le ordenó Davina a Klaus obligándole a regresar al estanque.

—¿Como rompemos la canalización?— Preguntó Elijah sabiendo que debían de detenerlo de alguna forma, sino no podrían impedir la desvinculación.

—No lo se, es un Original y no hay un hechizo de protección.— Alegó el Original nervioso al no saber cómo romper un hechizo así, los únicos que podían saberlo eran Freya, Kol o Astrid y los tres estaban fuera de juego.

—La vela...— Murmuró Taylor viendo el dibujo que había en una de ellas.

—¿Qué dices?— Preguntó Elijah confundido al no comprender que relación tenía una vela con todo ello.

—Tiene dos símbolos, una media luna y una inicial.— Les explico haciéndoles ver que aquella vela era la que estaban usando como amarre para canalizar el poder de Astrid 

—Apagala.— Le ordenó Leonidas haciendo que la híbrida obedeciera, para a continuación Astrid empezar a regresar a la normalidad.

—Odio a las brujas de Nueva Orleans.— Murmuró justamente después de despertar haciendo reír a su hermano. Al mismo tiempo que Klaus soltara un grito de dolor, haciendo que Astrid y Elijah se acercaran a él para asegurarse de que estaba bien.

—Les he sentido irse, mi vínculo se ha roto.— Explicó haciendo que ambos se mirasen al comprender que Klaus se había convertido en el objetivo de todos aquellos enemigos que tenia, ahora tenían la oportunidad de matarle sabiendo que ningún vampiro de su línea de sangre moriría después.

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—Ahora comprendo lo que me decías cuando nos conocimos.— Comentó Stefan mientras él y Astrid recorrían las calles de Nueva Orleans. —Cuando un vampiro ama lo hace de forma que puede llegar a ser enfermiza.— Explicó recordando que Taylor había hecho todo lo posible para salvar a su familia, por qué el amor hacia la familia también era enfermizo. —Nunca me perdone lo que le paso a Eliana por nuestra culpa.— Admitió mientras Astrid agachaba la cabeza al escuchar el nombre de su hermana, aunque había superado su muerte se la hacía doloroso pronunciar su nombre.

—La culpabilidad nos acaba asfixiando Stefan, hay sentimientos que son mejor dejarlos a un lado.— Admitió la Original recordando que cuando Klaus encerró a sus hermanos, la culpabilidad la invadió de una forma que casi la hizo volverse loca.

—Tu hermana quemaría el mundo con tal de protegerte.— Aseguró haciendo una referencia a Taylor, lo que hizo que Astrid sonriera mostrando también, en su mirada, lo orgullosa que estaba se ella.

—Taylor haría lo que fuera por quienes quiere, en eso nos parecemos. Más de lo que me gustaría admitir.— Admitió la Original, sabiendo que si su hermana seguía arriesgandose de aquella forma acabaría matandola.

—Aprendí mucho de ti, tu y Lexi fuisteis como dos hermanas mayores.— Admitió Stefan sabiendo que gracias a ellas él estaba con vida, ellas habían sido demasiado importantes en su vida como para no admitir que su ayuda le había permitido ser quien era.

—Lexi salvaba a la gente, me salvo a mi en muchas ocasiones.— Reveló Astrid sorprendiendo a su amigo con sus palabras, ya que era la primera vez que le decía a alguien que Lexi le había salvado, y es que era cierto, gracias a ella no había apagado su humanidad. —Me recordaba tanto a Eliana que cada vez que pensaba en apagar mi humanidad, pensaba en todo aquello que siempre había querido representar como vampiro.— Añadió mostrando de esa forma uno de los tantos motivos por los que Astrid había tomado la errónea decisión de apagar su humanidad.

—Cuando ambas murieron...— Empezó a decir al comprender todo.

—Lexi fue una hermana más, Stefan. Y tú también. Me alegro de haberte vuelto a ver, viejo amigo.— Sonrió queriendo evadir de alguna forma aquel tema, ya que la híbrida todavía no se sentía cómoda hablando de todo lo que hizo cuando apago sus sentimientos.

—Ten cuidado, lo que yo he visto en un día...— Empezó a decir en señal a todo lo que estaba pasando en la ciudad.

—Supongo que lo de ser difícil de matar viene de genética.— Rió haciendo una referencia a que ambos descendían de una misma familia.

—Tener cuidado, no creo que la amenaza haya terminado. Y siendo sinceros... no me gustaría morir.— La recordó haciendo alusión al hecho de que era vampiro gracias al hecho de que él venía del linaje de ella.

—Tenlo tu, la cazadora mística no creo que se dé por vencida con facilidad, pero hablaré con algunos contactos a ver si saben como impedir que te mate y así detenerla para siempre.— Le tranquilizó, haciendo que el menor de los Salvatore sonriera para después darla un abrazo en señal de despedida.

★★★

Admito que me hubiera encantado verlos torturando a los De Martel, pero aún así me encantó hacer esa escena, ya no solo por el equipazo que hacen Elijah y Astrid para picar a los dos hermanos, sino porque sabemos más de los castigos de Carina.

De alguna forma quería mantenerla presente, y más que nada pensé que haciendo a sus hijos castigos de aquella manera sería algo interesante. No me digan por qué pero fue así.

Con el hecho de que la pieza clave fuera una reina... bueno me vino como anillo al dedo, ya no solo por la trama, pero cambiando dos cosas, Klaus por Astrid, Leo por Aurora, Elijah por todas sus amantes (supongo) y Astrid por Eliana, cosa que creo bastante lógica ¿no?

La escena donde canalizan a Astrid, bueno debía de sacarla de la ecuación puesto que aun tiene la poca magia que la dejo Adelaide (la cual tengo intención de usar más adelante) pero vamos que me limite a hacer lo básico.

Aún así, se que os hubiera encantado ver alguna escenita de Stefan y Taylor, pero no lo vi necesario.

Vi más necesario hacer la escena final entre Stefan y Astrid, no se pero de alguna forma quería dar un cierre, y me pareció maravilloso escribir esa escena donde él la pide disculpas, y donde ella le explica que Lexi fue quien les salvo a ambos. De verdad me encantó hacer esa escénica.

Lo que creo que fue más evidente era quien iba a ser el primero en perder a toda su estirpe, porque vamos a ver sabemos que Klaus se ha librado de morir así desde... TVD así que como que las pistas estaban ahí.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ♥️