
Capítulo 18 |Corporation Capsule.
|Existen muchas maneras de tener una cita|
━━━━❰・🍚・❱━━━━
¿Me extrañaron? Sí, lo sé, dos capítulos sin mi hermosa narración es mucho, lo sé, se pasaron de lanza la verdad. ¡Pero, hey! Ya me tienen de regreso por fin.
Bueno, dejemos de lado eso y vayamos por lo que vinieron.
La verdad es que sí me tomó por sorpresa el hecho de descubrir que el saltamontes de quinta es Gohan —¡insisto en que yo no firmé para eso!—, es decir, ¿quién iba a decir que el come libros es un chico dotado no solamente de inteligencia? No solo es un erudito, sino también es hijo de mi artemarcialista favorito: Son Gokú, es súper fuerte, tiene músculos bastantes marcados, es el perfecto prototipo de joven para llevarlo al lado oscuro y es sumamente amable.
El chico perfecto para ustedes, ¿no?
Sí, bueno, no babeen delante mío, ¿de acuerdo? Las estoy viendo, carajo.
En fin, como les decía: aún no termino de digerir todo, es raro, y más con el hecho de que él y yo nos estamos llevando un poco mejor que antes, ¡incluso hasta en nuestras formas civiles! Jamás me vi de amiga con el Gran Saiyaman —sí, lo acepto por primera vez delante de ustedes, ¿felices?—, mucho menos con el nerd de Gohan.
Lo bueno de todo esto es que tengo la satisfacción de por fin saber su verdadera identidad. Lo curioso aquí es que las ganas de gritarle "te lo dije" no están como creí que sería cuando lo supiera todo, solo me siento en paz.
Supongo que se ha ganado una pequeña estimación de mi parte, ¡pero una muy pequeñísima, eh!
—¿Sabes? Nunca creí que fueras tú la Chica Encapuchada... —su comentario me saca de mis divagaciones, haciendo que alce la mirada de mi celular para prestarle atención a Gohan.
Ah, sí, lo olvidada: ambos estamos en el patio donde nos topamos por primera vez en la escuela, almorzando como se le ha venido haciendo costumbre a él; sí, al él, no a mí.
Videl y su dúo rubio andan haciendo quién sabe qué —no tengo interés en saberlo la verdad, solo sé que es algo de sus clubes—, por lo que estamos solos nuevamente. Así es, ventajas que uno tiene por no pertenecer a ningún club ni a cosas extracurriculares; aprendan de la gran y sabia Yuzuki, mis fans.
—Bueno, yo jamás pensé que fueras el saltamontes; siempre imaginé que era un hombre más mayor que yo, mujeriego, varonil y coqueto —enumero y le dedico una sonrisa burlona. El de ropas holgadas me mira incrédulo, por lo que supongo que ha de pensar que estoy bromeando.
¿Qué? No me miren así, ¡hablo en serio! Creía que solo era un chico que buscaba atención de las mujeres para llevárselas a la cama. Y, bueno, creo que en parte es por eso que me cuesta asimilar que detrás del Gran Saiyaman se encuentre este nerd...
—No estás hablando en serio, ¿verdad? —Cuestiona mirándome y yo solo le doy una pequeña sonrisa junto a un encogimiento de hombros—. ¡¿P-por qué pensaste eso?! ¡Yo no soy así!
—Ahora lo sé, pero..., ni idea. Sigo sin entender por qué un chico que lo consideran bastante atractivo querría estar salvando la ciudad en vez de estar ligando a diestra y siniestra teniendo la posibilidad —tras decir en voz alta lo que pienso, él se avergüenza bastante y baja la mirada. Joder, debe de dejar de hacer eso, ya me está hartando que sea tímido y tierno cuando solo es Gohan.
—N-no me consideran atractivo... —susurra por lo bajo.
—Quizás a ti no porque no lo quieres así, pero al saltamontes vaya que sí —aseguro con tranquilidad.
¿Está siendo modesto o es lo bastante distraído como para no notarlo? ¡Maldición! He visto reporteras de hasta treinta años intentar coquetearle cuando lo están entrevistando y ni se diga la multitud de fans hormonadas que tiene... e incluso un par de hombres por allí.
¡Ja! Si supieran cómo es el Gran Saiyaman sin su casco, estoy segura de que se impactarían o se llevarían una gran decepción. Porque sí, he visto en las redes sociales cómo lo idealizan.
—Eh, vaya... —murmura sin verme, manteniéndose con la vista baja; parece pensativo—. Yo antes pensaba que eras mayor que yo.
—¿Qué? —Digo intentando no reír. Está bromeando, ¿no? No creo que...
—Sí, eh, bueno, me refiero por tu vocabulario ya que te hace ver más grande —exclama y me dirige una pequeña sonrisa—. Y, bueno, también fue una gran sorpresa saber que eras tú.
¿Debería sentirme alagada o indignada? Meh, alagada será.
—¿Por qué decidiste hacer aparición siendo el Power Ranger sin recursos? —Indago con curiosidad. Realmente es algo que me intriga desde que lo conocí.
—¿Y tú por qué quisiste ser la Chica Encapuchada? —Cuestiona para mi sorpresa, dedicándome una sonrisa un tanto traviesa; no quiere hablar de ello, por eso está esquivando el tema, lo sé.
Su alter ego ha hecho acto de presencia, gente.
—Eso es un secreto secretosamente secretoso —contesto con burla y este rueda los ojos con diversión.
—Esas palabras ni siquiera existen.
—En mi mundo vaya que sí —me jacto y Gohan solo ríe por lo bajo.
Después de eso, ambos nos quedamos en silencio, solo escuchando el ruido que hacen los demás alumnos.
Reitero: es sumamente raro este ambiente. Pensé de momento que todo iba a ser tenso después de que ambos estuviéramos al tanto de nuestras identidades, pero veo que no fue así, todo lo contrario: Gohan parece menos tímido que antes y yo, extrañamente, siento un poco más de confianza en su persona. Y sí, apenas todo lo del revoltijo pasó ayer.
Cómo cambian tanto las cosas solo por un suceso, ¿no?
—Por cierto... —lo miro con atención y él solo parece un tanto avergonzado; se está rascando la mejilla y posee una sonrisa nerviosa—, quería saber si podrías acompañarme a un lugar después de clases.
—Tengo que ver si mi agenda no está muy apretada para hacerte un espacio —digo para hacerme la interesante y saco mi celular. Gohan vuelve a reír, dejando su faceta tímida detrás.
—Te espero en el portón de la salida —concluye él y se levanta tras oír la campana que avisa que debemos regresar a clases. Sin más, mientras yo guardo mis cosas, Gohan hace un gesto de despedida y se va.
¡Ni siquiera me dejó responderle, maldita sea!
▶▫▪♡▪▫◀
—Tardaste —me quejo cuando lo veo aproximarse donde yo estoy. Me dirige un sonrisa de disculpa.
Llevo quince minutos esperando, ¡pero, eh! ¡Quince minutos son quince minutos! ¡Y nadie deja esperando a la gran Inoue Yuzuki!
Vale, ya, le voy a bajar un poco a mi egocentrismo.
—Perdón, la maestra de Inglés se extendió un poco más de lo debido —excusa. Y le creo: he oído que esa maestra es un tanto estricta. Ugh, lo que me va a tocar soportar cuando pase a segundo grado.
—En fin, saltamontes, ¿a dónde piensas que vayamos? —Cuestiono y este me da otra sonrisa.
Sabiendo lo nerd que es, seguro va a terminar arrastrándome a una biblioteca, o quizás me quiera llevar a un laboratorio secreto y se le salga el científico loco que lleva dentro para experimentar conmigo sus fórmulas raras. ¿Quién sabe? Todo se puede.
—Lo sabrás dentro de unos minutos —responde con una sonrisa alegre, haciéndome una señal para que lo siga.
Y sí, termino obedeciéndole. ¿Qué más da? No tengo nada qué perder y estoy aburrida además.
Me guía hasta un callejón solitario y me pide que me cambie mi ropa a la de la Chica Encapuchada y termino haciendo lo que me pide; él pulsa en botón de su reloj y rápidamente cambia su ropa a la del saltamontes. Ugh, qué envidia, yo tengo que perder valiosos segundos cambiándome y Gohan lo hace sin ningún problema.
Terminamos volando por los cielos un par de minutos —claro, Gohan me va guiando a quién sabe dónde— hasta que se detiene frente a... ¡¿Corporation Capsule?! ¡¿Qué?!
—Llegamos —anuncia tras aterrizar y yo sigo perpleja.
Me está jodiendo, ¿no? En esta empresa es prácticamente imposible acceder sin tener autorización o algún conocido de mucha confianza dentro, además, es una de las más reconocidas mundialmente hablando y mucho no se sabe de la vida personal de los meros encargados por si fuera poco. En otras palabras: es todo un dilema lo que pasa dentro.
Aunque, claro, nadie puede negar que su ropa especial resistente y sus grandes proyectos son lo que le siguen de geniales; son costosos, pero vaya que valen la pena.
—¡¿Qu-qué vamos a hacer?! —Inquiero con miedo. No se le vaya a pegar la locura de querer arrastrarme para que nos infiltremos y...
—¿Recuerdas que te mencioné ayer que una amiga me construyó este reloj? —Me enseña el antes mencionado y asiento aún estupefacta; por todas las salchichas del mundo, no me digan que...—. Bueno, la que lo hizo es la famosa Brief Bulma.
—¡¿La amenazaste para que te lo hiciera?! —Cuestiono alterada. ¡Ay, no, ay no! ¡Yo soy problemática, pero no me quiero meter en asuntos mayores de la ley! ¡Soy muy joven como para ir a un reclusorio para menores...!
—¡¿Qué?! ¡Claro que no! —Se apresura a negar el Son, y me siento un poco más tranquila—. Ella es bastante cercana a mi familia, es casi como la tía que nunca tuve.
—Ahh... —de acuerdo, me siento una completa idiota en estos instantes.
—Y..., bueno, he visto que tienes problemas con lo de estarte cambiando a cada instante y que en esos momentos estás muy vulnerable a que te descubran, así que decidí pedirle un reloj para ti —aclara y me da una de sus típicas sonrisas. Pero yo estoy entrando en pánico, así es.
—Gohan, y-ya me gasté mi mesada y la patria está pobre, no tengo el suficiente dinero como para costearme un...
—¿Y quién dijo que te lo van a cobrar? —Me interrumpe con un gesto divertido—. Te lo mandé a pedir yo personalmente, no te preocupes.
Oh...
—¡¿Ehh?!
━━━━❰・🍚・❱━━━━
-Lindassj1
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro