𝙲𝚊𝚙𝚒́𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟶𝟺
Mi pequeña neurona (la única que tengo), me decía que no fuera porque la vergüenza me iba a consumir. Pero eso ya no es mi neurona, esa es mi conciencia que le falta inteligencia.
No podía faltar a mi palabra. Alphys seguramente debe estar preocupada y Toriel quizás estaba histérica. A pesar de ser vecinas, la Reina y yo, no he permitido que entrara a mi departamento. Al menos no aún.
Me vestí elegante como me lo había pedido mi amiga. Un vestido negro.
En mi closet nunca había tenido un vestido, mis otras ropas y yo, no sabíamos qué era esa cosa. Pero mi amiga Frisk junto con Toriel me eligieron ese vestido. No soy muy fan de ese tipo de estilos de vestido, pero está precioso el maldito.
Pero algo que agradecía que era negro, ese color en estos momentos es la bendición de toda mujer cuando se trata de andar de sangrona. Aunque originalmente no debería salir de casa pero es completamente necesario.
Una vez puesto el hermoso vestido fui descalza al baño a cepillarme los dientes y de una sola vez maquillarme un poquito. No soy de usar una máscara de maquillaje, pero solo uso lo necesario para resaltar mis ojos y labios. Me cambio y salgo del baño a colocarme unos zapatos de tacón medianos.
Me observo al espejo y lucía muy bien. Me gustaba lo que veía aunque siempre me gusta lo que veo en el espejo. Siempre he sido una mujer fuerte, nunca me deje influenciar por comentarios pocos "amigables" hacía mi persona.
Una vez lista, tomó un pequeño bolso de mano y ahí meto un cambio, labial, mi teléfono y mis llaves. No es como que fuera a salir del país. Solo íbamos a un lugar muy elegante y enorme, para una despedida...Nada del otro mundo
Tocan la puerta con golpes desesperados.
⸻¡Sam!, ¡¿Estás en casa?! ⸻Un grito preocupado sonó del otro lado de la puerta principal.
¿Y es que no podían ser más pacientes?
Arreglo mi cabello un poco y abro la puerta con un semblante bastante serio. Pero una punzada en mi nuca sentí cuando veo a Undyne, Papyrus, y Frisk en mi puerta. Sentía que olvidaba algo, y no creo que sea haberles avisado que estaba en casa.
⸻¡Samantha!/ ¡T/N!
Todos gritaron mis nombres, Frisk y Papyrus fueron los únicos que se aventaron hacía mí para rodear sus brazos en mi cuerpo. Pero el sentimiento de que algo olvidaba se hacía un poco más fuerte.
⸻¡¿Dónde fuiste?!, Sans me dijo que te habías escapado cuando él estaba descansando.
Levanté una ceja confundida, tratando de adivinar, en qué momento de la vida me he escapado de él cuando estaba en el laboratorio de Alphys. Cuando comprendí que era una mentira de parte del esqueleto sonrisas, simplemente dejé salir una risita cómplice.
⸻Fui a la farmacia para... ⸻Me quedé callada cuando recordé en ese mismo instante que necesitaba una pastilla por si me daba dolor de nuevo. ⸻ Espera un momento por favor.
Casi corriendo voy a la cocina y tomo una pastilla en su blíster. Y lo guardo en mi bolso; sabía que mi sentimiento de olvidar algo nunca se iba a equivocar.
⸻¿Qué pasó? ⸻Preguntó Papyrus algo confundido y preocupado.
⸻Fui a por una pastilla. Todo está bien y lo estará.
⸻¿Segura? ⸻Pregunta dudosa Undyne.
⸻Tan segura como cuando estoy dispuesta a patear traseros de un pescado de atún.
Undyne entendió mi referencia e hizo cara de ofendida. Cruzándose de brazos y apartando la mirada, Frisk se fijó en su reacción soltando una risa divertida, mientras que Papyrus es un espectador un poco más sutil, observando todos los movimientos de Frisk.
⸻No es verdad Undyne. No te preocupes ⸻Deja de reír y me mira con su típica risa risueña⸻ ¿Segura que quieres ir? Estabas muy grave cuando te vi.
Rodeé los ojos y levanté la mano para dejarla caer con gracia.
⸻Tranquila, ya estoy mejor, sino, no estuviera con un estúpido vestido.
Y al momento de decir toda la oración, me miraron de pies a cabeza. Observando mi vestido y mi rostro (que seguramente se notaba un poco nervioso), ya que no soy de esas mujeres que usan vestido.
⸻¡No digan nada! ⸻Me adelanté cuando Frisk abrió la boca para decir sepa Dios qué cosa. ⸻ Cierren las bocas, y nos vamos ya que nos esperan abajo.
Si... realmente no estoy segura si nos esperan, pero todo vale con tal de que no me sigan mirando. Y es que desde pequeña he odiado los vestidos porque a mí no me quedan "hermosos" o porque son asquerosos (al menos en su minoría). De igual manera el vestido que me habían obsequiado no era tan feo y cubría perfectamente lo que debía.
Todos se hicieron para atrás sin mencionar nada, pero sus semblantes transmitían el sentimiento de: «Te ves increíble» o «Estas hermosa» ya que como dije anteriormente, es muy raro que me haya puesto un vestido; me di la media vuelta y cerré la puerta con llave.
Y gracias al cielo hicieron caso por segunda vez a mis palabras. Todos se adelantaron para caminar al elevador, ya que la reían y yo vivíamos en un quinto piso de dieciséis. Pero iban muy callados, tanto que me incomodaba. Y es que sabía lo que querían decir.
⸻Esta b-...
⸻¡Estás increíble! ¡Te queda fabuloso el vestido!
⸻El gran Papyrus dice. ¡La humana es hermosa!
⸻Te queda increíble el vestido.
No sabía si estar contenta o enojada. Ya sabía perfectamente todo eso, pero... realmente nadie me había dicho eso...ni siquiera lo había logrado escuchar de mamá. Pero en cierto punto me gustó sus halagos de mis mejores amigos.
⸻Gracias.
Papyrus iba manejando su Ferrari. Con sus lentes de sol que tanto le gustan, pero...Está vez Frisk le obligó llevarlos arriba de la cabeza, ya que manejar con lentes de sol por la noche no es una buena combinación que se diga. Estaba un poco molesto, porque se le notaba pero era necesario y, es que para mí es como una pequeña venganza por haber obligado a su hermano a ser profesor de la universidad. ¿Cuándo aprenderá que ese sujeto nunca hará nada bueno por su vida?
¡Él solo piensa en dormir y descansar!
Pero en fin, no soy nadie para decir que tienen que hacer y que no, pero si puedo preguntarme el porqué hacen las cosas. Es un poco ilógico pero es lo que sucede cuando vives con seres mitológicos y que nunca existieron.
Otra cosa ilógica al parecer.
Llegamos al lugar, un edificio de tres pisos. Dijeron que nuestro piso era el tercero, que iba a ser solo nuestro por esta noche. Me gustó la idea, pero tener solamente un piso para más de 10 personas es un poco exagerado, pero supongo que es porque quieren que la fiesta sea a lo grande.
⸻Dicen los humanos que nos podemos bajar aquí. ⸻Papyrus nos dio indicaciones para empezar a bajar de su carro.
⸻Vayan ustedes, me quedaré ayudar a Papyrus. ⸻Me ofrecí a esperar dónde pondrían el auto de Papyrus.
Frisk abrió la boca para negarse, pero Undyne se adelantó poniendo una mano en su hombro, dando a entender que ella también se quedaría con nosotros.
⸻No te preocupes Frisk, estarán vigilados con mi único ojo. ⸻Cerró su ojo en forma de guiño, pero se vio más como parpadeo.
Frisk asintió con su cabeza, con una sonrisa comprensible en sus labios. Tomó de su bolso su celular para marcar un número, para después caminar dentro del edificio.
Luego nosotros empezamos a caminar lentamente detrás del auto de Papyrus; puede que sea un Ferrari, uno viejo pero es probable que esa cosa se la roben, y en ningún momento quiero que mi amigo sufra por eso. No tengo poderes pero sé que poner una denuncia es incluso más fácil que tratar de detener al ladrón.
⸻Sam, ¿Por qué no te quedaste en casa de Alphys? ⸻Preguntó Papyrus un tanto preocupado.
De alguna manera sabía que me iba a preguntar, pero no creí que fuera en un momento un poco apartados de todos; Undyne apoyo al esqueleto sin decir nada, únicamente viéndome fijamente.
⸻Es complicado de decir, Papyrus. Pero se los explicaré a todos estando en la fiesta. ⸻Respondí un poco incómoda por la mirada de la peli-roja.
⸻¿Por qué no respondes ahora?; Somos tus amigos más cercanos.
⸻Lo sé Undyne. ⸻Me detuve a recibir las llaves del carro del huesitos. ⸻Gracias; pero no me gusta repetir cosas complicadas. A los demás también les debo una explicación.
⸻De acuerdo, ¿Pero como escapaste de Sans?
Esa pregunta me tensó. Le entregué las llaves a mi amigo y desvíe mi mirada.
Sans nunca se llevó bien conmigo, y si Frisk le decía que me retuviera siempre lo hacía con molestos chistes y su tediosa magia. Y eso medio mundo lo sabe, nunca me hace caso y mucho menos me apoya. Y simplemente nunca me ayuda.
⸻Frisk lo dijo. ¿Por qué no le creen?, ¿Por qué acaso no me enseñó la mejor profesora? ⸻Esta vez le ataque a su orgullo a mi querida amiga.
⸻¡Contra eso no voy a competir!
⸻Menos yo.
Y menos mal, porque hasta a mí se me olvidó que había dicho Frisk.
Toqué la puerta francesa que se encontraba enfrente de nosotros. Esperando que alguien nos abriera, Undyne acomodo un poco su peinado y Papyrus su corbata. Los dos se veían muy guapos, tanto así que simplemente no les dije nada, no había que mejorar ni quitar nada de ellos, estaban perfectamente vestidos.
⸻¡Bienvenidos a la fiesta, darlings! ⸻Nos abrió la puerta Metatton.
Mis dos acompañantes entraron emocionados dando cumplidos al robot, pero yo simplemente me crucé de brazos al tenerla justamente delante mía.
⸻¡Por el cielo estrellado del Underground! ⸻Me miró de arriba hacía abajo para darse la vuelta ella observando mi vestimenta. ⸻¡Estás increíblemente espectacular! ¡Eres una dio-
⸻Sigue, tal vez así consigues que te perdone. ⸻Mencioné más que enojada.
⸻Sam...yo...
Arquee una ceja en la espera de una respuesta lógica de parte de la hojalata. Puede que sea una robot y toda la cosa, pero ella no es ninguna ignorante. Sabe lo que a hecho y aún más porque yo soy una persona que cuida que los "secretos"; Metatton incómoda trato de encontrar palabras para excusarse de lo que a hecho. Sin embargo no tenía nada para defenderse contra mi.
⸻¿Y bien?
⸻Yo...Darling, no te pongas así. Mi show no tenía nada bueno que decir.
⸻¿Y eso que tiene que ver con que andes por el mundo revelando secretos de otros?
Metatton bajo la cabeza en arrepentimiento. Ella sabe que tengo razón, no tiene ningún derecho de andar diciendo cosas que no debe. Precisamente se llaman secretos, nadie más los tiene que saber.
⸻Olvídalo Metatton. Que no se repita, te lo ruego en varios idiomas que sepas, pero no lo vuelvas hacer. ⸻Deshice el nudo en mis brazos y junte mis manos en forma de rezo.
Metatton al principio dudo si estaba bromeando, o si le estaba tendiendo una trampa. Ya que soy una persona un tanto difícil que te perdone, incluso puedo hacer que te hayas arrepentido de solo pensar lo que hiciste. Pero no quiero hacerlo con ella, es una buena amiga. Te ayuda incluso si tienes algún problema enorme (si es que ella misma te metió en el problema).
La tomé de los hombros para mirarla con ojos de preocupación y súplica. Los ojos de ella viajaron por mi rostro para ver algún rastro de cólera, pero no lo iba a encontrar porque realmente le estaba suplicando.
⸻Metatton. Eres una gran amiga y nunca dudaré de ello. Pero no vuelvas a hacer eso, te lo ruego.
Ella asintió con la cabeza, tímida y arrepentida. Tan solo espero que sea cierto ese arrepentimiento. Solté un suspiro y la abracé como único medio de desahogarme con ella. Al menos arreglamos ese problema, ahora faltaba el gran problema sobre mi salud. Porque al conocer a Mettaton seguramente se lo dijo a media civilización de monstruos.
⸻¿Qué haces en la puerta, Metatton?
Una voz masculina, con un tono perezoso pero gruesa hizo que la robot girara un poco su torso. Metatton me tomó de las manos delicadamente para después ponerse normal. Ser un robot tenía sus ventajas.
⸻¡Oh!, pero si es el famoso maestro del que tanto se habla. ⸻Mencionó emocionada.
Sabía que no lo había dicho de mala manera. Pero me estaba poniendo nerviosa e incómoda, ya que hace unos segundos estábamos hablando sobre eso; escuché como Sans soltaba un suspiro un poco irritado e igualmente incómodo.
⸻No se a confirmado, Metatton. Por favor, deja de llamarme así.
⸻Olvidé por completo que solo Frisk puede llamarte así~
Okay, esto se puso increíblemente incómodo. Puse una mano en el hombro derecho de Metatton para apartarla un poco y ver cara a cara al dichoso saco de huesos flojos. Él mismo me miró sorprendido, un poco asustado. Pero aún así su sonrisa despreocupada se mantenía a flote.
⸻Bienvenida, niña.
⸻Gracias. ⸻Muy incómodo. ⸻Iré a buscar a mi amiga, con permiso.
⸻Propio. ⸻Me respondió de igual manera incómodo.
Metatton tenía un no sé qué, qué podía hacer que las personas se alejaran al momento por el tema de conversación que ella misma sacaba. Y por más que alguien tratará de sacar otro tema o tomar las riendas, ella logró destacar.
Mis manos hechas puño hacían que mis uñas se clavaran en la piel de mis palmas. Estaba completamente ajena a este lugar y hay muchos monstruos que ni siquiera conozco. Me sentía el bicho raro de este mundo.
Y como si mis rezos fueron escuchados, la reina se acercó a mí con los brazos abiertos junto con el rey y el príncipe. La familia Dremurr al rescate de una humana que ni siquiera tiene nada que ver en sus tierras, reinos pasados o algo de familia. Aún me sorprende lo rápido que podían acoger a un humano que les ayuda un poco.
⸻¡Sam! ⸻Los tres se acercaron a mí con una sonrisa amable y amistosa.
⸻Sus majestades.
Ya me había dicho varias veces que no era necesario hacer tan elegante, pero tener esos títulos simplemente se me sale lo "respetuoso" (lo poco que me queda) y dar lo mejor de mi, tanto de actitud como modales; me había inclinado lo suficiente como para que mi vientre doliera.
⸻Mi niña. No hace falta que hagas eso. ¡Eres parte de nuestra protección!
La reina me tomó de las manos con cuidado para después ser rodeada por el rey y el príncipe. Me sentí un poco incómoda, pero era porque nunca tuve un encuentro así desde que mi madre murió; la familia Dremur es muy cálida y llena de amor (a pesar de las dificultades que tuvieron ambos reyes), pues aún así, lograron volver a estabilizarse. Pero aún sigo sin comprender porque regresó con él tan repentinamente.
⸻Mamá tiene razón. ⸻Asriel me tendió el brazo como un verdadero príncipe, regalando una dulce sonrisa. ⸻Ya eres parte de nuestro reino.
⸻Muchas gracias. ⸻Acepte con nerviosismo el gesto de Asriel mientras bajaba levemente mi rostro.
⸻Nada de gracias, niña. Sube la mirada, una joven como tú debe ser fuerte de espíritu.
Y de la nada una cuarta voz femenina se unió a la pequeña reunión de los reyes. Era Frisk.
⸻Pero de carácter ya le basta. ⸻Sonrió pacífica.
⸻Frisk. Amiga. ⸻Mencionó divertido Asriel mientras nos acercamos a ella también. ⸻Gracias mamá, papá.
Los dos adultos sonrieron satisfechos. Dándonos a cada uno un beso en la cabeza por parte de la reina. Y una caricia en la misma por parte del rey, después se retiran tomándose de las manos; yo los miraba muy curiosa, tenía muchas dudas de las repentinas reconciliaciones. Pero como ya había mencionado antes. No soy nadie para juzgar.
⸻Sam. Escuché a mamá decir que te habías lastimado ahora en la mañana. ⸻Asriel posó una de sus grandes manos peludas en mi mano que sostenía su propio brazo.
⸻No te preocupes. Es algo natural que pasé eso. ⸻Masculle irritada.
⸻Puede ser. Pero cuando Sans te llevó a casa estabas gritando de dolor.
Rodeé los ojos incómoda por la conversación que había dado inicio. En ningún momento tenía la intención de continuar aquello, así que solté el brazo del príncipe y volví a cruzar mis brazos para ver el lugar más detalladamente.
⸻Que estoy bien. Si no fuese así, ni siquiera estaría de pie junto a ustedes.
⸻Lograste escapar de Sans en ese estado. ⸻Frisk comenzó a recordar las palabras de su novio. ⸻Si te es complicado escapar de él, se podría decir que fue momentáneo el dolor.
⸻Exacto. Así que no hay que preocuparse.
⸻Pero mamá había mencionado que estabas sangrado.
La voz del mayor sonaba muy preocupado. Pero a pesar de ser el mayor, parecía que aún mantenía la inocencia de un niño pequeño, casi igual que Papyrus. De todas maneras, no podía negarle una explicación sobre lo que había visto su madre. Tuve que preguntarle qué le había dicho exactamente.
Y el resultado me dejó un poco inquieta. Ya que la mentira de Sans se fue para el caño. Traté de tranquilizarla pero fue más testaruda y fue refunfuñando a buscar a su novio para, seguramente a regañarlo por ayudarme en mis planes de escapar del laboratorio. Pero Asriel aprovechó eso y me guío a conocer a más monstruos.
Las miradas estaban un poco extrañas. Y la amabilidad de Asriel había aumentado y su dulzura se hizo más fuerte. Me incomodaba la forma con la que me trataba de "ayudar", pero no quería ni debía ser descortés.
Después de las situaciones incómodas, Asriel me guío nuevamente al comer para sentarnos y comenzar una charla amena y pacífica. De hecho, vários se nos unieron sentándose en la mesa y comenzar a hablar, reír o contar anécdotas de los días anteriores.
Sans se había sentado enfrente de mí, mientras que a su lado derecho estaba Frisk y a su lado izquierdo estaba Papyrus. Tratando de no enojarse (por respeto a los reyes) por culpa de los chistes malos que hacía su hermano mayor. Pero algo andaba muy mal en él.
De vez en cuando gruñía o hacía muecas. Sus pupilas desaparecen o simplemente su sonrisa se borraba por unos segundos dando paso a un extraño sonrojo ligeramente azul. Y parecía que yo era la única que se había percatado de eso, pues de vez en cuando miraba disimuladamente la pareja que tenía enfrente de mi.
⸻T/N. ⸻Miré a Toriel cuando llamo a mi nombre. ⸻Frisk me contó un poco, pero no logré entender del todo qué había pasado.
Estaba confundida, extrañada miré a Frisk en busca de una pista o por lo menos una respuesta concreta, pero solo recibí una cara pintada de rojo por la vergüenza. Volví a mirar a la reina, con pena y aflicción.
⸻Perdóneme. Pero no comprendo lo que me ha querido decir.
⸻Cuando te vi sangrando en frente de tu departamento.
Y cuando mencionó «sangre» todos se quedaron callados, mirando a mi dirección. Exceptuando Frisk, ella ya sabía a qué se debía eso.
⸻Olvidé por completo que Frisk no tiene el pudor de explicar las cosas como se deben. ⸻La miré molesta. ⸻Pero se los explicaré porque es algo natural y no me da vergüenza en decirlo.
⸻¿Decir el qué? ⸻Preguntó Papyros intrigado.
Pero Sans se quedó estático. Como si medusa lo hubiera visto a los ojos, pues no se movía y tampoco reprendió a Papyrus por preguntar al que se relacionaba sobre mí. Incluso sus cuencas seguían vacías.
⸻El período, mi querido Papyrus. ⸻Le respondí.
⸻¿El qué cosa?
⸻Se los resumiré. ⸻Aclaré mi garganta dramáticamente para sacar del trance a Sans, cosa que funcionó y continúe hablando. ⸻Es algo que les pasa a las mujeres humanas, se le llama período porque nos pasa una vez al mes.
»El período, regla o "Andres". Pasa cuando las niñas de 12 para arriba les comienza a bajar sangre de su parte íntima. No duele y no nos afecta en absoluto, a menos que tengan anemia u otra patología; este sangrado suele durar de cinco a una semana. Esto depende de cada mujer, ya que no todas somos iguales y varía de cómo te has desarrollado.
Tiene doble funcionalidad. Ya que una vez que se te quita la regla, tienes mayores posibilidades de quedar embarazada. Los días fértiles son los que vienen después«.
⸻¿Y eso duele mucho? ⸻Preguntó de nuevo Papyrus.
⸻No realmente. Pero como había mencionado antes, varía de cada mujer.
⸻¿Tienen alguna forma de saber cuándo les va a bajar? ⸻Esta vez fue Alphys la que pregunto un poco más interesada.
⸻Para una mujer experimentada los síntomas podrían ser: Dolor de cabeza, sueño, dolor de espalda, dolor de vientre o se irritan con mayor facilidad. He ahí la dichosa frase: "Anda en sus días". ⸻Pause y con discreción miré a Frisk, quién se cubría el rostro con vergüenza. ⸻Pero cuando se trata de una niña, no sé sabe cuándo le podría bajar. Incluso puede tardar hasta los 16 o 17 años de edad.
⸻Es casi igual que el celo, ¿No?
⸻Te diría que... ⸻Me quedé callada para tomar un trago de agua que nos habían dado a todos, después seguí hablando. ⸻No sé. No conozco ni comprendo lo suficiente su dichoso celo.
⸻Es la época de reproducción. ⸻Me respondió Asgore.
⸻A nosotros nos pasa una vez al año. Es tan importante que solemos hacer una fiesta en honor a nuestro celo. ⸻Siguió Asriel.
⸻Solo que es la única similitud que tienen. ⸻Mencionó Metatton.
Mi mirada chocó con la de Sans por equivocación. Se le notaba sudoroso, afligido y muy nervioso. Se le notaba que quería salir de aquí lo más rápido posible.
⸻Ahora ya se sabe el aroma tan dulce que tienes. ⸻Mencionó Undyne con una sonrisa divertida. ⸻Y yo que te iba a preguntar el nombre del perfume que llevabas.
Eso me desconcertó de cierta manera. ¿Aroma?, No soy de llevar perfumes fuertes o cítricos. Así que con duda miré a Alphys.
⸻E-Ella se refiere a q-que tienes u-un aroma m-muy atrayente.
⸻¿Qué yo qué?
⸻Mi niña. ⸻Me llamó nuevamente Toriel. ⸻Nosotros nos guiamos por las hormonas. Las hormonas del celo. Estás hormonas son aromas deliciosos para tu pareja con quién hayas pasado tu anterior celo.
⸻Pero si no has conseguido pareja, tus instintos voraz serán muy difíciles de controlar y es posible que terminemos haciendo cosas que nos arrepentiremos después.
⸻Por esa razón hacemos la celebración. Para conseguir pareja o celebrar el celo con tu pareja.
Está conversación se tornó incómoda. Pues en pocas palabras, están hablando de follar. Suena grotesco así, pero es la verdad. Pero al escuchar las explicaciones, supe que esto era muy importante para ellos, pues de ahí salen nuevas descendencias. Me sentía incómoda, pues ahora sé que mis "hormonas" son las que me hacen tener un olor que les llama la atención a ellos. Pero no podía evitarlo, ni siquiera sabía de eso. No sabía que los días fértiles de las mujeres humanas tuvieran aromas.
⸻¿Puedo saber a qué huelen las hormonas?
⸻Eso también depende de los monstruos, darling. Los aromas son diferentes pero son exquisitos con la persona ideal.
Maldición. Entonces no hay un aroma en específico. Pero si hay aromas diferentes...
⸻Entonces, ¿Qué aroma tengo yo ahora?
Sans se removió inquieto en su silla para luego, con sus manos apretar los posa brazos de su silla. Aún con sus cuencas negras, pero abrió la boca a pesar de estar incómodo y se acercó un poco a la mesa para mirarme a mí (o eso quiero creer).
⸻A cerezas y bosque.
Editado: 04.04.2023
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