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Se sentía raramente cómoda, a pesar de sentir su cuerpo adormecido sin poder mover los dedos de sus manos siquiera. La superficie en donde se encontraba era tan suave que daba la impresión de estar acostada encima de una nube. El olor con el que estaban impregnadas las sábanas que la cubrían era tan reconfortante como bálsamo para sus heridas. Por primera vez en muchos días se tomó la libertad de dejar su consciente dormido y recuperar las horas de sueño que no se podía permitir por sus extenuantes jornadas laborales, si es que se le puede llamar así a una explotación desmedida. Solamente quería dormir, escapar de esas pesadillas y despertar en una realidad diferente, una más colorida.

- ¿Es normal que duerma tanto? - el rey quería degollar a todos los médicos que la habían examinado.

Ninguno había logrado sacarla de ese sueño profundo que la hacía parecer estar en un estado de coma y por si de males fueran pocos Kwan parecía estar de luna de miel con su omega esclavo, no se había dignado a responder los llamados del rey, haciéndose de oídos sordos aún con sus constantes amenazas. Ella la llevó a ese estado, debería encargarse de arreglar su mierda, eso pensaba Jeon por lo menos.

Él solo la veía unas pocas horas al día cuando su trabajo lo permitía, tampoco quería crear ningún vínculo de afecto con ella; sin embargo, cuando entraba a la habitación no podía evitar mirarla sin que todo su ser se removiera por dentro. Su lobo la aceptaba y la reclamaba como suya, pero él solo ponía escusas y daba negativas, no podía tenerla, eso arruinaría sus planes. "El rey, no siente, el rey impone" esas eran las últimas palabras que su padre le dijo antes de morir y que él subiera al trono. No podía permitirse sentir empatía con el dolor de los esclavos, no podía ser benevolente a la hora de subir impuestos aunque las clases bajas no pudieran pagarlos, no podía tratar por iguales tan siquiera a los lobos ricos y adinerados que pertenecían a la corte, no podía tratar con delicadeza a las cortesanas de su harem que solo abrían las piernas por dinero, no podía enamorarse...

Pero aun así, cuando la miraba a ella, no podía detener las acciones de su cuerpo. Se acostaba olisqueando su cuello en busca de un olor inexistente, la abrazaba con cuidado como si se fuera a romper, peinaba su ondulado cabello castaño con las yemas de sus dedos hasta quedarse dormido a su lado. No podía enamorarse y ni siquiera se creía capaz de saber amar, pero ella lo estaba haciendo caer en un abismo que no tenía fin, un abismo tan oscuro que no le permitía ver qué había debajo.

- Lleva solo dos días inconsciente mi rey, no sabemos qué pudo desencadenar su estado, tenía signos de deshidratación y desnutrición, su salud no es muy buena, su condición de omega no ayuda, los sueros y el medicamento que le suministramos la han hecho mejorar solo un poco. Si usted pudiera darle, aunque sea unas gotas de su sangre...

El antiguo galeno, padre de Kwan fue obligado a acallar sus palabras, la mirada para nada agradable que le ofrecía el rey era suficiente para silenciarlo. Sí, con unas simples gotas de su sangre, el cuerpo de Min Ji hubiese quedado en perfecto estado, después de todo no solo era la sangre de su destinado sino la de un alfa y no cualquier alfa, uno real. Todo se hubiese resuelto en un periquete si no fuese por la terquedad de Jungkook que no quería dar su brazo a torcer.

- Ya dije que no lo haré, ¿Sabes lo que significaría darle mi sangre a ella?, crearía un lazo entre ambos, un lazo que no estoy dispuesto a hacer, encuentre otra vía, para eso se le pagan sus honorarios.

El galeno bajo su cabeza, un poco apenado, pidió disculpas por su insolencia y preguntó si podía retirarse del lugar. Convivir más de tres minutos con alguien que tenía niveles insufribles de soberbia no era nada fácil ni ameno. Cuando las puertas se cerraron, Jungkook poso sus ojos marrones en la omega que estaba durmiendo plácidamente en su cama. La hubiese enviado a otros aposentos de ser posible, pero no quería armar más revuelo en el palacio, después de todo ni el Consejo sabía que ella se encontraba allí.

Se acercó a su lecho hasta que sus pies tocaron las patas de un sillón que había colocado a su lado para vigilarle el sueño, sentándose en él tomó con delicadeza una de las manos de la omega algo maltratadas por el duro trabajo ejercido en la cantera de crown, se veía tan en paz durmiendo que a veces pensaba que si el querer despertarla era buena idea.

Observó por varios minutos como su pecho subía y bajaba con su tranquila respiración, hacía de todo para evitar mirar sus apetitosos labios entreabiertos, esos que le incitaban probarlos, degustar su sabor y convertirlo en su preferido, eran tan carnosos que solo quería morderlos. Sí, debía apartar la vista si no quería cometer una locura.

Eso era ella, una locura de la cual debía permanecer cuerdo, pero era tan difícil y su lobo hablándole no ayudaba.

- ¡Solo dale a beber un poco de tu sangre, maldito estúpido!, no me hagas tomar el control porque te arrepentirás.

Kan era un lobo insoportable, amante del caos y la destrucción, fuerte, soberbio e invencible, lo demostraba en cada batalla, sus victorias eran muestra de ello, y qué mejor portador que Jungkook; sin embargo, nunca mostraba signos de interés o compasión con otro ser.

- Intenta tomar el control, si es que puedes. Eres un lobo fuerte, pero yo soy tu portador, yo te controlo a ti, no al revés.

- Pruébame y verás de lo que soy capaz.

Jungkook blanqueó los ojos con fastidio, no le haría caso. Cuando estuvo dispuesto a abandonar la habitación, no pudo. Se veía tan frágil que temió perderla por un breve instante. Mandó todo al demonio cuando unió sus labios dejándose llevar por sus deseos internos, mordió su lengua hasta hacerla sangrar y la hizo beber de aquel líquido vital, su sabor dulce aún se sentía por encima del de la sangre. Sintió a Kan aullar de regocijo, su primer beso después de tanto tiempo, claramente nunca besaba a las cortesanas con las que mantenía coito y con las que tuvo su primer celo.

Cortó el beso cuando la sintió removerse con dificultad debajo de él, separó sus labios listos para enfrentar esa mirada asesina, la cual veía por primera vez y la cual extrañadamente le causaba pavor.

- ¡¿Quién eres?!, ¿Dónde estoy? - preguntó exaltada y desorientada.

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Pocas veces dejo notas en esta historia, pero debido a algunos comentarios me veo en la penosa necesidad de hacerla. Bueno, haré un par de aclaraciones, esta historia es del género omegaverse hombre lobo, no un libro de anatomía ni un diccionario de terminologías médicas. Y ahora dirán ¿Qué pasó Jessica con quién te fuiste a los chongos ahora?, los pongo en contexto y de paso le respondo como se debe a esa persona.

A mí no me molesta que me corrijan o señalen errores, siempre y cuando sí lo sean, puedo hasta enumerar ejemplos de ello, como cuando republique Amigos o Amantes y a la protagonista le modifique el nombre y en algunos capítulos aún mantenía el anterior y gracias a sus comentarios pude detectar el error y editarlo, como cuando hace poco la página de corrector ortográfico me cambió el nombre de Namjoon por Nalgón 😂 todavía me estoy riendo de esto, o como cuando por las políticas nuevas de Wattpad tuve que modificar edades en Erased y la protagonista en los capítulos editados tenía 18 y en los no editados 16 que yo ni me acordaba en cuáles capítulos mencionaba su edad y gracias a una nueva lectora que está leyéndola recientemente me lo comunico y pude arreglarlo, por cierto ya está editada por completa.

En los capítulos anteriores que ya ni me acuerdo en cuál es porque fue un maratón se hace mención de dos personajes antagonista Taehyung (archiduque) y Hanna (esclava) en el cual Tae viola a Hanna y la marca sin su consentimiento dejándole múltiples lesiones una de esas lesiones es la mordedura de la marca en el cuello que casi le perfora una arteria carótida. Vamos por partes la carótida se encuentra en el cuello a ambos lados zona donde fue la mordedura, la marca puede realizarse en tres zonas en específico, no recuerdo si hable a grandes rasgos de esto en la guía de Erased, pero ahora se los digo las zonas viables para una marcación correcta son el cuello, los hombros, y la nuca que es donde se encuentra la fuente de olor que segrega las feromonas, en el capítulo se menciona la zona en la que es y que CASI vuelvo a repetir se perfora la carótida, no se llegó a perforar. Ahora recapitulemos de nuevo ¿Qué es esto?, un omegaverse de licántropos, Hanna es una loba omega, que los licántropos tenga forma humanoide semejante a la de nosotros no quiere decir que sean humanos y sus causas de muertes o lesiones sean iguales, poseen forma animal, tienen un proceso de sanación diferente, son longevos, tienen una inmunidad diferente y demás aspectos que no me es necesario detallar para llegar a mi punto.

Yo no voy a las historias de las demás escritoras a hacer payasadas ni queriéndome hacer la máster, pero cuando vi esta serie de comentarios por parte de una "lectora" me llene de coraje sinceramente, no voy a mencionar nombres, seguro ella hasta lee esto tarde o temprano y ustedes de chismosas lo más probable es que vayan a los comentarios a ver quién fue, en fin uno siempre busca emplear palabras y terminologías de fácil comprensión para el lector, siempre busca instruirse mínimamente para hablar de algo aunque desconozca del tema, no estudio medicina, aunque es una de las carreras más estudiadas en mi país y con mi escalafón de bachillerato podía cogerla más que fácil y en sí ese era mi plan inicial, pero ya cuando llegue a 12 grado cambie de sueños y aspiraciones ya no se me hacía atractivo estudiar tantos años, hacer servicio social, luego licenciatura para al final no poder ni salir de mi país (que es lo que quiero), el sueldo es una miseria y si renuncias tienes que esperar hasta 10 años para poder irte de aquí así sea para Jamaica. Creo que lo que más me molesto fue su actitud engreída, si yo te doy una referencia de busca en Google, el motor de búsqueda más reconocido que con una simple pregunta te muestra imágenes y artículos de especialistas, no es para que me respondas tan egocéntricamente "Yo no estudio por Google estudio medicina" o algo así escribió ya ni recordar quiero.

Si no te gusta como escribe alguien, ¡¿Para qué chingados la lees?!, ¡Salte y vete a la verga, no más! 🙄 ay Santa Ramona, dame paciencia.