Bonnie realmente había estado preocupada luego de que Elena no apareciera en su casa como había quedado en hacerlo luego de verla la última vez.

Ella había hablado con los hermanos Salvatore de la situación que había descubierto con su mejor amiga.

Les contó sobre el embarazo milagroso que Elena estaba pasando.

Decir que los hermanos Salvatore no estaban sorprendidos era mentir.

Cuando Bonnie les dijo que de alguna manera Elena estaba embarazada, ellos casi se desmayaron en ese instante ya que era algo imposible de pensar que Elena siendo un vampiro tuviera un hijo.

Bonnie les había dicho varias veces que tal vez era algo relacionado con alguna magia poderosa.

Luego de una larga explicación por parte de la bruja Bennett, los tres habían ido a la casa Gilbert dónde Elena debería estar hablando con Jeremy, pero grande fue la sorpresa para Bonnie cuando Jeremy le dijo que Elena nunca había llegado a la casa.

Bonnie rápidamente supo que algo andaba mal y lo confirmó cuando quiso hacer un hechizo de localización y no pudo encontrar a Elena.

Eso había preocupado a todos, no saber dónde estaba el doppelganger había a puesto a todos buscándola para saber de su paradero.

Bonnie siguió intentándo buscar a Elena con magia pero todos los mapas se quemaban cuando hacia el hechizo de localización, eso le hizo saber a Bonnie que todo eso tenía que ver con brujas que habían bloqueado la manera para localizar a Elena.

A Bonnie no le había quedado más que otra en decirle a Jeremy también que Elena estaba embarazada.

El Gilbert había quedado peor que los Salvatore al saber eso. Él realmente se desmayó cuando lo supo.

Luego de despertar de su desmayo le había preguntado a Bonnie varias veces si de verdad Elena estaba embarazada o él se lo había imaginado.

Para Jeremy todo eso era algo inesperado y sorprendente. Nunca pensó que su hermana tendría un bebé luego de convertirse en un vampiro.

A Jeremy le preocupaba con mayor razón su hermana en esa situación. Había intentado localizarla por todos los medios pero nada había funcionado.

Por un momento ellos creyeron que los originales que aún estaban en la ciudad la tenían secuestrada pero desecharon esa idea rápidamente ya que Elena no era humana y al ser un vampiro su sangre ya no era importante.

Los siguientes días después de la desaparición de Elena pasaron lentos para ellos, cada día buscaban aunque sea una pista para poder encontrarla pero siempre fallaban.

Era como hubiera desaparecido de la faz de la tierra. Incluso llegaron a pesar que ni siquiera estaba en Mystic Falls.

Los últimos originales que habían quedado en Mystic Falls también se habían ido del pueblo con los días para alivio de la pandilla, sin embargo una parte de cada uno de ellos aún seguían sospechando que ellos tenían que ver algo con la desaparición de Elena a pesar de no tener pruebas.

[...]

Elena había estado nerviosa todo el tiempo que pasó después que Elijah se fuera de la cripta.

Ella no tenía idea de lo que pasaría después, lo único que estaba segura era que tendría que volver a ver a Klaus y la verdad eso le preocupaba bastante.

Sabía como era el hibrido y temía su reacción.

Nuevamente en el día, Elena maldijo al universo por ponerla en esa situación.

«Embarazada de mi enemigo, esto es todo un cliché». Pensó Elena.

Jamás en su vida pensó que tendría al hijo de Klaus dentro de ella, incluso decirlo de esa forma sonaba extremadamente raro para ella.

Klaus no era precisamente una de sus personas favoritas en el planeta, de hecho él era el último en su lista.

Con Elijah por otro lado era diferente, a él lo soportaba más que a los otros originales que conoció.

Un ruido desde afuera de la cripta saco de sus pensamientos a Elena.

Dos brujas entraron al lugar y la sacaron a jalones a pesar de las protestas de Elena hacia ellas.

Cuando Elena salió de la cripta lo primero que vió fue a Elijah y a Klaus a su lado.

Elena se paralizó por un momento al ver al hibrido.

Klaus estaba de igual manera que Elena ya que el doppelganger era la última persona que el original espero ver cuándo Elijah lo llevó con las brujas que conspiraban contra él.

─ Klaus ─ susurró Elena mirándolo.

Elena no sabía si lo que sentía era alivio por verlo finalmente sabiendo que por fin sus días en esa cripta acabarían, o alivio de que él posiblemente la mataría ahí mismo y así terminaría con su vida problemática.

Ella no tenía idea de cuál de las dos opciones pasaría, lo único que sabía era que ya no sufriría en ese horrible lugar con esas brujas.

Literalmente ella le hubiera suplicado a Klaus por la segunda opción sino fuera porque estaba embarazada.

Aunque el bebé fuera hijo de Klaus a Elena igual le preocupaba ya que el bebé no tenía la culpa de quien era su padre y ella lo tenía perfectamente claro.

─ ¿Qué significa esto, Elijah? ─ Klaus dobló su cuerpo mirando a su hermano luego de ver a Elena ahí.

El doppelganger tragó saliva al saber que en ese momento se decidiría sobre su vida y del bebé.

─ Deja que Sophie hablé, ella va a explicarte todo, Niklaus ─ le dijo el original de traje.

Klaus negó rápidamente con su cabeza.

─ No voy a escuchar nada ─ negó para luego mirar fijamente a Sophie ─ si quieres chantajearme para que te ayude estás equivocada ─ le dijo, luego volvió su mirada a Elena ─ el doppelganger es un vampiro y ya no me es útil como cuando era humana. Ya no tiene valor ─ mencionó.

Elena rodó sus ojos al escucharlo, también le dió ganas de golpearlo porque nuevamente estaba viviendo una horrible situación gracias a él.

Literalmente su vida se vino abajo cuando Klaus apareció en Mystic Falls y parecía como si tal situación nunca acabaría.

─ ¡Niklaus! ─ Elijah levantó la voz mirando mal a su hermano.

─ ¿Elijah qué locura es está? ─ preguntó arto el hibrido.

─ Tienes que escúcharla ─ repitió Elijah.

Sophie dió unos pasos a delante de Klaus mientras lo miraba.

─ Klaus, en Mystic Falls conociste una licantropo, su nombre era Hayley, ella vino a Nueva Orleans a buscar a su familia ─ empezó a hablar ─ cuando la ví supe que estaba embarazada, yo tengo un don especial Klaus, puedo sentir cuando una chica está embarazada ─ le dijo la bruja.

Klaus se sorprendió un poco al escuchar a la bruja hablar de Hayley.

─ ¿Qué?, Es imposible ─ negó Klaus ─ ¿Qué estás diciendo?.

─ Niklaus, Elena lleva a tu hijo ─ soltó Elijah mirándolo.

Klaus soltó una risa luego de escuchar a su hermano.

─ ¡Elena es una vampiro!, Además ¡Yo nunca estuve con ella!, Esto es una maldita farsa ─ dijo Klaus.

Elena se mantuvo en silencio tratando de no alterar más la situación en la que se encontraba en esos momentos.

─ No tuviste con Elena, pero con Hayley si. La loba estaba embarazada de ti cuando llegó a Nueva Orleans, lamentablemente pasaron cosas y ella murió, sin más opciones traspasamos al bebé a alguien más antes de que muriera. El doppelganger de Petrova era lo suficientemente fuerte para cargar con el bebé sin importar que fuera vampiro ─ dijo segura Sophie.

Klaus miró a Elena, su mirada fue hasta su vientre, pudo escuchar perfectamente pequeños latidos en ella.

El hibrido tragó saliva antes eso.

─ Están locos ─ negó Klaus no queriendo creer que eso fuera posible ─ es imposible, ¡Los vampiros no pueden procrear!

─ Pero los licantropos si. La magia te hizo vampiro pero naciste siendo un hombre lobo. Eres el hibrido. El primero de tu especie y este embarazo es una de las lagunas de la naturaleza ─ le dijo Sophie mirando al hibrido.

─ ¡No es cierto!, Debió estar con alguien más, ¡Eso debió ser! ─ gruñó furioso mirando a Elena.

El doppelganger levantó sus cejas ya que literalmente Klaus la estaba culpando a ella por algo que ni siquiera hizo.

─ A mi no me metas en esto, suficiente tengo con estas locas brujas que me secuestraron para meter a tu bebé en mi vientre sin mi permiso ─ dijo molesta Elena con todos, sobre todo molesta con Klaus ─ esto es tu maldita culpa por no cuidarte antes de tener sexo. Tienes más de mil años y pareces un maldito adolescente hormonal que no se pudo cuidar antes de acostarse con alguien ─ soltó enojada.

A Elena en esos momentos le dejo de importar su vida, realmente si Klaus la mataba por hablarle así se lo agradecería en el más allá si alguna vez lo volvía a ver nuevamente.

Elijah abrió sus ojos más de lo normal de la sorpresa que se llevó al escuchar a Elena, realmente no espero esa reacción de su parte, al original incluso le preocupó su vida al saber que su hermano le podría hacer algo malo.

Klaus por otra parte quedó en silencio por unos segundos luego de escuchar al doppelganger. Él realmente no podía creer que Elena le hubiera hablado de esa forma.

─ Mi hermana dió su vida por esto, para realizar el hechizo de traspaso. El sacrificio de Jane-Anne no será en vano, controlamos la vida de Elena y del bebé ─ volvió a hablar Sophie cortando el momento tenso ─ si no nos ayudas a derrotar a Marcel, al igual que a mi, Elena no vivirá lo suficiente para disfrutar su nueva vida inmortal ─ agregó mirando a Klaus.

─ ¿Espera?, ¿Qué? ─ Elijah se acercó a la bruja luego de escuchar su clara amenaza.

Elena escuchó toda la conversación, ella no volvió a hablar, solo miró y escuchó.

Cómo lo imaginó anteriormente a Klaus no le importó el bebé.

Elena nuevamente quiso golpearlo cuando le dijo a Sophie que la mataran a ella y al bebé.

Ella no podía creer la mala suerte que el bebé estaba empezando a tener sin que esté aún naciera. No solamente su madre había muerto sino que su padre lo negaba y no le importaba su vida.

Creyó que el destino fue injusto con ese bebé inocente que aún no nacía.

Luego de ese momento tenso entre la bruja Sophie y los Mikaelson. Elena se volvió a quedar en la cripta para su desgracia.

Elijah le había prometido convencer a Klaus para que desistiera de su idea anterior, también le prometió sacarla de allí lo más pronto posible que él pudiera.

Sin más remedio, Elena tuvo que quedarse en la cripta siendo observada nuevamente por las brujas.

Elena se prometió que si Elijah convencía a Klaus en recapacitar, ella cuidaría del bebé.

Tal vez sonaba una idea loca de su parte pero lo haría. Elena no quería que ese bebé sufriera, le dolía incluso saber que había perdido a su madre antes de nacer.

Elena se prometió así misma y al bebé que sería la madre que él o ella necesitaría en el futuro.

Tal vez era una decisión demasiada precipitada porque literalmente estaría unida a los Mikaelson para siempre si hacía algo así, sin embargo ella lo haría.

Lo haría por el bebé. Ese bebé la necesitaba.

¡CAPÍTULO 3!

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