𝐄𝐌𝐏𝐈𝐑𝐄 - 10
Su pequeña salida del palacio a la pequeña cafetería había durado cerca de dos horas, y antes de que la noche cayera por completo ambas mujeres habían regresado al palacio para ver los desfiles que se llevarían acabo esa noche desde uno de los miradores de este. Después de charlar sobre cosas banales en su salida el ambiente era más a meno, Tzuyu ya no se sentía tan incomoda por estar junto a su ex y T/n ya no estaba nerviosa, ¿Difícil? Por supuesto, pero no era nada que no pudieran lograr y manejar con tranquilidad.
Tras haber pasado unos cuantos minutos en soledad ambas emperatrices fueron acorraladas por Soojin y Shuhua.
—¿Sucedió algo? -preguntó T/n, Soojin asintió- ¿Algo grave?
—No majestad, no es nada grave -respondió Soojin tranquila, T/n asintió aliviada- Es solo su tío Akira, el emperador aceptó venir y reunirse con usted durante la cumbre de la OEM.
—Perfecto, ¿Podrías encargarte de eso?
Soojin asintió ante la solicitud de T/n. —Por supuesto majestad -respondió ésta- El emperador llegará mañana en la mañana.
—Genial -dijo T/n- Muchas gracias Soojin, si deseas puedes quedarte aquí disfrutando del desfile.
La pelirroja solo sonrió, Shuhua en ese momento aprovecho para preguntar algo que aún no entendía.
—¿Que es la OEM? -preguntó la rubia intrigada. Está se sentía un poco estúpida por no saber el significado de ese acrónimo.
Tzuyu miró a T/n seguidamente, ella también tenía la misma pregunta.
—Bueno... -musitó la azabache- La OEM es como una organización mundial, algo así como la ONU o la Unión Europea, solo que en este caso la conforman doce representantes de los doce países más importantes en el mundo que aún cuentan con la monarquía como forma de gobierno -esta explicó de manera sencilla, tratando que las otras dos entendieran fácilmente- la Organización de Estados Monárquicos es eso, una especie de unión o concejo con todos los reyes, príncipes y emperadores del mundo qué están dispuestos a mantener la paz mundial, lograr tratados de comercio entre naciones y ayudar en cualquier sentido siempre y cuando se necesite.
—¿Y por qué no sabíamos de eso?
—Tzuyu ha hecho un buen trabajo ignorando lo que sucede por estas partes del mundo, entre ello cosas así, además, nos gusta hacer todo en silencio, las ayudas humanitarias y cosas por el mismo estilo se hacen fuera del ojo público, por eso no sabían nada de eso -explico T/n hacía Shuhua, la morena desvió su mirada totalmente avergonzada- Pero ya que están aquí podemos aprovechar eso y que se unan a la reunión, podría servir de algo en el futuro.
¿Servir en el futuro? ¿Para qué?
—¿Para que podría ser útil eso?
—Uno nunca sabe, si algo es provechoso y podría ser útil en un futuro cercano es mejor aceptarlo con los brazos abiertos -respondió T/n- Por ahora disfrutemos de lo que queda del festival. La reunión se llevará acabo durante el partido inicial, así no notarán tanto nuestra ausencia.
En ese momento, varios flashes de camaras alumbraron el rostro de las cuatro chicas. El plazo de los días libres de prensa y noticieros terminarían esa noche, y muy seguramente aquellas fotografías que estaban tomando esa noche serían la primicia y la portada en la mañana. Tzuyu estaba nerviosa, tanto como se le podía permitir, pero T/n le había asegurado que no había nada que temer, ella estaba protegida por la emperatriz más poderosa que el mundo antiguo y el nuevo podrían conocer, si algo malo podía pasar ella estaba ahí para extenderle la mano, darle la palmadita en la espalda y asegurarle que todo estaría bien.
Tzuyu sonrió tanto como pudo para saludar a las cámaras, las pocas personas que la pudieron reconocer estaban sorprendidos de ver a una monarca extranjera en el palacio.
Entonces, en ese momento la morena se sintió un poco mal, los recuerdos pasados vinieron a su mente, y el como había tratado a la azabache años atrás la comenzaron a mortificar. De una manera u otra está tenía que recompensarle a T/n ese mal trato.
Algunas horas después...
—Cuando te fuiste... Pasé por algunas cosas malas -dijo Tzuyu, su barbilla estaba apoyada en el respaldar de mármol del balcón, como su espalda algo ladeada y sentada en una silla, viendo hacía las aguas tranquilas del lago, T/n a su lado prestó suma atención mientras bebía de su chocolate caliente- Al principio fue difícil, ya que no estabas ahí me tocó hacer las cosas que hacías por mi, perdí muchos tratados por mi mala organización y desperdicié muchas alianzas. Creo que fue en ese momento cuando el concejal Wong se aprovechó de mi precaria situación para comenzar a hacer de las suyas en la corte.
Luego hizo un pequeño silencio.
—Para cuando pude darme cuenta ya era muy tarde, el concejal había tejido una red de lealtad bastante poderosa, me relegó a simples temas protocolarios y redujo mucho mi autoridad mediante leyes antiguas, se colocó como primer ministro y ha estado haciendo todo lo posible para que contraiga matrimonio con su hijo y legitimar su poder en el concejo y el trono -agregó está- Shuhua me ha ayudado bastante para mantenerlo a raya, pero en algún momento este sujeto encontrará otra manera de sacarme por completo del gobierno.
—Suena bastante mal -dijo T/n, Tzuyu asintió suspirando- Si puedo ser franca... Tal vez eso sea mi culpa -dijo, Tzuyu la miró confundida- Si hubiera sido honesta contigo esto se habría evitado, yo no hubiera tenido que haber salido casi corriendo del país y muy posiblemente haber evitado todo esto.
Tzuyu negó casi de inmediato. —No, nada de eso, tú solo tenías un deber que cumplir, fue culpa mía haber tomado aquella noticia de mala manera -dijo- Jamás pensé que serías una princesa, menos de un país tan importante como este, creo que mi mala reacción fue por miedo, y créeme, estuve bastante temerosa de haber dañado algo entre países y haber causado una guerra.
T/n negó riendo suavemente.
—No tenía derecho de hacer tal cosa, sería muy hipócrita de mi parte haber llegado hasta ese extremo -respondió la azabache, luego fijó su vista en Tzuyu- ¿Sabes? -la morena también la miró- Existe una posibilidad muy loca para que tengas una oportunidad contra este sujeto, lo he discutido un poco con Shuhua y Soojin, incluso con Jihyo sobre la viabilidad de esto, y es muy buena, pero la última palabra la tienes tú.
—¿Por qué estás ten nerviosa?
T/n sonrió, obviamente nerviosa, dandole la razón a Tzuyu.
—Por que no sé cómo reaccionarias a eso -dijo, luego suspiró profundamente- Yo...
—¿Tú...? -alargó Tzuyu- Vamos T/n, solo dilo.
Y la azabache puso su expresión más seria para soltar aquella bomba.
Tzuyu esperó intranquila a que está se decidiera a decir algo.
—Cásate conmigo.
Un segundo. Dos segundos. Tres segundos.
En una fracción de tiempo la morena pasó de estar expectante, a estar confundida y finalmente sorprendida. ¿Ella escuchó bien? ¿Verdad?
—¿Qué dijiste? -finalmente preguntó después de estar en silencio cerca de un minuto.
T/n tragó nerviosa.
—Cásate conmigo -repitió T/n, está desvío la mirada de Tzuyu hacía el frente- Al casarte conmigo y unirte a mi uniendo las dos coronas dinasticamente, pasarías a formar de la familia imperial Miyawaki, el Imperio de China dejaría de existir y será anexado al Imperio Americano, siendo una provincia más de este -dijo- Al unir los dos imperios, y según las propias leyes de tu país, el Imperio Americano, al ser más grande y poderoso en cualquier sentido pasaría a tomar control del tuyo, el parlamento americano abriría una sucursal en Pekín y obtendría el control total del gobierno chino, todos los concejales, incluído el concejal Wong, pasarían a responder directamente hacia mi, las leyes de América les serían empleadas a todos los funcionarios gubernamentales, y como sabes, ante cualquier indicio de corrupción y traición a la monarquía y al país es castigado con la cadena perpetua, y en casos graves es penado con la pena máxima, la muerte -agregó, seguido vió a la morena, que seguía atónita ante las palabras de T/n- Obviamente este control total mío solo estaría vigente de facto en los tratados y el papel, yo solo ejercería tales poderes mientras re-estructuro tu concejo y eliminó del mapa a toda esta mierda que no te deja tranquila, tras haber logrado mi objetivo, y créeme que así será, anularé el matrimonio, se anulará el tratado de la anexión China y se le otorgará su independencia a la provincia mediante un referéndum, yo me echaré la culpa y te dejaré el camino libre para que tú seas la primera emperatriz después de tal reforma. Gobernando tranquilamente y como siempre debió de ser, Wong y sus aliados serán llevados a juicios por traición y todo volverá a la normalidad.
Finalmente T/n terminó de explicar su plan. Está le dejó un tiempo prudente a Tzuyu antes de esperar una respuesta para que esta pudiera meditar sus palabras.
En si el plan era bueno, sería uno a corto plazo y no dejaría repercusiones graves para ninguna de ellas en el futuro.
Solo sería necesario que Tzuyu aceptara para que esto se llevará acabo. Luego, después de un tiempo en silencio, T/n volvió a hablar.
—Algo que me gustaría agregar, sería tu papel en esto -dijo, Tzuyu dejó de ver el lago para mirar a la azabache, que aún tenía en sus manos aquella taza humeante- No serías una reina, ni princesa menor, ni emperatriz consorte -dijo- Serías una emperatriz en toda la extensión de la palabra. Tú pasarías a tener la misma autoridad en toda América como la tengo yo, nada de relegos, nada de restricciones, y tus ciudadanos tendrían los mismos derechos y beneficios que los mios. Y tú serías mi equivalente en cualquier sentido, con el mismo derecho para decidir e intervenir, una Miyawaki en toda la palabra.
Tzuyu asintió.
—¿Cuánto tiempo tardaría esto? -preguntó.
—El plan está hecho para durar de dos a tres meses, pero podría tardar más, todo depende de cuánto este dispuesto a colaborar tu anciano rebelde -respondió T/n- Solo tendrías que estar de acuerdo.
—¿Por qué haces esto? -preguntó Tzuyu- Fui tan mala contigo, hice de todo para mantenerte alejada, y aún así... Estás arriesgando todo para salvarme de esto. Entonces, ¿Por qué lo haces?
T/n no dudó mucho para responder.
—Fuiste la persona a la que más amé y que de hecho aún amo que es distinta a mi familia, me enseñaste tantas cosas que... Simplemente no puedo dejarte caer -aseguró firmemente- Una vez hace muchos años prometí ser tu soporte. Este es mi momento para cumplir esa promesa.
Ante el silencio y el sonrojo de T/n, Tzuyu reprimió una leve sonrisa, sintiendo como sus orejas se calentaban ante las palabras de T/n.
Ella también la seguía amando después de tanto tiempo.
—Lo haré -respondió firme, sorprendiendo suavemente a T/n- Haré lo que me pidas, después de todo, manejas a un continente entero tú sola y lo mantienes estable, tu experiencia me puede ayudar a salvar el legado de mi padre -dijo- Pero solo aceptaré con una condición.
T/n asintió.
—¿Cuál es esa condición?
Tzuyu se sentó recta en su silla.
—No anules nada -dijo, T/n frunció el ceño.
—¿Qué? -preguntó de regreso.
—El matrimonio, o la anexión, no los anules -respondió Tzuyu- Cuando terminemos con esto, no anules nada, déjalo así como está.
T/n asintió dudosa. —¿Por qué? -preguntó.
Tzuyu estiró su mano hacia T/n, la cual dejó de sostener la taza con ambas manos para tomar la de Tzuyu, sintiendo como su calor corporal se pasaba a su cuerpo, rozando aquella suave y hermosa piel morena con la suya.
—Por que yo también te sigo amando, T/n.
La OEM (Organización de Estados Monárquicos) como dice su nombre, es una organización de carácter mundial, sin sede fija es como la ONU de las monarquías, sus funciones, entre muchas, es velar por la seguridad y la paz mundial entre ellos, ayudas humanitarias, votaciones y demás cosas que sirven en esta organización, su fundación se remonta a finales del siglo XlX, en la década de 1899, cuando la emperatriz Miyeon ll del imperio americano establecido las bases fundamentales de la organización. Sus únicos doce países miembros que la integran son los qué, a día de hoy, aún conservan a la monarquía como forma de gobierno, entre ellos están el Reino Unido, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo, Dinamarca, Suecia, Noruega, Japón, Liechtenstein, Tailandia, Mónaco y América.
Emblema:
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro