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05. Los ingleses y su adicción al té

Baje la cabeza mientras que escuchaba a honduras platicar un poco con UK, seguía detrás de el parados en lo que sería la entrada del gran edificio.

Seguía aun preocupada y angustiada por lo de esta mañana, todos al ver mi cara pálida y asustado, me cuestionaron y dijeron que si no me sentía bien podría descansar e irme mañana con UK, El beliceño felizmente hablaría con eso con su padre.

"¡Pequeña!" Nos giramos los tres, observando a los del caribe acercarse a nosotros, saludando a los dos mayores y luego a mi cordialmente.

"¡Cuba!¡Chicos!" Me lance abrazarlos, dejando de lado la maleta que me había comprado no hace poco con ropa en ella, Honduras menciono que obtuvo un poco de ayuda de Francia, ya que el quería también saber un poco de mí.

Ahora recordándolo, Francia se le conoce en las historias mayormente como mujer y no hombre, por lo que se me hace extraño escuchar hablar de panamá como el francés platicaba sin parar sobre hacer ropa.

Tengo miedo.

"¡Muy buenos días Honduras y UK!" Hablo en su tanto oxidado español, aunque cuba le estuviera enseñando un poco, se notaba fuertemente su acento en el.

"Hola Jamaica." Saludo cordialmente el país británico, Honduras solamente lo saludo con un apretón de manos y dándose una palmadas en sus espaldas cuando se abrazaron y apartaron.

(Me acordaron de Mabel y dipper.)

Observe detenidamente a los demás que me acariciaron la cabeza o estrecharon su mano conmigo.

"Bien, nos debemos de ir." UK estrecho su mano en despida con honduras, quien le dio una cara amenazante antes de murmurarle algo y luego el inglés solo resoplar y asentir, alejándose de honduras quien cambio de cara cuando llegó la hora de despedirse.

"Cuídate, hable con UK y tal vez dentro de unos días pueda visitarte." Acaricio mis cabellos con suavidad, solo me queje quitando su mano y mirar por encima de mi hombro como el señor UK subía al auto.

Nos abrazamos con fuerza, temblaba entre sus brazos y el miedo de dejarlo e quedarme sola me carcomía con fuerza, nos apartamos, yo aun con miedo y con el poco coraje que me quedaba, lo mire con una sonrisa entristecida.

Al darme la vuelta mire como el señor UK me sonreía pero antes de avanzar, una mano se pose en mi hombro.

"_____, ten esto." Me di la vuelta curiosa observándolo, el metió su mano en su saco levantándolo un poco y luego sacar un diario mal gastado.

Me lo entrego, curiosa y un tanto perpleja lo tome.

"Nos vemos, ______." Sin más, subí al auto y cerré la puerta mirando como honduras y los del caribe se despedían de mí.

"¿Y que le dio honduras, señorita?" Voltee a verlo, mirando a UK esperando mi respuesta, aunque estaba curiosa y insegura de hacerlo, guarde el libro en mi mochila.

"Aún no lo se, tal vez lo averigüe luego." El solo sonrió y asintió satisfecho de mi respuesta, para volver su postura adelante.

(------)

Bostece mirando por ventana de la aerolínea privada del señor UK, suspirando cuando observaba desde la gran altura el aeropuerto cerca de nosotros.

"Señor uk." Llame soltando algunos bostezos y rascando uno de mis ojos, lo escuche tararear y dejaba la vista de su periódico.

"¿Cómo describiría a Mariana?" Sabía que la pregunta era un tanto absurda y que llegaría a los oídos de ellas, pero por lo menos debería de conocer como ellos la describen y como levantar un poco mejor que ella sus expectativas.

Suspiro aliviado, mirando con una sonrisa en sus labios aun lado.

"Es muy amable y cuidadosa, además de muy social." Habla con cierto brillo de alegría en todo su ser, resople al saber que mariana era la típica chica cliché.

"Genial." Murmullo con sarcasmo e indiferencia, mostrando una sonrisa forzada en mis labios.

Me cruzo de brazos ignorando al inglés, observando como comenzábamos a aterrizar, solté un bostezo, era algo temprano y no me gustaba estar despierta tan temprano.

Después que el jet privado aterrizara, nos bajamos, aunque temblé de frió al recordar que estos meses haría mucho frió aquí en Europa.

Sentí un suave peso en mis hombros, toque lo que estaba en mis hombros sintiendo la aguantada mano del británico, alce la vista y lo mire observándome detenidamente, sus manos aun en mis hombros entregándome lo que sería su saco.  

Miro su rostro, lo cual cambio de un color rosado suave en sus mejillas, a lo que lace una ceja curiosa, mirando como negaba y bruscamente quitaba sus manos de mis hombros, casi botando el saco si no fuera porque estaba mi mano en su mano.

"Okey, Young lady, we have to go, now." Miro a un lado y sin mirarle, por lo que extrañada pase bajando las escaleras del jet.

Mire hacia adelante donde estaba una mujer de cabellos largos azules y vestida formalmente, me miro con cierta indiferencia que detecte.

"Miss Olivia, Thank god you are here." Yo mire ambos adultos sin entender mucho, observando como la fémina carraspeo y UK miraba a otro lado que no fuera yo.

(¿¿¿¿Qué es lo que le pasa al señor uk????)

"Everything you had ordered, sir, is ready, the house is ready, and what the girl needs is already bought, sir." Observe como no le decía con muchas ganas del mundo, dejando de lado su Tablet contra su pecho, observándome frialdad.

Yo solo quería ir a dormir, bostezando y escuchando los adultos charlar sobre otras cosas que no me llegan a interesar mucho.

El señor uk me ordeno que me subiera por lo que lo hice, sentándome pegada a la ventana, observando de reojo a un chofer en espera de alguna orden, luego subieron los otros tras una larga charla, la secretaria del señor uk se sentó en el asiento de copiloto mientras que UK a un lado mío, aunque solo me acomode un poco para dormirme, mire afuero los autos y edificios, escuchando de fondo la charla de la secretaria y el británico.

(----)

Abrí mis ojos, mirando la cabeza de la cama, por lo que me removí quejándome tratando de recuperar el sueño.

ESPERA-

¿COMO LLEGUE HASTA AQUÍ?

Me levante impulsándome por mis brazos, observando mi alrededor estaba en un cuarto impecable, mis maletas aun lado de una silla y el saco que el señor UK me había entregado ahí estaba colocado delicadamente.

Moví mis cabellos dejándolos caer a un lado, observando como estaba creciendo en las pocas semanas que pasaba aquí, cuales con ansias pasaban rápido, algo que me indicaba que debería de ser mas apresurada.

Bien, había otro problema que era los secretarios de los countryhumans, por lo que era algo nuevo que no había visto, desde luego que jamás había visto la secretaria o secretario de honduras, aunque para mi a veces no me fijaba de muchas cosas en la vida, dándome cuenta que probablemente tendría problemas con este tipo de personas.

Tal vez lo que seria esta secretaria seria mi niñera.

Me levante tocando el suelo con mis calcetines, observando que estaba en las mismas prendas que antes por lo que solo camine hacia la silla, temblando un poco por el frio, tome el saco y me coloque abrigándome con el calor que daba este, luego saque mis cosas, observando el diario de cuero café que honduras me entrego hace unas horas.

Corrí hacia la cama y me subí para sentarme en ella con los brazos cruzados, usando mi teléfono de linterna.

NOVA

Era lo que decía en grande, palabras escritas en el cuero del libreto, quitando la cuerda alrededor de esta y dejando el teléfono boca arriba, la luz iluminando mi alrededor, observando como algunas páginas se caían u otros cosas.

Tome entre mis dedos el delicado papel, observando como todo estaba escrito en caligrafía algo daña y fue rápido en hacerlo, ya que había algunas partes que no entendía mucho, además que la tinta hacia cierta manchas en ciertas partes.

'Dos. . . Adolescentes. . . . Dos. . . . Enemigas. . . solo una saldrá. . . victoriosa. . . Destrucción. . . y. . . . Caos. . . . .'

Entrecerré más mis ojos, tratando de leer lo que estaba escrito aunque las palabras no eran demasiado claras.

'Un. . . corazón destrozado. . . . Hija de dos seres. . . . Ayudara. . . . A la. . . creación. . . Vida. . . a. . . . Recuperar. . . . Lo perdido. . . . '

Hija de dos seres, ¿Se referirá a Emma?, ella es hija de URSS y Noah marly, mitad humana y country, por lo que por las imágenes que había logrado ver por las redes, lo único que puedo salir Emma de URSS fue su brillante ojo amarillo, mirando las fotografías de Emma con un parche negro en su ojo derecho, idéntica a su padre.

Tal vez Emma sepa de esto, por lo que se, Emma también estaba buscando una forma de salir de este lugar pero jamás lo había logrado, llevando a callejones sin salida o cabos sueltos.

Lo perdido.

¿Qué era lo que estaba perdido?

Una preciosa joya que los paises desean tener en su poder, algo que les había quitado sus poderes al caer en manos equivocadas, arrebatando los últimos jugos de poderes que alguna vez tuvieron en sus manos.

La joya de los dioses mas antiguos, una joya que se le fue arrebatada a una diosa, Non iens, una de las dioses más poderosas y la creadora de estos seres, donde les regalo la habilidad de obtener poderes pero mientras que ellos amaran a un ser, alguien predestinado al rechazo y la miseria, siendo detestada por todo el mundo por sus bondadosos actos.

Pero alguien lo evitara, un ser que está predestinado a que la adoren y amen pero con un corazón de pierda, sedienta de poder lograra destruirlos y traer caos a todos.

Por lo que, se notan que se habían equivocado muchas veces, mirando lo que habían causa con el tiempo y que jamás habían obtenido sus más ansiados poderes.

La perilla se movió, escondí rápidamente las cosas debajo de mi almohada y me acomode con rapidez, escuchando los pasos de tacón parar enfrente de la cama, cerrando fuertemente los ojos y los nervios entrar por mi cuerpo haciendo erizar toda mi morena piel.

Trate de calmarme, recordando las veces en que fingía estar dormida cuando mi mama venia revisarme por si no estaba con el teléfono, escuchando unos bajos murmullos y luego el tacón del zapato alejarse, cerrando la puerta detrás suyo.

Solté el aire que había retenido varios minutos, solo logre acomodarme y sacar mi teléfono, apagando la linterna y dejándola a un lado, y cerrando los ojos, tratando de por lo menos dormir un poco.

(----)

"Good Morning, Young Lady." Saludo cordialmente el inglés, yo solo asentí rascando uno de mis ojos tratando de quitar cualquier rastro de ellos, sentándome en la mesa donde el señor UK estaba sentado enfrente de mí.

Hizo un movimiento con la mano y tomo entre sus manos el periódico británico, una sirvienta se acercó amablemente y dejo el desayuno enfrente, agradecí con una sonrisa perezosa, por lo que la mujer se inclinó y se retiró sin más, mirando con agua en mi boca el desayuno.

"Pensé que te habían quitado el saco, No dormido con ello." Señalo observando que aun tenía su saco puesto, aunque si hubiera visto mejor el poco visible sonrojo y ojos llenos de ternura.

"Me dio algo de frio, así que me levante para abrigarme con él." Encogí los hombros mirando a un lado mientras que llevaba comida a mi boca.

Tarareo, siguiendo leyendo su periódico y enfrente suyo había una hermosa taza de te de porcelana, delicadamente hecha a mano y siendo algo de la realeza.

Bajo una de sus manos para tomar delicadamente la oreja de la taza y alzarla, llevando el borde de la taza a sus labios y beberlo, comía mientras que hacia todo eso ante mi mirada.

"¿Por qué le gusta tanto el té?" Pregunte curiosa observando como pensaba ante mi pregunta despejando sus labios de la taza y volverla a colocar en el pequeño plato redondo.

En las historias siempre hacían a UK bebiendo té, no había historia que no se leyera encontrando la escena de Inglaterra bebiendo su buena taza de té leyendo el periódico mientras que desayuna junto a la protagonista.

Ambos frente del otro.

"Porque tiene un exquisito aroma, algo que si te dedicas a olerlo y saborearlo, será muy adicto." Me mira con una sonrisa en sus labios bajando el periódico y dejándolo a un lado, su pierna encima de la otra y sus manos entrelazas en la mesa.

"¿Cuál es su objetivo?" Pregunto monótono, analizándome con sus ojos todo mi ser, mirando el cómo estaba firme en su lugar.

Huir a mi hogar, era mi único objetivo y siempre lo seria sin importar las circunstancias, lograría una forma más de acercarme lo que quiero.

"Volver a casa." Dije firmemente, observando cómo se había conmovido por unos segundos pero siempre firme, mirando al británico acomodar un poco su manca de su saco formal.

"Honduras le contó que estamos tratando de lograr una manera de que usted vuelva a su hogar." Hablo moviendo sus dedos, bebí de mi juego de naranja, observando como el me miraba precavido.

No sabía de lo que habla y supongo que el catracho se le había olvidado decirme, por lo que negué dudosa, mirando como este asentía con una sonrisa decorando sus labios.

"Ayer en la tarde estuvimos hablando sobre como las íbamos a mandar a ustedes dos." Su voz se apago levemente, supongo que descartaba la idea de mandar devuelta a mariana, después de todo se había encariñado con ella.

(Como siempre.)

UK parecía una de esas personas dominantes y analizadoras, siempre admire la forma delicada que tomaba las cosas y el como respondía todo con calma, me había sorprendió el hecho que se había rebajado por una engañosa adolescente que no se sabe sus motivos claros.

"Supongo que construirían una maquina que abrirá un portal para mandarnos a nuestro mundo." Me recargue en mi brazo mirando aun lado aburrida y desinteresada, "Por lo que estaremos pasando entre country's que nos cuidaran hasta que terminen de construir su maquina, estoy en el correcto?" Observe seriamente al contrario observando lo sorprendido que estaba bajando su taza y asintiendo lentamente.

Fue mas fácil de lo que creí en deducirlo, y agradezco haber pasado mi tiempo en ello, como había dicho antes, será lo suficiente fácil para informarse en este tipo de cosas pero el otro cabo de esto es recopilar información sobre una antigua predicción.

"Supongo que la subestime un poco." Me obligue a mi misma abandonar mis pensamientos y mirar extrañada al otro, que llevo su taza de porcelana a su boca.

"¿Usted conoce sobre una antigua leyenda predicada por nuestros ancestros?" Negué, apenas me había dado tiempo en tomar fotos a la computadora de honduras sobre los foros que ellos tenían y la información necesaria.

"La leyenda cuenta sobre dos niñas, dos jóvenes niñas que aparecerían en estos tiempos." Mueve sus dedos en la oreja de la taza, observándome analíticamente mientras que sus piernas se mueven bajo la mesa.

Me coloco bien, interesada escuchando lo que el contrario esta apunto de contarme y mis manos entrelazadas entre si.

"Dos jóvenes, Una adolescente que traerá bondad y felicidad a nuestros corazones, su personalidad siendo amorosa y valiente pero. ." Pauso unos segundos dejando su taza aun lado, ya vacía, toma la tetera y vacía mas te en su taza de los escudos reales de la casa real de los Buckingham.

"La otra será nuestra destrucción, su amabilidad será la cuestión de nuestro chapa y separación entre nosotros, dividiéndonos en dos bandos." Abrí un tanto los ojos observándolo detenidamente, sus facciones decían otra cosa de lo que me estaba diciendo.

Tu serás nuestra destrucción.

Me sentía mal tanto eso, pensando que mi actitud llamaría su atención —aunque lo logre.— pero igual sospechaba sobre mi y mi personalidad también pensaba que seria un mal para ellos, era demasiado reservada y seria, mostrando lo educada que soy antes ellos aunque en las historias fueran diferentes.

Mire aun lado herida de cierta forma por eso, no me interesaba sus ojos llenos de culpa y lastima, lo quería obtener mi objetivo y quejarme ante ONU para volver con honduras o que me mandara con otro país.

Pero.

"¿Es ridículo creer en ese tipo de historias, no señor UK?" Coloque mis utensilios encima del plato de porcelana bien, había un poco de comida que no me interesaba terminar o ya no tenia apetito.

El cubierto y cuchillo estaban cruzados desde las puntas, demostrando que no me gusta el la comida o para mi como se puede distinguir el tema es que no me gusta el tema que estábamos hablando, la incomodad apodera todo mi cuerpo y de cierta forma, el disgusto.

UK lo noto rápidamente, pausando y mirando aun lado mientras que tomaba su taza, escuchando los pájaros de la mañana volar en el alrededor, las mucamas limpiando en los alrededores del lugar.

"Con su permiso, me retiro." Me levante mirando al contrario asentir su voltearme a ver, se notaba la frustración severa en su rostro ante ellos y mas por lo que había hecho.

Y me retire con el mentó en alto, dejando de lado al británico y enfocando mi atención en los de su alrededor.

Si, Irlanda del Norte, Gales y Escocia.

(------) [Cambio de Personaje, Mariana Sánchez en España.]

»Prisión de España, Madrid, Centro Penitenciario Social victoria Kent.«

Sus pasos se escuchaban en las frías paredes de la cárcel, dos policías la seguía por detrás mientras que la femenina de largos cabellos ondulados se apresuraba en su paso, ansiosa y molesta por la situación que estaba pasando.

Su mandíbula estaba tensada y su ceño muy marcado, los guardias que estaban pegados a la pared la saludan cordialmente pero ella solo lo ignora, escuchando los guardias abrir la puerta gruesa de metal puro y dejando ver una despelucada mujer de cabellos negros que tenia una esposas gruesas que cubrían hasta la mitad de sus brazos sin mostrar sus manos, y una cadena en su cuello, observando como respiraba profundamente.

"Tienen menos de diez minutos." El guardia a cargo menciona observando seriamente a la adolescente de 17 años.

"Si, Si, Como sea, largo imbéciles." Movió su mano descaradamente, escuchando los murmullos de estos la puerta cerrarse bruscamente, dejando el aire frió merodear por el lugar.

Mariana miro detenidamente a la contraria, observando como mantenía su cabeza agachada y sus sucios y desordenados cabellos, litigiosos y llenos de una capa de caspa, le asqueaba la manera en que estaba así y de cierta forma le causaba cierta emoción al ver la mayor así.

"Asi que, dime, Emma." Escucha la mayor resoplar y alza la cabeza, tirando todos sus cabellos hacia atrás, cayendo algunos por su delgada cara, sus ojos avellana que eran tan fuertes eran pálidos sin algún brillo y unas bolsas moradas con negro se asomaban debajo de estos, relamió sus resecos labios y sonrió con sequedad.

"Pensé que vendrías la próxima semana." Comenta desinteresada, mirando a la menor cruzarse de brazos.

"Salió un contratiempo, Otra humana llego aquí." La mayor la observa interesa, aun así, no demuestra su sonrisa engreída ante ello, "Hace dos semanas que llego en Honduras, cerca de san pedro sula, Su departamento lo encontró como el informe dice." Una curiosa sonrisa se asoma en sus labios y la falsa inocencia entre en ella.

"¿Y para que me necesitas?¿No tienes lo necesario?" Su voz rasposa se hizo resaltar, su saliva raspo sin piedad su garganta y miraba a la contrario tener una sonrisa de lado a lado.

"Ella probablemente venga hacerte unas preguntas, si la respondes como yo te digo," Se acerco y se agacho cerca de su oído, "te sacare de esta porquería de carcel." Murmulla con malvada en su voz pero Emma ríe amargamente.

"Buen Chiste niña, nadie me ha podido sacar de aquí y todos quieren mi cabeza." La sonrisa amarga decoro sus labios y la otra se alejo, Soltando unas risas observando el cierto desconcierto en ella.

"Raro, por que los rumores dictan o. ." Pauso sacando de su bolsillo un papel maltratado y Emma abrió con fuerza los ojos y su sonrisa decayó, dejando sus ojos verla sombríamente.

"Lo que dice esta nota, es que quieres huir de este lugar y volver al mundo humano sin antes matar a tu padre." La de piel pálida se mueve con brusquedad de su asiento de cemento, activando los mecanismos y una fuerte corriente de energía chocar contra su cuerpo, un gemido de dolor escapa de su boca.

"S-Solo una persona tenia esa nota, maldita zorra." Escupe adolorida y furiosa, observando a la mexicana reírse oscuramente.

"El me la entrego fácilmente, después de todo son tan manipulables." Se burla descaradamente, guardando sin cuidado alguno la carta.

"No te preocupes cariño." Con un dedo levanto el mentó de Emma, quien tenia el ceño fruncido y la fuente de su nariz arrugada, mostrando sus colmillos como si fuera un perro rabioso.

"Si haces todo lo que digo, saldrás de aquí." Aparta con brusquedad su cabeza mirando aun lado y aires llenos de furia escapaban de ella.

"Te daré tiempo, la próxima semana que vuelva espero tu respuesta." Habla fríamente, escuchando un gruñido de esta.

De repente la puerta se abre con brusquedad. "Su tiempo termino señorita." El guardia comenta por lo que Mariana asiente y se da la vuelta.

Detiene su paso. "Tu padre dijo que siempre habías sido su mayor decepción, Alemania desde que te ayudo dijo que fue su peor decisión." Emma muerde su labio inferior, tratando de ignorar las palabras de la contraria.

"¿Aun crees que tienes a alguien?" Mariana coloca detras de su espalda sus brazos, Mirando seriamente la pared gris frente suyo, estando en medio de la salida. "Piénsalo, Emma Marly Sovietic." Y sin mas se retira.

Ella solo escucha el pesado sonido de la puerta de metal cerrándose, volviendo a su silencioso y tortuoso habito, mirando de una forma decaída y sin expresión la esquina de la habitación color gris.

De solo pensarlo, se volvería loca aquí en estas cuatro paredes, siendo retenida de matarse ella misma por las cadenas y al ser una prisionera de alto peligro, representándola sus prendas negras.

Salir de cada había sido una de sus mejores anhelos, volver a ver el celeste cielo y sentir el cosquilleo del viento pasar por su cuerpo, observar los enormes campos y admirar los animales que pasaban.

Añoraba su libertad desde que cumplió sus 26 años de edad.

Valdría la pena mentirle a la nueva compañera de este andante infierno?

Tal vez si o Tal vez no.

Todos son crueles si lo piensas de tal forma, despiadados sin algún corazón solo capaces de arriesgar todo por ellos mismo.

Como Mariana.

"¿Todo por mentirle a esa niña nueva?" Bufa algo frustrada, "Le he mentido a peor personas, no me costara con esta." Mira aun lado, formulando su respuesta a la mexicana orgullosa.

(------) [ Con _______ Fúnez]

"¡Auch!" Estornude tapándome entre mi codo y brazo, escuchando un 'Bless you' de Escocia.

Estaban hablando de mi. . . que mierdas.

"¡Eres tan adorable!" Irlanda me apretaba en su abrazo, golpeo con fuerza a sus brazos con mis manos.

¡Necesito aire!

"¡La ahogas Irlanda!" Gales coloca fuerza y logra sacarme de esa terrible prisión cuando ya estaba apunto de irme con san Pedro.

Respiro grandes bocazas de aire y mi mano en mi pecho, mientras que me agachaba y mi otra mano en mi rodilla.

(¡El tiene brazos muy fuertes!*sudar*)

"Lo siento cariño, él siempre es así." Escocia da unas palmaditas en mi espalda, tratando de calmar mis nervios y el cómo me reincorporaba ya al recuperar el aire completamente.

"Si, me tomo por total sorpresa si soy sincera." Rasco mi nuca mirando las escose soltar una risita mientras que Irlanda del norte y gales se sentaban a beber su taza.

Ellos son muy adictos al té y he escuchado sobre que cada uno tiene su favorita marca de té, me sorprende el hecho sobre esto, aunque no debería de hacerlo supongo que verlos platicar sobre viejos, pero viejísimos recuerdos me traen cierta nostalgia.

Aun así, me quede escuchando atenta su conversación, recibiendo de parte de unas sirvientas un poco de chocolate caliente y galletas dulces, por lo que agradecía con una sonrisa y devore mi festín, mientras que los adictos hablan más de té. 

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