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Capรญtulo 37

El bullicio de los guardias corriendo de un lado a otro ante el ataque del rey resonaba en los oรญdos de Valerio, que parecรญan agudizarse a medida que su conciencia se perdรญa, sintiendo cรณmo su cuerpo era empujado hacia el suelo mientras la calidez de su sangre brotaba sin parar de la herida que habรญa perforado su pecho.

Cada latido le arrancaba un poco mรกs de vida; siendo consciente de lo frรกgil de su existencia y perdiendo el miedo a lo que hubiera despuรฉs, detuvo la mano del guardia que intentaba detener su sangrado y mirรกndolo, apretรณ su mano con fuerza mientras la palidez invadรญa su piel y aquel bello color violรกceo se desvanecรญa de sus labios.

El aire que respiraba se hacรญa cada vez mรกs escaso, como si el mundo lo estuviera abandonando y en medio de la agonรญa, su mente se aferrรณ a la imagen de Luna y a lo bella que se veรญa a sus ojos; tanto la primera vez que la conociรณ, como cuando se casรณ con ella junto a aquella imagen que le robรณ una รบltima sonrisa; su bella luz de luna con el vientre abultado.

โ€”Luna โ€”susurrรณ, con la voz entrecortada mientras su garganta se llenaba de un sabor metรกlico.

De repente, desviรณ su mirada y observรณ el cuerpo de su hermano inerte a unos escasos metros, con los ojos abiertos y una expresiรณn vacรญa y frรญa, mientras la sangre seguรญa emanando de las heridas de su garganta. Las รบnicas fuerzas que le quedaban comenzaron a desvanecerse; su pรกrpado se volviรณ mรกs pesado y su sensibilidad se habรญa esfumado a tal punto que ya no sentรญa nada, ni siquiera el calor de la arena bajo su cuerpo.

Por mรกs que quiso reaccionar ante el grito de un hombre que lo llamaba a la distancia, esa voz se iba desvaneciendo lentamente al tiempo que su vista comenzaba a sumergirse en un vacรญo oscuro que parecรญa arrastrarlo hacia una densa oscuridad.

โ€”ยกMi rey!

ร‰l continuaba escuchando aquella voz, mรกs lejana que nunca, hasta que ese mismo grito desgarrador cortรณ con la oscuridad y el silencio en el que se habรญa sumergido la mente del rey.

โ€”ยกMI REY!

Los ojos de Valerio se abrieron de golpe bajo un jadeo agรณnico, como si acabara de emerger de un mismo abismo en el que desesperadamente buscaba tomar aire.

โ€”ยกMi rey, despierte, por favor! ยกDespierte! โ€”insistรญa el lord consejero, recibiendo a un aturdido Valerio que no entendรญa lo que acababa de suceder.

ร‰l recorriรณ con su mirada el lugar donde estaba, observando su sala privada, la que apenas estaba iluminada por la luz del dรญa. Su corazรณn aรบn latรญa desbocado y fue entonces cuando la insistencia de aquella voz lo devolviรณ a su realidad.

โ€”ยกMi rey! โ€”insistiรณ el consejero, mirando a Valerio con preocupaciรณn.

โ€”ยฟQuรฉ sucede, Lord? โ€”ร‰l tomรณ el brazo de su consejero, sintiรฉndose desorientado, mientras se levantaba del sillรณn donde habรญa caรญdo rendido horas antes por el cansancio.

โ€”Mi rey, lamento despertarlo de esta forma, pero debe venir de inmediato a sus aposentos.

โ€”ยฟQuรฉ sucede en mis aposentos?

โ€”Es la Reina Luna.

El corazรณn de Valerio se acelerรณ al escuchar esas palabras y sin pensarlo dos veces, saliรณ de la sala rumbo a su habitaciรณn.

โ€”ยฟPor quรฉ no me avisaron antes de lo que estaba sucediendo con mi esposa? โ€”reclamรณ mientras caminaba junto a su consejero con prisa por el pasilloโ€”. Esto no es cualquier asunto, ยกes el nacimiento de mi hijo!

โ€”Lo siento, majestad y sรฉ que usted tiene razรณn, pero la reina Irenia ordenรณ que no lo molestรกramos hasta que el bebรฉ hubiera nacido. No sabรญamos que las cosas se complicarรญan tanto.

โ€”El reinado del rey Dafert y la reina Irenia concluyรณ el dรญa que el rey Dafert Worwick muriรณ y con รฉl, su ordenanza. Bajo mi mando, las ordenanzas son distintas y espero que se amolde a ellas con rapidez, Lord. ยฟEntendiรณ?

โ€”Sรญ, majestad.

Al culminar las palabras del lord consejero, ambos hombres llegaron a las puertas de los aposentos donde yacรญa Luna, y Valerio se detuvo en seco al ver una formaciรณn de guardias en la entrada, quienes al verlo, inclinaron sus cabezas ante รฉl en seรฑal de respeto y algo mรกs. Aquel gesto parecรญa ser demasiado solemne, y una sensaciรณn gรฉlida recorriรณ la espalda de Valerio junto a un escalofrรญo inquietante.

ร‰l continuรณ caminando, encontrando las puertas de la habitaciรณn abiertas, dejando que de su interior escaparan murmullos apresurados junto al sonido lejano de alguien llorando. Al instante, Valerio sintiรณ un nudo formarse en su garganta mientras avanzaba con un enorme miedo en su pecho, preparรกndose para lo peor. Pero en ese instante, la reina Irenia saliรณ de los aposentos y sin previo aviso, se arrojรณ sobre รฉl rodeรกndolo con sus brazos.

โ€”Hijo.

โ€”ยฟMadre, quรฉ sucede? ยฟDรณnde estรกn Luna y mi hijo? โ€”Valerio buscรณ la mirada de su madre con miedoโ€”. ยฟEllos estรกn bien?

โ€”No entres ahรญ, mi vida โ€”sollozรณ Irenia, apretando las manos de su hijo.

Alarmado por las palabras y el estado de su madre, รฉl se zafรณ de su amarre llamando a su esposa.

โ€”ยกLuna!

El rubio entrรณ a la habitaciรณn con prisa, esperando ver a su esposa y a su hijo, pero el tiempo pareciรณ detenerse cuando sus ojos captaron la escena ante รฉl.

Luna estaba en la cama, inmรณvil, con su cuerpo cubierto por una sรกbana blanca que estaba empapada de sangre y al lado de la cama, en una pequeรฑa cuna de madera, yacรญa el cuerpo diminuto de su reciรฉn nacido, cubierto de la misma forma.

Un intenso dolor comenzรณ a apoderarse de Valerio en ese momento y su respiraciรณn se volviรณ irregular, mientras su pecho subรญa y bajaba con dificultad, sintiendo cรณmo su mundo se derrumbaba.

โ€”No, no. ยกNO!

Aquel grito de agonรญa se escuchรณ en cada rincรณn del castillo junto a aquel llanto sin control, exigiendo una explicaciรณn y tras รฉl, Irenia se acercรณ tratando de encontrar palabras para consolarlo.

โ€”Hijo, fue muy complicado para ella. Su cuerpo no pudo resistir el parto. Lo siento mucho, mi vida.

Valerio se dejรณ caer en el regazo de su madre y ella lo llevรณ fuera de la habitaciรณn en medio de su amargo llanto, escuchando sus sollozos casi incoherentes. Tratando de mantenerlo lรบcido, Irenia lo abrazรณ con fuerza, sosteniรฉndolo entre sus brazos, mientras รฉl parecรญa estar al borde de perder la razรณn.

En medio de sus lamentos, Valerio alzรณ la mirada, encontrรกndose al otro extremo del pasillo con la figura de Verti observando aquella escena con una peculiar sonrisa dibujada en su rostro; era esa la misma sonrisa que รฉl habรญa visto en su sueรฑo, donde Verti le confesaba que รฉl lo habรญa hecho rey, y el corazรณn de Valerio ya destrozado por la pรฉrdida, cediรณ ante la furia y se zafรณ del abrazo de su madre para correr tras su hermano.

Al ver que Valerio iba por รฉl, Verti comenzรณ a correr, huyendo de las intenciones asesinas de su hermano con un evidente miedo en su rostro y una necesidad urgente de escapar. La misma necesidad lo llevรณ a doblar en la esquina de un pasillo, desapareciendo por un instante de la vista de Valerio y cuando รฉl tomรณ el mismo camino, vio a Verti intentando forzar la puerta de una sala al final del pasillo.

Desesperado, Verti forzaba la puerta sin poder abrirla hasta que logrรณ tirarla y entrรณ, cerrรกndola con fuerza, pero Valerio llegรณ segundos despuรฉs y la abriรณ, irrumpiendo en la estancia con el aliento entrecortado, encontrรกndose con la sala privada del castillo que รฉl conocรญa bien, pero que al mismo tiempo lucia diferente y al instante, vio a un hombre de cabello largo y blanco con un parche en su rostro que cubrรญa uno de sus ojos.

Ante la presencia autoritaria e imponente de este hombre, Valerio se quedรณ perplejo, intentando entender que hacรญa ese hombre ahรญ, pues รฉl lo conocรญa; ya lo habรญa visto antes. Ese era el mismo hombre que le habรญa ofrecido una copa en aquel extraรฑo sueรฑo que tuvo estando en Turbios.

Junto a aquel Worwick de casta blanca, estaba una mujer muy hermosa, de cabello castaรฑo que en sus brazos sostenรญa a un niรฑo pequeรฑo, y al verlo con mรกs detenimiento; Valerio sintiรณ estarse viendo a sรญ mismo, como si fuera capaz de contemplar su alma dentro de los ojos de aquel pequeรฑo de cabellos dorados y ojos grises igual que รฉl.

Aquel hombre y aquella mujer estaban frente a una enorme mesa en la que descansaba un bosquejo tallado en piedra, y al analizarlo mรกs, supo que ese bosquejo era una representaciรณn de lo que parecรญa ser la antigua Northlandy.

โ€”Ustedes son los conquistadores โ€”se escuchรณ la voz dulce de aquella mujer en la sala, hablรกndole al Worwick de casta blanca junto a ellaโ€”. Igual que el rey Aiseen, usted tambiรฉn es un segundo hijo, se casรณ con su hermana menor y conquistรณ despuรฉs de una pรฉrdida irrevocable. Si el rey Aiseen logrรณ levantar un gran reino despuรฉs de la horrible caรญda de su propia casa y pudo vivir en paz con lo que logrรณ a costa de sangre, muerte y pรฉrdida, usted tambiรฉn podrรก. No es usted menor que รฉl. A รฉl se le fue arrebatada una casa del Norte y usted conquistรณ las tres.

โ€”ยกEl conquistador! โ€”susurrรณ Valerio al oรญr las palabras de aquella mujer, mientras sus pasos retrocedรญan hasta el otro extremo de la sala.

โ€”ยฟQuรฉ precio debo pagar para volver a sentir dicha en mi alma otra vez? โ€”preguntรณ aquel hombre, observando a la mujer junto a รฉl, y ella respondiรณ mientras Valerio retrocedรญa aรบn mรกs, escuchando aquellas palabras.

โ€”Serรฉ necia al decir que no tiene mรกs nada que pagar. Siempre que algo se nos quita, algo mรกs se nos es dado.

Valerio dio un รบltimo paso atrรกs y su espalda chocรณ abruptamente contra una puerta, la cual se abriรณ con el impacto, y el rubio se encontrรณย  en otro pasillo del mismo castillo, pero un poco mรกs iluminado y con un silencio abrumador.

Valerio dio unos pasos hacia adelante en medio de aquel silencio, cuando una pareja conformada por un hombre de cabello blanco y corto, junto a una mujer de cabellera dorada cuyo vientre estaba abultado, saliรณ de una de las salas que conectaba con ese pasillo. Valerio permaneciรณ inmรณvil, observando a la pareja con cautela, y entonces la voz suave de la mujer se hizo audible en medio del silencio.

โ€”Pero no logro entender algo, Aiseen โ€”la mujer fijรณ su mirada en el hombre, mientras llevaba una mano a su vientreโ€”. ยฟLos dioses revelarรกn la llegada de ese conquistador?

โ€”Es correcto, mi amada Vianya โ€”respondiรณ Aiseen, mirando a su hermana con ternuraโ€”. Los dioses se revelarรกn al rey que prepararรก su llegada. Porque el conquistador debe nacer en la generaciรณn que estรฉ preparada para recibir su justicia. Solo asรญ dejaremos de ser un reino para convertirnos en un imperio.

โ€”ยฟQuรฉ es esto? โ€”se quebrรณ la voz de Valerio, mientras intentaba entender lo que estaba viendoโ€”. ยกEsto no es real!

La pareja siguiรณ avanzando hacia lo que parecรญa ser el jardรญn del castillo, y Valerio los siguiรณ hasta el umbral del pasillo. Pero cuando cruzรณ la salida que lo llevarรญa al jardรญn, se encontrรณ con un horizonte que revelaba un vasto ocรฉano que parecรญa extenderse hasta el infinito.

Las aguas de aquel ocรฉano eran de un azul profundo que brillaba al reflejo del sol, y sus oรญdos no tardaron en escuchar cรณmo las olas se agitaban bajo la brisa frรญa. ร‰l se girรณ para buscar el regreso hacia el castillo, pero aquella salida ya no estaba ahรญ y entonces fue cuando lo vio.

A unos metros de distancia, en una cumbre rocosa que daba al mar, estaba sentado un hombre de cabello blanco y largo, mirando fijamente hacia el ocรฉano como si estuviera observando algo mรกs allรก de lo visible. Valerio se quedรณ inmรณvil, dudando si debรญa acercarse o no, hasta que a su lado pasaron cuatro personas que reconociรณ al instante por sus cabellos.

Un hombre de cabello blanco y largo con una armadura gris caminaba a la par de una mujer de cabello blanco, que vestรญa una armadura ligera del mismo color. Los otros dos tenรญan el cabello largo y dorado; uno de ellos llevaba un uniforme de arquerรญa militar junto a su arco y flechas. Valerio vio cรณmo ellos se quedaron de pie frente a lo que reconociรณ al instante como el mar de Almas, en la costa de Dersia. Entonces escuchรณ al hombre sentado en la roca decir:

โ€”Lo logramos, hermanos.

En ese instante, la tierra comenzรณ a temblar bajo los pies de Valerio, como si el propio suelo estuviera intentando expulsarlo de aquel lugar. El Worwick intentรณ mantenerse en pie, pero ante el fuerte temblor perdiรณ el equilibrio y rodรณ cuesta abajo mientras que enormes piedras se desprendรญan y lo seguรญan en su descenso.

Valerio intentรณ sostenerse de una roca para no caer al abismo y al mirar abajo, vio emerger dos filas de soldados a punto de impactar una contra la otra, pero lo que llamรณ mรกs su atenciรณn fue un caballo de melena blanca que galopaba encabezando el ataque de una de las formaciones y sobre el equino; un arquero levantรณ su arco y flecha, apuntando hacia la formaciรณn enemiga y la roca que lo sostenรญa se desprendiรณ violentamente junto con el derrumbe, lanzando a Valerio hacia el abismo, donde su cuerpo impactรณ contra el suelo, devolviรฉndolo a la vida.

Valerio despertรณ cayendo de la cama en medio de un jadeo desesperante junto a un grito pavoroso que despertรณ a Luna casi al instante.

La puerta de la habitaciรณn de Valerio se abriรณ, y la reina Irenia entrรณ acompaรฑada por un encargado que la seguรญa de cerca. Los ojos de la reina se posaron de inmediato en su hijo, quien estaba con la cabeza agachada, sentado en uno de los sillones.

Las manos de Valerio temblaban con ligereza; su respiraciรณn errรกtica se alcanzaba a escuchar en medio del silencio, y su camisรณn estaba empapado de sudor.

โ€”Hijo, Valerio โ€”dijo Irenia, acercรกndose a รฉl con cautelaโ€”. ยฟQuรฉ sucediรณ?

โ€”Tuvo una pesadilla โ€”respondiรณ Luna, observando a Irenia, mientras trataba de secar la frente de su esposo con un paรฑo limpio.

โ€”ยฟPero quรฉ tipo de pesadilla fue esta?

โ€”No lo sรฉ, no ha querido hablar mucho, pero creo que no fue cualquier sueรฑo. Ahora estรก un poco mรกs calmado, pero estaba mucho peor cuando se despertรณ y pensรฉ que iba a perder la razรณn.

Irenia frunciรณ el ceรฑo y se inclinรณ hacia su hijo, buscando su mirada.

โ€”Valerio, hijo, mรญrame. โ€”Valerio alzรณ la mirada hacia su madre, dejando ver sus ojos enrojecidos bajo lo que parecรญa ser un fuerte agotamientoโ€”. ยฟEstรกs bien, hijo?

โ€”Fue รฉl, madre.

โ€”ยฟA quรฉ te refieres, hijo?

โ€”Verti, fue รฉl quien me hizo rey.

โœจPara los lectores que viene de la saga de VALKO espero les haya gustado la breve apariciรณn de Valko y de Elizabeth junto a pequeรฑo Valerio II en el libro de Valko junto a la apariciรณn de Veikan junto a sus hermanos en libro de Hielo & sangre โ™ฅ๏ธ

Bแบกn ฤ‘ang ฤ‘แปc truyแป‡n trรชn: Truyen247.Pro