[8] ¿𝐞𝐬 𝐞𝐬𝐭𝐨 𝐮𝐧 𝐣𝐮𝐞𝐠𝐨?

— Cuéntanos como conseguiste la invitación— dijo Hunter mientras le daba una calada a su cigarrillo.

Nos encontrábamos sentados en el parking del instituto en nuestra hora libre. El profesor de historia del arte no había aparecido por clase así que a primera hora decidimos ir a tomar el aire fresco, a diferencia de Maggie quien sí estaba faltando a su clase de biología.

— Fue fácil— cogió el cigarro de Hunter —Se puede decir que Jasmine me debe una— echó el humo hasta que llegó a los orificios nasales de Jo.

— Dios— empezó a toser— Echa el humo para el otro lado por favor.

El dúo dinámico rió. Rodeé los ojos y me extendí en el suelo del parking, respirando el aire puro. Realmente estar allí con mis amigos me producía una paz mental. Estaban pasando cosas súper raras este año y lo único que me apartaba de mis pensamientos eran las tardes con mis amigos.

— Oye Lotty — captó mi atención Hunter. Me apoyé sobre los codos y uní nuestras miradas — Se dice por ahí que se te vió de cita romántica con Bradley.

— ¿Qué? — me recoloqué poniendo mis piernas en mariposa— Que tonteria.

— ¿Entonces no fuiste con él a tomar algo? — La mirada de Maggie estaba clavada sobre mí.

— No— aparté la mirada pero sabía perfectamente que los tres mantenían la suya— Bueno, puede ser que sí.

— Lo sabía— dijo Hunter, para luego quitarle el cigarro a Maggie.

— Pero fue solo como amigos— aclaré. Miré a cada uno a los ojos, pero ví que los de Jo trasmitían tristeza.

— Te va a utilizar— susurró, captando la atención del grupo— Jugará contigo, con tu corazón, con tus sentimientos.

— Solo fue como amigos chicos— dije mientras me ponía de pie— ¿Es que ahora creeis antes unos absurdos rumores antes que a mí?—Joshepine se levantó y se puso en frente de mi.

— No es eso Charlotte— Maggie y Hunter copiaron su acción— Tú sabes perfectamente que esto lo decimos por tu bien.

— Jo tiene razón— Hunter le dio otra calada al tabaco.

— Mira Lotty— Maggie se colocó a mi lado y apoyó su cabeza sobre mi hombro— Solo queremos decirte que todo esto es muy raro.

— Raro, ¿por qué?— me aparté de mi amiga.
Sabía que tenían razón, que lo más probable es que Aiden estuviese planeando algo para meterse en mis bragas, pero no quería verlo, prefería pensar que sí estaba intentando retomar aquella bonita amistad.

— Cojones— se quejó Hunter y Jo le dió un codazo.

— Porque todo ha pasado tan deprisa— comenzó a decir Maggie calmada— Durante todo el instituto ni uno de ese grupo nos dirigía la palabra, ¿ Y ahora dos de ellos están pillados por ti?

— Y no hablemos de que tu hermano jugó con Joshepine— aclaró Hunter. Miré a Jo, quién estaba cabizbaja intentando retener sus sentimientos. Me acerqué a ella y le abracé.

— Joshepine— suspiré.

—Nosotros solo queremos protegerte.

— Chicos, no tenéis que protegerme de nada — me aparté de Jo— Ellos no están jugando con nosotros.

En ese momento aquel Jeep negro aparcó a escasos metros de nosotros, captando la atención de los cuatro. La melena de Bradley brillaba con el sol y la brisa de las nueve de la mañana provocaba que luciese aún mas bonito. Dado a que nos encontrábamos en frente a la entrada principal del instituto, a Aiden no le quedó mas remedio que pasar por delante nuestra.

Y en aquel momento los astros se alinearon, como si mis amigos hubiesen escrito aquella historia, el chico de ojos verdes evitó cualquier contacto conmigo adentrándose en el edificio. Mis ojos se abrieron por el asombro y el desconcierto. Noté las manos de Joshepine rodearme, a la vez que la sirena sonaba avisando del cambio de clase.

— Será mejor que vayamos a clase— Rompió Hunter el silencio incómodo y todos le hicimos caso.

• • •

A segunda hora teníamos clase de Artes Escénicas con la señorita Young. Una de mis clases favoritas, que con suerte compartía con Joshepine. Es una materia optativa, la cúal realizamos en el salón de actos donde también se representan musicales y obras teatrales.

— Bien chicos— apareció la profesora, sentándose en las butacas— Vamos a empezar a preparar la obra de fin de curso.

—¿De que será este año Melody? — interrumpió una alumna entusiasmada.

— A eso iba señorita Adams— rió — ¿Listos?—todos sonreímos y empezamos a dar golpecitos con los pies en la tarima.

— ¡Los sentimientos!— todos nos miramos, confundidos. En ese momento mis ojos se juntaron con los de Aiden, pero aparté enseguida la mirada.

— Señorita Young— captó la atención de todos el ojiverde— Habíamos escuchado que este año sería de Romeo y Julieta.

— Escuchasteis muy bien Bradley— Melody se levantó de la butaca y subió hasta el escenario para ir paseando de un lado al otro— Pero, ¿no creeis que está muy visto ya?

— Si señorita, pero como todas las obras de teatro — soltó Jo y los ojos de la profesora se iluminaron.

— ¡Ahi quería llegar yo queridos!— giró sobre sus pies y miró a los ojos cada uno de sus alumnos a los ojos— Nosotros vamos a hacer la obra, vamos a escribir el guión.

— ¿No crees que es un poco arriesgado?— dije y Melody se colocó a mi lado— Ya casi no tenemos tiempo para ensayar, como para perder tiempo escribiendo el guión.

— Tiene razón— soltó una alumna— A parte no nos vamos a poner de acuerdo.

— Bien chicos— Young movió sus caderas hasta colocarse enfrente de sus alumnos— Tomarlo como un aprendizaje para empatizar con vuestros compañeros.

Todos nos sentamos en el suelo del escenario y esperamos a que la profesora hablase. Melody se recolocó las gafas y nos miró profundamente.

— Es vuestro último año aqui y os he visto crecer y evolucionar a cada uno de vosotros — volvió a pasear de un lado al otro— Quiero que vuestra última vez pisando este escenario sea mágica.

Todos sonreímos.

— Antes de nada quiero daros los personajes — empezó a decir mientras se sentaba en frente a nosotros— Aun estoy barajando algunas ideas, pero sé que Josephine Blake harás de Alegría.

Choqué mi hombro con el de mi amiga y esta me trasmitió una sonrisa calurosa.

— Y Aiden Bradley— el ojiverde miró a la profesora— Tú harás de Enojo.

No pude evitar reir— Te va perfecto el papel Bradley.

—Que graciosa Miller— Me asesinó con la mirada.

— Para terminar, señorita Miller, tú harás de Asco — Vi a Aiden quien estaba intentando aguantar la risa, le saqué la lengua y este me guiñó un ojo— Los que me quedan los anunciaré mañana a primera hora—dijo mientras la sirena sonaba por tercera vez en el día— ¡Estad atentos al tablón de anuncios!

• • •

A última hora tenía Economía por lo que me dirigí hacía mi taquilla para dejar el resto de libros. Cuando cerré la puerta de esta la cara de Bradley se estampó con la mía, provocando que soltase un grito.

— No soy tan feo como para asustarte — dijo con una sonrisa tonta en su boca, pero rodeé los ojos.

Evité sus palabras y comencé a caminar por los pasillos, pero parecía imposible que Aiden se despegara de mí.

— ¿Por qué no me hablas?— se colocó a mi lado, pero seguí sin contestar— ¿Es por lo de esta mañana?

Frené en seco— Si sabías que estaba allí, ¿Por qué cojones no me dijiste ni un maldito hola?

— Oh vamos, no te lo tomes a pecho— miró hacia un lado, el pasillo estaba vacío — Simplemente no surgió.

— Ah claro— solté para seguir mi camino hasta el aula de economía.

— ¿Claro qué? — dijo con un tono de enfado, pero lo evité— ¡Charlie! — Agarró mi mano.

Suspiré— Estaba claro que esto de volver a ser amigos no te iba a durar mucho más.

— ¿A que te refieres?— por el tono de voz se le notaba confundido.

— Estábamos mucho mejor cuando no nos hablábamos, ahora lo único que hago es escuchar rumores y comerme la cabeza—me mordí el labio superior— Que si tal vez solo quieres meterte en mis bragas— negué con la cabeza— Tal vez tu y yo estamos destinados a ser conocidos y quedarnos con los recuerdos del pasado.

— ¿Pero qué dices Charlotte?— No le hice caso y seguí caminando— ¡ Estas exagerando las cosas, y te vas a arrepentir!— gritó a mis espaldas.

• • •

— Esta comida está asquerosa— soltó Maggie mientras metía un trozo de ensaladilla en la boca.

— Creo que hubo peores comidas que esta — Hunter sonrió y le dí la razón.

— Sí bueno— la rubia rodeó los ojos— Creo que se me ha quitado el apetito con tanta mayonesa.

Joshepine y yo reímos. Mis ojos se desviaron hasta el gran ventanal del fondo, donde se encontraba aquel dichoso grupo. Mi hermano mantenía su mirada hacía aquí, con aquellos ojos brillantes que trasmitían desconcierto.

— Tierra llamando a Charlotte — me quitó de mis pensamientos Jo— ¿Hola?

— Perdón, me había quedado pasmada.

— Ya vimos— Hunter rió— A lo que íbamos, ¿tenéis ya pensado que vais a llevar a la fiesta?

—¿Un bikini?— solté confusa.

— Logicamente— Maggie unió sus cejas— Pero no un bikini cualquiera, ¿Joshepine?

— Fiesta nueva— le siguió la castaña.

— Conjunto nuevo— terminó el chico.

Rodeé los ojos. Mis amigos estaban realmente locos, si se pensaban que me iba a gastar dinero en un conjunto nuevo por cada fiesta a la que iría la llevaban clara.

—Ah no— me levanté de las sillas colocando mi bolso en el hombro— No pienso comprarme nada nuevo— empecé a caminar hacia la puerta del comedor con mis amigos pisándome los talones.

— Venga Lotty— gritó Hunter — Solo por esta vez.

— Solo un vestido para la piscina— le siguió Joshepine. Antes de llegar a la puerta me giré sobre mis talones.

— Con brillantes— sugirió Maggie— Como si fuese Coachella — dijo esta entusiasmada.

Todos reímos— Está bien, pero me la devolveréis — suspiré — Tendré que poner de mis ahorros.

Los chicos me abrazaron contentos.