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𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟔: 𝐃𝐄𝐒𝐈𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐑𝐄𝐘

Pasado

Salió de la cabaña a toda prisa, los que estaban compartiendo en la fogata nocturna se hicieron a un lado viendo cómo Park Juwon corría angustiado hacia el bosque en busca de Akiko la curadera de la manada.

—¡Akiko, anciana Akiko! — gritó cuando vio a la mujer cargando unos leños.

—¿Qué sucede Park Juwon? ¿le a pasado algo a nuestro alfa? ¿o es Haeun?

—Mi hermano y mi esposa están bien, pero mi hijo Akiko... mi hijo está muy enfermo.

La mujer dejó caer los leños y sacudió sus manos.

—¿Qué es lo que tiene?

—Su colmillos han brotado, pero no se ve como un lobo, tiene mucha fiebre, tiene dolor de oídos, nos pide que nos callemos, pero nadie habla, y ahora comenzó a convulsionar. 

—Debieron llamarme cuando solo era una fiebre — la mujer entró a su cabaña, demorando solo unos segundos y salió con una bolsa hecha a mano llena de plantas que sobresalía.

Regresaron a la aldea y encontraron a Haeun fuera de la cabaña siendo sujetada por una omega de la manada.

—¡Juwon! — gritó al verle, este corrió donde ella.

—¿Nuestro hijo? ¿Qué sucede?

—Tu hermano se encuentra dentro, Jimin nuestro pequeño se ha transformado y me ha atacado.

—¿Se transformó? Pero solo tiene siete años

—No es un lobo como creíamos, por favor que tu hermano no le mate.

Al escuchar aquello Juwon entró a la cabaña y Akiko le siguió, había un zorro sobre la cama de su hijo y su hermano estaba intentando someterlo con una navaja en la mano.

—¿Jimin? — preguntó Juwon intentando procesar que ese zorro debía ser su pequeño hijo.

—Una, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve... Dios creía que ya no existían —dijo la anciana al ver la forma del zorro.

—Tiene nueve colas, tu hijo Juwon es un zorro de nueve colas ¿Entiendes lo que significa?

—Por favor no lo haga alfa, es mi hijo, es mi único hijo — rogó al borde de las lágrimas.

El zorro se puso en posición de ataque y comenzó a gruñir al alfa que intentaba someterle.

—Es una bestia peligrosa, de por si ser zorro ya es malo, el es...

—Un zorro místico — dijo la anciana — hace más de tres décadas que no se había visto alguno con vida. 

—Es una amenaza para toda la aldea, debo eliminarlo cuanto antes. 

—Es solo un niño Doyun — dijo Juwon tratando de hacerle entender a su hermano y alfa.

—Es un niño, pero tiene el tamaño de un zorro normal, cuando crezca su tamaño será más grande y si pierde el control toda la aldea corre peligro, no dejaré que llegue a ese punto.

En ese momento el zorro saltó hacia el alfa para atacar, Doyun tomó firme su navaja y procedió a defenderse 

Era una mañana nublada, el cielo estaba gris, el suelo estaba frio, el pasto verde estaba blanco por la helada que había caído, Jimin estaba tapado hasta las orejas, le habían advertido que no podía cerrar las ventanas y luego de lo ocurrido la noche anterior no queria provocar nada en el dragón.

Por otro lado el Rey Yoongi estaba levantado desde madrugada, hoy es un día importante, por primera vez atendería dilemas del reino, hoy recibiría algunas personas del pueblo y debía atender sus necesidades.

Por otro lado, no podía dejar de pensar en el omega al otro lado de la puerta, algo en él lo estaba volviendo demasiado posesivo con el zorro, y es que solo lo ha visto como dos veces desde que está en el palacio, pero aun así puede recordar exactamente la forma de su rostro, los ojo almendrados y puede recordar el rosado de esos gruesos labios. Si le preguntaran cómo son los omegas de su harem, no sabría decirlo, solo recuerda vagamente a dos de ellos, pero si le preguntaran como es el recién llegado, podría decir hasta cuantos lunares tiene su rostro. 

Con cuidado se acercó a la puerta que daba a la habitación del omega, estaba a punto de abrirla cuando sus guardias dan el aviso de que el consejero real esperaba por él.

—Solo no desaparezcas.

Murmuró a la puerta del omega, para girarse y golpear las puertas de su habitación para que las abrieran.

—Mi señor, le esperan en el salón real.

—¿Tan temprano? — sin esperar a Seokjin, el rey comenzó a caminar.

—El pueblo madruga para poder ser de los primeros cincuenta que verá hoy — dijo siguiéndole a un paso de distancia.

—¿Primeros cincuenta? — el rey se detuvo en el pasillo ¿tantas personas querían hablar con él? ese fue su pensamiento al comienzo, pero analizó, de los cerca de dos mil habitantes en el reino, debían de ser muchas las emergencias, pero se supone que el palacio acude a las necesidades de su pueblo ¿Cómo pueden seguir habiendo necesidades?

—No tengo claro el motivo, pero hace un año que su madre dejó de dar dinero a los ministros— Seokjin señaló el camino — Debemos continuar señor.

El Rey salió de sus pensamientos mezclados entre el reino y el omega zorro.

—¿Un año? — dijo mientras continuaba el camino.

—Lo único que pude averiguar es que la Reina estaba guardando recursos para tiempos difíciles.

—Tiempos difíciles...

Cuando llegaron a las puertas del salón real, los guardias avisaron que el Rey había llegado, y abrieron las grandes puertas,  caminó hacia el trono y dispuso de tomar asiento en este.

Seokjin se quedó al lado derecho del Rey e hizo una seña a los guardias de la puerta principal para que comiencen hacer el ingreso de las personas que se encontraban al otro lado de las puertas del palacio.

Los diez ministros entraron y se ubicaron de a cinco bajo los escalones del trono.

De uno a uno fueron pasando las personas hasta llegar a las puertas del salón real.

—¿Hay la seguridad suficiente? — El Rey se veía un poco ansioso.

—Si mi Rey, tranquilo, estamos preparados para esto.

—¡Park Jihyung! — gritó uno de los guardias.

Caminó un hombre de avanzada edad, el Rey Yoongi se estaba impacientando por lo lento que caminaba el hombre.

—¿Puede alguien ser tan lento?

—Shh... — el Rey miró a Seokjin disgustado por que lo callaran, Seokjin sonrió nervioso —la mayoría de los que viene son personas mayores, debería de tener paciencia señor.

—¿Cómo sabes tanto?

—Al parecer vivo más en el palacio que usted.

Yoongi estaba apunto de contestar hasta que el anciano llegó a donde los guardias le habían permitido, Jackson y otro guardia que él no conocía detenían el paso del hombre, hizo la señal para que le dejaran.

—Mi señor, vengo aquí para presentar mi caso.

—Habla anciano...

—Park Jihyung... — le susurró su mano derecha Seokjin.

—Habla anciano Park Jihyung.

—Verá han estado cobrando los impuesto, pero hace más de dos meses que no han llegado las mercaderías de afuera, entonces no he podido vender, somos muchos con este problema, como no hay ventas, no hay dinero para los impuestos, la mayoría estamos gastando el dinero de nuestros ahorros, y el hecho que haya aumentado el impuesto nos perjudica aún más.

—¿Cuándo aumentó el impuesto? — El Rey miró a los ministro y estos se acomodaron su ropas.

Habia llegado el momento de destapar todo lo que había ocurrido en el reinado de la Reina Soyeon.

Jimin estaba mirando el jardín, habían muchas personas, podía percibir que todos eran dragones, se estaba acostumbrado a la energía que estos proyectaban.

—¿Que está sucediendo?

—¿Cómo?

Jinsoo despegó su vista del libro y miró a Jimin quien ya había terminado de desayunar. Miró hacia la ventana donde Jimin miraba y sonrió.

—Hoy a venido el pueblo para hablar con el Rey y este le de solución a sus problemas, hace meses que no habían estas reuniones.

—¿Por que no? se me hace algo muy bueno — dijo Jimin observando como la mayoría de estos eran personas mayores.

—La Reina Soyeon había dejado de permitir el acceso al pueblo por las quejas que tenían.

—¿Es una broma?  ¿Dejar al pueblo solo? esa mujer está loca.

—Silencio —Jinsoo le dio con el libro en la cabeza a Jimin — hay temas de los que no debes hablar, menos en voz alta.

—Pero...

—Deberías de saberlo ya, has estado al lado de ella, sabes que su mirada fría no es solo por protocolo, ella tiene mucho poder Jimin, si quieres ser el omega del Rey, debes de tener mucho cuidado de ella y no hacer nada que te cause problemas con ella.

—Yo no quiero ser el omega de nadie, menos de ese sujeto, amargado prepotente.

Jimin se sentó derecho y se cruzó de brazos, Jinsoo solo negó con la cabeza, y volvió al libro, debía repasar para la clase de hoy.

De pronto las puertas se abrieron con gran estruendo y ambos saltaron en sus asientos.

—¡Señor Jinsoo apresúrese, los omegas se están peleando en el harem!

—¡¿Qué?! Estos niños no me dejan tranquilo ningún momento —Jinsoo se levantó y miró a Jimin —. Quédate aquí Jimin y lee este libro, no tardo.

—Si.

En cuanto Jimin se quedó solo se levantó y fue a mirar hacia la ventana, claramente no conocía a nadie, en su mayoría las personas eran ancianas habían muy pocos jóvenes, pero había algo que notó desde que había bajado a la biblioteca.

Habían muy pocos guardias dentro del palacio, ahora sabia porque, la mayoría estaba por el jardín delantero para estar vigilando a las personas.

Jimin fue hacia las ventanas del otro lado y comenzó a revisarlas, solo una estaba abierta y decidió salir por ella, no había ningún guardia por los alrededores de este lado del palacio, ahora solo debía buscar por donde podría salir de ese lugar.

Todo era roca, si queria salir tendría que escalar, Jimin tomó distancia para correr y treparse por la pared de roca, pero cuando comenzó a correr su mirada se desvió hacia a bajo de la muralla haciendo que cayera sentado. Habia una grieta en la piedra, esta era cubierta por un arbusto, Jimin gateó hasta el arbusto y lo movió, había un pequeño hueco que daba hacia el otro lado.

Si nadie se había dado cuenta de esto era de milagro, era su milagro, ahora debía huir de aquí.

Jimin se arrastró por el pequeño espacio, del tamaño justo para que un hombre cayera, corrió el arbusto que había hacia el otro lado y cuando estuvo todo su cuerpo fuera comenzó a reír, a reír emocionado, había encontrado la libertad, y no había tenido que matar a nadie, todo fue muy fácil, justo cuando lo necesitaba.

—Demasiado fácil — miró la imponente muralla, se veía mucho más grande desde fuera.

Doyun cayó hacia atrás, había recibido un golpe, miró hacia el zorro, pero solo pudo ver el cuerpo de su hermano.

—¿Ju-juwon? Hermano que hiciste — se levantó y vió a su hermano protegiendo al zorro, pero sus ojos se llenaron de lágrimas al ver como su navaja estaba enterrada en el cuello de su hermano —¡N-no! ¡Hermano!

Akiko cerró los ojos con dolor, todo había pasado tan rápido que no había podido detener a Juwon. La puerta se abrió con violencia y Haeun entró.

—¿Jimin? — su mirada pasó de Doyun al piso donde esté miraba y su ojos se llenaron de lágrimas — ¡Juwon!

Antes que diera un paso más Akiko la detuvo, Doyun cayó de rodillas y dio vuelta el cuerpo de su hermano, ya no estaba el zorro debajo de pel, estaba su pequeño sobrino desnudo, manchado por la sangre de su padre.

—Cuidalo — Doyun se asustó cuando una mano le tomó de sus ropas con fuerza. Juwon —, es un niño, por favor cuida de Jimin y Haeun, no debe porque ser una amenaza, no todos son igu... — Juwon comenzó a toser sangre provocando que se ahogara con ella, su cabeza cayó hacia un lado y falleció  viendo por última vez a su pequeño hijo.

Capítulo especial, en algunos iré relatando  cosas vividas por Jimin para entrar en contexto en su vida también y considero que enriquece más la historia.

Para quienes también leen La Maldicion Perla, les comento que ando con poca inspiración y por eso demoro en actualizar, pero ya estoy trabajando en el capítulo.

🐲GoldenUnnie🐲

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