Me encontraba en mi habitación, para ser más precisa estaba acostada en mi cama, hoy sinceramente no tenía ánimos de hacer algo en específico, por lo que me puse mis audífonos y decidí reproducir mi playlist favorita... conforme cada canción pasaba más emoción era la que sentía, sinceramente esto me ayudaba cuando me sentía frustrada e incluso estresada... mientras las oía, veía el techo... no tenía nada en especial pero sinceramente era en lo único que podía enfocarme, no tenía sueño como para tomarme un rato durmiendo, los minutos pasaban hasta que chequé mi teléfono y vi que era la 1:10 de la tarde... no quise tomarle importancia a eso, seguí viendo el techo hasta que mi teléfono comenzó a sonar... con algo de pereza lo tomé y vi que se trataba de Alleria, por lo que decidí contestar.

- En la llamada -

—¿Bueno? ¿Qué pasó Alleria? —respondí con tranquilidad sin apartar mi mirada del techo.

—¡Karina! Dios que bueno que me contestas —respondió ¿Aliviada? Sinceramente no sabía que le pasaba.

—¿Por qué? —pregunté confundida—. ¿Alleria está todo bien? —pregunté comenzando a preocuparme.

—No, no estoy bien, necesito hablar contigo —habló entre nervios y angustiada.

—Alleria me estás asustando ¿Qué sucedió? —pregunté preocupada mientras me paraba de golpe de la cama.

—No puedo decírtelo por llamada, ¿Podemos vernos a las 3 de la tarde? —preguntó angustiada.

—Claro que sí, nos vemos de rato, pero tranquila o te va a dar algo amiga —respondí preocupada.

—Trato, pero sinceramente no puedo estarlo, de rato te platico, nos vemos —colgó.

- Fin de la llamada -

Sinceramente me quedé muy preocupada por ella, no sé qué le esté pasando, espero que no sea algo grave, aunque por su forma de decirlo puede que me equivoque ¡Dios necesito saberlo cuanto antes! ¿Será que le diga a Harith? Uhmm mejor luego, sé que tarde o temprano se enterará y si Alleria pregunta diré que no vendrá porque estaba ocupado, lo sé a veces soy cruel con el pobre Harith.

Un rato después...

Me encontraba sentada en mi habitación ya lista para ver a Karina, eran las 2:45 de la tarde, con ella había quedado en que nos veríamos a las 3, pero realmente no podía esperar... así que me levanté de la cama, tomé mis llaves y mi teléfono, salí de mi habitación y me dirigí a la habitación de mi madre, al estar afuera toqué suavemente hasta que escuché un "pase" desde el interior por lo que entré y con una sonrisa vi a mi madre quien al verme sonrió de igual manera.

—Hola mami —saludé con una cálida sonrisa—. ¿Cómo te encuentras?

—Ya estoy mejor de salud cariño —vi que se levantó, iba a detenerla, pero ella me miró por un momento—. Descuida, ya puedo comenzar a levantarme por mi cuenta cariño.

—Es bueno saberlo, solo no te exijas mucho —la miré algo preocupada.

—Descuida cariño —me miró cálidamente —sabes que no haría algo que dañara mi salud —asentí ya más tranquila.

—Por cierto mami —hablé captando su atención—. ¿Puedo ir al centro con Karina? —pregunté observándola de manera nerviosa.

—Claro cariño, solo no vayas a llegar tarde para la cena —me miró con algo de seriedad.

—No te preocupes por eso —sonreí—. Llegaré temprano, te lo prometo —me acerqué a ella, la abracé y besé su frente.

Me despedí de ella y salí de su habitación, bajé las escaleras y me dirigí a la entrada, abrí la puerta y salí dirigiéndome hacia el centro para ir a ver a Karina, hablando con mi mamá hizo que solo me quedaran 10 minutos para llegar, por lo que apresuré el paso... por suerte no quedaba muy lejos de mi casa así que no tardé demasiado, pasaron unos minutos hasta que llegué, observé a mis alrededores y al parecer todavía no ha llegado, me sentía bastante nerviosa, la verdad es que necesito contarle sobre lo que pasó en la mañana con Jake, sinceramente aun no puedo creer lo que pasó de verdad, sé que quizás estoy volviendo esto un tema enorme, pero necesito aclarar esto, aunque en realidad no sé cómo... estaba tan enfocada en mis pensamientos cuando escuché que alguien me llamaba.

—¡Alleria! —volteé a ver y vi que se trataba de Karina—. ¡Bien ya estoy aquí! ¿¡Estás bien?! ¿¡Qué pasó!? —preguntó preocupada mientras se acercaba hacia donde yo estaba procurando que estuviera bien.

—"Creo que exageré un poco cuando hablé con ella" —pensé algo nerviosa—. No, sinceramente estoy muy confundida Karina —hablé con cierta angustia mientras ella me miraba con algo de confusión.

—¿Por qué? ¿Pasó algo? —preguntó confundida, pero sin quitar su expresión preocupada mientras ponía sus manos en mis hombros esperando mi respuesta.

—suspiré para después hablar—. Es sobre Jake —mencioné y sonreí inconscientemente cuando lo nombré para después recibir un golpe en mi cabeza por parte de Karina mientras me miraba con enojo—. Ay... ¿Eso por qué fue? —la miré mal sabiendo que me lo merecía.

—¡¡Alleria Díaz Anderson!! ¡Casi me matas del susto y de la preocupación, pensé que te había pasado algo serio! —regañó seria aun mirándome con enojo mientras se cruzaba de brazos.

—Auch, eso dolió —me quejé mientras me tallaba la cabeza con mi mano por el golpe —Ya te he dicho que no menciones mi primer apellido, sabes que lo odio y lo siento, pero es que necesito hablar —suspiré mientras desviaba la mirada.

—¿Quién tiene la culpa de haberme preocupado de esa manera? —preguntó a modo de reproche a lo que yo rodeé los ojos—. Pero bueno, haber ¿Qué te dijo Jake? —preguntó con algo de curiosidad mientras yo la miraba de nuevo para contarle.

Ambas caminamos hacia una de las mesas que se encontraban vacías, tomamos asiento y le platiqué con cada detalle lo que había pasado con Jake, no sabía que hacer la verdad, al terminar con mi explicación, ella se quedó igual de sorprendida que yo, pero después en su rostro una gran sonrisa se formó, no sabía si tomarlo como bien o preocuparme hasta que...

—No puede ser... —se quedó callada por unos segundos—. ¡¡TE DIJE QUE A ÉL LE GUSTAS Y QUIERE CONFESÁRTELO!! —gritó mientras se paraba de su asiento mientras dio un pequeño golpe en la mesa captando la atención de todos.

—Grítalo más fuerte que creo que no te alcanzaron a escuchar en China —hablé sarcásticamente mientras ella reía levemente para luego volverse a sentar—. Aunque quizás no sea por eso y yo soy la que se está haciendo ideas —la miré algo seria.

Ella rodó los ojos y seguimos platicando del tema, quería invitar a Harith, pero Karina me había dicho que él estaba ocupado y que no podía venir, así que nos pasamos toda la tarde juntas, sinceramente aún no lo podía creer, un poco después Harith nos marcó diciendo que quería vernos, así que fuimos a su casa.

En casa de Harith...

En cuanto llegamos a su casa, me acerqué a la puerta y toqué el timbre, al poco tiempo vi que él salió, aunque noté que estaba algo serio.

—¡Hey Harith! ¿Cómo estás? —saludé sonriente mientras veía a Harith, aunque se veía todavía serio.

—Hola... ¿Cómo crees que estoy? —preguntó serio mientras se cruzaba de brazos por lo que yo lo miré confundida mientras inclinaba la cabeza levemente—. Mis mejores amigas estuvieron reunidas por varias horas y no me invitaron —comentó a punto de llorar mientras llevaba una mano a su cara para evitar que lo "viéramos llorar".

—Pero...

—Tranquilo no te perdiste de mucho —comentó Karina indiferente interrumpiéndome.

—Pero dijiste que estabas ocupado —mencioné haciendo una mueca mientras me cruzaba de brazos.

—¿Quién te dijo esa gran mentira? —miré a Karina mientras que ella desviaba la mirada— Eso no se vale eres muy injusta conmigo —habló dramático mientras se acercaba a Karina para tomarla por los hombros.

—Ya, ya deja el drama, tenía que hablar primero con ella antes de que te pusieras histérico —aclaró seriamente mientras se soltaba de su agarre y me miraba.

—¿Histérico? ¿Qué te hizo Ortiz? —preguntó serio mientras volvía a cruzarse de brazos mirándome fijamente.

—¿Cómo sabes que se trata de él? —pregunté mientras lo miraba sorprendida.

—Harith solo está celoso, deja que se le pase —comentó divertida mientras Harith la miraba y rodaba los ojos.

—Entonces si se trata de él —afirmó seriamente mientras volvía a mirarme, miré a Karina para después suspirar y empezar a hablar.

Le contamos a Harith lo que pasó con Jake claro el no tuvo la misma reacción que Karina, por su expresión parecía enojado y eso no era bueno.

—Lo voy a matar ¿Dónde vive? —preguntó enojado mientras apretaba sus puños y tensaba la mandíbula.

—Harith relájate, no estamos para tus ataques de celos —reprendió seria mientras tomaba sus manos para tranquilizarlo.

—Solo me preocupo por Alleria, eso deberían saberlo las dos —aclaró serio mientras me miraba.

—Harith si sigues así con esos celos y manera de preocuparte pensaré que tú eres el que está enamorado de mi —mencioné en tono burlesco, el soltó un suspiro y se cruzó de brazos.

—Claro que te amo... pero como una hermana, nada más y lo sabes —recalcó serio mientras tomaba mis manos—. No dejaré que ese sujeto ni nadie te ilusione, tú y Karina son las mejores en mi vida y no dejaría que les hicieran daño —me sonríe tiernamente.

—Espera... ¿Ilusionar? —me solté de sus manos mientras lo miraba—. Por dios Harith ni siquiera me gusta ¿Qué te hace creer que caeré en sus encantos? —dije desafiante mientras el solo dio un suspiro, esto tardaría.

Pasamos un rato hablando del tema, luego nos distrajimos jugando videojuegos, me alegra pasar tiempo con ellos la verdad me ayudaron a distraerme, aunque tuve que irme ya que mi madre estará preocupada, prácticamente nos pasamos toda la tarde en casa de Harith, me despedí de ellos, y salí de su casa, fui hacia la mía, pero sentí que alguien me seguía, entonces alguien me tomó por el brazo con fuerza, llevándome a un callejón haciendo que me alarme.

—Suéltame —ordené fríamente.

—Vaya, vaya a quien tenemos por aquí, ¿No es peligroso que una princesa este sola a estas horas? —sonrió maliciosamente mirándome de arriba abajo.

—"Este tipo es molesto" —pensé molesta.

No dije nada, el sujeto me tomó fuerte del brazo, pero logré zafarme, aunque me dejó una marca, no le di importancia y le di una patada en su parte baja, intentó agarrarme de nuevo, pero no lo consiguió, corrí lo más rápido que pude donde nadie me viera y me transformé en Claire, necesitaba darle una lección a ese malnacido que se atrevió a ponerme una mano encima... salí del lugar y me dirigí hacia donde estaba el sujeto.

—¿Quién eres tú? —preguntó algo temeroso, que idiota.

—¿Nadie te dijo que tienes que respetar a las mujeres? —lo miré fríamente mientras me acercaba a él.

El tipo salió corriendo y lo perseguí, en un momento ya estaba en frente de él, retrocedió, pero lo noquee y lo llevé con la policía... me comentaron que él había sido buscado desde hace mucho tiempo por asesinato a menores, por fin se le hará justicia por todos aquellos inocentes que murieron por causa de él, los policías me agradecieron y yo me retiré de ahí para ir a casa, llegué por la ventana y entre, cerré la ventana cuidadosamente para no causar ruido y me destransformé, salí de mi cuarto y mi madre me vio.

—¿Alleria? ¿A qué hora llegaste? Me tenías tan preocupada —comentó mi mamá mientras se acercaba a mí para luego abrazarme, le correspondí el abrazo.

—Lo siento mami, debí avisarte cuando llegué, no quería preocuparte —respondí apenada separándome del abrazo y llevar una mano a la nuca mientras la miraba.

—Lo importante es que estás bien, ¿Quieres cenar? —me sonrió tiernamente.

—No gracias, me voy a dormir ha sido un día largo —dije fingiendo bostezar mientras iba de nuevo a mi habitación.

—Entiendo hija —dijo detrás de mí, pero sentí que me tomó del brazo—. Pero ¿Qué te pasó Alleria? —preguntó preocupada voltee a verla y ella estaba observando donde tenía las marcas.

—"Carajo" —pensé frustrada—. No fue nada mami, no te preocupes —sonreí tratando de calmarla.

—Pero cariño, claramente se ve que alguien lo hizo a propósito, dímelo —insistió.

—No paso nada enserio, prometo ponerme algo para que se me quite, buenas noches —sonreí y besé su mejilla soltándome de su agarre e ir rápidamente a mi habitación sin darle tiempo de responderme.

Fui a mi cuarto y me encerré, volví a ser Claire y salí por la ventana, fui al punto donde podía ver toda la ciudad, cuidando que no pasara nada, en eso escuché una voz.