¿Paracaídas? ¿Acaso había escuchado bien?

Definitivamente Jungkook quería matarlo. Seguramente la cara de miedo que había puesto Jimin no fue desapercibida por el menor.

-No te preocupes, yo te cuidare. - Dijo Jungkook con mucha seguridad.

Después de haberse quitado los trajes de buceo y volver a ponerse sus ropas, salieron como a un hangar, donde había un par de avionetas y en las paredes mucho equipo que Jimin no sabia ni lo que era.

De inmediato un chico que se encontraba ahí se acerco a saludar a Jungkook, al parecer era muy popular por aquí.

-¿Que necesitas Jeikei? - Dijo el chico.

-De momento nada Kai, en cuanto estemos listos te aviso para el despegue.

-Perfecto. Los dejo entonces - Dijo haciendo una reverencia, la cual Jungkook y Jimin correspondieron.

Jungkook se movía por el lugar con mucha confianza y seguridad, pronto le trajo a Jimin un traje completo, y toda la protección que necesitaban ponerse.

-¿Alguna vez has saltado? - Pregunto Jungkook mientras ajustaba unos amarres en la entrepierna del mayor poniendo a Jimin muy nervioso.

-N-no... - Contesto este apenas...

-Bien - Dijo Jungkook y luego tiro del arnés que apretaba ajustando duro la ingle de Jimin - Te explicare todo lo necesario, saltaras conmigo, no debes de temer, todo saldrá bien.

Jungkook comenzó a instruir a Jimin, se acostaron en el suelo simulando la caída y Jungkook explicaba la posición de las piernas, brazos y cabeza, le explicaba cada cosa que pudiera llegar a sentir, de que altura estarían cayendo, cuanto tiempo duraría la caída, cuantos segundos serian de caída libre, etc.

Jimin estaba extremadamente nervioso, cuando pensó en una cita jamás pensó en esto, pero la verdad es que estaba demasiado emocionado.

Luego de como una hora de ponerse los trajes, los paracaídas mas la explicación, estuvieron listos.

El chico que anteriormente había estado con ellos volvió.

-¿Listos? - Pregunto regalándole a ambos chicos una enorme sonrisa.

-Listo Kai... - Dijo Jungkook parado atrás de Jimin posando una mano sobre la espalda baja del mayor mientras este se metía dentro de la avioneta.

Una vez adentro, la avioneta despegó sin ningún problema.

-¿No es un poco joven para pilotear esta cosa? - Pregunto Jimin nervioso.

-Tranquilo, Kai es el mejor.

Después de un par de minutos Jungkook se acomodo detrás de Jimin.

-No temas, yo estaré siempre contigo cuidándote. - Dijo Jungkook en el oído de Jimin haciendo a este estremecer y a la vez sentirse muy seguro. Solo asintió.

Cuando estuvieron en el borde de la avioneta listos para saltar Jimin volteó la cara no quería ver. - Te vas a arrepentir de perdértelo, es la mejor parte - Gritaba fuertemente Jungkook ya que el viento era fuerte. - El miedo dura solo un segundo, enfréntalo.

Jimin asintió aunque en el fondo estaba cagado de miedo.

Jungkook empezó a contar de forma regresiva y el corazón de Jimin quería salirse de su pecho.

3.....2.... Y antes de llegar al 1 Jungkook los hizo saltar tomando a Jimin completamente desprevenido.

Jimin cerro los ojos durante un segundo, pero luego recordó las palabras del mas joven y abrió los ojos, la vista era simplemente maravillosa, el viento les pegaba duro y la adrenalina era indescriptible.

-Casi tan bueno como un orgasmo ¿No lo crees? - Grito Jungkook fuerte en el oído de Jimin.

Jimin no podía ni hablar, sentía como su saliva salía de su boca, sus ojos se cerraban solos por mas que se esforzara por mantenerlos abiertos, y de pronto una sensación de libertad y de plenitud se instalo en su ser.

Jamás se había sentido tan feliz y tan libre.

Comenzó a gritar fuertemente, gritos de euforia y felicidad haciendo a Jungkook también pegar gritos fuerte de emoción.

Después de un rato Jungkook tiro del paracaídas y una nueva sensación se apodero de Jimin, fueron jalados hacia arriba bruscamente haciendo que su estomago quisiera salir por su garganta, todo su cuerpo estaba estremecido, su piel erizada, su corazón al borde del colapso y su mente en blanco, simplemente gozando las sensaciones que la adrenalina le daba.

Una vez que el paracaídas se abrió comenzaron a descender mas suavemente, pudiendo ahora si ver los detalles de todo, Jungkook de pronto dejo un beso en su mejilla - ¿Te gusta Jiminie? - Dijo el menor.

Jimin no se espero esa pequeña acción y mucho menos ese tierno sobrenombre a lo cual solo asintió entusiasmado.

El mayor parecía un niño pequeño le señalaba a Jungkook a todos lados maravillado, se recargaba en el pecho del menor con anhelo y alegría, una vez estuvieron a unos cuantos metros de aterrizar Jungkook le recordó que hacer.

Tocaron suelo y comenzaron a correr arrastrados por la fuerza del paracaídas, al ser Jungkook el experto, tomo el cuerpo de Jimin y se giro, para amortiguar el la caída del mayor.

Quedaron recostados en el césped, Jimin completamente arriba del cuerpo del menor.

-Sano y salvo Jiminie.

Jimin le dedico una sonrisa hermosa, el brillo de sus ojos era magia, y sin mas preámbulos se agacho y beso los labios del menor.

Jungkook fue tomado por sorpresa pero de inmediato correspondió ese beso, el entendía la sensación de Jimin, después de las emociones que te brinda el saltar, simplemente no sabes que hacer, muchos lloran, otros ríen, otros corren, otros se desmayan y Jimin... pues Jimin tuvo el impulso de besarlo.

Después de separarse del beso Jimin lo miro un poco sonrojado - Gracias Jungkook.

-No hay de que Jiminie, no hay de que.

Una vez que pudieron tranquilizarse un poco se quitaron los paracaídas y los trajes y ya volvió todo a la normalidad.

Jungkook le extendió su mano en señal de que la tomara para seguirlo y Jimin no dudo.

Una vez de nuevo en el lobby del lugar Jungkook fue de nuevo al modulo de información y sacó su billetera y de esta una tarjeta de crédito para pagar por todo.

-Ya no tardes en volver a visitarnos Kookie - Dijo la chica coqueta de un principio.

-No lo hare, gracias por todo Noona.

Tomo de nuevo mi mano y nos fuimos al auto.

-¡Woah! Fue increíble, y luego cuando entraste en ese hoyo en el tanque me morí de miedo creí que no regresarías, pero luego cuando volviste sentí alivio, pero no, cuando íbamos a saltar, eres un tramposo Jungkook saltaste en el 2 y me tomaste desprevenido, fue increíble...

Jimin no paro en todo el camino de hablar de todo lo que sintió y de como la había pasado mezclando pensamientos e ideas de lo rápido que volvían los recuerdos a su mente.

Jungkook se sentía demasiado conmovido de la ternura que le provocaba ese chico, por que a pesar de ser mayor que el por casi 10 años, tenia el alma pura y linda y eso le gusta mucho al menor, quien solo lo miraba sonriendo emocionado también, el recordaba muy bien sus primeras veces en el tanque y en el paracaídas y jamás podría olvidarlas, y esta feliz de haber creado esos recuerdo en Jimin junto con el.

De pronto llegaron a un restaurante, era un sport bar donde servían alitas y cerveza.

-Muero de hambre.

-Espero que te guste este lugar...

-Nunca he venido pero se ve interesante... 

Les asignaron una mesa un poco alejada y sola, la mesa era de esas altas con un par de bancos, y era gracioso ver a Jimin complicándose un poco para subir y bajar del dichoso banco.

-No te rías...

-Eres lindo Jimin.

El mayor solo se sonrojo avergonzado.

Pidieron alitas de muchos sabores Jungkook solo pidió un tarro de cerveza para el calor, puesto que iba a manejar y después siguió tomando limonada, por su parte Jimin pedía tarro tras tarro... estaba pasándola muy a gusto, no quería que la cita terminara, la platica con Jungkook era demasiado amena, era un chico muy inteligente e interesante.

Hablaban del amor por los deportes de Jungkook y como fue que gracias a eso, el logró a muy temprana edad (con ayuda de sus padres claro) lanzar su propia línea de accesorios y ropa deportiva, haciéndolo uno de los empresarios mas jóvenes y emprendedores de Corea lo cual dejo a Jimin sorprendido.

Hablaron de como Jimin siempre amo la danza y el canto pero tuvo que elegir una carrera "seria" por sus padres, todos médicos en su familia, aunque confeso que va a clases de danza dos veces por semana y que nuca ha dejado de cantar aunque sea en la ducha.

Jimin comenzó a desinhibirse un poco conforme mas tarros de cerveza ingería, sus mejillas y su nariz están coloradas y su forma de ser es cada vez mas genuina, desapareciendo casi por completo la fría imagen del hombre controlado y calculador que refleja cuando es el Doctor Park.

Jungkook esta perdido escuchando y viendo al mayor, se esta dando cuenta de que Jimin es mas que un cuerpo y una cara bonita, es un chico sensible, amable, gracioso, super inteligente y muy ocurrente.

Verlo ebrio es demasiado gracioso por que es aún mas torpe.

Ambos chicos están riendo a carcajadas de lo que platican, jamás vuelven a tocar el tema de la "tarea" ni de la relación "Doctor-Paciente" Simplemente son dos chicos teniendo una cita y pasándola genial.

Deciden que es hora de irse así que Jungkook paga la cuenta y le ayuda a Jimin a bajar del banco y cuando el menor se acerca a Jimin, queda exactamente a la altura del rostro del mayor, Jimin lo rodea con sus piernas evitando que se aleje y una vez lo tiene tan cerca rodea su cuello con ambos bracitos y lo besa lentamente.

Jungkook se deja hacer y toma a Jimin de su pequeña cintura.

Después de un beso que sabe a cerveza con limonada, Jungkook carga a Jimin y lo baja del banco cuidadosamente, una vez lo suelta le deja un pequeño beso en su nariz y le da la mano la cual el mayor toma sin problemas.

Una vez en el carro Jungkook se dirige a llevar a Jimin a su casa.

-¿Ya me vas a dejar en mi casa? - Dice un Jimin un poco borracho pero completamente consiente de todas sus acciones.

-Así es, ya es tarde, mañana es lunes y tienes que trabajar y yo tengo que ir a la escuela y a trabajar también.

Jimin hace un puchero demasiado infantil y tierno con sus labios.

-No quiero.

Jungkook suelta una carcajada. - En verdad que quien te viera Jimin... eres increíble.

Una vez afuera de la casa de Jimin, el mayor se quita el cinturón de seguridad y se voltea un poco viendo hacia el menor.

-Gracias por todo Jungkook, ha sido la mejor cita que he tenido en mi vida, la pase muy bien.

-Gracias a ti Jimin, me da gusto que la pasaras bien, yo también lo hice.

Jimin se acerco de nuevo a Jungkook y volvió a besarlo, Jungkook tenia todo el día tratando de controlarse ante los besos del mayor pero a la mierda el control, correspondió el beso de Jimin y lo jaló hacia el sentándolo a horcajadas sobre su regazo.

Se besaban apasionadamente, Jungkook metió sus manos bajo la tela de la ropa del mayor tocando directamente su piel tan suave y tan caliente.

Jimin devoraba la boca del menor con desesperación como si la vida se le fuera en ello, Jungkook le gustaba, y mucho y estaba enloqueciendo por ese niño que resulto ser todo un hombre responsable, maduro, atento y educado con el único "defecto" de ser gay, según sus padres.

Después de ese beso tan intenso se separaron, Jimin estaba sobre Jungkook tocando con sus dos manitos la cara del menor, frente a frente, respirando agitadamente y las manos de Jungkook reposaban en un abrazo sobre la cintura del mayor.

-¿Quieres pasar Jungkook? - Dijo Jimim seductoramente.

Jungkook sabia lo que podía pasar si aceptaba pasar a la casa del mayor, estaba implícito en esa "inocente" invitación, pero para este punto Jungkook ya no podía.

-Así no Jiminie... - Dijo dulcemente y beso la nariz ajena.

-¿Así como? - Respondió Jimin un poco molesto y ofendido.

-Estas borracho, y el día que te haga el amor, quiero que los dos estemos completamente consientes de ello. - De nuevo se acerco y ahora fue el quien beso a Jimin de una manera tan dulce y tierna que Jimin sentía que moriría ahí mismo.

Jimin se bajo del regazo de Jungkook un poco avergonzado, JAMAS NADIE NUNCA lo había rechazado, se sentía tan raro, era tan extraño pero a la vez su pecho picaba.

-Gracias Jungkook, ve con cuidado... nos vemos la semana que entra en el consultorio.

-Descansa Jimin, nos vemos ponto.

El mayor abrió la puerta y bajó del auto, antes de entrar a su casa se despidió con la mano Jungkook correspondió lanzándole un beso al aire y el mayor fingió atraparlo.

Jimin entro, cerro la puerta y una enorme, gigantesca sonrisa se apodero de el haciéndolo soltar un suspiro igual de grande.

-Park Jimjin, estas perdido, completamente perdido y jodido... - Bufó.

Un lindo recuerdo de ese día.