Último capítulo ❤️🤧

El tiempo escribiendo este segundo libro se me ha pasado demasiado rápido.

Aún así, estoy segura de que estarán felices con la noticia que daré en el Epílogo.

Y estoy segura de que no se esperan todo lo que pasará en ese capítulo💜

❗

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Mal's POV:
Al salir de la pista, nos dirigimos hacia nuestros amigos para despedirnos.

Logré notar que muchos de los chicos estaban ebrios o a punto de estarlo.

Sorpredentemente, Uma también lo estaba. Generalmente ella regaña a Harry por eso, pero creo que hoy será al revés.

Logramos alejarnos luego de oír sus comentarios sin sentido alguno.

Evie y Doug eran de los pocos lúcidos.

-Cualquier cosa avísennos o a los padres de Ben.

-Descuida, M. Estaremos bien.

-Gracias por dejar que nos quedáramos-nos dijo Doug.

-Es bastante tarde, así que era lo mejor. Sobre todo viendo el estado en el que están los demás.

Todos miramos en dirección a la pista, donde Jay y Carlos bailaban. Haciendo pasos bastantes extraños.

Los cuatro nos reímos.

-No olviden que mi tercer sobrino o sobrina puede esperar un poco más-me susurró Evie cuando nos abrazamos para despedirnos.

-¡Evie!

Ella se rió.

De camino a ver a los niños, nos encontramos con mis suegros.

-Gracias por cuidarlos mientras que no estamos-les dije.

-No es nada, querida-me dijo Bella.

-Volveremos antes del almuerzo.

-Está bien, hijo. Vayan con cuidado-dijo Adam.

Nos despedimos y seguimos hasta la puerta del cuarto de los mellizos.

Abrí la puerta y nos acercamos a la cuna.

-Los veremos mañana, mis amores-les dije.

Besamos sus frentes y los cubrimos bien con sus mantas.

Ava empezó a hacer pucheros. Ben se dio cuenta de que su peluche había quedado del otro lado de la cuna, así que se lo dio.

Ella sonrió y se tranquilizó al tenerlo en sus brazos.

Cerramos la puerta sin hacer ruido.

-Ya tengo un maletín listo en el auto, así que podemos irnos.

-Bueno, ¿entonces a qué estamos esperando?

Se rió y besó mi frente.

(...)

-Espero que esa hora de viaje haya valido la pena-le dije.

-Creeme, lo hará.

Oí que abría la puerta y me dejó en el suelo.

Me vendó los ojos pocos después de salir del castillo ya que decía que descubriría a donde iríamos si veía el camino.

Cuando salimos del auto se puso el bolso en el hombro y me cargó.

Me guió hasta cierto punto y cerró la puerta.

-Voy a quitarte la venda, ¿ok?

Asentí.

Dejé de sentir la venda sobre mis ojos.
El olor a madera comenzó a hacerse cada vez más familiar.

-Ya puedes abrirlos-dijo abrazando mi cintura.

Sonreí ampliamente al darme cuenta de donde estábamos.

La cabaña de su abuelo.

Todo el camino de la puerta hasta arriba está lleno de pétalos de rosas y la luz de la chimenea es lo único que ilumina el lugar.

-No habíamos estado solos aquí desde...

-Desde el día en que nuestros hijos fueron concebidos-dijo y besó mi hombro.

Reí por lo que dijo.

Me di la vuelta y rodée su cuello con mis brazos.

-¿Cuándo tuviste tiempo de arreglar todo esto? Estuviste junto a mí todo el tiempo.

-Dígamos que Evie y Doug querían devolvernos el favor luego de que los ayudáramos con su boda.

-Ya no me burlaré de ellos por lo que pasó en casa de los padres de Doug nunca más.

Ben se rió.

-Sabemos que eso no durará mucho.

-Oye, debes de tener más esperanzas.

Los dos reímos.

Tomó mi mano y nos sentamos en el sillón.

-¿Champán, mi lady? - me dijo tomando la botella y la copa de la mesa.

-Sí, su alteza.

Volvimos a reírnos.

Bebimos el líquido de nuestras copas mientras que hablábamos. Tantos sus zapatos como los míos estaban tirados en el piso. Estuvimos así treinta minutos o tal vez una hora, entre risas y varios besos.

-Gracias por subirme el ánimo luego de lo que pasó con mi papá-le dije, jugando con nuestras manos entrelazadas.

Tengo mi cabeza apoyada en el respaldar del sillón.

-¿Crees que logren solucionar las cosas?

Suspiré.

-Eso espero. Ya pasé muchos años sin tenerlo en mi vida, y espero que eso no vuelva a ser así.

Ben besó mi frente y apretó mi mano.

-Tranquila, sé que todo mejorará. Él te ama, es tu padre y se dará cuenta de su error en algún punto. Si es que no lo ha hecho ya.

Puse mi mano sobre su mejilla, ya que su rostro no está muy lejos del mío, y lo miré.

-¿Cómo es que siempre sabes que decir en momentos así?

-Te conozco perfectamente. Luego de todo por lo que hemos pasado, sé como detectar tus estados de ánimo con solo mirarte a los ojos. Y las palabras solo son producto de todo lo que siento por ti.

Arrugué la nariz y sonreí.

-¿Y qué sientes por mí?

-¿Quieres que te lo diga?

-Sip.

Se acercó más a mí.

-Te amo. Te amo con todo mi ser. Te amo como jamás pensé que amaría a alguien.

-¿En serio?

-Ujum.

-Pues yo también te amo. Te amo demasiado. Te amo tanto que sé que mi corazón jamás latirá por alguien como lo hace por ti.

Sus labios estaban a escasos milímetros de los míos. No desperdicie ni un segundo más y los uní con los míos.

Nuestras respiraciones comenzaron a volverse más pesadas a medida que el beso se intensificaba.

-Creo que es hora de subir-me susurró con la voz ronca.

-Pienso lo mismo.

Se levantó, sin soltar mi mano, y me ayudó a hacer lo mismo.

Subimos las escaleras en silencio. Al llegar a la habitación, cerré la puerta con fuerza y volví a lanzarme a sus labios.

Me acercó a él y empezó a besar mi cuello. Suspiré y dejé que siguiera con lo que hacía.

Se puso detrás de mí y comenzó a besar mis hombros, mientras que quitaba con cuidado las mangas y el cierre de mi vestido.

Cuando oí que caía al piso, me di la vuelta y lo puse mi mano en su nuca. Lo besé con fuerza mientras que desabotonaba los botones de su camisa.

Caímos sobre el colchón sin dejar de besarnos.

Sus labios comenzaron a descender por mi pecho.

-Ben, por lo que más quieras, no pares esto.

Se puso a mi altura.

-Viendo como estamos los dos, creo que difícilmente eso podría pasar.

Solté una risita.

-Te amo.

Besó la punta de mi nariz y sonreí.

-Y yo a ti.

No sé exactamente qué hora era cuando sentí como mi cabeza quedaba apoyada sobre el pecho de Ben.

Uno de sus brazos está alrededor de mi cintura y su otra mano le hace caricias a mi cabello.

-¿Es posible que algún día nos cansemos de esto? - le pregunté.

-Conociéndonos, creo que eso es imposible.

Ambos reímos.

-¿Quieres saber algo? - me dijo.

-¿Qué cosa?

-Los mejores días de mi vida los he pasado contigo.

Sonreí.

Bostecé y mis ojos comenzaron a sentirse pesados.

-Buenas noches, mi reina.

Besó mi coronilla.

-Buenas noches, amor.

(...)

-Cariño, ¿ya están listos? - pregunté.

-Sí. Allá vamos.

Miré a Max, quién está muy entretenido jugando con su chupón y su peluche.

Está sentado conmigo sobre la cama mientras que esperamos a Ben y a Ava.

Evie y Doug organizaron un almuerzo  con nuestro grupo de amigos. La idea es que luego de unas horas, los chicos se vayan con Doug a casa de su familia y nosotras nos quedaremos en casa de Evie y él.

Haremos sus despedidas de solteros y mañana será la boda.

-Listos-oí la voz de Ben.

Levanté la vista de mi pequeño y los miré. Tomé a Max en mis brazos y me levanté de la cama.

-Te vez guapo.

Ben sonrió. Puso su brazo sobre mi cintura.

-Y tú te vez muy linda y adorable, princesita-dije y le di un toque en la punta de la nariz.

Se rió.

-Tú lleva nuestras cosas y yo llevo lo de los niños.

-Ok.

Agarramos todo y Ben tomó mi mano. Nos despedimos de sus padres y subimos a la limusina.

Los veremos mañana en la boda.

-¿Quieres ver algo mientras llegamos?- me preguntó.

-Teniendo en cuenta que nuestros angelitos están despiertos, dudo que podamos ver algo que no sea para niños.

Mason y Ava se dieron cuenta de que me refería a ellos y comenzaron a balbucear.

Ben y yo reímos.

Recosté mi cabeza en su hombro y dejamos que los niños se entretuvieran.

-¿Crees que Evie te haga preguntas por lo de hace dos semanas?

-Es Evie de quién hablamos, claro que lo hará-le dije y nos reímos.

-Y seguro que hará una de sus tantas bromas sobre nosotros siendo conejos.

-Se la paso solo por que ayudó con la sorpresa.

Nos quedamos callados y terminé quedándome dormida.

Ayer llegamos tarde de una reunión y luego teníamos que encargarnos de unos documentos. Y para agregarle, los niños-más que todo Ava- estuvieron muy intranquilos hasta que logramos dormirlos.

Abrí los ojos justo cuando el vehículo se detuvo frente a la casa de mi mejor amiga.

Le agradecimos al conductor y nos bajamos, luego de asegurarnos de que no se hubiera quedado nada.

Tocamos la puerta y Doug nos abrió.

-Son los últimos en llegar.

-Lo sentimos, apenas pudimos dormir anoche-le dijo Ben.

-Tranquilos, pasen.

Entramos y dejamos las cosas junto con las de los demás.

Caminamos hacia el jardín y saludamos a todos.

Harry y Jay están haciendo la comida en la parrilla y hablan con nosotros mientras tanto.

Dizzy, Celia, Squeaky y Squirmy están en la piscina, jugando con Chico.

-Aprovechando que ya todos estamos aquí, Audrey y yo queremos contarles algo-dijo Chad.

Todos les pusimos atención.

-Sabemos que este día es para celebrar su boda, chicos-dijo la rubia, mirando a la peliazul y a Doug- Pero nos pareció la mejor oportunidad para decirles.

Chad tomó su mano y ella le sonrió.

-Estoy embarazada.

Las chicas chillaron y nos reímos.

Los abrazamos y felicitamos.

-Primer embarazo en nuestro grupo de amigos que sucede luego del matrimonio-dijo Uma.

Los demás se rieron. Evie y yo la miramos frunciendo el ceño.

-Ja ja, muy graciosa, Camarón.

Los chicos volvieron a reírse.

-¿Cuánto tiempo tienes? - le preguntó Jane.

-Más o menos cinco semanas-le respondió Audrey.

-Nos enteramos ayer-siguió Chad.

-Supongo que sus familias están emocionadas-dijo Gil.

-Todos cenamos juntos. Definitivamente mi madre y la suya pudieron habernos dejado sordos por como se pusieron al enterarse-dijo Audrey, riéndose.

Luego de esa gran noticia, todos volvieron a dispersarse un poco.

Los menores volvieron al agua. Mientras que Ben y Doug juegan con los bebés.

Ava y Max gatean sobre una manta en el pasto y mi sobrina está en los brazos de su papá.

-Espero poder ser tan buen padre como ellos en algún momento.

Evie, Carlos y yo centramos nuestra mirada en Jay cuando dijo eso.

-¿Lonnie y tú planean tener hijos? - le preguntó Carlos.

El hijo de Jafar asintió.

-Solo esperamos a la boda para intentarlo.

-Bueno, no falta mucho para eso. Es en Enero y ya estamos a principios de Octubre-dije.

-Además, conocemos como son ustedes dos. Seguramente estarán listos para eso desde el primer día de la luna de miel.

Los cuatro reímos por lo que dijo Evie.

-Hablando de paternidad, ¿has sabido algo de tu padre desde tu cumpleaños? - preguntó el pecoso.

Suspiré.

-Llegó una carta suya anoche, pero no tuve el valor de abrirla.

-¡Mal!- exclamaron al unísono.

-Quise hacerlo, pero me retracté al recordar lo mal que me hizo sentir en ese momento.

-M...-Evie tomó mi mano- Debes abrirla. No sabes lo que te encontrarás.

-Pasaste muchos años esperando a tener una buena relación con aunque sea uno de tus padres como para mandarlo todo a la mierda cuando al fin las cosas están bien-dijo Jay.

-Además, puede que esté arrepentido por lo que te dijo. Y si no es así, pues se lo pierde-concluyó Carlos.

-Gracias, chicos.

Los abracé y ellos me correspondieron.

(...)

Acaricié la mejilla de Max y los miré a él y a Ben.

-¿Seguro de que no quieres que se quede conmigo?

-Estará bien, lo prometo.

Pasó su brazo por mi cintura y besó mi coronilla.

-Nos veremos en unas horas. Y estoy seguro de que ambas se verán muy hermosas-dijo refiriéndose a mí y a nuestra hija.

Ava se rió cuando Ben besó su frente. Hice lo mismo con la de Max y besé a Ben antes de que subiera al auto con los chicos.

Cerré la puerta de la casa y me dirigí a la sala, donde están ella y las chicas.

Dejé a mi hija junto a Emma y me senté al lado de mi mejor amiga.

-Ya que hemos dejado claro que no nos sobrepasaremos en ninguna de las despedidas de soltera, las actividades serán dentro de los más sano posible-dije.

Todas asintieron.

-Gracias por todo esto, chicas. En especial a ti, M.

Sonreí.

-Quería que fuera algo cómodo para todas, así como hiciste tú en mi despedida.

-Bueno, basta de charla y empecemos con los juegos-dijo Audrey.

Todas nos reímos.

Habíamos apartado algunos muebles, de modo que teníamos bastante espacio.

Pasamos el resto de la noche jugando juegos de mesa, haciendo karaoke, bailando y respondiendo a preguntas.

Evie me dijo que no me preocupara por nada y que podía dormir en el cuarto de invitados, aprovechando que Emma dormirá con ella y es uno de lo cuartos más cómodos.

Le di a Ava su peluche y la puse debajo de las sábanas como a mí.

-Buenas noches, pequeña.

Besé su frente y ella sonrió adormilada. Acaricié su mejilla hasta que tanto ella como yo cayeramos rendidas.

Narrador Omnisciente:
La Reina de Auradon estaba de cuclillas frente a su hija y su ahijada.

-Son las niñas más adorables del mundo.

Las dos se rieron.

Mal volteó de nuevo la cámara y se sentó junto a las bebés.

-Veo que todo va bien por allá-dijo el Rey.

-Así es, las chicas ya están casi listas.

Se oyeron los balbuceos de Mason , así que su padre enfocó la cámara sobre él.

-El niño de mamá y papá se ve muy guapo.

(Mason no es exactamente así, es solo para que se guíen de como se ve su ropa).

Este se rió al oír la voz de su mamá.

Ben y Mal hablaron durante un rato hasta que la mejor amiga de estos se acercó.

-Te ves muy bien, Evs.

Sonrió y cargó a su hija.

-Gracias, pero estoy un poco nerviosa-dijo la peliazul.

-Doug está igual que tú.

-Todo estará bien, E.

Le dio las gracias a sus amigos y se despidieron.

Alguien tocó la puerta y la abrió, dejando ver a la futura suegra de Evie.

-Luces preciosa, querida.

La hija de la Reina Malvada sonrió y la abrazó.

Hablaron un rato hasta que las chicas estuvieron listas.

(El peinado de las damas tiene flores a un costado).

-M, ¿podrías ayudarme con el vestido?

Esta asintió.

Dejaron a Dizzy y a Celia cargo de Ava y Emma.

La acompañó hasta el closet y sacó el traje del estuche.

-¿Tú te sentías así cuando Ben y tú se casaron?-preguntó después de un rato.

-¿Así cómo?

-Tan nerviosa pero a la vez tan anciosa por saber lo que se viene en su vida juntos.

La pelimorada sonrió. Terminó de subir el cierre del vestido y apoyó su mano en el hombro de Evie.

-Habían muchos sentimientos encontrados, pero esos dos eran los que predominaban.

Evie sonrió al ver su reflejo en el espejo.

-Te ves hermosa, E.

La futura novia enredó el brazo con el de su amiga y volvieron con las demás.

Todas gritaron al ver como lucía Evie.

(La tiara en el peinado no va y la corona aún no la tiene puesta).

-Te ves genial, hermanita-le dijo Dizzy, abrazandola con su brazo libre.

-Y eso que aún falta el último detalle-aclaró Mal.

Se acercó al sillón donde estaba sentada y tomó una caja negra aterciopelada. La dejó a un lado y sacó la tiara que había adentro.

-M...

-Estás a poco tiempo de cumplir tu sueño de toda la vida, ser una princesa y tener a alguien que te haga feliz a tu lado. Ben y yo pensamos en darte esta, tu primera corona como princesa, para agradecerte todo lo que has hecho por nosotros-dijo y le puso la corona en la cabeza.

-No sé qué decir.

-Eres como una hermana para mí. Has estado en momentos difíciles y te has quedado a mi lado a pesar de todo. Te lo mereces.

Evie la abrazó con fuerza.

-Gracias.

Las demás soltaron un Aw y se rieron.

Emma volvió a los brazos de su madre. Escondió su rostro en su cuello y comenzó a quedarse dormida.

Ava extendió sus manos hacia Mal, así que Celia se la entregó.

La puerta de la habitación se abrió.

-Mi hermana y mi sobrina lucen preciosas-exclamó Blancanieves.

Abrazó a Evie y besó la frente de Emma.

Bianca se acercó con Danielle.

La hija de Blancanieves es tres años mayor, al igual que Derek. Y desde el nacimiento de Emma, su hija se ha llevado muy bien con los otros bebés.

Mal y ella dejaron a las dos niñas en el suelo para que jugaran con los juguetes que habían.

-Mi ahijado está ansioso por verlas-le dijo Blancanieves.

Evie sonrió.

-Ya queremos que sea tu coronación, Evs-dijo Lonnie.

-Al fin podré cumplir mi sueño-dijo ilusionada.

-Y serás la mejor princesa, Evie-la siguió Bianca.

Revisaron que no faltara nada y salieron en los diferentes autos para llegar a la ceremonia.

(...)

-Doug Dwarfson, ¿aceptas a Evie como tu legítima esposa, para amarla y respetarla por el resto de la eternidad? - le preguntó el Hada Madrina.

-Acepto.

Evie sonrió al ver como su hija, quien está en los brazos de Doug, balbuceaba.

El hijo de Tontín apretó el agarre en sus manos entrelazadas.

-Evie Queen Grimhilde, ¿aceptas a Doug como tu legítimo esposo, para amarlo y respetarlo por el resto de la eternidad?

-Acepto.

Los dos se miraron sonriendo.

-Si hay alguien que se oponga a esta unión, que hable ahora o caye para siempre.

La catedral se quedó en total silencio.

-Los declaro marido y mujer. Doug, puedes besar a la novia.

El Hada Madrina no había terminado de decir la última palabra cuando Evie ya se había lanzado a los labios de él.

Todos se rieron antes de aplaudir y hacer ruido.

Unieron sus frentes sonriendo. Besaron las mejillas de su hija y se abrazaron.

Los primeros en felicitarlos fueron la familia de Doug. Luego los siguieron Jay, Carlos, Mal y Ben.

-Felicidades, chicos-les dijo el pecoso.

-Otro integrante más a la familia-Jay despeinó ligeramente el cabello de Doug.

Los seis se rieron.

-Estoy feliz por ustedes chicos-les dijo el hijo de Bella y Adam.

-Gracias.

Mal abrazó a Evie.

-Gracias a los principes de Auradon por llevar los anillos.

Como buena tía que es, Evie besó las frentes de Ava y Max. Ambos se rieron.

Como Emma todavía es muy pequeña, ella simplemente entró en los brazos de Doug al principio de la ceremonia.

El resto del grupo de amigos se acercó para felicitarlos.

-¡Qué inicie la fiesta ya! - exclamó Jay.

Todos rieron. Ya se había hecho una costumbre que él diga eso.

(...)

Los invitados quedaron asombrados al ver las decoraciones de la recepción.

La temática era de Bosque Encantado, con algunos toques de cuento de hadas.

Los recién casados dejaron a su hija con los padres de él a la hora de bailar su primer baile como marido y mujer.

Tanto Mal, como Jay y Carlos no pudieron evitar una que otra lágrima al ver la cara de felicidad de su hermana.

Era de las ocasiones en que la habían visto más feliz.

Al terminar el baile, los presentes aplaudieron. Ya se encontraban en sus mesas, con la comida servida y copas en la mano, esperando a que se dieran todos los discursos.

Evie estaba hecha un mar de lágrimas al oír todo lo que dijeron sus mejores amigos y lo que dijo su esposo.

También por la sorpresa que le habían preparado sus amigos. Lograron que Evie hablara por videollamada con la Reina Malvada y le presentara a su nieta.

Para Evie significó mucho el hecho de que le dieran ese regalo.

-¡Por Evie y Doug! - exclamaron tres de los VK's, alzando sus copas.

-¡Por Evie y Doug!

Tomaron un sorbo del contenido de la copa y se dieron un beso.

Se tomaron fotos con los invitados y partieron el gran pastel antes de volver a la pista de baile.

-And you will never see my side. And I will always think I'm right. But I always regret the night, I told you I would hate you 'til forever.

-Forever, forever, forever. Forever, forever, forever, forever. Forever, forever, forever, forever. I told you I would hate you 'til forever. Forever, forever, forever. Forever, forever, forever, forever. Forever, forever, forever, forever. I told you I would hate you 'til forever.

Todos bailaban al ritmo de la música.

Cuando cambió la canción, pusieron una de las favoritas de varias de las chicas.

-You don't have to say you love me. You don't have to say nothing. You don't have to say you're mine.

-Honey, I'd walk through fire for you.
Just let me adore you. Oh, honey, I'd walk through fire for you. Just let me adore you. Like it's the only thing I'll ever do. Like it's the only thing I'll ever do.

En cierto momento, le bajaron un poco a la música para que Evie hablara.

-Es hora de atrapar el ramo-gritó.

La mayoría de las mujeres que estaban ahí se acercaron.

La novia se dio la vuelta y lanzó el ramo.

-Jane, espero que Carlos no sea tortuga y cumpla con lo que significa esto-le dijo Evie.

Todos rieron.

Tanto la hija del Hada Madrina como el hijo de Cruella tenían las mejillas más rojas que un tomate.

Chico, quien tiene un traje que hace juego con el de los padrinos, comenzó a ladrar. Lo que hizo que las risas aumentaran.

No pasó mucho rato de eso cuando las chicas acompañaron a Evie y a Emma para que de pusieran algo más cómodo.

La familia se iría al aeropuerto para viajar hasta donde sería la luna de miel.

-No importa cuanto le haya insistido a Doug, no quiso decirme a donde vamos-dijo, cruzándose de brazos.

Mal y Audrey se rieron al recordar que no hace tanto habían estado en una situación parecida con sus respectivos esposos.

-Voy a extrañar mucho a esta pequeñita-dijo la pelimorada.

Le dio un toque en la punta de la nariz a la hija de los recién casados. Esta esbozó una sonrisa.

Las tenía a ella y a su hija sobre sus piernas.

-Y yo pensando que me extrañarías más a mí, M.

Todas rieron por eso.

Se reunieron con el resto del grupo y cada uno se dispidió.

La fiesta siguió luego de que Evie, Doug y Emma se fueran.

Mal's POV:
Cuando los demás volvieron a la pista, tomé el brazo de Ben y nos sentamos junto a sus padres.

Me duelen demasiado los pies por culpa de estos tacones.

Tengo apoyada mi cabeza sobre su hombro y mis piernas estiradas sobre las suyas.

Los mellizos se quedaron dormidos hace poco, así que los pusimos en su coche.

-Es muy lindo el hecho de que hayan ayudado tanto a los chicos con todo esto-nos dijo Bella.

-Doug es mi mejor amigo desde que somos niños. Y Evie también se convirtió en mi mejor amiga desde hace varios años, merecían que su día fuera lo más especial posible.

Asentí a lo que Ben dijo y bostecé.

Creo que voy a ser la siguiente en caer dormida luego de los niños.

-Creo que deberíamos volver a casa. Es bastante tarde y veo que todos estamos cansados-sugirió Adam.

-Buena idea.

Ben me ayudó a levantarme y fuimos a despedirnos de nuestros amigos.

Los padres de Ben vinieron en auto, así que nos quedamos en la parte trasera con nuestros hijos.

Los cuatro caímos rendidos apenas llegamos al castillo.

(...)

Ya han pasado tres días desde la boda. Evie nos llamó no mucho después de que llegaran a su destino.

Doug escogió Grecia como su destino. Irán a varias de las islas durante el mes que estarán allí.

Reí al ver los intentos que hacía Max para levantarse.

Ben está sentado en el suelo con él y con Ava.

Estamos en nuestra oficina. Les trajimos juguetes a los niños y los dejamos sobre una especie de alfombra.

Decidimos hacer una pausa y mi esposo se puso a jugar con los niños.

Miré el sobre en mis manos. No he tenido el valor de abrirlo.

Dejé de mirarlo al sentir una manito sobre la mía.

Con la ayuda de Ben, Max logró ponerse de pie, apoyando sus manos en el borde del cojín.

Sus ojos me miraron con curiosidad mientras que su boca jugaba con su chupón.

-¿Quieres que mamá juegue contigo?

Mason se rió.

Lo levanté y lo puse sobre mis piernas. Besé su frente y dejé que su manito enrrollara mis dedos.

Sentí como el sillón se hundía y miré a Ben. Tiene a Ava en sus brazos mientras que ella juega con su peluche.

-¿Crees que sea buena idea que lea lo que me escribió mi papá?

Tomó mi mano y besó mis nudillos.

-Dale una oportunidad. No pierdes nada por hacerlo, tal vez te sorprenda lo que dice.

Tomé aire y abrí el sobre. Lo puse a un lado y agarré la hoja de papel que había adentro.

"Hija,

Sé que luego de lo que te dije ese día debes de estar odiándome y que tal vez ni siquiera leas esta carta. Pero aún así espero que lo hagas.

Apenas dije lo que te dije me arrepentí de haberlo hecho.

No medí mis palabras y dije lo que menos merecías que te dijera.

No eres una decepción, Mal. Ni mucho menos todos los insultos que llegó a decirte tu madre.

Lamentablemente ella no supo valorarte. Valorar el hecho de que a pesar de que te hacía tantas cosas malas, tú estabas ahí para ella.

Qué no huiste para intentar encontrarme. Qué te quedaste a su lado porque la amabas, y aún lo haces.

Fue un terrible error decir que no debiste decir lo que dijiste cuando visitaste su tumba.
Estabas en todo tu derecho de hacerlo.

Es solo que mi corazón aún ama a tu madre, a pesar de todo el daño que le hizo a nuestra familia.

Y aunque siempre supe de lo que era capaz, mantuve falsas esperanzas de que algún día cambiaría.

Que sería la madre que tú necesitaste y que yo volvería a estar junto a ustedes.

Te prometo que si me das la oportunidad de seguir en tu vida y en la de mis nietos, haré lo posible por decirte como me siento con las cosas que respecto a tu madre. Y trataré de entenderte a ti.

No quiero hacerte daño. No más del que te hice en todos años.
Lo lamento tanto, hija. No sabes cuanto lo hago.

Entenderé sino quieres responder esto y no quieras saber más de mí. Al fin y al cabo me lo merezco.

Solo quiero que sepas que siempre te amaré, Mal. Y haré lo que sea necesario para remendar mis errores.

-Hades. "

Doblé de nuevo el papel. Sentí como las lágrimas caían.

Ben me abrazó hasta que me tranquilicé.

-¿Qué harás? - me preguntó, limpiando las lágrimas que quedaban sobre mis mejillas.

-Necesito comunicarme con él, sea como sea. O más bien, necesito verlo.

-Sea lo que quieras hacer, te ayudaré.

Sonreí.

-Gracias.

Nos quedamos mirando a los niños y creo que tuvo una idea.

-¿Y si en vez de videollamarlo el día del bautizo, lo invitamos a que venga?

Lo miré a los ojos.

-¿Harías eso por mí?

Puso su mano libre sobre la mía.

-Haría lo que sea con tal de que seas feliz.

Volví a abrazarlo, sin dejar de sonreír.

-Te amo.

Besó mi coronilla.

-Yo también te amo.

Dejé a Max sobre el sillón y me senté en la silla del escritorio.

Se suponía que en este momento haríamos las invitaciones para el bautizo de los niños, así que a la que le daré prioridad será a la de mi papá.

Escribí una carta y la puse dentro del sobre con la tarjeta.

Ben se puso a mi lado y tomó mi mano.

Espero que esto funcione.

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¿Ustedes que creen? ¿Hades irá al bautizo?

Este final es bastante diferente al de Black Magic.

Durante el Epílogo ocurrirán bastantes cosas inesperadas.

Las canciones que bailan durante la boda Devie son Forever de Chvrches y Adore You de Harry Styles.

Este capítulo se lo dedico a mi tocaya, JufiJauregui 💜💜💜

Su cumpleaños fue ayer, y quería agradecerte todo el apoyo que me has dado desde antes de publicar el primer libro hasta ahora.

Daré más agradecimientos en el próximo capítulo.

¡Nos leemos pronto!

~Con amor, su escritora💕.

Publicado el 16/ 03 / 2020.