Capítulo 19: Nunca será suficiente
No pude dejar varios capítulos escritos ya que tuve muchas tareas en estos días libres, pero al menos pude escribirles este.
Cuando encontré ese Gif morí de amor😍
El vídeo en multimedia es demasiado hermoso, vale la pena que lo vean 💙💜
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Mal's POV:
Llegamos de Arendelle hace algunos días. Fue un gran viaje. Pudimos descansar y los niños viajaron por primera vez.
Se portaron muy bien a pesar de ser tan pequeños. Aunque Ava ha estado algo inquieta en los últimos días, presiento que ella va a ser como yo de pequeña y Max como Ben.
-Princesita, ¿podrías quedarte quieta por favor? - le pedí.
Ella me miró unos segundos y siguió dando patadas, riéndose. Suspiré.
Llevo casi diez minutos intentando vestirla ya que les di de comer a ella y Mason y luego los bañamos, pero no logro terminar. Ha estado moviéndose mucho.
-¿Necesitas ayuda?
Me di la vuelta para mirar a Ben, quien tiene a un Max ya arreglado y dormido entre sus brazos.
-Por favor.
Se acercó y me dio al bebé. Mason rodeó mi cuello con sus brazitos y escondió su cara en mi cuello.
-Mi niña, se que te gusta jugar con tu mamá, pero debes hacerle caso. ¿Sí? - le preguntó y le dio un toque en la nariz.
Ava se rió. Empezó a moverse menos.
-Si está así solo por que la arreglaba para dormir, no me quiero imaginar como será en dos días para ponerle su vestido para el aniversario de tus padres. Además, siempre te hace más caso a ti.
-Se le pasará, amor. Confío en que te harán caso tanto a ti como a mí por igual.
-Eso espero.
Ben levantó a la bebé, ya con su pijama. Besó su frente y comenzó a mecerla.
Pocos minutos después oí el pequeño bostezo de Ava y vi como sus ojos se iban cerrando.
Los dejamos en sus cunas.
-¿Puedes creer que en menos de dos días ya tendrán tres meses? - le pregunté.
Pasó un brazo por mi cintura y besó mi coronilla.
-Están creciendo muy rápido, pero estoy feliz por que los dos podemos pasar tanto tiempo con ellos y que vemos los constantes cambios que han estado teniendo.
Sonreí y apoyé mi cabeza en su hombro. Fue mi turno de bostezar.
-¿Quieres que vayamos a dormir? Hoy fue un día largo y mañana también lo será.
Asentí. Me levantó y me cargó hasta nuestra habitación.
A penas pude oírlo cuando me dijo...
-Buenas noches, mi reina. Descansa.
Mis ojos ya estaban cerrados cuando pronunció la última palabra.
(...)
Acabamos de salir de una reunión con el Consejo de Segundones, la cual fue bastante agotadora. Lo peor es que ya veníamos de una reunión con el Consejo Real. Y antes de eso habíamos esto revisando documentos en nuestra oficina.
No hemos visto a los mellizos desde hace varias horas. Volvimos a dejarlos con Evie y con Doug para que los cuidaran.
A ellos les sirve como práctica para cuando nazca Emma y de ese modo nos ayudan.
Y no es que no confíe en Jay o en Carlos para que los cuiden, pero sé que su responsabilidad con niños no es muy buena. Más adelante no tendré problema en que los cuiden, aún así, por ahora no pasará.
-Ya que al fin nos libramos de las responsabilidades como reyes por hoy, ¿qué quieres hacer luego de buscar a los niños?
Puso su mano sobre mi rodilla y comenzó a acariciarla con cariño. Puse mi mano sobre la suya.
-Bueno, Evie quería que nos quedáramos hablando un rato con ella y con Doug. Aunque luego de eso podríamos ir al Lago Encantado.
-Eso suena bien para mí.
Pocos minutos después, llegamos a casa de Evie. Nos bajamos del auto y tocamos la puerta.
-Hola, chicos-nos saludó Doug.
-Hola.
Entramos a la casa.
-¿En donde están Evie y los niños? - le pregunté.
-Están en su estudio.
-Si quieres ve con ellos, yo los alcanzo en unos minutos-me dijo Ben.
-Ok.
Besé su mejilla.
Caminé hasta el otro lado de la casa. Al llegar a la puerta, me encontré con que Evie le estaba midiendo un vestido a Ava.
-E, sabes que si les sigues haciendo ropa no voy a tener donde ponerla. Con lo que les has hecho es suficiente y hasta sobra.
Entré a su estudio y me agaché para besar la frente de mi pequeño.
Evie me dio a Ava y besé sus pequeñas mejillas rosadas. Mi niña se rió y sonreí.
-Lo siento, pero sabes que me encanta consentir a mis sobrinos-le hizo cosquillas a Max y ahora él se rió- Nunca había hecho ropa para bebés hasta que ellos nacieron. Esto me ayudó para saber que debo hacer y que no, así sabré que hacerle a Emma.
Puso una mano sobre su estómago.
-Ya quiero que nazca mi ahijada, sé que ella y los niños se llevarán muy bien.
Evie sonrió por lo que dije.
Ava empezó a balbucear y a poner los labios de una manera muy tierna y graciosa. Entendí que era lo que quería así que le busqué su chupón.
Se lo puse en la boca y al instante empezó a jugar con él.
-Hace rato vi a Max haciendo lo mismo y no entendía que era lo que quería-me dijo Evie y reímos.
Me senté al lado de ella y nos quedamos un rato hablando. Luego de eso alcanzamos a Ben y a Doug. Alrededor de una hora después nos despedimos de ellos y nos fuimos.
Llegamos al Lago Encantado poco antes del atardecer. De camino acá buscamos Pizza para cenar.
Cuando nos sentamos en el suelo de piedra, Ava y Mason ya estaban profundamente dormidos. Seguramente se despertarán en un rato para comer.
-Tienes algo de salsa en el rostro.
Él se rió.
-¿Dónde?
Le señalé su mejilla.
-¿Aquí?
Reí ya que no lograba ubicar exactamente donde la tenía.
Me incliné hacia él y le quité la mancha. Su mirada está sobre mis labios y me puse nerviosa.
Acarició mis mejillas.
-¿Sabes que te ves muy adorable cuando estás nerviosa?
Mis mejillas se tornaron rosadas y negué con la cabeza.
Acercó sus labios y los unió con los míos.
Al separarnos, junté mi frente con la suya.
Nos sentamos al borde del suelo, con nuestros pies dentro del agua. Yo estoy sentada sobre su regazo y él me rodea con sus brazos y tiene su cabeza apoyada sobre mi hombro.
-No sé por qué, pero estoy recordando algo que nos pasó cuando aún estábamos en Auradon Prep.
-¿Ah sí? - le pregunté.
-Y recuerdo que te molestaste un poco conmigo. Aunque eso no duró mucho.
-Adivinaré, tenía que ver con tus celos, con los míos o con los de los dos. ¿Verdad? - pregunté riéndome.
-Así fue-respondió como yo.
-Creo que ya sé de cual ocasión hablas.
Flashback...
Salí de clases de Historia de Leñadores y Piratas junto con Evie, Jay y Carlos. Los cuatro íbamos hablando sobre la tarea que nos enviaron para la misma clase.
-No entiendo porqué el profesor nunca puede dejar de enviar tareas al final de cada clase. No lo hace solo cuando nos tocan exámenes-se quejó Carlos.
-Lo sé, lo peor es que yo pretendía pasar mi tarde libre practicando R.O.A.R con Lonnie, no haciendo un trabajo que es para mañana mismo-le siguió Jay.
-Tendremos el resto de la tarde libre al terminarlo, o al menos ustedes dos sí la tendrán-les dije.
-Sí, ustedes no tienen nada que hacer. En cambio, Doug y yo debemos ocuparnos de varias cosas de Evie's 4 Hearts y Mal debe ayudar a Ben a organizar el evento de este fin de semana.
-Está bien, tienen razón. No debemos quejarnos-dijo Carlos.
Llegamos cerca de la entrada al pasillo donde están los casilleros.
-Ustedes vayan buscando su comida, los alcanzo con Ben en unos minutos.
Ellos asintieron y siguieron hasta la cafetería.
Caminé, sabiendo de memoria en que lugar se encuentra el casillero de Ben. Me detuve al ver que había una chica hablando con él. Es del año de los juniors, o sea, dos años menor que nosotros.
Rodé los ojos al ver que intentaba coquetear con él de manera bastante torpe. No es la primera vez que lo intenta.
Me dirigí hacia ellos. Abracé a Ben por la espalda. Él sonrió al ver que era yo.
-Hola, amor-me saludó.
-Hola, cielo.
Me puse delante de él, rodeé su cuello con mis brazos y me puse de puntillas para besarlo. Él me correspondió al instante.
Luego de no sé, creo que un minuto, nos separamos.
Di media vuelta.
-Oh, hola Zoe, no te había visto. ¿Interrumpí algo? -dije inocentemente.
Ben me abrazó por la cintura. Sé que ya se dio cuenta de mis intenciones.
-Hola, Mal. En realidad, no interrumpes nada. Yo ya me iba. Adiós.
Dicho eso, se fue. Ben cerró su casillero y agarró mi mano. Comenzamos a caminar hacia la cafetería.
-Sabes que no hace falta que hagas eso solo por que estás celosa.
Lo miré.
-Pff, ¿yo? ¿Celosa? Por favor.
-Te conozco, y sé perfectamente como te pones estando celosa. No hace falta que intentes disimularlo.
-No sé de qué me estás hablando.
Él se rió.
-Como tú digas, celosita.
Intenté no sonreír cuando besó mi mejilla, pero no lo logré.
(...)
Ya era viernes, lo que significaba que tendría el fin de semana para dormir, pasar tiempo con los chicos y pasar tiempo con Ben.
Él y yo nos pasamos toda la clase de Química hablando, ya que el Señor Delay estaba revisando y evaluando los trabajos que le entregamos al principio de la clase.
No faltaron las chicas que nos miraban con recelo. Así que como buena novia que soy, besé a Ben en los labios y en las mejillas cada vez que notaba que tenían mucho tiempo viéndonos.
En este momento, estoy recogiendo mis cosas en mi casillero. Esperando a que me alcance ya que vamos a almorzar con sus padres en el castillo, posiblemente pase la noche allá.
Él se fue a hablar un momento con el Hada Madrina.
Sentí unos brazos rodearme y vi su reflejo en el espejo que tengo en la puerta.
-¿Ya podemos irnos? - le pregunté.
-Sí, pero antes debo hacer algo.
Me puse mi mochila sobre el hombro.
-¿Qué debes hac...
No pude terminar de preguntarle ya que sus labios estaban sobre los míos.
-¿A qué se debe esto? - le pregunté riéndome al separarnos.
-No tiene que haber una razón para que te bese en público.
Lo miré con una ceja alzada.
-¿Seguro que no fue por que habían varios chicos mirándome cuando llegaste?
Lo estaba mirando a los ojos, así que miró hacia otro lado. Me crucé de brazos.
-¿Cuántas veces debo decirte que no me importan las miradas de los demás chicos, que solo me importa la tuya? - le pregunté ligeramente molesta.
Es la tercera vez que hace eso en este mes.
-Lo siento, sé que a ti solamente te importa la mía como a mí solo me importa la tuya. Pero a veces no puedo evitarlo.
Comencé a caminar.
-No estás molesta conmigo, ¿o sí?
No le respondí.
-¿Qué debo hacer para que me perdones?
Lo pensé unos segundos.
-Si me das un tazón lleno de fresas, tal vez lo considere-dije haciéndome la difícil.
Pasó un brazo por mis hombros y besó mi cabeza.
-Dalo por hecho.
Sonreí.
Fin del flashback...
-Siempre has sido bastante celosa, princesa- me dijo.
-Tú no te quedas atrás, Bennyboo.
Él se rió y me apretó más contra él.
(...)
Estoy en el cuarto de los niños, terminando de vestirlos.
Para nuestra suerte, esta vez no fue una odisea tener que ponerle la ropa a Ava.
-Son los bebés más lindos del mundo, mis amores.
Los mellizos se rieron por lo que dije. Le acomodé a Ava su diadema, la cual Dizzy le hizo. Max metió su dedo en su boca, así que le di su chupón para que dejara de hacerlo.
Ben se puso a mi lado y me abrazó.
-¿Listo para celebrar los tres meses de nuestros hijos y el aniversario de tus padres?
-Sí, pero primero quiero darte algo.
Cargó a la niña y yo al niño y nos guío hasta nuestra habitación.
Me senté en el sillón frente a la cama, con cuidado de nos aplastar el vestido que Evie me hizo.
-Este día es en parte para celebrar a nuestros hijos, así que tengo algo para ti.
Buscó algo en su mesa de noche y volvió a sentarse junto a mí.
Abrió una caja morada de terciopelo. Miré a él y al collar alternativamente.
-Amor, es hermoso.
Tomé el collar entre mis manos.
-Abrélo.
Hice lo que me dijo y sonreí.
(imaginen que el cristal es morado y no rosado y que la cadena y el resto del dije son de oro rosado y dorado...)
De un lado, tiene una foto de nosotros dos con Ava y Mason. La tomaron los padres de Ben hace unos días cuando estuvimos en Arendelle.
Y del otro lado tiene una inscripción en francés que dice "Plus que ma propre vie". Más que a mi propia vida.
-Sé que te había gustado esa frase desde que la leíste en aquel libro. Y es que representa justamente lo que siento por ustedes tres. Los amo más que a mi propia vida.
Sonreí y lo abracé.
-Gracias-susurré.
Besó mi cabeza y nos separamos.
Reímos al ver que Ava y Max miraban el collar e intentaban agarrarlo con sus manitas.
-¿Quieres que te lo ponga?
Asentí.
Dejamos con cuidado a los bebés sobre el sillón y nos levantamos.
Se puso detrás de mí. Sentí como el collar reposaba sobre mi pecho.
Me di la vuelta y apoyé mis manos sobre su pecho.
-Así como te lo prometí con este... - comencé, tomando el collar que me regaló en nuestra fiesta de compromiso-... Lo haré con el que me acabas de dar. Rara vez no lo tendré puesto.
Sonrió y rozó nuestras narices.
-Los amo, a ti y a nuestros hijos.
Tomé sus mejillas entre mis manos sonriendo.
-Al igual que nosotros a ti.
Nos besamos hasta que el oxígeno hizo falta.
Tomamos a Ava y a Max entre nuestros brazos y salimos del cuarto.
Ya se oía la música en el jardín cuando llegamos al primer piso del castillo. Muchos de los invitados ya están aquí.
Llegamos con los padres de Ben y los saludamos.
-De nuevo, feliz aniversario-les dije.
-Aw, gracias querida-me dijo Bella.
Ella y Adam nos abrazaron.
-La ropa que les hizo Evie a ustedes dos y a nuestros nietos es muy linda.
-Pues muchas gracias, Bella-dijo mi mejor amiga.
Doug venía detrás de ella. Saludaron y felicitaron a mis suegros y hablamos un rato los seis.
La fiesta siguió, bastante entretenida. Había mucha gente aquí. Habitantes de todo el reino vinieron a la celebración. Y como no, si es el aniversario de bodas número 26 de los padres de Ben.
Ellos han estado hablando con otros reyes y reinas mientras que nosotros estamos con nuestros amigos.
Ava y Max han sido el centro de atención desde que llegamos al jardín. Todos los miran con ternura cuando pasan a nuestro lado.
En este momento, estamos sentados alrededor de una mesa. Nuestra princesa sobre mis piernas y nuestro príncipe sobre las de Ben.
Chico intenta alcanzarlos de vez en cuando. Y cuando lo logra, les lame las manos, provocando las risas de los bebés.
-¿Ya están listos para hacer la sorpresa para tus padres, Ben? - preguntó Chad.
Él y Audrey están frente a nosotros.
-Eso creo.
-Bennyboo, ¿no me digas que estás nervioso? - le preguntó Audrey burlona.
Ella le dice así de vez en cuando en broma, al igual que los demás. Saben que la única que le puede decir así de cariño soy yo.
-No, claro que no.
-¿Y cómo va a estarlo? Luego de haberle cantado a Mal frente a toda la preparatoria hace unos años, lo dudo-dijo Lonnie.
Todos nos reímos. Ben y yo nos miramos sonriendo unos segundos.
-Para que lo dijiste, ahora estarán en Bealandia hasta el final de la fiesta-se quejó Celia.
Volvimos a reírnos.
Vimos que Lumière y Ding Ding nos hacían señas cerca de la pequeña tarima que estaba en uno de los bordes del jardín.
-Creo que ya es hora-le dije a Ben.
-¿Podrían cuidar a los niños? - les pidió a nuestros amigos.
-Claro.
Le di a Max a Jay y Ben le dio a Ava a Carlos.
Ben tomó mi mano y caminamos hacia donde ellos estaban.
-Ya está todo listo, mis reyes-nos dijo Lumière.
-Gracias-le dijo Ben.
La Señora Potts, Chip y Melody llegaron.
-A tus padres les encantará esto-le dijo la Señora Potts a Ben.
-Esperamos que sea así.
-No les vamos a quitar más tiempo, suban al escenario.
Seguido de que Melody dijera eso, los cinco se fueron con los demás.
Ben subió el primer escalón y me ayudó para que no me enredara con la parte baja del vestido.
Nos paramos frente a los dos micrófonos. Entrelacé mi mano con la de Ben. Él la apretó con suavidad y soltamos nuestro agarre poco después.
La gente comenzó a acercarse a donde nosotros estábamos. Los padres de Ben se pusieron en primera fila junto con los chicos.
Jay y Carlos les pasaron a los mellizos.
-Hola a todos. Mal y yo queremos agradecerles a todos por haber venido a celebrar junto a nuestra familia una fecha especial para dos personas muy importantes para nosotros. Para celebrar el aniversario número veintiséis de mis padres.
Ellos sonrieron. El resto de los presentes comenzó a aplaudir.
-Bella, Adam, jamás me alcanzarán las palabras para agradecerles todo lo que han hecho por mí. Desde que empecé a salir con Ben, siempre han estado ahí para los dos en lo que más los hemos necesitado, sin importar qué. Son los padres que nunca tuve, los mejores padres para Ben y los mejores abuelos que sus nietos podrían tener.
Los últimos nombrados parecieron reconocer que hablaba de ellos ya que comenzaron a reírse y a mirarme a mí y a su papá.
-En casi veintidós años, he aprendido mucho gracias a ustedes. No podría pedir a mejores padres. Han estado para Mal y para mí siempre que los necesitamos. Y sabemos que también lo estarán para nuestros hijos. Como un pequeño agradecimiento por lo que han hecho por nosotros, Mal y yo les tenemos una sorpresa que esperamos que les guste.
Los presentes volvieron a hacer ruido.
Le hicimos señas a Lonnie, quien otra vez nos ayudaba con la música.
▶️...
-I'm trying to hold my breath, Let it stay this way. Can't let this moment end. You set off a dream in me- miré a Ben y él me sonrió-, Getting louder now. Can you hear it echoing?
-Take my hand- hice lo que él cantó-, Will you share this with me? 'Cause darling without you...
-All the shine of a thousand spotlights,
All the stars we steal from the night sky. Will never be enough, Never be enough-cantó.
-Towers of gold are still too little. These hands could hold the world but it'll, Never be enough. Never be enough. For me- canté.
-Never, never. Never, never. Never, for me. For me. Never enough, Never enough- (Ben).
-Never enough, For me- (Mal).
-For me- (Ben).
-For me- cantamos los dos.
Nos pusimos uno frente al otro.
-All the shine of a thousand spotlights,
All the stars we steal from the nightsky. Will never be enough,
Never be enough. Towers of gold are still too little. These hands could hold the world but it'll, Never be enough.
Never be enough, For me.
-Never, never- (Mal).
-Never, never- (Ben).
-Never, for me- (Mal).
-For me.
Me acercó más a él.
-Never enough. Never, never. Never enough. Never, never. Never enough,
For me, For me, For me. For me.
Los dos sonreímos al terminar de cantar. Él me abrazó y bajamos del escenario, con los aplauses, silbidos y gritos de la gente de fondo.
Bella y Adam se dirigieron directamente a donde estábamos.
-Eso fue muy hermoso, chicos.
-Gracias por esto-nos dijo Adam.
Nos abrazaron. Al separarnos, Ava y Max empezaron a moverse entre sus brazos.
-Creo que es momento de que vuelvan con sus padres-dijo mi suegro.
Tomé a Ava y Ben a Max.
Ella rodeó mi cuello con uno de sus brazos y con el otro abrazó su peluche. Max hizo lo mismo con Ben y su peluche.
Seguimos celebrando junto a todos hasta una hora avanzada de la noche.
Cuando nos fuimos a dormir, los cuatro estábamos exhaustos.
Dejamos que por esta noche nuestros hijos durmieran con nosotros.
Ambos están entre Ben y yo.
-Y pensar que hace tan solo casi 10 meses nos enteramos de que iban a llegar a nuestras vidas.
Levanté la vista de los niños y lo miré.
-El tiempo ha pasado demasiado rápido desde entonces.
Besó mi frente.
-Es verdad, pero estos dos años han sido los mejores de mi vida.
Sonreí por lo que dijo.
-También han sido los míos.
Luego de algunos minutos, el sueño me venció.
Me siento totalmente feliz y segura teniéndo a los tres aquí conmigo.
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Mi idea era terminar este capítulo más temprano, pero se me fue varias veces la luz y por consecuencia, el Internet.
Hace tiempo que no escribía un capítulo musical y me gustó el resultado❤️
The Greatest Showman tiene uno de los mejores soundtracks que he escuchado.
Mis favoritas son Rewritte the Stars y Never Enough, o sea, la canción que leyeron.
Desde hace tiempo que quería poner una de esas dos canciones en un capítulo o un OS.
¡Nos leemos pronto!
~Con amor, su escritora💕.
Publicado el 03/11/2019.
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