𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟎: 𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥 𝐝𝐞𝐥 𝐕𝐞𝐫𝐚𝐧𝐨
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9 años después...
Narrador Omnisciente:
Las olas chocaban contra las rocas en la bahía. Las aves marítimas cantaban y el sol brillaba intensamente. El día tenía un clima ideal para estar en el mar, nadar y broncearse.
El verano estaba por terminar, dando inicio a un nuevo año escolar, así que era la ocasión ideal para divertirse y despejarse.
El gran grupo de amigos de Hijos de Villanos e Hijos de Héroes, ahora con sus familias, se reuniría ese mismo día para celebrar. Subirían al yate real de los Beast-Underworld y todos regresarían a Auradon City al anochecer.
Ben y Mal estaban con sus hijos- Mason, Ava y Blair- y sus padres - Adam, Bella, Perséfone y Hades- en la casa que les pertenecía a ambos a unas horas de la ciudad capital. Ese era su lugar de escape cada vez que tenían oportunidad de relajarse de sus responsabilidades reales. Hasta Cerbero iba con la familia.
Evie y Doug habían estado en Egipto el último mes junto a Emma, Danna y Dylan y Regina. La ex-Reina Malvada y su hija habían aprovechado el viaje para tomar inspiración para la próxima colección capsula de Evie's Hearts antes de centrarse en el lanzamiento de la campaña de Otoño e Invierno de ese año.
Jay y Lonnie junto a Jason y Lara Jean decidieron hacer un recorrido por el país en una casa rodante, conociendo nuevos lugares y explorando. Incluso tenían sesiones improvisadas de R.O.A.R. en algunos de los campamentos donde se hospedaban.
Jane, Carlos, su hija Jenny, Chico y el Hada Madrina pasaron sus vacaciones ayudando en distintos refugios animales para la fundación del pecoso. Las tres mujeres brindaban ayuda mágica si era requerido para curar a algunas criaturas heridas. El can era una gran compañía para los animales.
Chad, Audrey, Christian y Arianna pasaron esos dos meses en el Páramo. Como familia habían decidido seguir el legado de Aurora para cuidar aquel lugar, y la rubia estaba encantada con eso. Incluso Mal los ayudaba cada que podía por ser, de algún modo, parte de su origen.
Uma, Harry, Heather y Harvey estuvieron en la Isla de los Perdidos y en Nunca Jamás junto a Gil, Alena y Gabe. Navegaron en el barco perteneciente a los dos primeros. Había sido un viaje muy entretenido.
Dizzy, Celia y Chloe se quedaron en la ciudad ya que la pelirroja mayor había quedado a cargo de la compañía de Evie en su ausencia. Su hija aprovechó ese tiempo para aprender verdaderamente como funcionaba ese mundo ya que esperaba estar en él en el futuro.
Liv, la hija menor de Rosie Montoya y ahijada de Carter Mason, acompañaba a la familia real desde hacía un par de días por ser la mejor amiga de la menor de los Beast. Era muy querida y apreciada por todos.
Melody, Chip, Connor y Michael habían sido invitados por que los adultos son grandes amigos del rey y familia, relativamente lejana, de la reina.
Entrando en detalles con la Familia Real de Auradon, Bella y Adam habían estado viajando bastante en los últimos años, pero siempre regresaban a casa. Este año estarían sí o sí en el castillo dado a que era el último año de reinado de Ben y Mal.
Hades y Perséfone, como sospechaba la pelimorada, terminaron retomando su relación de manera oficial cuando los mellizos comenzaban la secundaria. Se casaron de nuevo poco después de eso. La relación madre e hija de la Diosa de la Primavera y la reina era muy especial.
Blair seguía siendo una apasionada por el baile. Y cuando conoció a Rachel, a la cual todos le dicen Liv de cariño por su segundo nombre, encontró a su mejor amiga y compañera de baile. Además, ambas comparten también su pasión por la lectura y la escritura. Son inseparables.
La Princesa de Costa Luna había llegado a Auradon como parte del programa de intercambio entre ambos reinos, mismo programa con el que su hermano Nick había estudiado la preparatoria antes de regresar a su país para la Universidad y asumir el trono al completar sus estudios.
Conoció a Blair cuando apenas tenían cuatro años en un viaje de la familia Beast a Costa Luna. Se mantuvieron en contacto a través de sus padres hasta que tuvieron la edad para poseer teléfonos propios. Y al llegar el momento de comenzar la secundaria, le rogó a sus padres para que la dejaran ir a estudiar a Auradon.
Había una ventaja a su favor porque su hermano ya estaba allí, así que aceptaron. Agregando el hecho de que confiaban en que Ben y Mal estarían pendientes de su hija menor.
Ava heredó el amor de su madre por el arte, así que su gran amor era pintar y esculpir por horas. Aunque internamente, y para conocimiento de sus amigas, su otro gran amor era un chico al que era muy cercana desde que eran bebés. Su magia es muy poderosa, así que espera aprender todo lo que pueda de su progenitora y sus tías Jane y Uma.
Sus dos hermanos también poseen magia, pero a pesar de todo la de mayor impacto es la suya. La que le sigue es la de su hermana menor y luego la de su mellizo.
Mason está perdidamente enamorado de su novia, Emma Dwarfson. Su amor de niños terminó siendo un amor verdadero que aún perdura. Le encanta hacer deporte y jugar videojuegos. Pero al igual que sus hermanas, su abuela, y su padre, ama con locura la lectura.
La personalidad de los tres hermanos suele contrastar, pero aman pasar tiempo juntos. Comparten el mismo círculo de amigos, y están muy cómodos y felices con eso. Son inseparables.
Ben y Mal, como se prometieron muchos años atrás, repartían su tiempo para su reinado, sus hijos, sus amigos, su familia y su relación. Y lo equilibran muy bien. Incluso han logrado encontrar actividades para hacer cada uno por separado en sus tiempos libres, lo cual es extremadamente sano.
Mal ha estado trabajando en su salud mental. Al principio le costó muchísimo abrirse sobre su pasado con alguien que no fueran Ben, Evie, Carlos, Jay, sus suegros o su padre, pero al fin había encontrado un equilibrio. No lograba encontrar confianza en alguien externo por la posibilidad de perder su privacidad por culpa de la prensa, pero su psicóloga es una persona de muchísima confianza.
Comenzó a asistir a sus terapias cuando sus hijos apenas comenzaban la primaria. No negaría que había sido duro batallar con su pasado, los traumas, las heridas y la culpa. Pero desde ese entonces se sentía con mayor paz y tranquilidad.
Los traumas no desaparecieron de la noche a la mañana, a veces todavía lucha contra ellos. Aún así, está orgullosa de todo lo que ha logrado para sí misma. En ocasiones la han acompañado Ben, sus hijos y su padre. Y ha sido de gran ayuda.
De hecho, en los últimos años no ha asistido con mucha frecuencia dado a sus grandes mejorías. Trata de ir si es realmente necesario. Además, se prometió a sí misma no descuidar el arte, así que ha mejorado mucho más luego de graduarse de la universidad.
Por otro lado, Ben decidió invertir su tiempo libre en seguir con la lectura, hacer ejercicio como cuando era adolescente y jugar videojuegos con sus amigos y su hijo. De hecho, ambos son muy buenos a pesar de no jugar frecuentemente.
Ambos son los mejores padres que sus hijos podrían tener. Aman a los tres con locura y harían lo que fuera por su bienestar. Asisten a todos los partidos de Tourney, recitales y obras que pueden. Hacen salidas y viajes en familia y conviven en casa.
En poco más de un año dejarán el trono para que sus dos hijos mayores sean los reyes luego de cumplir la mayoría de edad, así que están dejando todo preparado para ellos.
Mal estaba parada en el balcón de su habitación con los ojos cerrados, dejando que la brisa matutina del mar la relajara. Sus cabellos morados ondeaban libremente y el sol hacía relucir las pecas en su nariz y mejillas.
Sonrió cuando sintió los fuertes brazos de Ben rodeándola y sus manos posándose en su estómago. Apoyó su espalda en el pecho de él y se sumergió en la tranquilidad y calidez que su cuerpo le producen. Se quedaron en silencio por varios minutos, disfrutando del sonido del mar.
El castaño le dio la vuelta para que quedaran frente a frente. Se sonreían, mirándose a los ojos.
-Tu idea de pasar todo el verano aquí ha sido una de las mejores que has tenido- le dijo a su esposo, acariciando su pómulo.
El rey sonrió y posó su mano en su espalda baja.
-Toda la familia necesitaba un descanso, y tiempo de calidad. Adoré pasar este tiempo con los niños. Además- sacó dos objetos de su bolsillo, poniéndolos a la altura de su rostro y pasó su mano de la cintura al estómago de su esposa-, esto nos dio la oportunidad de por fin tener a nuestro esperado cuarto bebé.
Mal se llevó una mano a la boca y con la otra tomó las dos pruebas de embarazo que se había hecho unos minutos atrás. Sonrió, con los ojos brillantes de la emoción.
-¡Las dos salieron positivas! - exclamó con felicidad.
Ben asintió, con los ojos llorosos. Mal rodeó su cuello y él la alzó del suelo, ninguno paraba de reír en medio de su abrazo.
Luego del nacimiento de Blair decidieron que si tenían otro bebé, esperarían a que los chicos tuvieran al menos 16 años. Max y Ava ya tenían 17 y Blair había cumplido los 16 dos meses atrás.
Y ahora que solo les quedaba un año de reinado, podrían centrar toda su atención en ese nuevo bebé. Además de ver la graduación de dos de sus hijos mayores y el último año de preparatoria de su, ahora, hija del medio.
Creyeron que sería complicado dado a que ya no eran tan jóvenes y esa edad era compleja para embarazos, pero lo habían logrado más pronto de lo que esperaban. Están muy felices de que se haya dado de esa manera.
-¿Qué harás con lo que estabas investigando de tu magia y la de los niños? - le preguntó él.
Seguían abrazados, pero Ben había dejado a Mal en el suelo de nuevo.
-No debería de haber problema ahora que la domino por completo- vio la expresión de duda en el rostro de su marido- No nos sucederá nada, amor. No me excederé con mis poderes y trataré de no hacer cosas que me debiliten.
Sus palabras aliviaron al descendiente de Bella y Adam. Sabe perfectamente lo buena que es Mal con su magia y lo mucho que ha mejorado estos años, pero la preocupación lo invadió al recordar el comienzo del embarazo de los mellizos.
La ojiverde captó al instante porque se puso así, y lo entendía. Esa preocupación permanecía en ella aún después de tantos años. Pero confía en sí misma y en su magia.
-Te prometo que no haré nada que nos ponga en riesgo a los dos, ¿ok?-juntó sus frentes.
El castaño asintió, calmándose poco a poco. Rozó sus narices, provocando que ella soltara una risita. Iba a decirle algo hasta que Mal lo tomó desprevenido y unió sus labios.
Se derritieron ante el tacto del otro. La Princesa del Inframundo apenas pudo coordinar sus hechizos para dejar las pruebas de embarazo escondidas en su equipaje. Después de que el humo morado se dispersó, colocó su mano en la nuca del rey.
Cuando decidieron tratar de intentar tener otro bebé, acordaron no decirle a nadie hasta que pasaran el primer trimestre para asegurarse de que todo estuviera en orden. Si sus hijos, padres o amigos lo descubrían antes se los dirían, pero prefieren que sea así por el momento.
Cerca de la puerta de entrada de la habitación se oyeron pasos provenientes de tres pares de pies.
-Mamá, papá, los estamos esperan... - la ojimiel se calló al alzar la mirada de su celular y ver la escena.
Ava y Mason, quienes venían detrás de ella, se frenaron de golpe para no chocar con la menor.
-¡Blair! - se quejó Max, ya que había chocado su pie con la esquina de la puerta por esquivarla.
Ben y Mal dejaran sus rostros cerca, riendo en silencio al oír las voces de sus descendientes.
-Que asco- se quejó la castaña con ligeros toques de rubio y morado- No sean así, sabemos que nos están oyendo.
Esas palabras bastaron para que el matrimonio estallara en risas. Se separaron y entraron a la habitación, cerrando las puertas de la terraza.
-Nunca cambiarán - dijo la reina entre risas.
Ben abrazaba a las dos chicas y Mal al chico.
-¿Ya tienen todo listo? - preguntó ella.
Los tres hicieron ruidos de afirmación.
-Nuestras maletas ya están en el auto que nos llevará a la bahía- contestó Max, besando la coronilla de su madre.
-Los abuelos y Kore están esperándonos- siguió Ava.
-¿Y Liv? - cuestionó Ben.
-Está abajo haciendo una video llamada con Rosie y Nate - respondió Blair.
-Entonces es hora de irnos. Los demás nos avisaron que les faltaba poco para llegar al pueblo- dijo la pelimorada.
Los chicos los ayudaron a tomar las maletas y bajaron luego de verificar que no faltara nada. Conversaron unos minutos con los padres de su invitada y emprendieron camino a la bahía.
(...)
Por suerte, eran los primeros en llegar. Así que se instalaron sin problema y fueron dejando sus maletas en una de las habitaciones del yate. Sería más fácil encontrarlas al llegar a la ciudad si las repartían en grupos con antelación.
Admiraban los vitrales en la embarcación, en especial el de Ben y Mal hasta que oyeron ruido en el muelle.
Al acercarse al barandal, rieron al darse cuenta que el escándalo estaba siendo provocado por sus amigos. Gritaban, silbaban y tocaban los claxons desde los autos donde llegaron.
Fueron recibidos por los pocos miembros de la Guardia Real que por protocolo debían viajar con ellos y se empezaron a reunir al haber dejado sus maletas. Los besos en la mejilla y los abrazos abundaron hasta que ya todos se habían saludado.
El yate comenzó a navegar. Apenas iban a ser las diez de la mañana, así que estarían navegando a los alrededores de una pequeña isla cercana y a las cinco de la tarde tomarían camino rumbo a Auradon City.
Bella, Adam, Hades, Perséfone, Regina y el Hada Madrina estaban en grupo en la parte más apartada de la superficie del yate, dejando que sus hijos y nietos se divirtieran. Chico y Cerbero corrían de un lado a otro, felices de tener tantas personas para jugar.
Los adultos conocidos como los VK's y los AK's estaban repartidos por varias mesas, poniéndose al día y bromeando. Y sus hijos estaban al otro extremo.
El recorrido hasta el islote fue de tan solo media hora. De modo que al llegar, los toboganes, flotadores y motos de agua comenzaron a acomodarse alrededor del yate.
Los integrantes del Core Four hablaban entre ellos, degustando los postres que Evie preparó junto a Emma y Dylan para ese día.
-Es increíble ver como son nuestras vidas ahora, ¿no creen? - comentó Jay.
-Sí- la peliazul concordó, riendo suavemente.
-Somos adultos ahora - se voltearon al oír gritos provenientes del agua, eran Chad y Gil compitiendo sobre las motos- Bueno, casi - dijo el pecoso.
Los cuatro rieron.
-Si le hubieran dicho a la Mal de dieciséis años que ese año se mudaría a Auradon y esta sería su vida, definitivamente los hubiera asesinado- rió la pelimorada.
-Creo que todos siempre estaremos agradecidos con Ben por ser el primero del otro lado de la barrera en darnos una oportunidad - habló Evie.
Vieron como el rey miró en dirección a ellos mientras que hablaba con Melody y Chip y les sonrió.
-Siempre - dijo Mal, totalmente embelezada por su marido.
Carlos la codeó con diversión.
-Casi veintitrés años juntos y aún se te cae la baba por él - le dijo burlon.
La reina se rió, con las mejillas sonrojadas. Tomó un sorbo de su vaso de "piña colada". Los otros tres consumían lo mismo con alcohol, así que no percibieron que había una diferencia.
-Pues no somos la única pareja que sigue de ese modo - sus amigos estuvieron de acuerdo.
Observaron a sus hijos. Mal e Evie se miraron con complicidad al ver a sus dos hijos mayores. Mason y Emma no se habían separado de los brazos del otro desde que se habían reencontrado luego de poco más de dos meses sin verse.
Ava le revolvió el cabello a su mellizo y a su mejor amiga, haciendo que se separaran del beso que estaban por darse.
-¡Carajo, Ava! - se quejó la pareja.
Sus amigos y la nombrada rieron.
-Parecen chicles, alguien tenía que separarlos- dijo Christian con simpleza.
Los demás estuvieron de acuerdo.
-Gracias por el apoyo, Chris- le dijo la ojiverde.
El chico le sonrió y le extendió la lata de refresco que le había ayudado a abrir. Ella se sentó a su lado. El resto se miró, entendiendo el gesto.
-¿Cómo creen que será su último año?- cuestionó Arianna, siendo una de las menores del grupo.
-¿Honestamente? Esperamos que sea uno de los mejores de nuestras vidas- contestó Connor.
Miró disimuladamente a la princesa de Auradon, quién tenía su vista posada en el chico a su lado.
-Tenemos casi todo lo necesario planificado, aunque aún no hemos decidido si haremos algún viaje durante el año escolar o no - agregó Jason.
-Ay hermanito, hagan viajes o no sabemos que todos se emborracharán al menos una vez en fiestas- bromeó Lara Jean.
-Van a beber hasta el amanecer - rió Harvey.
-Eso pretendemos, bro- aseguró Heather, usando un tono divertido.
-Y obviamente ustedes irán con nosotros a todas esas fiestas- dijo Jenny.
-Tú eras la menor de su año - le recordó Dylan.
La pelinegra lo mandó a callar, tapando sus labios con su dedo.
-Solo por menos de seis meses, cielo- le dijo a su novio.
Todos rieron.
-Es genial tenernos los unos a los otros, ¿saben? Podremos tener uno o dos años de diferencia entre algunos, pero los adoro chicos- comentó Danna.
Chloe y Arianna la abrazaron de lado.
-No me digan que a la mini Grimhilde le dieron alcohol - dijo Mike.
-Todos sabemos que ella no necesita beber para ser sentimental- le recordó Chloe.
-Em, ¿eso es un halago o...?
Sus amigos rieron. Siguieron conversando.
-¿Cómo van las cosas con tus padres, Gabe? - preguntó Liv.
-Todo bien, aunque es curioso pensar como ambos tardaron tanto tiempo en descubrir sus sexualidades- respondió el de cabello rizado.
-¿Se lo vas a decir a la hija de las dos personas por las que Alena terminó descubriéndolo? - rió Blair- Si tu madre se hubiera dado cuenta antes de que no solo le atraía mi papá sino también mi mamá, probablemente no se hubiera dejado hechizar por mi abuela.
Gabe casi se ahogó por el comentario, provocando más risas.
-Es que nadie puede negarlo, B, tus padres harían dudar la sexualidad de cualquiera. Y te lo dice tu mejor amiga bi- le dijo Liv.
Siguieron riéndose.
-Te recuerdo que tu bestie también lo es - le recordó Ava.
La menor de los Beast se encogió de hombros.
-Adoro ver las caras de los dinosaurios del consejo cuando mamá y papá se los recuerdan- dijo ella sonriendo.
Ava y Max rieron porque eso era muy cierto. La castaña empujó a su hermana al agua con su magia cuando esta se distrajo.
-Me la debías - le gritó cuando Ava comenzó a maldecirla desde el mar.
Max se reía a carcajadas burlándose de su melliza hasta que esta lo jaló al agua con ella. De algún modo él también logró meter a Blair en el agua.
-¡Pelea de agua! - gritó Jason.
Uno a uno los adolescentes cayeron al agua. En algún punto, todos estaban en el mar. Incluso sus padres y abuelos se habían unido. Subían a los flotadores y trampolines acuáticos, se mojaban con pistolas de agua.
Las peleas se centraban más que todo en los grupos de hermanos o mejores amigos. Mason y Emma atacaban a Blair y a Liv en el trampolín, y ellas devolvían el ataque. Christian y Ava habían logrado escapar de ellos, nadando hacia el yate.
Ambos reían a carcajadas, tratando de no resbalarse en las escaleras hasta encontrar dos toallas.
-Tenemos suerte de que no nos notarán, Blair tiene muy buena vista por la herencia de mamá - dijo la princesa, entrecortada por las risas.
El castaño casi pelinegro se rió junto a ella. La rodeó delicadamente con una toalla. Sus cuerpos quedaron muy cerca. Él la tomó con cuidado de la cintura cuando ella casi perdió el equilibrio por sus pies mojados. Se miraron a los ojos.
-Pues yo estoy teniendo muy buena vista en este momento - le dijo Chris, en un subidón de confianza.
Sus rostros cada vez estaban más cerca.
-¿E-en serio? - cuestionó ella, con la voz temblándole de los nervios.
Él asintió. No pudo contestarle lo que quería ya que oyeron las voces de Hades y Perséfone subiendo las escaleras. Se separaron rápidamente, con las mejillas rosadas.
Los Dioses del Inframundo reían. Sus brazos rodeaban la espalda del otro mientras que terminaban de subir los escalones.
-Debieron ver las caras de Adam y Bella- rió la pelirroja.
El peliazul sonrió y abrazó de costado a su nieta.
-Otra razón más para ser tu abuelo favorito, Δράκων - dijo con orgullo.
Los dos jóvenes rieron.
-¿Quieren pizza? Aún quedan varios trozos en las cajas - comentó Chris, distrayéndolos antes de que notaran algo raro entre ellos dos.
-Sí, por favor - pidió la Diosa de la Primavera.
Hades se fue junto al hijo de Audrey y Chad.
-¿Cómo es que te gusta la pizza con piña? - le preguntó el dios, horrorizado.
El más joven se encogió de hombros. Las dos mujeres rieron.
-¿Interrumpimos algo? - interrogó la madrastra de Mal, sentándose.
La ojiverde desvió la mirada.
-No sé de qué hablas, Kore - Ava se hizo la desentendida.
Perséfone se rió.
-Si tú lo dices - dijo con humor, colocándose sus lentes de sol negros.
Los demás comenzaron a subir al barco, buscando algo de comida y para secarse.
(...)
El cielo estaba despejado, mostrando colores naranjas, amarillos y rojos en el atardecer. El yate real estaba a una hora del puerto de la capital, así que todos estaban relajados admirando el paisaje.
Mal estaba acurrucada en el pecho de Ben mientras que él acariciaba su cabello. El rey le agitó suavemente el brazo para que mirara algo. La pelimorada sonrió al ver a Blair con su brazo entrelazado al de su mejor amiga, Ava conversando animadamente con Christian y Mason y Emma en la misma posición que ellos. Aunque las dos mejores amigas tomaban la mano de la otra.
-Ellas me recuerdan a Evie y a ti - le dijo, refiriéndose a su hija mayor y a su ahijada- Y ellos a ti y a mí.
La pelimorada sonrió. Alzó un poco la cabeza, tomando la barbilla de Ben con suavidad.
-Creo que este es uno de los mejores finales de verano de la historia.
El rey soltó una risita. Besó su coronilla y la apegó de nuevo a él.
-Definitivamente lo es.
Se mantuvieron en silencio, oyendo las olas del mar. Los dos tenían toda la razón. Era el final del verano más divertido y feliz de todos.
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*da saltitos y grita*
Después de mucho tiempo sin escribir algo de esta historia, al fin les traigo el esperado primer capítulo luego del salto temporal.
Como podrán notar, en la nueva generación hay algunas parejas formadas y otras en camino.
¿Qué opinan de cada personaje?
Aquí haré una pequeña aclaración de los años que cursarán cada personaje en la escuela:
-Senior Year (Último año)= Ava, Max, Emma, Jenny, Jason, Heather, Connor, Christian.
-Junior Year (Penúltimo año) = Blair, Liv, Lara Jean, Harvey, Mike, Arianna, Danna, Dylan, Chloe y Gabe.
Este capítulo se lo dedico a la Licenciada ElaenaT, porque estuvo de cumpleaños este fin de semana hoy se graduó en la universidad😂❤️✨🦋
¡Nos leemos pronto!
~Con amor, su escritora💕.
Publicado el 12/07/2022.
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