Capítulo 38
Narra Mina.
—¿Les dijiste a Sana y a Mark que también iré a la fiesta de Jackson? —preguntó Nayeon antes de darle una mordida a su manzana.
Nos encontrábamos en su casa, en la sala de estar exáctamente. Como era sábado fui a platicar con ella y arreglar cómo iríamos a la fiesta de esta noche. Obviamente les dije a mis padres que me quedaría a dormir en su casa y omití el resto.
—Yes.
—¿Y vendrán igual?
—Mark sí, Sana se negó. Sigue muy molesta contigo y ahora seguro que conmigo también, pero ya qué. Con Mark es suficiente.
—Okay. ¿Y qué te dijo Mark cuando le mencionaste que nos volvimos a hablar?
—Pues... —Justo sonó mi teléfono— Debe ser él.
Saqué el aparato de mi cartera y sí, era él, así que contesté.
—Mark. ¿Por qué no llegas?
—Pasaré por la casa de esa traidora en la noche, directamente para ir a recogerlas en el auto —Rodé los ojos.
—No seas infantil y ven ahora.
—No lo soy y no pienso pisar la casa de esa panquequera que nos dió la espalda nunca más en my life. Primero que me pida perdón y tal vez entonces las cosas vuelvan a ser como antes.
"Genial".
Miré a Nayeon y ella rodó los ojos también.
—Estás en altavoz, bobo —Le habló la coneja—. Si quieres decirme algo, ven y dímelo en la cara.
—¿Cuál? Si no tienes, descarada —respondió él desde la otra línea—. De lo contrario no vendrías hasta ahora a querer retomar contacto con nosotros.
—Retira lo que acabas de decir o te rompo-
—¡Nos vemos luego, Mark —Era mejor ponerle fin a la conversación— , ven por nosotras a las once, muac!
Colgué.
—Uff, creo que pasaste tanto tiempo con las negrorosa que se te pegó lo turra.
—"Qué chistosa".
—Jajaja.
—Por cierto, ¿estás segura con eso de volver con BamBam?
Mi sonrisa de burla se esfumó.
Tenía que tocar el tema 😑
—Ya volví con BamBam. Somos novios otra vez. Lo de esta noche es precisamente para enrostrárselo a todos los imbéciles del insti. Por eso la invitación es abierta, de otro modo ni loca aceptaría ir a una fiesta donde estarán los nerds y demás perdedores de la escuela.
—Vaya, es raro escuchar eso viniendo de ti. Y pensar que una vez nos echaste en cara a Sana, Mark y a mí todos los favores que nos hiciste con el fin de que cambiáramos nuestra actitud con el resto, sin contar todas las cosas que nos dijiste sobre reflexionar y tratar bien a los demás. Es como si ahora estuviese delante de otra Mina.
—Já. Olvídense de todo lo que les dije esa vez. Estaba transitando el mayor momento de estupidez de mi vida así que hagan de cuenta que jamás pasó —Sonreí tras terminar de decir aquello—. En cambio, a partir de esta noche todo será diferente, para bien, recuperaré mi lugar en el instituto y me encargaré de que todo vuelva a su sitio —El solo escucharlo me da satisfacción.
—Oye, eres consciente de que en poco más de un mes tendremos los exámenes finales y chau, nos graduaremos, ¿no?
—Soy consciente de que me graduaré como la reina que soy y no como la loser a la que todos fastidiaban.
—Te recuerdo que tu novia era la payasa del insti.
—No sé de qué hablas —dije usando la pantalla de mi celular como espejo.
—No te hagas la desentendida. Sabes bien que hablo de la ena... de Son.
—¿Cuál "San"? No conozco a nadie con ese nombre.
—Son Chaeyoung, alias "la enana", "la duende", "hongo con patas", "gnomo". ¿Recuerdas cuánto te molestaba que la llamara por esos apodos?
—Hmmm... —Fingí ponerme a pensar— No, definitivamente no sé de quién estás hablando —repetí y prendí el televisor—. I'm so sorry.
—Al parecer Mark no es el único infantil —Escuché que murmuró pero al voltear ya no estaba.
Qué sabe esa coneja.
Y esa idiota...
Fue la primera vez que le expresé mis sentimientos a alguien y solamente se burló de mí. ¿No tengo derecho a querer olvidarla?
No veo la hora de que sean las once.
Narra Chaeyoung.
—¿Ya le pediste permiso a tu madre?
—Sí —Le respondí a Dahyun a través de la videollamada, tirada en mi cama—. Dijo que puedo hacerme un cambio en el cabello pero nada llamativo.
—Perfecto. Mañana nos ocuparemos de eso.
—Pero mañana es domingo. ¿Dónde encontraremos una peluquería abierta?
—Cerca de mi casa hay una que abrió hace poco y como necesita clientes también atiende los domingos hasta la tarde.
—Uhm... No sé, no me da confianza.
—Hubiéramos ido hoy si no fuera porque te demoraste en consultarlo con tu madre y se nos hizo tarde —Aish.
—Ugggghhhhhh... —Hundí mi cara en la almohada.
—¿Qué pasa, Chae?
Me destapé.
—No puedo dejar de pensar en Mina. Quiero que me crea y me perdone —Y que regrese conmigo.
—Wow, te gusta mucho eh.
—Ya te dije que sí. Insististe tanto en que lo aceptara y ahora...
—Lo sé, lo sé. Es que ya me había acostumbrado a que lo negaras siempre jsjs.
Bueno, la verdad es que se siente bien decir libremente que Mina me gusta. De haberlo sabido lo habría reconocido antes.
—Sabes, el lunes, cuando le hablé a Mina en los casilleros, iba a proponerle que saliéramos juntas —Sonreí un poco triste—. Me refiero a... a conocernos mejor, sin ningún chantaje de por medio —Y tomadas de la mano—. Pero... Ella estaba tan furiosa y ahora no quiere ni verme, me odia demasiado, dijo muchas palabras hirientes. Quizás lo mejor que puedo hacer es dejarla en paz.
—No, no te desanimes, Chae. Estoy segura de que ella dijo esas cosas porque está dolida, no porque realmente lo sienta. Pero ya verás que más pronto de lo que crees la recuperarás —Ojalá.
—Aún no entiendo muy bien en qué consiste tu plan.
—Es fácil. Si no puedes hacer que Mina te crea, harás que vuelva a caer redondita a tus pies —¿Ah?—. Solo debes sacar tus encantos a flote y no podrá resistirse a ti.
—No tengo ganas de hacer el ridículo, Dahyun.
—No lo harás —Sí, cómo no—. A propósito, Joy me llamó hace rato y a que no sabes.
—Qué.
—Alguien de la escuela hará una fiesta en su casa esta noche y todos están invitados. Podemos ir con Joy, eh, eh.
—Ve tú. Yo no me siento del todo bien y no me iré de fiesta —Mientras Mina debe estar sola y triste en su cuarto—. Además sabes muy bien que mis padres no me dejan salir de noche.
—Pero ayer dijiste que tus padres se irían a la casa de tu abuela.
—Y ya se fueron pero-
—Pero nada, Chae, por favor, nunca hemos tenido la oportunidad de ir a una fiesta en grande —Cierto— y quiero ir al menos una vez antes de graduarme. Y tú eres mi bro, tienes que acompañarme.
—Solo estarán los nerds que vemos a diario en la escuela, aparentando ser "cool".
—No lo creo...
—¿Por qué? Espera, ¿dónde será la fiesta?
—Bueno... —Carraspeó— Es en la casa de Jackson-
—¡No, ni loca! ¡Ni sueñes que asistiré a una fiesta del equipo de fútbol!
—Pero...
—Pero nada ¡No, no y no! Además todos en la escuela han tratado mal a Mina, no puedo ni quiero estar en el mismo lugar que ellos y ni hablar de BamBam y sus amigos.
—No tienes que saludarlos ni mucho menos hacerles charla.
Desvié mis ojos a mi izquierda con el ceño fruncido.
—Hazlo por nosotras —Suspiró—. Falta poco para que nos graduemos y quiero que salgamos a divertirnos, bailar un rato, hacer locuras una vez en nuestras vidas. Quiero que en el futuro, cuando seamos unas viejas aburridas, recordemos que nuestra adolescencia no se basó únicamente en ser las bufonas sin suerte de la escuela que bailaron "ardillas por doquier" frente a todos en quinto grado, por perder una apuesta con las de sexto. El par de "ñoñas" a las que siempre encerraban en sus casilleros o le quitaban sus almuerzos, entre otras "bromas" de muy mal gusto, y que se unieron al Consejo Estudiantil para obtener sobresaliente en sus expedientes y ganar algo de respeto —El tiempo sí que pasó muy rápido—. Quiero llevarme un recuerdo loco y realmente divertido de mi paso por el instituto y sé que en el fondo tú también. Quiero sentirme genial por una noche y quiero que sea junto a mi bro. Te banqué en muchas, Chaeyoung, y no me arrepiento de nada porque eres mi mejor amiga. Solo te pido esto.
Rayos.
—Joder, si lo dices así cómo puedo negarme.
—¡Siiiiii! —Se veía muy emocionada.
—¿Y a qué hora se supone que iremos?
—Primero le avisaré a Joy y a Somi y luego te confirmo.
—Está bien —¡Qué!—. ¿Dijiste Somi? ¿E-ella también irá? —Carajo.
—Pues para saber eso mismo es que voy a llamarla? ¿Por?
—Por nada.
No le dije a Dahyun que Somi me había declarado su... amor. Joder. Y aún no he logrado aclarar las cosas con ella. Joder x2.
—Te enviaré un mesaje después así que no apagues tu teléfono.
—Ok.
Tras cortar la videollamada me puse de costado en mi cama, y mirando la linda imagen de Mina en mi celular no sé en qué momento me quedé dormida.
Al cabo de no sé cuantas horas me desperté y ya era de noche. Chequeé mi celular y tenía un mensaje de Dahyun que decía que vendrían a buscarme alrededor de las diez.
En serio no quería ir pero Dahyun en parte tenía razón y supuse que no estaría del todo mal salir un rato.
Con pereza me levanté de mi cama y fuí a ducharme.
No tenía idea de qué tipo de fiesta sería, pero el el solo recordar aquella fiesta de Kai me daban ganas de fingir estar enferma para no ir. Esa fiesta sí que me traumó si es que acaso se le podía llamar así, pero lo bueno es que en esta ocasión solo me quedaría un rato y procuraría regresar a casa antes de la medianoche.
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