Narra Chaeyoung.

Llegué a mi casa con la cabeza hecha un lío.

No quería pensar en nada.

En nada.

EN NADA.

Me encontraba entre un estado de shock y un estado de zombie.

—¿Chaeyoung? ¿Eres tú? —Escuché a mi madre justo cuando subí al primer escalón de la escalera que me guiaba a mi güarida.

—S-sí mamá. Ya llegué —Pasé a la sala y vi a mis padres viendo televisión.

—¿A dónde fuiste?

—A-a casa de Dahyun —Mentí rascándome la nuca.

—Saliste tan apurada que nos preocupamos —dijo papá.

—Eh, sí, es que... me avisó que tiene un nuevo videojuego.

—Ya veo. Chaeyoung, iremos a la casa de unos amigos. ¿Quieres ir con nosotros?

—Prefiero quedarme. Estoy algo cansada y quiero acostarme.

—Está bien.

Me di vuelta y reanudé mi camino hacia mi escondite.

Cuando entré a mi cuarto, me oculté bajo las sábanas. No tenía sueño pero quería dormir.
Prendí mi teléfono y tenía mensajes de Dahyun.

Dahyun.
Chaeyoung!
¿Ya llegaste a tu casa?
17:02

Dahyun.
Avisa cuando llegues.
Quiero saber los detalles :3
17:40

Dahyun.
Te recuerdo la reunión de mañana.
18:32

Dahyun.
Chaeyoung, ¿vives?
Quiero los chismes de tu cita.
CHISMES, CHISMES, CHISMES >:D
18:39

Cita.

Cita.

Cita.

¡Cita!

¡¡¡¡Cita!!!!

¡Ahhhhhhhhhh!

JODEEEEEEEEEEEEEER.

¡CiTa!

¡MiNa!

¡¡¡Mi primer beso!!!

¡¡¡¿En qué diablos estaba pensando cuando dejé que pasara?!!!

Y encima huí como una rata.

Sí, le había dicho que mis padres me esperaban y me fui corriendo, bueno, en la bici.
Esto era un desastre, ¿qué diablos haría ahora?

No quería pero solo podía pensar en ese beso, estaba grabado en mi mente. Y el beso automáticamente me llevaba a pensar en Mina.

Beso.

Mina.

Beso.

Mina.

Beso.

Mina.

Sus mejillas rojas.

Solo le daba vueltas al asunto, horas, una y otra vez hasta que recordé que, antes de que me fuera de su casa, dijo que me llamaría.

Pensé en apagar mi celular pero, mientras batallaba conmigo misma en si hacerlo o no, recibí otro mensaje. Era ella.

Carajo.

Tragué en seco.

Me desconecté del wi-fi para que no quedara marcado el visto del mensaje y lo abrí.

Mi preciosa novia🐧
Buenas noches Chaengie ❤.
Duerme bien. Sueña con los angelitos, mi baby tiger ❤❤❤.
22:48

¿Ah?

Joder.

Mina.

Mi primer beso no debía ser así. Entonces, ¿por qué se sintió tan bien? ¿Por qué no la alejé? ¿Esto tenía algún sentido?

Ugh.

Apagué la pantalla del teléfono y con mi cerebro revuelto, me propuse dormir.

Cuando desperté ya era domingo. Joder, no quería que llegase el lunes.
A duras penas me levanté y me aseé. Bajé a la cocina y les dije a mis padres que volvería más tarde.

No tenía ganas de nada. Caminé lento y sin ánimos.
Cuando llegué a la casa de Dahyun, Somi ya estaba ahí, la saludé pero ni me miró.
El asunto fue rápido. Conversamos e hicimos una lista de los elementos que necesitaríamos para el campamento, nos pusimos de acuerdo de quién llevaría qué cosa para ese día. Faltaba poco más de una semana y ya estaba dudando de si ir o no.

Honestamente mi mente estuvo en las nubes la mayor parte del tiempo. Sí noté que Somi estaba más callada, con el ceño casi fruncido. Solo se dirigía a Dahyun cuando quería decir algo, no me miraba y se limitaba a responder con un "sí", "no" y "no sé" cada vez que yo le hacía una pregunta.
Era obvio, estaba molesta conmigo y yo no tenía idea del por qué.

No fuimos al cine como lo habíamos planeado, Somi dijo que tenía cosas que hacer y se fue. Tampoco me miró cuando se despidió.

¿Ahora qué hice?

En fin, ni  bien nos quedamos a solas, salió a flote el espíritu chusma de Dahyun.

—¡Ya, cuenta, cuenta, cuenta, cuenta!

—¿Qué cosa? —Me tumbé desanimadamente en la cama. No quería hablar del tema.

—¿Cómo "qué cosa"?  La cita, cuenta, ¿qué tal? ¿La llevaste a Burger King?

—No, a McDonald's, me gustan más las hamburguesas de allá —Además sabía que Myoui esparaba otro tipo de lugar donde comer.

—Jaja, seguro la sorprendiste.

—Así es, ¿esa era la consigna, no?  Dijo que la sorprendiera.

—¿Y a dónde más la llevaste?

—A la pista de skate y bicis. Hubo competencia —No me lo iba a perder.

—Jajaja, eso lo hiciste pensando en ti —Asentí—. Ayer estuve esperando tu llamada para que me contaras lo divertido pero fui timada. Incluso hice palomitas pero nada.

—Me puse a ver la tele con mis padres cuando llegué. Luego me dormí.

—Bueno pero cuenta, ¿qué más pasó?

—Ehm, nada más. Eso fue todo.

—¿En serio?

—S-sí... —Joder, no sabía si decírselo o no. Se reirá, mejor no— Fue muy aburrido.

—Pues la verdad sí —Se lo creyó, uf—. ¡A propósito! Chaeyoung, ayer acompañé a mi madre al centro comercial y adivina a quién me encontré.

—¿A tu mamá?

—No.

—Es que siempre dices que la pierdes de vista y luego te cuesta volver a encontrarla.

—Sí pero esta vez no —Me miró esperando que le dijera algún nombre pero me encongí de hombros—. A Jimin.

—¿Qué?

—Sí, mientras mi madre esperaba que la atendieran, hablé con él y lo terminé de convencer para que conquiste a Mina.

Joder. Me había olvidado de ese chico.

Luego de la vez que hablamos del ese "plan", Dahyun habló con el tal Jimin en la escuela. Tras un par de charlas más, él admitió su interés por Mina. Dijo que le gustaba desde hace dos años pero que nunca se animó a hablarle por su carácter y porque en ese tiempo era novia de BamBam, y ahora la mía. Claro, él no estaba al tanto de que Dahyun era mi amiga sino no hubiese abierto el pico.

—¿Chaeyoung?

—Eh, sí, te escucho.

—Bien, me dijo que a partir de mañana intentará hablarle y cortejarla —¿Qué?—. Tal vez le llevará flores y chocolates, y-

—Espera —Me quedé en pausa.

—¿Qué pasa?

—E-es que...

—No me digas que te arrepentiste.

—Bueno, verás...

—Yo no entender Chaeyoung, dijiste que querías "deshacerte de Mina" y eso es lo que sucederá si se enamora de Jimin. Se irá con él, se harán novios, se besarán, borrará el video, etc., y te dajará "en paz", como siempre quisiste.

¡¡¡UN MOMENTO!!!

¿S-se be-besarán?

¡¡¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!

NO.

Le he dado mi primer beso a Mina. Si ella llegara a besar a alguien más...
Se sentirá extraño.

Eso no se sentirá bien.

—Definitivamente no. Debemos parar con este plan, Dahyun.

—No entiendo tus cambios de parecer.

—Solo para con esto.

—Ya hablé con Jimin, lo alenté y le deseé suerte. ¿Qué se supone que le diga ahora?  Además... Un momento, ¿qué está sucediendo?

—¿A-a qué te refieres?

—Ahh, como lo sospeché, algo pasó ayer y no me lo quieres decir.

—Eh, y-yo, pues... —Carajo. Valiendo barrigas como siempre.

—Vamos, habla.

—Creo que ya se hizo tarde, mejor me voy-

—Mmm... Tengo razón, algo sucedió. Desembucha —Se acercó más y me miró espectante.

—Bueno pero promete que no te reirás.

—Lo prometo.

—No te creo —Pero ni un poquito.

—Eres mai best fren Chae, no me reiré de ti —Sí, claro.

—Está bien. El asunto es que ayer, luego de ir a McDonald's, fuimos a su casa y...

—¿Y...?

—Y... nosdimosunbeso —Resoplé—. Ella me besó.

—...

—¿Dahyun?

—WOOOOOOOOOOOW —Increíble. Su expresión pasó de una de cara de póker a una de emoji hipercontenta.

—¿A dónde vas? —Abrió su armario y sacó una bandera que llevaba escrito... Ay no, está loca, ¿"MiChaeng"?— ¿Cuándo hiciste eso? —La miré incrédula.

—Hace un tiempo. Siempre las he shippeado.

—Sí, ya me lo dijiste antes. ¿Aun así se te ocurrió ese plan?  Eres rara.

—Solo quería ayudarte con lo del chantaje y pos eso. Pero ya, cuenta, ¿cómo fue?, ¿te gustó?, ¿fue un beso como en las películas?, ¿qué más hicieron, eh? —Esa mirada sugerente me asustó.

—Solo fue un besito y ya, quita esa cara de pervertida. Ya es hora de volver a mi casa, ahí te ves —Me levanté y caminé hacia la puerta.

—Espera. Si ya no quieres, entonces dejaremos el plan de lado y Jimin pues... ojalá no le vaya bien con Mina.

—Nos vemos mañana.

Salí de su casa y me encaminé a la mía. En unos minutos llegué y volví a "esconderme" en mi habitación.
Aún no me sentía con valor de ver a mis padres, no después de haber besado a una chica. Me pondría nerviosa y lo notarían.

Me pasé el resto del día estudiando y leyendo historietas para distraerme, ah y comiendo chocolates. Sí bajé a cenar pero enseguida regresé. Activé la alarma y me dormí hablando con la almohada.

Al día siguiente traté de fingir estar enferma para faltar a clases pero obviamente no me creyeron. Realmente no sabía qué le diría a Mina cuando nos viéramos.

Hasta hace un año nuestra relación era mucho más clara y simple que ahora; ella me hacía bullying todos los días y yo la detestaba con todo mi ser. Luego empezó a decir que yo le gustaba y para mí era sumamente insoportable.
Pero ahora todo era distinto. Ella me besó y yo se lo permití.

El tacto de sus labios... quedó tatuado en los míos desde ese instante.

Ella fue, es y será mi primer beso para siempre.

¿Eso era bueno o malo? 

Tomé una buena ducha y me alisté. Agarré mi mochila y luego de desayunar y unos mimos de mi madre, me dirigí hacia el instituto.

¿Cuántas probabilidaes había de que Mina no fuera a la escuela?

Bueno, mejor me callo.

Caminé despacio para hacer tiempo y llegar puntual, pero me encontré con Dahyun y me llevó a rastras. Cuando llegamos dijo que iría al baño mientras yo iba por mis libros, así que minuciosamente me escabullí por los pasillos hasta llegar a los casilleros.
Creí que como Myoui solía llegar antes que yo, ya estaría en el salón. Pero no.

La vi apoyada en su casillero hablando y riéndo con sus amigas. El solo verla me devolvía al momento del beso. Rayos.

Intenté mantener la calma. Fingí que no la vi y fui a mi casillero. Abrí la pequeña puerta y busqué mi libro de matemática, cómo odiaba esa materia.

—Chaengie... —Sentí un susurro en mi oído y me sobresalté.

—¿Q-qué, qué demonios? —Volteé y el rostro de Mina estaba a solo unos centímetros del mío— ¿Qué-qué crees que haces? —Me alejé de inmediato.

—Te estaba esperando.

Joder.

Su sonrisa boba solo hacía que me fuera imposible verla a los ojos.

—Quiero que hablemos, Chaeyoung —¡Ay noo! ¡Quiere hablar del beso!

—De-debemos ir a clases —Me apresuré en sacar mi libro y cerré mi casillero.

—Pero... —Justo sonó la campana. Gracias God— Es cierto, ya deberíamos estar en el salón —Me tomó del brazo y empezamos a caminar.

Quería apartarla y al mismo tiempo... no lo sé. Había algo en su tacto, algo que me ponía nerviosa.

Entramos al salón justo después del profesor y nos sentamos en nuestros respectivos lugares.
El maestro explicó unas ecuaciones y copió unas actividades en el pizarrón.
Las hice todas pero aún me faltaba hacer los gráficos. Me di vuelta para pedirle ayuda a Dahyun y la muy nerd ya había terminado.

—¿Cómo le haces?

—¿Qué cosa?

—Eres una nerd.

—No lo soy, es solo que tú prestas suficiente atención en clase. ¿Ya terminaste?

—No, ¿me ayudas con los gráficos?

—Está bien, déjame chequear tus resultados —Le alcancé mi cuaderno y me dió el ok. Mientras me explicaba me esforcé por escuchar, pero un par de ojos no me dejaban concentrarme. Miré rápidamente hacia el fondo y vi a Mina sonriéndome. Joder. Traté de ignorarla y seguí con mi tarea.

—Chaeyoung —Dahyun me llamó y me dió una nota— Mmm... Tórtolas —Rió ¿Ehh?

Desdoblé el pedazo de hoja y la leí : "Querida Chaeyoung, te traje algo para el receso. Te gustará. De Mina"

Aish.

Agarré mi lápiz y escribí debajo de lo que ella puso: "Estás loca."

Se la devolví a Dahyun para que la volviera a pasar y un minuto después me llamó otra vez. Me dió el mismo papelito y lo leí: "Loca por ti boo ;) ."

Volteé a verla y estaba sonriendo con la vista en su cuaderno. Já. Ya no le respondí y creí que todo había acabado ahí pero siguió enviándome notas durante el resto de la clase.
Cuando tocaron el timbre del recreo, guardé mis cosas como rayo y salí corriendo.

Me sentía muy acobardada para hablar del... beso. ¿Qué se supone que le diría? 
"Myoui, en realidad, solo me dejé llevar por la emoción de mi primera cita". No podía decirle eso porque ¡ni siquiera yo lo sabía!

Para mi mala suerte no llegué muy lejos. Apenas crucé unos metros de la puerta, Sana y Mark me sujetaron de los brazos. Maldición.

—¡Suéltenme!

—¿A dónde vas con tanta prisa, Son? —Jodido Mark.

—¡Idiotas! —¡Mamá!

—Jaja... Casi se te escapa, Mina.

¿Ah?

¡Ay noo!

Me soltaron y quedé frente a Mina. ¡Aish!

—¿Por qué corres, Chaeyoung? —No podía mirarla a los ojos, no porque le tuviera miedo sino porque me inundaban los nervios.

Su mirada... la de aquella vez... Sus mejillas enrojecidas... y sus labios...
Esa imagen estaba clavada en mi mente y no podía borrarla.

¡Necesito agitar mi cabeza para acomodar mi cerebro!

—E-es que... ¿quiero ir al baño?

—No es cierto, no sabes mentir.

—M-Mina... —Tragué en seco.

—Ven tigresito —Tomó mi mano y empezó a caminar.

—¿A dónde me llevas? —Auxilio— E-El recreo acabará pronto y debo ir a mi siguiente clase.

—Tenemos veinte minutos —¡Por eso mismo!

Llegamos a las escaleras y frenó de golpe. Antes de que pudiera formular palabra alguna, me abrazó. Diablos.

—M-Mina... —Me siento gelatina.

—No tienes idea de cuánto he pensado en ti desde el sábado —¿Eh?—. En ti y en nuestro... beso —Escuché su risita y cerré los ojos al recordar aquella la sensación—. ¿Tú pensaste en mí?

—Yo... Te dije que fue mi primer beso, cómo no iba a pensar en ello.

—Lo sé tigresito, y no sabes cuánto me alegra saberlo —Sin soltarme me miró a los ojos y vi que sus mejillas estaban nuevamente rojas. Dios. Mi mente estaba en blanco—. Chaengie, me siento feliz de haber sido tu primera cita y tu primer beso —Sonreí por dentro—. Quiero ser todas tus primeras veces —Khe ¿Policía?

—¿Q-qué...?

¿Qué clase de tensión era esta?

—Me gustó mucho besarte, Chaengie —Se acercó más a mi rostro y sentí mis nervios a flor de piel. Ay mamá.

—M-Mi-Mina... —Temblé.

Sentí su respiración tan cerca de mí que creí que volvería a besarme.

Pero no. Justo oímos las voces y risas de otros estudiantes que pasaron por allí. Salí de mi trance y me alejé disimuladamente.

—Mejor sentémonos.

—¿E-en las escaleras?

—Sí. Te traje galletas, les puse chocolate como te gusta —Aproveché que abrió su mochila y la miré. Sentí un leve ardor en mi cara. No pude evitar recordar ese momento otra vez—. Ten —Me acercó una galleta cuadrada y la tomé. Le di un mordisco y le faltaba azúcar.

Este silencio me incomodaba.

—Ehm... ¿Y mi cajita feliz? — Tenía que preguntarlo.

—En mi casa. Mañana te la traeré.

—Bueno. Ehh, ¿viste qué personaje tocó?

—Chewbacca. Pero se le salió la cabeza. Intenté pegársela pero no dió resultado.

—Aish.

—Chaeyoung.

—¿Q-qué?

—¿Te gustó el beso?

—¿P-Po-por qué quieres saber eso?

—¿Por qué nunca respondes directamente?

—¿A qué te refieres?

—¿Lo ves?  Jaja.

—¿Qué cosa?

—Sí te gustó —Sonrió y comió una galleta. Qué arrogancia la de Francia.

—Les falta azúcar.

—¿Qué?  No es cierto. Están perfectas y te encantan —Rió.

—Admito que el chocolate está rico.

Esto era... muy extraño. Era la primera vez que manteníamos una conversación sin discutir en la escuela. Vaya.

¿Acaso será el fin del mundo y no me enteré?

Luego de que el timbre volviera a sonar fui a mi siguiente clase. Ciencias.
Mientras caminaba por los pasillos me tildé varias veces pensando en Mina, en el beso y en mí.

De verdad, era más fácil aborrecerla que otra cosa pero si de verdad estaba cambiando, debía empezar a tratarla diferente.

Pasé al aula y vi a Somi.

Creo que es un buen momento para aclarar las cosas con ella.

—Hola Somi —Me senté a su lado pero volvió a ignorarme—. ¿Somi?

—Hola —respondió seria sin dejar de ver su libro.

—Ehm... podemos hablar —Creí que se negaría pero me miró con dudas y asintió. Uf—. ¿Estás enojada conmigo?

—No estoy enojada sino... confundida.

—¿Puedo saber por qué?

—Chaeyoung.

—¿Huh?

—¿Por qué no me dijiste que la chica más popular del instituto es tu novia?

—¿Quién? —Mina, idiota— Oh. Ella...

—No lo entiendo. He visto a sus amigas molestar a los demás y ella no debe ser diferente —Carajo.

—¿Te hicieron algo?

—A mí, no y no sé si debo estar agradecida —Por supuesto que no—. Es que no lo entiendo, ¿cómo puedes estar con alguien así?  Tú misma me advertiste de ellas aquella vez en en almuerzo y ahora resulta que eres novia de una.

—Mina... Ella ya no hace eso.

—¿Cómo lo sabes?  He hablado con otras compañeras y me contaron cosas muy malas sobre ella. Y no hablo solo del bullying, Chaeyoung.

—Somi-

—Tú eres tan amable, linda e inocente, te mereces a aguien mucho mejor. Sé que es tu vida pero me siento algo decepcionada.

¿Decepción?

—¿Ya no quieres ser mi amiga?

—Me gusta ser tu amiga pero... no quiero estar cerca de alguien así, y no hablo de ti.

—Ellas no te harán nada Somi.

—Dime, ¿alguna vez te ha hablado de mí, se ha quejado o ha sentido celos de mí? —Siempre. Joder.

—Bueno... Sí, pero-

—Lo sabía. Tal vez para ti sea normal —¿Qué?— pero ella es una persona tóxica y desagradable para mí y para muchos.

—Somi...

—Suerte Chaeyoung —Fue lo último que dijo antes de retomar su lectura.

No supe qué más decirle. De todos modos, ya no querría escucharme. Entendí que Somi me quería lejos de ella, así que busqué otro lugar en el fondo del salón.

Somi tenía razón. ¿Cómo defender lo indefendible?  No tenía argumentos para refutarla.  Yo misma fui víctima de Mina y si nunca pude hacer más amigos en el pasado, fue precisamente por ella.

Debería odiarla y desearle lo peor pero yo no odio a nadie.

Y ahora creo que siento cierta... ¿atracción hacia ella?

Rayos.