
𝐹𝑖𝑛𝑎𝑙
Nadie había accedido a ayudarme porque decían que no se podían meter en los negocios de los demás pero ¡Esto no era un estúpido negocio!, Corrí hasta donde los había dejado rogando porque todo estuviera bien
—Pará Rivers, esto es estúpido.— escuché que exclamó Carre —Baja el arma.—
—No quiero, debo acabar con lo que papá inició.— dijo
Salí de mi escondite para acercarme a los dos argentinos, todos me vieron asombrados
—¿Qué haces aquí?.— preguntó Rivers bajando el arma y escondiendola detrás de su espalda —Pensé que seguías bailando.—
—No es necesario que escondas eso.— dije intentando acercarme pero Spreen tomó mi mano para que me alejara, sabía que me quería proteger
—Este no es asunto tuyo.— habló Rivers
—Le apuntabas a mi novio y a mi amigo, creo que sí es asunto mío.— peleé
—No quiero hacerte daño a tí, vuelve adentro.— pidió y negué —Eres mi hermanita.—
—Mi única familia siempre fué papá, tú me mentiste.— dije
Rivers volvió a sacar el arma pero esta vez sin apuntar a nadie
—Lo único que intenté todo este tiempo fué protegerte, al principio no quería saber de ti, después me dí cuenta que quería formar parte de tu vida.— dijo —Pero tuvo que llegar Spreen para arruinar la relación que estábamos creando.—
—Él no arruinó nada.— hablé —Todo lo que pasó fué culpa de papá, sus mentiras nos trajeron hasta aquí.—
—Papá no hizo más que intentar cuidarte, eras su princesa, incluso te dejó todo.— peleó Rivers —No es justo que le pagues saliendo con su asesino.—
—Quizas nunca pueda convencerte de que Spreen no tuvo la culpa.— murmuré —Pero puedes intentar conocerlo, no es malo, podemos ser la familia que siempre quisiste que fuéramos.—
—No los quiero a ellos cerca de nuestras vidas.— condicionó y la miré mal —Ni quiero que vendas las acciones de papá.—
Miré de reojo tanto a Spreen como a Carre, sus rostros expresaban algo de pánico y nerviosismo, quizás yo estaba tan tranquila porque sabía que no me haría nada
—No estoy negociando contigo.— reí un poco —Si quieres estar en mi vida tendrás que aceptar a mi novio y a mi amigo, además las acciones las venderé para invertirlas en algo legal dónde también puedes trabajar.—
Rivers asintío y suspiró resignada, sabía que talvez la había convencido
—Ahora ven y dame el arma.— pedí mientras veía como ella se acercaba
Toda esta etapa podía estar apunto de terminar, si ellos solucionaban sus asuntos talvez podíamos formar un gran equipo, podría tener a la familia que siempre habría querido
De repente Rivers rápidamente apuntó de nuevo con la pistola a Spreen y disparó, quizás había sido su poca experiencia con un arma o talvez fué el hecho de que yo estaba muy cerca de él pero de un momento a otro sentí el impacto, un gran ardor en mi pecho y caí
—¡_____!.— el grito de Spreen paralizó todo a mi alrededor, el ador se hacía cada vez más fuerte y el dolor era tanto que no sentía la mayoría de mi cuerpo
—Llamaré a una ambulancia.— exclamó Carre rápidamente y sentí como Spreen se tiraba al piso para acariciar mi mejilla
—Todo va a estar bien flaca, pensá en todos nuestros planes.— dijo empezando a llorar sobre mí
Debía aferrarme a la vida, se supone que hoy terminaría la etapa relacionada a papá y empezaría una nueva etapa con Spreen, nuestra empresa, nuestra relación, todo lo que tenía que ver con los dos
—Rita se fué.— escuché la voz de Charly pero no podía ni siquiera girar mi cabeza para verlo —Frank y Peter están moviendo sus contactos para traer el mejor servicio médico, demuestra que eres fuerte niña.—
Mi mirada simplemente estaba enfocada en Spreen, seguía llorando a unos pocos metros con sus manos llenas de mi sangre, había intentado parar mi hemorragia apretando la herida
—Perdóname.— rogó Spreen quitando algunos mechones de cabello que estorbaban en mi rostro —No debí salir a hablar con ella.—
Tomé todas las fuerzas que me quedaban para levantar mi mano y limpiar las lágrimas que seguían cayendo de sus hermosos ojos
—Nada de esto es tu culpa.— mi voz era cada vez más débil
—No hables hasta que llegue la ayuda.— pidió y sonreí un poco —¿Cómo podés sonreír en este momento?.—
—Conseguí mi pequeña venganza, estás sufriendo.— me burlé sintiendo un infierno dentro de mí
No sabía cuánto más podría aguantar, empezaba a sentir mis ojos pesados pero mi fuerza de voluntad era mayor, no podía darme por vencida ahora.
Spreen sonrió entre lágrimas y besó cortamente mi frente mientras acariciaba mi cabello
—La ayuda viene para acá.— escuché en el fondo a Carre —Vendrá la ambulancia que la llevará al hospital más cercano donde estarán los doctores de Frank esperándola.—
—¿Por qué nos están ayudando?.— preguntó Spreen sin entender y yo tampoco lo sabía —Ellos no son de ayudar a nadie.—
—Armando era nuestro amigo, no dejaremos que le pase nada a su hija.— respondió Charly —No medimos el peligro de aquella chica y fué nuestro error venir cuando ya era tarde.—
Inconscientemente mis ojos empezaban a cerrarse poco a poco
—No te duermas.— pidió Spreen llorando —No me dejes.—
Aunque lo intentara ya no podía más, todo se volvió negro y durante un segundo aparecieron por mi cabeza recuerdos de todo lo que había vivido con aquellos argentinos. Durante todo este tiempo había pensado en la horrible muerte de papá sin imaginar que acabaría como él
Spreen me había enseñado tantas cosas, más allá de amar y todas esas cursilerías, me hizo sentir libre, me hizo entender que para planear algo era necesario saber todos los detalles, me dió un propósito y me ayudó a soñar en grande.
Empecé a planear algo para arruinarlo sin saber que todo saldría totalmente opuesto, me había enamorado como una loca y él se había convertido en la persona en la que más confiaba pero ahora estaba a punto de perderlo todo dulce.. dulce.. ¿Venganza?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro