Heeseung tiró de la mano de Jay al notar la extraña actitud de Jake, era... algo similar a los celos de Seorim cada vez que paseaban por la playa, la ciudad, ¡e incluso su propio departamento! Eso era algo escalofriante.

Oh, no. ¿Qué es lo que él estaba pensando? ¡Era una completa locura! Y por supuesto que él lo sabía, pero prefería culpar a su cerebro tan curioso por saber cada mínimo detalle que ocurría a su alrededor antes que creerle a su algo interior que solía enviar señales cuando las cosas estaban tomando un camino completamente distinto al inicial.

Heeseung mordió su labio inferior al sentir la firme mirada de Jake sobre su nuca, podía sentir cómo atravesaba su mente hasta dejar un profundo agujero, privándolo de todo pensamiento coherente en ese momento. Era extraño. ¿Debía irse? ¿Debía quedarse? Él sólo necesitaba una señal. Lamentablemente, Jay parecía no notar los curiosos ojos de Jake puestos en él, ¿o es que acaso estaba ignorándolo? Dios, estaba más que claro el hecho de que Yeonjun quería estar a solas con él, pero aún no podía distinguir el ambiente que comenzaba a formarse entre ellos. Se sentía tenso. Sofocante.

Era realmente extraño. A Heeseung no le gustaba eso.

¿Acaso él estaba siendo el mal tercio?

Se supone que él y Jake eran amigos... o al menos es lo que él suponía, después de todo, no es como ellos fuesen completos extraños y Heeseung creía tener la suficiente confianza y comodidad con él como para llamarlo su amigo, no debería haber nada extraño en eso.

Excepto que Jake parecía no querer hacer ni el más mínimo intento por ocultar su evidente atracción hacia Jay. ¿Por qué no simplemente le decía que quería estar a solas con él? Heeseung lo entendería completamente, y no quisiera interrumpir ni arruinar uno de sus ligues, después de todo, él estaba enfocado únicamente en recuperar a Seorim, es más, si Jake no llegaba a enamorarse de él, entonces que lo hiciera de Jay, mientras se mantuviese lejos de su adoraba novia todo estaría bien. Él sólo era un chico desesperado por salvar su relación y a la chica que amaba.

Todo estaría bien mientras Seorim aún tuviese ojos únicamente para él, incluso si era una vil mentira.

Heeseung sólo quería sentir que ella aún lo amaba, que seguía siendo su chico especial, aquel que alegraba sus días y el que despertaba con ella entre sus brazos, aquel que tenía la suerte de poder sacar lo mejor de Seorim, aquel que lograba poner ese brillo tan especial en sus ojos. El único que hiciese sus ojos brillar de amor.

Heeseung sólo quería seguir siendo el único para Seorim, y haría lo que fuese por conseguirlo, aunque su corazón fuese el que saliese más lastimado con todo eso.

Él iba a conseguirlo sea como sea.

—¿Hablaste con Seorim? —preguntó Jungwon, bebiendo un sorbo de su taza de café.

—Aún no lo he hecho.

Jungwon hizo una mueca y frunció el ceño.

—Deberías hacerlo, Seung. —él negó apresuradamente. —No es sano esto que estás haciendo, saldrás lastimado y arrepentido cuando la situación se salga de control.

Sonó más duro de lo que pretendía, pero alguien debía hacerle entender.

—Pues... pues, ¡eso no va a pasar! —Jungwon sorbió nuevamente de su taza, completamente seguro de que pasaría. —Seorim aún me ama... ella, ella sólo está confundida, en el fondo debe saber que aún soy yo a quien verdaderamente ama, no a ese... ese chico.

Jungwon frunció aún más el ceño, comenzando a molestarse.

—Deberías aceptar que ella ya no lo hace, Seung.

—No. —insistió él, sabiendo que, en el fondo, Jungwon tenía razón. —Eso podría cambiar, sólo, sólo necesito un poco más de tiempo y todo volverá a ser como antes. Yo... —con sus ojos inundados de lágrimas, insistió una vez más. —Haré que seamos lo que siempre fuimos, lo prometo.

—No prometas nada, sabes que esta vez no será de esa forma.

Y Heeseung no supo qué responder ante eso, comenzando a formar dos puños con sus manos por debajo del suéter que traía puesto. Parecía que haría una rabieta en cualquier momento, tal cual un niño pequeño queriendo conservar ese juguete al que tanto amor le tenía, sin embargo, antes de poder hacerlo, su teléfono vibró, anunciando un nuevo mensaje.

Con emoción, se levantó para alcanzarlo y ver de quién se trataba, esperando que fuese Seorim, mas su emoción desapareció un poco al ver que sólo se trataba de Jake.

Ese maldito idiota.

Jake Shim.

Hey, Seung!
20:46

Hey, Jake, ¿qué tal todo?
20:46

Oh, estoy excelente, pero quería preguntarte algo, si no te molesta, claro
20:47

Por supuesto, puedes preguntar lo que sea
20:47

Genial, entonces, ah... ¿Tienes el número de Jay?
20:47

Heeseung realmente pensó en qué responder ante eso.

Por supuesto que tenía su número, pero algo le impedía decir un simple "Sí, ¿lo quieres?", y eso le jodía en sobremanera. Era tan simple como decirlo, entonces, ¿por qué no podía hacerlo?

Jake Shim.

¿Seung...?
20:50

Ah, lo siento, Jungwon me llamó un momento
20:50

¿Jungwon?
20:50

Es un amigo, algún día te lo presentaré
20:51

Uh, claro. Entonces, ¿tienes su número? :)
20:51

Ah, sobre eso... Jay cambió su número y no tengo el nuevo, pero se lo pediré en cuanto nos veamos!
20:52

Oh, gracias, Seung, te debo una ;)
20:52

Esa había sido la mayor mentira que había hecho en el día, y no tenía ni la menor idea del por qué lo había hecho. ¿Qué estaba mal con él? ¿Acaso temía que su plan fallase? Seguramente debía ser eso, porque, por supuesto que él quería asegurarse de que todo saliese a la perfección, tal cual había planeado desde un principio, pero entonces, ¿por qué se sentía tan incorrecto? ¿Cómo pasó de no querer arruinar el posible ligue de Jake a querer ser él su próximo ligue? Debía ser sólo su mente hablando como un perfeccionista asegurándose de que todo estuviese bien.

Sí, eso debía ser.

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Último capítulo publicado en la obra original, una vez actualicen les subiré el próximo capítulo <3