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« SEÑORES BLACK—EVANS »



















































14 FEBRERO DE 1979

Suspiro una última vez antes de mirarse al espejo. No creia lo que veia, era muy difícil pensar que ella, estaba ahi, con un vestido blanco.

Después de pensarlo mucho, ambos decidieron realizar la boda en el dia de los enamorados, el 14 de febrero y seria mas fácil para que Sirius jamas olvidarse su aniversario de bodas.

Hasley llevaba un vestido muy sencillo pero elegante. A ella le empezaron a gustar los vestidos con tiras delgadas, por lo que su vestido tenia tiras delgadas pero con flores de color dorado en ellas y perlas en el medio de la flor, la parte del pecho era recto pero tenia un pin de oro de una flor y en la parte de abajo era liso pero tenia el vorde con pequeños diamantes.

Hasley amaba su vestido de novia. Que claramente, Sirius habia pagado.

Su madre y su hermana terminaron de pienarla y darle un pequeño maquillaje. La mayor de las mellizas volteo a ver a su familia con una sonrisa.

Liliana agarró el rostro de su hija, sus ojos estaban lloroso, como no, si su pequeña guerrera se iba a casar con el amor de su vida.

- Mi niña valiente. - hablo la mayor en forma tierna. - Dejaras de ser una niña para ahora ser una mujer.

- Tanto que te quejabas diciendo que Petunia se caso joven, ahora tu lo haces. - Dijo Lily. - Perdiste la apuesta, Has.

Hasley solto una risa, ambas mellizas habian apostado la que se casé primero iba a escoger el nombre del segundo hijo de ambas, si es que llegaban a tener claro.

Hasley espera con todas sus ganas que sea así.

- Ni le digas a Potter - señalo Hasley a su hermana.

- Lo prometo por el meñique.

Ambas hermanas juntaron sus meñiques en forma de promesa, sabia que era su forma de un juramento que nunca iban a romper.

Liliana sonrio mientras escuchaba a sus hijas hablar, ella no tenía favoritas pero sin duda sus pequeñas pelirrojas eran su luz, ellas le sacaban risas, regaños, llantos pero eran sus pequeñas, verlas crecer y hacer su vida era difícil, pensar que ambas estaban en su vientre, darles luz, estar ahi en sus primeros pasos, sus primeras palabras y ahora estar a su lado en el dia de su boda, le ponía muy sentimental.

Lily fue la primera en ver a su mamá que estaba llorando. Y Hasley fue la primera en acercase.

- Mami. - hablaron ambas.

Liliana abrazo a ambas sin arruinar eo vestidos de novia y de dama de honor.

- No puedo creer que mi pequeña Lila esta punto de casarse y mi Rose se case en dos semanas. - La mayor hablo con voz entrecortada. - Se que su padre hubiera hecho un escándalo pero estaría llorando.

Ambas menores rien. Imaginaban a su padre llendo a darle un sermon a sus prometidos de como tratar a sus hijas.

La mayor se separo y limpio las lágrimas de sus hijas, por suerte la Mckinnon les enseñó un hechizo a ambas para que el maquillaje fuera antiagua.

Algo que Liliana no quiso mencionar ese dia era de la presencia de Lucas Parkinson. Su pequeño hijo, que no era de sangre pero lo habia criado como un hijo. Ella extrañaba mucho a Derek Lucas Parkinson.

La puerta se abrio y Marlene asomó su cabeza por la puerta. - Primero que todo, te vez muy hermosa, divinamente, pero ahora ya no puedo decirte que eres mi esposa pero podemos ser amantes.

Liliana solto una risa, Lily ladeo la cabeza y arreglo el vestido de su hermana.

- Tia Ana. - Dijo Marlene acercándose a ellas. - Hay tres personas afuera que piden ver a Hasley. - Liliana alzo su ceja. - son tres pelinegros con un humor de mierda...

- ¡Marlene! - Regaño la mayor.

- ¡Lo siento! - La rubia señalo a la novia - Ella dice mas groserias que yo.

- ¡Es mi dia!

- ¿Y? Estoy sensible, este dia es como si fuera nuestro divorcio.

- ¡Maly apulate! - grito Viktor desde el otro lado de la habitación.

Las pelirrojas rieron y se retiraron con Marlene dejando pasar a los chicos.

Héctor llevaba un traje todo negro, hasta la corbata. Regulus a diferencia del mayor llevaba la camisa blanca y la corbata de color verde. Viktor llevaba un pequeño traje con su camisa roja, este último tenia una caja mediana en sus manos.

El pequeño abrio su boca sorprendido, igual que Héctor, solo Regulus lo miraba de forma tierna.

- Pa, Lila se ve como una pincesa - hablo el pequeño jalando del pantalón a su padre.

- Es princesa - corrigió Regulus.

Viktor le saco la lengua y se acerco a su tia para entregarle la caja. La pelirroja se agacho para recibir la caja.

- ¿Que es?

- Es un regalo de los tres. - Hablo Héctor.

Viktor levanto la mano. - Yo elegí la pieda y combina con tus ojos tita.

Hasley abrio la caha dejando ver una pequeña tiara, estaba adorno por pequeños rubis y un gran diamante esmeralda en el centro. La pelirroja no tenia palabras.

- Es una tiara digna de una Black. Capaz mis padres me deshereden por darte a ti, pero creo que lo mereces mas que nadie. - Dijo el Black menor.

- Reg... no tenias porque..

- Hiciste muchas cosas por mi, Hasley. Cosas que ni yo tuve el atrevimiento de hacer, y casarte con mi hermano es una cosa realmente riesgosa.

Viktor miro mal al mayor. - Eles malo tio.

- Cuando crezcas le entenderás.

Viktor alzo los hombros y dijo que mejor iria con su tio canuto.

- No entiendo como llego a quererlo. - hablo Héctor. - ¿Que le ven?

Ella movio sus manos para levantar su mirada y ver a los chicos. - ¿Él va a venir?

Héctor bajo la mirada y nego.

- Mackenzie no me dejo entrar a la casa. - Hablo Regulus. - Y peor cuando le dije que venia a ver a Lucas.

Ella solo asintio, hubiera deseado que él estuviera ahi. Aunque sea para decirle que estaba por cometer su peor locura. Después de todo fue su mejor amigo.

El sonido de una campana hizo que la pelirroja mirara a Hector. Ella le entrego la tiara, él con mucho cuidado la puso en su cabeza.

- Ahora si te vez como una princesa.

- Como la bella y la bestia. - Suspiro Regulus. - Te veo afuera. - sonrio para retirarse.

Héctor miro con una sonrisa a Hasley, pero ella pudo leer su expresión por sus ojos.

- ¿Estás llorando?

- No. Soy alergico a los perro. Tu olor a canuto me da alergia.

Hasley sonrio y abrazo fuerte al mayor.

- ¿Puedes llevarme?

- Ese seria el último momento donde dejaras de ser mi hermanita para ser una mujer. - Suspiró y se alajo un poco de la Evans. - Claro que si.





















El patio de aquella mansion estaba decorado con lirios lilas y un pequeño camino donde dejarian pasar a la novia. Al lado habia sillas y una carpilla al final de camino.

Ese patio de mansión en medio de un campo ya tenian dueños, Los Black–Evans.

El mismo dia que Sirius le pidió matrimonio a Hasley, fue el mismo dia donde le habia contado que él habia comprado aquel campo y que mandarian hacer una casa. Hasley se imagino una casa como la que tenia ella, pero estaba equivocada, Sirius hizo prácticamente una mansión, tenia tres pisos, en cada piso habia un salon grande y los cuartos eran tamaño de la una o dos salas comunes. Después de todo Sirius nunca dejaria de ser un Black si tenia dinero.

Los merodeadores estaban en la capilla, Sirius y como padrino a James Potter. Sirius se acomoda una vez más su corbata.

- ¡Deja de hacer eso! - Murmuro James. - Me volveras loco.

- ¿Y si dice que no?

- Ella te quire. - Hablo Peter.

- ¿Y si no es suficiente?

- Ella te ama - Hablo Regulus llegando junto a Remus. - Es más que suficiente.

Sirius le regalo una sonrisa. Al menos su hermano y su prima Andromeda estaban aqui.

- Tienes razón, eso es mas que suficiente. - Suspiro y acomodo su corbata una última vez, se peino y sacudio su cuerpo. - Estoy listo.

Sirius se encaminó con James detras para esperar a que la novia haga su entrada.

- Ellos realmente se aman. - Hablo Remus.

- Si - Asintio Regulus y le dio una mirada a Peter que estaba detras de su amigo Lupin.

- Ire a buscar sitio. - hablo retirandose.

- Pettigrew no me da buena espina. - Dijo Regulus una vez Peter se retiro.

- Él a sido asi siempre, es el mas calmado del grupo.

- No me fio de el, Lupin. Ustedes tampoco deberían.

Desde de decir se retiro para sentarse al lado de la mama Evans y Viktor.

Las puertas de la mansión fueron abierta, las personas se levantaron, algunas daban miradas de ternura, otros lloraban —Solo James y Marlen— y algunos solo sonreían.

Hasley iba del brazo con Héctor, el mayor la agarraba fuerte como si evitará que no de ese gran paso.

Sirius tenia los ojos brillantes y una gran sonrisa, él hace años se habia planteado del porqué no le pediria ser su novia, no era porque no le quería ya que eso era lo mas hacia, sino porque el no quería decir que era su novia, ya que antes de Hasley hubieron dos, el quería decir con orgullo que Hasley Evans era su esposa. Su mujer, la chica que comparte su vida.

Ambos ex-galkins detuvieron sus pasos al quedar al final. Héctor volteo delicadamente para ver la cara de la pelirroja.

- Obicham te lila - Hablo Héctor en búlgaro. “Te amo Lila”

- I az oshte, bratko - Respondió Hasley en el mismo idioma “Y yo mas, hermano”.

Evans solto la mano del Krum para agarrar la de Sirius.

- Te entrego en nombre de Eduardo Evans. - Hablo Héctor hacia Sirius.

El novio asintió y ayudo a la Evans a quedar frente a frente a él.

- Hoy estamos reunidos aqui para unir a esta dos personas; Hasley Lila Evans y Sirius Orion Black. - Hablo el ministro de magia. - Sirius Orion Black ¿Tienes tus votos listo?

El pelinegro asintio.

- Mi Lila, desde que conocí el dia en aquel tren con tus tatuajes raros y tus insultos, me dije ¿Quien es ella?, al principio planeaba que cayeras en mis encantos - Hasley solto una risa. - Pero terminó siendo al revés, yo me aventé. Recuerdo todo exactamente desde que nos conocimos, tu frustración cuando no podias realizar una simple pocion, tus ojos brillantes cuando estabas con Lily, cuando James y tú compiten al ver quien es mejor en el Quidditch.

- Y sigo siendo yo. - Hablo James.

- Mentiloso - Hablo Viktor - Tio Reg es mejo que tú. - Regulus sonrió orgulloso y le revolvió el cabello al Krum

Remus le puso una mano en el hombro del Potter porque si seguia capaz Sirius nunca acabaría de dar sus votos.

- Como decia. Me enamoré por cada de esos pequeños detalles. Y mi plan al parecer a funcionado, te conquistaria, harias que me ames, y como te dije si estas cansada yo seré tu muro donde puedas sostenerte. Pero ahora para toda nuestra vida amor.

Hasley tenia ganas de llorar de amor. Él ministro se limpio las lágrimas y con su mano dio una señal para que ella hablara.

- Hasley Lila Evans, tus votos.

- Bueno, no prepare mis votos la verdad. - Admitio Hasley. - Pero cuando te conocí creí que era un tonto, aun lo sigues siendo. - Las personas rieron - Una persona me preguntó como me llegué a enamorar de ti. En todo este tiempo no lo plantee, yo nunca olaneaba enamorarme, pero creo que me di cuenta al momento que tu intentaste  entrar en mi vida, jamas en mi vida deje que alguien entre como si nada, pero tú entraste como si fuera tu hogar. Y quiero que sepas que estoy muy agradecida, porque ahora no se como viviria sin tu amor.

Las personas que se encontraban ahi aplaudieron.

- Después de decir todo. Si alguien se opone a esta boda que levante la mano.

Marlene y Héctor trataron levantar la mano pero Dorcas detuvo a su novia y Liliana a Héctor.

- ¿Sirius Orion Black, aceptas a Hasley Lila Evans como tu esposa, en las buenas y las malas, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte los separé?

Viktor se levantó y le entregó el anillo a Sirius. Para luego esperar el momento de Hasley y volver a su sitio.

- Aceptó - puso en anillo.

- ¿Hasley Lila Evans, aceptas a Sirius Orion Black, como tu esposo, en las buenas y las malas, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte los separé?

Viktor le entrego el anillo a su tia.

- Si. - con mucho cuidado le puso el anillo en el dedo.

- No me queda mas que decir que..

Antes que termine el ministro Sirius agarro las mejillas de la Evans y le dio un profundo beso, sellando su amor para siempre.

— Un aplauso para los señores Black-Evans.












Hasley terminó de bailar con Sirius para depues poner su cabeza sobre su pecho.

- Ya estoy cansada - Hablo Lila.

- Y yo queria bailar contigo, Hasley. - Dijo Regulus detras de ellos.

La pelirroja se volteo y le sonrió. - Pues entonces tú serás mi último baile. - Dijo ella.

- Que no se caiga. - le dijo Sirius a su hermano, dejo un beso en la coronilla de su esposa. - Estaré donde Mamá Liliana.

El nuevo señor Black se retiro. La señora Black se volteo a ver a su cuñado.

- Nunca entendí porque Sirius es tan asi contigo. Eres como si fueras lo mas preciado del mundo para él.

- ¿Si te digo que lo entederas cuando halles a la indicada me creerias?

- No. Pero ya estoy comprometido.

Hasley nego con la cabeza, nunca imagino ver a Regulus comprometído, sabia que él quería algo como su hermano y Hasley.

- Hallaras a la indicada. Solo avisame cuando te quieras divorciar, ahora ya tengo poder. - señalo la tiara de las mujeres Black.

Regulus se separo un poco para darle media vuelta y voler a poner su mano en su cintura.

- Tengo algo que decirte.

- Por favor no me digas que embarazadaste a alguien.

- ¿Porque piensas eso?

- La ultima vez que me dijeron eso, el pequeño Viktor vino al mundo - alzo los hombros. - Asi que por tu tono puedo decir que es algo serio.

- Si. - Regulus se aseguró que ningunl de los merodeadores no esten cerca y se acero un poco al oido de Hasley. - ¿No has notado a Pettigrew raro? ¿Sospechoso? ¿Distanciado?

Hasley asintió, no solo hoy o ayer lo notaba asi desde hace unos meses.

- Si.

- Igual, se que es su amigo, el de Sirius y Lily pero, creo que tiene que ver con quien-tu-sabes.

- ¿Lo viste en esas reuniones?

- No, pero tengo mis sospechas. Eso paso con Mack... Macmillan. Se alejo y... Ella es otra persona Hasley, la última vez que la vi nos dijimos cosas que prefiero olvidar toda nuestra amistad que tenia con ella.

- ¿No la vez? Pero me dijiste que fuiste a su casa.

- Si, pero ni bien salio y me dijo que que no, preferí irme.

- Osea que no lo ves. - Dijo Hasley.

- No. Nose nada de él, lo siento.

Hasley le puso una mano en su mejilla. - Esta bien. Lo mantendre vigilado.

- ¿Confias en lo que digo?

- Es tu palabra contra la nada. Te creo y creenme que me doy cuenta, Sirius cree que no pasa nada, pero una vez que se vayan todos esta casa será olcultada ante todos, solo mi familia lo vera. Y tu estas incluido.

- Ten mucho cuidado Hasley.

- Siempre lo hago. Ahora soy una Black.

- Vendre a verte.

- Espero que si, Reg. Esta también es tu casa.









¡AHHHHHH! *Gritito en Black–Evans* VIVAN LOS ESPOSOS.

Lo admito, si lloré.

Regulus sospecha de la rata... digo de Peter.

Me caen mal los Peter. Menos Peter Parker.

Lila es una digna Black. Silencio. Es todo y punto.

Ya pero ¿Listo para la Boda de Lily?

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