Pude notar como los alfileres que salían de los ojos de James acababan en nosotros, yo seguía sosteniendo el billete enrollado mirando la bandeja como una idiota

-Acabamos de llegar a la casa, James. -dijo Myles con bufido limpiándose su nariz

-Jericho, nos vamos. -su voz dura y persistente

-Pero... yo todavía no he terminado de nada. -dije anonadada

-¿No has terminado de metertela? Que pena, vamos.

Todavía no me había mirado desde que había analizado lo que estaba pasando en la habitación

Toda su apariencia se volvió oscura, estaba siendo borde sin ningún motivo aparente, ¿Que le importaba a él que estuviera haciendo o lo que estuviera a punto de hacer?

-Bueno, relájate tío, nos vamos a otro lado nosotros dos y ya está.

-Dijiste que no solías hacer eso. -señaló a la bandeja

Sus ojos siguen fijados en Myles, no sabría si tomarlo como una pelea de machitos o una pelea de protección, no tenía sentido ninguno de las dos opciones.

-Y tú dijiste que solo nos llamaríamos y juntaríamos si pasara algo.

-No, no lo dije. -su mandíbula se levantó amenazante al deletrear el 'no lo dije'

-Ni yo que no lo volvería a hacer.

Ambas miradas furiosas se juntaron, parecía que estaba a punto de desatar la tercera guerra mundial.

A veces las miradas tenían su propio lenguaje, pero la conversación que estábamos teniendo mentalmente era espectacular, él quería hacerme saber su descontento, al hacer lo que estaba haciendo, yo le estaba mostrando mi poca indiferencia hacia lo que estaba pasando y eso, eso le quemaba.

-Ya bueno, de todos modos nos vamos ya así que, despídete de tu amigo.

-Yo aún no me voy, me he tomado una pastilla hace unas horas estoy en mi po..

-Me da igual, nos vamos.

¿Qué? ¿No había terminado de hablar y me está ordenando que me fuera?

-Sigo hablando. -Moví las manos para que me pueda ver mejor, por si no lo había hecho ya- Como he dicho estoy en toda mi burbu...

Paré de hablar cuando vi a Chace entrar por la puerta.

-James tío ¿dónde estabas? Llevamos tiempo intentando buscarte.

Oficialmente mi corazón había dejado de latir por unos instantes. Hacía años que no lo veía, exactamente desde que decidió dejarme por teléfono.

Ninguna despedida, ningún beso, ninguna razón, ninguna conversación aparte, solo un "tenemos que dejarlo, no podemos seguir así." En parte tenía razón, no era nada sano, pero lo pudo haber hecho mejor, pero es tan calzonazos que ni lo pensó

Las supuestas mariposas ya estaban podridas dentro de mi estómago pero aún seguía con ellas dentro de mí.

Todo empezó a darme vueltas, tenía a los tres chicos con su atención puesta en mí, Myles perdido, James todavía no había quitado sus claros ojos avellana de mí, y Chace estaba tan blanco que parecía que estaba muerto ¿Y yo?

Siempre fiel a mi fea costumbre, Huir.

Pasé por delante sin decir ni una palabra, caminé con intención de desparecer entre la tierra

-Rino, ¿estás bien?

-No te atrevas a dirigirme la palabra -saqué mi dedo amenazante caminando hacia él con lágrimas en los ojos- Ni una puta palabra.

Chace levantó sus manos al mismo tiempo que James puso su mano en mí para alejarme de él lo más rápido que puede.

-¿Os conocéis?

Confuso miró hacia mí y después a él, pareció darse cuenta de la situación y aparté sus manos de mí.

Llegué al baño dando un portazo y miré al espejo para intentar calmarme. La sensación de impotencia, rabia, odio, cariño, asco, son unas cuantas de las cosas que estaba sintiendo en ese momento.

¿Que cojones acababa de pasar?

James

Fue tan fuerte el portazo que todos saltamos un poco al oírlo, me sentía fatal al haber sido tan borde con ella por un tema que hasta yo hacía, ella parecía dura y fuerte... realmente lo es, pero su dulce rostro y sus grandes ojos azules brillantes hacían que todo fuera más complicado, ella se podía cuidar a sí misma, ¿Por qué razón me empeñaba en que no?

Caminé por la habitación intentando saber que hacer o qué decir, Bennett acaba sentado en la cama donde estaba cuando he entrado mientras que Chace estaba furioso en la puerta con sus atléticos brazos cruzados

-¿Alguien me explica que acaba de pasar? -dijo Bennett con un suspiro

-¿Y tú quién eres? -respondió Chace

-¿Y quién eres tú para ella? -añadió Myles a la incógnita

-Fui algo que tú nunca serás. -respondió orgulloso

Solté un bufido junto a una carcajada, Chace entrecerró los ojos y me observó sin decir nada

-¿Un ex? No gracias, es algo de lo que nunca querría ser, cambiado por alguien.

-Ya te gustaría a ti estar con ella-Chace se acercó a Myles- o dentro de ella.

-Hmm... Yo todavía no sé, pero-subió una mano y se guardó todos los dedos menos los dos primeros haciendo el famoso movimiento- ellos dos te lo pueden decir.

A veces hasta yo tengo poca Fe en los hombres.

Chace se dirigió hacia Bennett vacilante a punto de pegarse, me metí por en medio e intenté parar la pelea, pelea en la que quizá me meta por lo que iba a soltar.

Con mi mano en el pecho de Chace lo llevé para atrás

-Tú algo habrás hecho para que ella te hable y se vaya de esa manera, lo último que tienes que hacer es pegarte con el que posiblemente sea su amigo de Interés.

Me giré dirigiéndome a Myles

-Y tu, tu deberías de haberte callado la puta boca al decir cosas como la que acabas de decir, nunca se dice lo que has hecho con personas en la intimidad, eso es de ser un hijo de puta.

Me había interpuesto en medio de ellos

-Así que ahora, por favor -miré a Chace-Largo.

Myles se encogió de hombros y se marchó enfurecido resoplando, Chace en cambio me sigue leyendo la mirada

-¿Te la estás tirando o algo? -se rascó la barba

-¿Perdona?

-Si, no sé, pregunto, somos amigos, ya sabes.

-¿Ya sé el qué? -estaba siendo un sinsentido

-El código de amigos ya sabes, no se debe de romper- un silencio bastante incómodo en la sala- pero que yo te doy permiso, ella es realmente buena.

Chace nunca tuvo dos dedos de frente, pero esperaba que fuera más espabilado

-¿Permiso? ¿Buena? ¿Me explicas? -me acerqué a él

-Si tío, Bandera verde, toda tuya, yo estuve con ella por una especie de pacto con mis padres, pero todo se vino abaj...

-¿Te he pedido la puta historia de tu vida? -estaba cabreado.

-Solo te digo que ella está loca hermano, está realmente loca, tiene problemas, necesita un psicólogo urgente pero nunca quiso.

Me guardé las manos en mis bolsillos de los pantalones de vestir, esperando a tranquilizarme para no darle un guantazo con la mano abierta, ¿como puede hablar así de ella?

-Su estabilidad emocional te hará caer, lo único que tenía bueno era su sexo. -se rio a carcajadas

Seguí el rollo con una risa mientras le decía lo buena que había sido su estúpida broma y cuando me quise dar cuenta, cogí impulso y le di un puñetazo con toda la fuerza que podía coger, del impulso que había dado me incliné para adelante y él del choque acaba yendo muchos pasos más para atrás, no era consciente de lo fuerte que le había dado hasta que vi un poco de sangre saliendo reciente de su labio

-¿James que cojones!? -dijo tocándose el labio

-Si hubieras sido un buen ex, pareja o persona con ella, primero, no sé habría ido a llorar al verte, segundo, todas esas palabras que tú sueltas ya me hacen ver el tipo de persona que eres, un cabrón. Y en mi vida el único cabrón que vaya a existir voy a ser yo, y créeme que esa chica no merece nada del trato que estoy viendo que le has dado.

Se acercó a mi cara, amenazante

-Y a ti que coño te importa como haya sido con ella? - sus ojos estaban llenos de furia y curiosidad

-Ella está pasando por mucha mierda, no necesita otra que atender -dije sin tacto y decidido- así que ahora por favor, Vete.

Jericho

Puto Chace, puto James, putos todos.

Mientras estaba en el baño resguardada intentando no pensar en que había visto a Chace y James había interrumpido mi momento con Myles, un extraño llanto salió de la puerta.

-¿Quien está ahí?

Sin respuesta.

-Oye -una voz femenina sobándose los mocos- ¿hay papel por ahí?

Busqué papel por el baño, abrí unos armarios y en un rincon había papel, agarré un rollo y di tres toques a la puerta

-Si hay. ¿Te lo paso por debajo de la puerta?

Abrió la puerta y me topé con una chica de a lo mejor 1,55 de altura, pelo de un color rojo rosado claro, ojos marrones verdosos y llevaba un pijama de unicornio azul, era bastante mona.

-Que adorable. -dije sonriendo

-Ja, gracias! Sabía que alguien le iba a gustar.

-¿A ti te gusta?

-Muchísimo, es muy precioso ¿no crees?

-Entonces es lo que cuenta. -dije con mi sonrisa más sincera

Me sonrió sincera, yo la devuelvo el gesto, di la vuelta para mirarme al espejo, pero la miré de nuevo y me presenté

-Soy Jericho, Encantada.

-Erika, Mucho gusto. -se limpió las lágrimas de los ojos mientras sonreía

-Sea lo que sea que te esté haciendo estar así, no dejes que gane.

Me miró sorprendida y me sacó una sonrisa tímida mientras me asentía y salía por la puerta, me quedé sola en el baño y eso me ponía nerviosa

Pensé en el mini bar que había a la salida de la fiesta y en los diez chupitos que me voy a pinflar en cuanto salga de aquí.

Me miré, me limpié la cara junto con el poco maquillaje que se me ha corrido y me animé yo sola a salir con orgullo y sin que me importara todo una puta mierda, abrí la puerta y cuando miré hacia delante estaba James esperándome a unos metros de la puerta, dándome el espacio que necesito ahora mismo.
Podría decir que su mirada es de preocupación, pero no tendría sentido, no nos conocemos tanto, pero bueno, tampoco tiene sentido que yo ahora esté en su casa hasta que papá vuelva.

-Si quieres que nos vayamos nos iremos, pero solo te pido estar 20 minutos más hasta que me baje un poco lo que he consumido. -miré al suelo y después a James- por favor.

-Por supuesto.

Nos pusimos en camino del minibar sin rastro de Myles o de Chace, y por dios que siguiera así por qué podría descuartizarlo aquí mismo y quedarme tan pancha, miré a todos lados por qué masoca de mí.

Buscando siempre mis putos demonios.

Mi mirada ahora fue a mi mano que James está agarrando, le miré confundida y él me regaló una de sus sonrisas matadoras, dándome a entender de que él está ahí conmigo, le solté la mano y puse mis manos en la barra, miré a James para que hablara el primero y pida lo que vaya a querer.

-Un chupito de Jack Daniel's por favor.

Me miró esperando a que dijera algo.

-Pon una botella mejor.

-Dios mío -dijo un tanto asustado e irónico mirando hacia arriba mientras lo dice

Sonreí y me giré para ver el público y la gente que había alrededor, esperando a encontrar ese maldito rostro

-Hay que disfrutar James, no hemos venido a una rave a beber agua.

-Llamaré a Terry para que venga a buscarnos -dijo sacando el móvil

La camarera pone nuestra botella y vasos encima de la barra

-No responde, y mi representante tampoco.

Nos serví un chupito y yo me bebí el mío a trago

-No te preocupes, yo conduzco. -dije buscando entre la multitud

-¿A quién buscas? -preguntó sin mirarme bebiéndose su chupito de golpe

-A nadie. ¿por qué? -Me había pillado

-Si buscas al tío que quería meterse Farlopa contigo se fue cuando entraste al baño, y si buscas a tu ex creo que se fue con una tía rubia, decía que se aburría.

Auch, por los dos lados.

-Estoy buscando a una chica con un traje de unicornio que estaba antes en el baño, solo eso. -mentí a más no poder.

-A saber, el terreno es grande. -me observó callado durante unos segundos- Oye, siento lo que ha pasado ahí dentro.

Bebí mi chupito a trago y me llevé la botella conmigo para dirigirnos al coche.

-Olvídalo.

---ꕥ𝙉𝙤𝙩𝙖 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙖𝙪𝙩𝙤𝙧𝙖ꕥ---

Bueno, Chace ya apareció, innecesario pero lo hizo. Todos odiamos a Chace🪤

¿Cuál fue su primera impresión de Chace?

No olviden sus comentarios y sus votos ♥