Joe veía escondido desde un armario como golpeaban y pateaban a su amigo Paulie
-¿No eras tan valiente?-
-Ay, que lindo, quiere proteger a su amigo-
-¿Te gusta que te golpeemos? ¿Eh?-decían los niños mientras golpeaban fuertemente a Paulie hasta dejarlo lleno de sangre y apenas podía moverse.
-Ah, que divertido, que divertido-
-¿Qué te pasa? ¿Te gusta? ¿Quieres más? ¡Levántate!-Joe estaba asustado al ver como le pegaban a su amigo y no poder hacer nada, cerró la puerta del armario para ya no ver y solo podía esperar a que ellos se fueran, así estuvo 10 minutos hasta que la puerta se abrió.

-¿Joe? ¿Qué haces aquí? te estuve buscando en todas partes, ya es nuestra hora de leer y dibujar- Dijo Emily confundida al encontrar a su amigo así, se veía muy indefenso y asustado, ella sabía que algo no estaba bien -¿Qué tienes? Esos idiotas te hicieron algo ¿No?- Ella sabía que a menudo unos chicos mayores molestaban a Joe y su amigo, pero ella no podía hacer nada ya que esos chicos la superaban en fuerza y tamaño, sin embargo le dolía ver a su amigo así, solo se limitó a abrazarlo.

-No pude hacer nada, soy un cobarde- dijo sin mirar a su amiga -ahora por mi culpa lo lastimaron- dijo Joe con la voz entre cortada y queriendo soltar unas lagrimas

-tranquilo ¿si? aquí estoy para ti, el estará bien, ya verás que se pondrá bien en unos días- Dijo Emily intentando animarlo ya que se veía muy afectado por lo que paso -vayamos a la cafetería a que comas algo y después vemos tal está Paulie, ¿okey?- A Emily también le asustaban los niños pero le afectaba más ver a Joe de esa manera asi que tomó a Joe de la mano para salir del lugar, ella no estaba segura de lo que sentía por Joe, pero tenía ese pequeño instinto maternal de protegerlo.

Mientras salían de aquel lugar Joe noto como 2 de los chicos que golpearon a su amigo iban caminando a su dirección, jaló a Emily rápidamente para esconderse detrás de un muro, Emily no tenía ni idea de que pasaba pero Joe se asomaba a ver si ya se habían ido.

-¿Qué haces Joe?¿De quién nos escondemos?-Dijo Emily susurrando con una voz confusa

-SHHH, cállate Emily- Dijo Joe también susurrando y tapando la boca de su amiga, no era normal que el le hablara asi a su amiga, el siempre era respetuoso pero esta vez parecía diferente. Joe espiaba a uno de esos niños, tenía toda la intención de tirarlo por las escaleras pero Emily lo sacó de sus pensamientos.

-¿Por qué me hablas asi? ¿Qué intentas hacer?- Emily noto como la enfermera Fiona los miraba a ambos, la enfermera sabía las intenciones de Joe asi que sin decir nada se limitó a mirarlos de lejos, cuando Emily se dio cuenta jalo a Joe para que supiera que estaban siendo observados.

Joe no le gustaba decepcionar a la enfermera Fiona, asi que en cuanto lo noto volvió a agarrar la mano de Emily y comenzó a correr, jalándola, asi ambos corrieron hasta la cafetería. Ambos estaban cansados y tomaron un poco de aire antes de hablar.

-¿Qué fue eso? tu mirada.... Joe tú querías tirarlo por las escaleras ¿cierto?- Dijo con la voz entrecortada -Por eso corrimos-

-me acobarde al ultimo minuto, si quería hacerlo... Emily, lo siento tanto, no quiero ser como ellos- Joe se sentía apenado por que su amiga casi lo hubiera visto hacer algo malo

-Joe, no dejes que te intimiden, siempre que estes apuntó de hacer algo impulsivo puedes decirme y no te  juzgar lo haces, por que eres mi mejor amigo y nunca le dire a nadie, si fuera para protegerte también lo hubiera empujado, me preocupó por ti ¿si?- Emily intentaba empatizar con Joe para que no se sintiera culpable, después de esto solo se recargó en su hombro y dijo.

-Ambos nos cuidaremos ¿si? hoy en la noche vayamos al tejado, asi podremos hablar tranquilos mientras vemos las estrellas- Emily solía ir sola ahí cuando se sentía triste, era la primera vez que invitaba a alguien a acompañarla, quizá era muy simple pero era algo muy especial para ella.

-Esta bien, gracias por estar siempre para mi Emily, llevaré algunos libros de terror para que note asustes- Joe se sentía afortunado por tenerla y que entendiera lo que estaba pasando.

Caída la noche Emily estaba emocionada, sentía que sería el día perfecto para compartir sus sentimientos con Joe, aunque estaba un poco confusa de si en verdad le gustaba Joe y ella sabía del amor platónico que tenía el por la enfermera, tenía una pequeña esperanza de que Joe pudiera corresponder, aunque apenas eran unos niños podía ser ese amor inocente de la infancia.

Robó un poco de comida de la cafetería, trajo unas mantas, unas almohadas y una linterna, todo estaba bien y ya era el momento en el que Joe tenía que llegar, pero simplemente no llegaba, Emily espero así 20 minutos hasta que se dispuso a buscarlo.

Hasta que encontró a Joe sentado en las escaleras algo triste, escribiendo algo en una pequeña libreta, pero cuando quería hablarle noto como la enfermera Fiona se acercaba y se sentaba frente a él, se escondió detrás de una pared y se limitó a escuchar.

-Tú amigo Paulie ya está mejor, creí que querías saberlo...- dijo ella mirándolo aunque Joe aunque el seguía viendo la libreta -Si te hubieras desquitado con ese abusivo yo no te habría delatado, es lo que se merece- A Joe le extrañaban esas palabras viniendo de ella, así que la miro confundido.

-Creo que me acobarde...- respondió Joe apenado

-Si, porque no eres como el, yo sé que se siente que te molesten... lo lamento, no es justo- dijo para después acariciar el pelo de Joe -Nosotros nos cuidaremos ¿Hecho?-

-Hecho- respondió Joe con una sonrisa

Emily quedó algo triste al escuchar eso, sentía unos extraños celos al verlos hablar, sentía que la enfermera Fiona era una mala influencia para Joe y eso tenía que cambiar, quería protegerlo de ella, Joe jamás llegó esa noche.