Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

veintidos

Me sentía bastante mal por haber extraviado aquel broche sin siquiera saber que lo traía en la maleta

—Necesito recostarme.— dije, mi esposo me miró preocupado —Estoy cansada por el vuelo, no te preocupes por favor.—

—Te acompaño, igual llamaré al médico, supongo que aún no tienes tus resultados.— habló tomando mi mano

—No quiero que nuestra relación vuelva a basarse en mi enfermedad.— me quejé un poco —Déjame hacer eso sola.—

—No hay que discutir de nuevo sobre eso.— dijo y lo miré sin entender a lo que se refería —Deja de pensar que puedes enfrentar todo sola, ya no estás sola, estamos casados y no sé por qué eso no te queda claro.—

¿Me veía mal queriéndolo dejar fuera de todo esto? Sabía que estaba siendo egoísta, pero lo hacía porque lo amaba más que a mi vida

—Necesito descansar.— volví a decir, estaba temerosa de que el dolor aumentara —Hablemos de esto después, pero no llames al doctor.—

—Si lo llamaré.— se cruzó de brazos —Acabas de regresar de un viaje, me gustaría tener la certeza de que sigues bien.—

—Estoy bien.— aseguré aunque no sabía si estaba mintiendo

—Si estuvieras bien no tratarías de evitar que llame al doctor.— exclamó —Si te sintieras bien incluso dejarías que el doctor te revise para dejarme tranquilo.—

Tenía bastante razón, incluso me sorprendía que fuera tan analítico en esta ocasión. Lo miré directamente a los ojos, se veía triste

—Deja de pensar que no solo te duele a ti.— pidió —Te amo y pensar que hay algo dentro de ti que te hace sentir incómoda me pone mal, yo soy tu esposo, por favor mírame, estoy aquí y jamás me iré.—

El pequeño dolor que sentía empezaba a agravarse

—Sé que estás conmigo.— aclaré —Pero no te necesito involucrar en esto, no quiero arruinarte con esto.—

—Ese es el problema contigo, parece que no me escuchas.— discutió —Por favor Mulán, entiéndeme así como intento entenderte a ti.—

—Pareciera que no me quieres entender.— discutí

Me miró durante un momento y simplemente negó

—Ve a acostarte o a hacer lo que necesites, no te diré nada más.— murmuró —Y antes de que te hagas ideas; no estoy molesto contigo, pienso que necesitas pensar mejor las cosas antes de seguir con esta plática.—

Decidí hacerle caso y me alejé, caminé directamente a la habitación, dejé algunas cosas en mi pequeña mesa de noche, noté que Mushu entró detrás de mí

—Mushu, vete con tu papá, quiero estar sola.— pedí mientras me recostaba en la cama

Cerré mis ojos hasta que sentí el peso de aquel perro caer sobre mí, parecía no entender que ya no pesaba poquito

—Quítate.— pedí moviéndolo, pero se aferraba a estar sobre mí —Mushu, quítate.—

No me dejó otra opción más que empujarlo, escuché que se cayó de la cama así que me senté de inmediato

—Perdón.— exclamé viendo como se iba de la habitación

No debía dejar que las emociones me controlaran en estos momentos, aunque era obvio que me sentía frustrada

Había perdido mi broche, la situación con Roier era complicada cuando metía el tema de mi salud y sobre todo el dolor se había vuelto constante

—¿Qué le hiciste a nuestro hijo?.— entró Roier y me miró

—Lo empujé fuerte.— admití y se sentó a mi lado

—Pídele una disculpa.— dijo

—Ya lo hice.— aclaré

El ambiente se convirtió en algo bastante incómodo, odiaba esto

—Acabo de regresar de mi viaje, hemos estado lejos algunos días.— murmuré —¿Puedes simplemente recostarte a mi lado y decirme que estaremos bien?.—

—Haré lo que quieras, pero por favor, primero sé honesta conmigo.— pidió y simplemente lo miré —¿Realmente estás bien?.—

Solté un suspiro, no podría seguir atrasando esto

—Me duele el pecho desde hace días.— conté sintiendo que mi voz temblaba

—¿Y no quieres ir al doctor?.— preguntó y negué rápidamente —¿Por qué?.—

—Siento que me dirán una mala noticia y prefiero ser feliz mientras tanto.— dije y bajé la mirada —Tenemos un buen matrimonio, ¿por qué tengo que arruinarlo con una posible recaída?.—

—No lo arruinaste ni podrás arruinarlo.— dijo tomando mis manos —No sé como hacerte entender que no eres una carga.—

Sin siquiera analizar lo que acababa de escuchar sentí que mis ojos se llenaron de lágrimas

—Quiero estar sana, es lo único que deseo.— lloré dejando salir todo lo que tenía —Solo quiero poder vivir contigo y no darte tantos dolores de cabeza.—

Estiró un poco su mano para limpiar las lágrimas de mi mejilla

—Te lo diré las veces que sean necesarias, no eres un dolor de cabeza. — aseguró, sentí que su voz temblaba

—Sé que me lo quieres dejar claro, pero es complicado para mí procesarlo.— dije sin poder dejar de llorar —Cuando pasó todo lo de mi operación tenía miedo de dejarte solo, ahora ese miedo se multiplicó.—

—Tu preocupación por mí te hace estar peor.— dijo —Necesito que dejes de pensar en mí, concéntrate en ti y en tu salud.—

Roier me estaba pidiendo que fuera egoísta con él y eso aún no estaba en mis planes

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro