
𝗢𝗢𝟲. 𝖽𝖺𝗆𝗇 𝗌𝗆𝗂𝗅𝖾
─ CAPÍTULO ─
SEIS
❛MALDITA SONRISA❜
• • •
Sentada en el sillón de la casa leyendo un libro sobre el Kekkei Genkkai mientras comía un litro de helado de nuez, mi favorito.
──¡¿QUÉ DIABLOS HACES AHÍ SENTADA, KATA?! ─escuche el gritó de mi hermano quien estaba estaba solo en una toalla.
Se preguntaran, ¿por qué esta tan nervioso y grita por todo? Y bueno es porque hoy es el dia de una boda. Y yo en lugar de estar bañada y arreglada estoy en mi pijama comiendo helado. Y siendo honesta no se porque se altera tanto por una simple boda.
──Estoy comiendo y leyendo, ¿acaso no lo ves? ─bajo su atenta mirada lleve mi cuchara llena de helado a mi boca. ──. ¿Hay algún problema, hermano? ─a este le comenzó a dar un tic en el ojo.
──¿Problema? Dices que si hay algún problema. ─soltó una risa tan falsa como él intentando ocultar sus nervios. ──. ¡Claro que si hay problemas! ¡No te has bañado y ni arreglado!
──Tu tampoco. ¿O es que iras en toalla? ─su cara se comenzó a poner roja del coraje. ──. Relájate, hermano. Nadie va a morir. Es solo una boda.
──¿Acaso sabes de quien es la boda? ─preguntó cruzando sus brazos.
──Ni idea. ─dije honesta comiendo mi helado.
──¡ES MIA! ─gritó mientras comía de mi helado, mi mente iba procesando sus palabras.
──Tuya... ─fue entonces que mi cabeza hizo click. ──. ¡Oh por el Dios Shinobi! ¡Hoy te casas, Minato! ¡¿Qué carajos haces en toalla?! ¡Ve y bañate no quiero ver miserias!
──¡Oye! ─se ofendió.
──¡Oh vamos, hermano! Nuestros genes son una mierda, tan solo mírame. Estoy más plana que una tabla de planchar. ─dije sin mucha importancia.
──Pero estas en pleno crecimiento, puedes tener esperanzas.
──¿Así como las tuyas? ─pregunté alzando una ceja.
──Si... nunca esperes mucho. ─yo solo rodé mis ojos yendo a mi habitación.
━━ • • • ━━
──No puedo hacerlo... ─rodé mis ojos por quinta vez al escuchar a mi hermano decir lo mismo una y otra vez. ──. Pero si quiero hacerlo. ¿Pero y si no me ama? ¿Y si se da cuenta de lo feo que soy?
──¡Fue suficiente! ─le di una cachetada que sonó por toda la habitación. ──. Minato es tu boda. Sí lo es, es porqué ella te acepto a ti y a mi por lo que somos. Y posiblemente acepte tu fealdad como lo hizo con tu amigo pequeño.
──Es que tengo miedo... ─miro a otro lado tomando su mejilla. ──. A no ser un buen esposo. ¿Y que tal si tenemos un hijo? No sé si seré un buen padre.
──Lo eres. ─él me miro extrañado. ──. Eres el mejor padre que cualquier persona desearía. Lo sé, porque me cuidaste desde que estaba en el vientre de mi madre. Minato eres la mejor persona que Konoha pudo haber tenido y serás un gran Hokage, de eso no lo dudes. ─tome su mano. ──. Y si no lo llegas a ser recuerda que me tienes a mi para ser tu pilar y no te derrumbes. En caso de que eso suceda ambos nos levantaremos juntos, como siempre ha sido. Somos Namikaze, y orgullosamente.
Él sonrió y en un segundo tenía sus brazos alrededor de mi cuerpo, le regrese el abrazo sintiendo su cuerpo calmarse.
──Vaya, ¿y yo pensaba que necesitarías de mi ayuda? ─nos separamos al escuchar la voz del anciano. ──. Veo que me he equivocado.
──¡Jiraiya-sensei! ─mi hermano fue a saludarlo. ──. Me alegra verlo el dia de mi boda.
──No puedo perdermela por nada del mundo.
──¡Claro! ─solté con ironia. ──Si el motivo de venir es solo para espiar en los baños, viejo pervertido. ─este me miro con una vena en su frente mientras mi hermano sonreí nerviosamente.
──¡Mocosa, irrespetuosa! Cuantas veces te he dicho que me llames abuelo. ─me encogí de hombros.
──Muchas, no lo sé. ─dije pasando por su lado. ──. Si me disculpan ire a comer los dangos que encargue.
──Kata, no te los comas todos. Deja para los demás. ─dijo el rubio.
──Lo intentaré. ─alce mi mano en modo de despido.
Llegue a el patio donde se llevara acabo la boda, ignore a los invitados y fui directo a la mesa de los bocadillos. O eso quería hacer antes de toparme con una azabache con prisa.
──¡kata! ─gire mi cabeza encontrando a la mejor amiga de Kushina.
──Mikoto-san, ¿sucede algo? ─pregunte al verla un poco apurada.
──No te importaría cuidar de Itachi mientras ayudo a Kushina con un pequeño problema. ─mi vista cayo en el pequeño de tres años que me miraba alzando sus brazos, no seria la primera vez que lo cargo.
──Claro, no hay problema. ─tome entre mis manos la cosa más linda que he visto en mi vida.
──Te lo agradezco, Fugaku esta haciendo cosas de ultimo minuto y no puede cuidarlo. ─yo solo sentía a el pequeño azabache abrazar mi cuello.
──No te preocupes, sabes que Itachi es como un pequeño hermano. ─tranquilice. ──. Usted vaya y ayuda a Kushina-neesan.
──Te portas bien, Itachi. ─él solo la miro para seguirla con la vista. ──. ¡Casi lo olvido! ─se regresó. ──. Puedes también cuidar de Shisui.
──¿Quien? ─era la primer vez que escuchaba su nombre.
──El vino conmigo pero fue a la mesa de los bocadillos. ¿Puedes buscarlo y cuidarlo?
──Claro, te veo después, Mikoto-san. ─la vi irse. ──. Se que eres un pequeño de tres años pero actúas como de diez así que no te vayas de mi lado. ─lo mire a los ojos, él a propósito movió su cabeza a un lado. ──. Porque eres tan adorablemente lindo. ─besé sus mejillas. ──. Ahora a buscar a ese chico Shisui.
No tenía ni la mínima idea de quien era él o como era, pero si es conocido de Mikoto es porque es un Uchiha así que no tardaré en identificarlo.
Al llegar a la mesa de bocadillos mis ojos se fueron literalmente a los delicioso dangos. Olvidando por lo que venia me acerque a la mesa tomando una brocheta comiendo un dango.
──¿Quieres? ─le acerqué uno a su boquita que con gusto comió. ──. Esto es delicioso.
Iba a tomar otro pero justamente mi mano choco con otra que intentaba tomar un dango por igual. Mire a el culpable de robarme mi dango encontrando a un niño de seis años, tenía ojos azabache como su cabello y caí en cuanta de que el era Shisui.
──Eres Shisui, ¿cierto? ─ante mi pregunta él miro a el azabache en mis brazos. ──. Mikoto-san me pidió que los cuide.
──Posiblemente y nosotros terminemos cuidándote, ─dijo con una sonrisa de medio lado. ──. Namikaze Kata.
Y ahí fue donde todo comenzó.
Con esa esa sonrisa, esa maldita sonrisa. Fue el detonante que llevo todo a la mierda en mi vida.
Jamás me imagine que una persona a la cual le doblo la edad se llegasé a enamorar de mi, y lo que no me creo todavia es que acabe igual que él. Y desde aquel dia hasta el dia de hoy, él es la única persona que ha estado a mi lado incluso después de la muerte.
• • •
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro