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πŸ”.πŸ“.-π…πˆπ— 𝐀 𝐇𝐄𝐀𝐑𝐓


Viajando un poco al pasado dΓ³nde la sangre llama a la sangre.
Daiki Kamo era un hombre de pocas palabras y muchos actos. Si bien ha estado al mando del grupo familiar por muchos aΓ±os y ha sabido llevarlo bien; la familia o mΓ‘s bien sus hijos eran otro tema que no era su fuerte o al menos eso trataba.
Daiki Kamo estaba bastante bien conservado para su edad-53 aΓ±os- era alto por familia, un cuerpo bastante cuidado, con cabellera y bigote negro y un semblante bastante serio. De ojos almendrados oscuros, arrugas en su frente y piel morena.
Solo contaba con dos hijos de edades muy diferentes y de esposas diferentes tambiΓ©n; pero eso no significo que no los reconociera o no los quisiera. Muy al contrario de su forma callada y semblante serio, Γ©l realmente daba todo por su familia y los querΓ­a, solo que no era muy bueno externando sus sentimientos pues no tuvo mucho de dΓ³nde aprender. Y a pesar de eso, nunca descuido a sus hijos, o a sus esposas... que su vida marital no fuera color de rosa era diferente, la vida romΓ‘ntica tristemente no lo habΓ­a tratado bien.
Con Kana Sohma, su primer esposa y el amor de su vida viviΓ³ varios aΓ±os. Tiempo despuΓ©s juntos tuvieron a Choso, su primer hijo y vivieron bastante felices el tiempo que pudieron juntos. Los cuidaba, los quito del ojo pΓΊblico, les dio una vida buena y trato de que estΓ‘ fuera lo mΓ‘s normal posible. Tristemente tiempo despuΓ©s se enteraron que Kana tenia una enfermedad terminal y no le quedaba mucho tiempo de vida. Daiki hizo todo lo posible para conseguirle mΓ‘s tiempo a su esposa pero entre el grupo familiar, cuidar de su hijo y hacer lo posible por buscar avances mΓ©dicos para su amada esposa, Daiki Kamo sucumbio al pecado y en un momento de debilidad tuvo un delis con Ren Sohma, prima de Kana...
Poco tiempo despuΓ©s Kana muriΓ³ dejando a un Choso de 8 aΓ±os destrozado, un Daiki Kamo arrepentido y a Ren Sohma, su prima, estando embarazada.
Su relaciΓ³n con Ren fue muy diferente. Si bien se caso con ella y tuvieron a su segunda hija T/N, la vida marital entre ellos era diferente y aΓΊn asΓ­, eso no impido que se enamorara de ella y terminarΓ‘ arrepentido.
Desde el momento uno, Ren se dio alas de ser la nueva SeΓ±ora Kamo, asistΓ­a a eventos, era muy aludida al ojo pΓΊblico y le gustaban las cosas caras y brillantes, pero tambiΓ©n sabΓ­a jugar su papel bastante bien... Ren Sohma era muchΓ­simo mΓ‘s joven que Daiki y Kana, y estaba segada por el dinero y el poder que estΓ© le daba.
Contrario a lo que se cree, no cuido de Choso, ni trato de crear un vΓ­nculo con Γ©l. Si bien con Daiki trato de atenderlo para asΓ­ tener la situaciΓ³n a su favor, ella no lo amaba; mucho menos a su hija.
El haber experimentado el amor de Kana y despuΓ©s ser usado por Ren le golpeΓ³ horrible y se encerrΓ³ en un caparazΓ³n. SeguΓ­a cuidando a la distancia de Choso, le consiguiΓ³ una nana y dejo que ella se hiciera cargo.
3 meses despuΓ©s Ren diΓ³ a luz a su hija, quien para su suerte no se parecΓ­an en nada fΓ­sicamente... Ese dΓ­a Daiki dio un suspiro de tranquilidad.
No hace falta mucha imaginaciΓ³n para saber que paso despuΓ©s, Daiki cada vez mΓ‘s encerrado en el trabajo, Choso y T/N creciendo en la misma casa pero separados, cada uno al cuidado de sus respectivas nanas. En el cumpleaΓ±os dos de T/N Ren no se presentΓ³, no llamo, no se llevΓ³ nada... Simplemente no regreso.
T/N no entendΓ­a nada pues era una infante, Choso sabΓ­a el sentimiento de ser dejado por tu madre asΓ­ que se prometiΓ³ no dejar que su hermana sufriera por lo mismo pues si bien no eran hermanos de la misma madre, su instinto surgiΓ³ solo. Daiki por su parte tuvo una revelaciΓ³n y lo comprendio todo. PerdiΓ³ a Kana por una enfermedad, perdiΓ³ a Ren por su avaricia y estaba perdiendo a sus hijos por su afΓ‘n de sacar su dolor en el trabajo y no pasar tiempo con ellos... Se dijo que no serΓ­a como su padre, se prometiΓ³ a ser lo suficientemente bueno para sus hijos y darlo todo, no serΓ­a algo que cambiarΓ‘ de la noche a la maΓ±ana pero si harΓ­a el intento, y lo supo cuando un dΓ­a despuΓ©s de llegar tarde de la empresa se encamino a las habitaciones de sus hijos para verlos; lo que encontrΓ³ lo desarmo y lo hizo llorar todo lo que no pudo y guardo por aΓ±os, por Kana, por Ren y por sus hijos.
Esa noche los encontrΓ³ a ambos dormidos en la cama de Choso, abrazados como koalas y con lagrimas en sus caritas. Esa noche velo el sueΓ±o de sus hijos por primera vez.
AΓ±os despuΓ©s las cosas cambiaron, ambos hijos seguΓ­an con sus nanas, pues Daiki tenΓ­a que cumplir con sus deberes. Pero Daiki siempre llegaba a casa a las 6 pm para pasar la tarde con ellos, Choso y T/N habΓ­an entablado su lazo de forma fuerte y nunca tocaron el tema de ser de madres diferentes. Por el contrario, T/N le pidiΓ³ permiso a Choso de ver a su madre como la suya propia, pues estΓ‘ se encariΓ±o de ella con solo escuchar todo lo que le contaba Choso de ella.
Daiki ajercia de jefe y padre a su manera y a sus hijos nunca les faltΓ³ una figura materna... O eso quiso creer. No se volviΓ³ a casar y no tocΓ³ el tema con ellos tampoco.
Nunca vio a sus hijos como moneda de cambio, pero el pertenecer al grupo lΓ­der en el mercado agropecuario y mΓ©dico y conocer a mucha gente a veces le hacΓ­an pensar como su padre.

Nunca vio a sus hijos como moneda de cambio o para su conveniencia. Los dejo ser ellos mismos pero siempre estando al pendiente y cumpliendo un protocolo por su bien.

Nunca vio a sus hijos como moneda de cambio pues Choso le dijo que querΓ­a estudiar medicina y hacer sentir orgullosa a su madre donde sea que estuviera y eso para Γ©l estaba bien.

Nunca vio a sus hijos como moneda de cambio, pero una dΓ­a llegΓ³ a su oficina un viejo amigo heredero de otro clan y cuyo grupo textil estaba posicionandose en un buen nivel y le pidiΓ³ a su hija en mano para su hijo... Y le dijo que como amigos debΓ­an quedar en familia... Y le dijo que sus hijos se llevaban muy bien y que su alianza serΓ­a buena para ambos clanes... Y presa del miedo de que T/N fuera a ser como Ren y de la presiΓ³n disfrazada de amistad acepto tal alianza.

Y al hablar con su hija y explicarle la situaciΓ³n y ella solo dijera "es mi deber para la familia", se dio cuenta de que no serΓ­a como Ren y algo dentro de Γ©l pudo descansar.

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