Hola amistades, sorry por la tardanza pero mis vacaciones se volvieron mas ocupadas de lo que planeaba y tambien una vez que regrese al trabajo pues tristemente no pude publicar mucho.

Vengo tambien a pedir una disculpa por haber dicho que quedaban pocos capitulos, la realidad es que despues de meditarlo no es asi, pero si es importante que sepan de que ya estamos en la recta final.

Espero que les guste este capitulo y les siga gustando la historia, si tienen dudas o criticas o tips por favor no duden en hacermelo saber ya que como saben es mi primera historia. Les mando muchos abrazos y espero esten bien.

-xx Kelly.

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James y Salvatore eran los mellizos -a Aslan le gustaba llamarles gemelos- de 5 años que habían adoptado a Aslan como su mamá pato cuando fueron llevados al orfanato por primera vez cuando tenían apenas 2 años. Eran de madre asiática y en base a la genética se creía que su padre era americano; aunque los niños al ser mellizos tenían rasgos un poco diferentes como sus cabellos y el color de su piel. James siendo el mayor por solo 5 minutos era de piel lechosa, cabello castaño claro y lacio, ojos grandes algo rasgados de los extremos. Salvatore en cuestión era de piel más bronceada, cabello castaño oscuro y un poco ondulado, sus ojos eran igual de grandes y rasgados de los extremos. James tenía un lunar a un costado de la barbilla del lado derecho mientras Salvatore lo tenía debajo del ojo izquierdo pero algo que ambos tienen en común era el bello color hazel en sus ojos. Cuando fueron dados a luz por su madre -la cual era una indigente- ella se dio a la fuga del hospital dejando a los niños aun en los cuneros; desde ahí los niños habían pasado de orfanato en orfanato hasta llegar al "P. Diana". Ambos niños habían sido atendidos por pediatras especialistas desde el día uno y para sorpresa de todos no padecían ninguna enfermedad y estaban muy sanos; el único inconveniente que tenían era que no hablaban con nadie que no fuera Aslan, lo que hacía muy difícil el hecho de adoptarlos, sumándole también que al adoptarlos se iban juntos y regularmente las parejas que eran seleccionadas para el proceso de adopción solo buscaban llevarse a uno de ellos. También con el cambio de administración en el mismo orfanato, este pedía muchísimos más requisitos y compromiso para adoptar lo cual agregaba un pendiente más para las personas enlistadas, como a los niños del sistema.
Cuando Aslan fue adoptado oficialmente por Ryomen y por mi, le preguntamos si había algo que él más quisiera y si estaba en nuestras posibilidades se lo daríamos; Aslan no lo pensó dos veces.
-"No quiero abusar de este regalo que me dieron al aceptarme como parte de su familia, pero si puedo pedir solamente una cosa en toda mi vida eso sería que adopten también a los gemes... Yo he estado con ellos casi tres años y siento como si fueran mis hermanos reales, yo sé que ustedes los van a querer mucho así como me han querido a mi; ellos tienen miedo de ser separados por eso no hablan mucho.... Por favor, nunca pediré nada más".
Ryomen y yo solo nos miramos y le dijimos que debíamos hablarlo, pero que no se preocupara, que trataremos de resolverlo. Al ser una pareja que no estaba casada legalmente habíamos tenido un poco de complicaciones por parte del estado para adoptar a Aslan y por consiguiente a los gemelos, pero no era algo que fuera grave; nuestro abogado, el señor Yu Haibara -aprendiz directo del señor Nanami y ahora su mano derecha- era quien estaba llevando todo el proceso y nos había comentado que probablemente tomará algo de tiempo pero que no deberíamos de preocuparnos.
Le explicamos la situación a Aslan y él más tranquilo pudo iniciar su vida como parte de los Kamo y así comenzar a familiarizarse de forma directa con el clan; toda la familia estaban más que felices de que él aceptará ser adoptado por nosotros ya que para ellos él era visto como nuestro hijo incluso antes de serlo de forma oficial ante los juzgados.
4 meses después el señor Haibara nos había dado la noticia de que podíamos iniciar con el proceso de familiarización con los menores pues estos al ser unos niños debían de seguir un plan de adaptación tanto en nuestra casa como en el orfanato por un mes y después de eso, ambos serían evaluados por un especialista infantil quien daría el veredicto final al juez para aprobar o no la adopción.
Era un miércoles de mayo cuando recibimos la noticia. Ryomen había regresado de una sesión de fotos promocionales de empresas Gojo para la nueva línea del cuidado de la piel dirigida especialmente a atletas; había pasado al supermercado a surtir despensa del mes y después había pasado al colegio de Aslan a recogerlo para juntos dirigirse a casa y comenzarán a preparar la cena ya que les había llamado a medio camino y les comenté que por una crisis de escritor me debía de quedar una hora más en la oficina pero prometía llegar antes de la cena -la cuál acostumbrabamos a tomarla más tardar a las 19:30 pm- y yo nunca fallaba mis promesas.
La convivencia entre los 3 era muy amena y Aslan poco a poco sentía que ahí había pertenecido siempre. Claro que se llevó una sorpresa grande al saber que tanto yo como Ryomen éramos personas importantes en nuestros países natales y que ahora al ser parte del clan Kamo tenía una reputación que cuidar, pero no por eso se lamentaba o lo veía como un problema; él estaba dispuesto a demostrar que habíamos hecho bien al elegirlo y siempre daría lo mejor de sí mismo para su familia; aun así no se lo pidiéramos y solo buscaramos su felicidad. Aprendió también lo que es realmente convivir con una familias grande y que está te demuestra cuán amorosos pueden llegar a ser, pues tanto mi familia como la de Ryomen eran personas tan amables y atentas que te hacían sentir muy bien recibido; sumando también a todos nuestros amigos los cuales lo llenaron de regalos cuando fue oficial la adopción y estuvieron muy felices por nosotros.
Regresando al presente, una vez que había llegado de la oficina y terminamos de cenar; yo me encontraba lavando los trastos sucios de la cena mientras Ryomen echaba una colada de ropa sucia en el cuarto de lavado y Aslan estaba terminando su tarea en la isla de la cocina y me hacía compañía. Es en ese momento cuando el teléfono de casa suena y él se levanta a atender.
Aslan: "Buenas noches, casa de la familia Kamo; ¿En qué puedo ayudarle?".
-"Buenas noches señorito Kamo, habla el abogado Haibara; estoy buscando a la señorita Kamo o al señor Itadori, si fuera tan amable".
Aslan: "Hola señor Yu, claro que sí, deme un momento, los voy a buscar".
Aslan corre hacia la cocina gritando en el proceso "El señor Yu está al teléfono, creo que es sobre los gemes, vamos Ryomen, vamos a la cocina con T/N", y seguía dirigiéndose a la cocina siendo seguido por un Ryomen con ropa en la mano pero emocionado también por esa llamada.
Llegan a la cocina y yo estaba limpiándome las manos porque también había escuchado esos gritos llenos de emoción y estaba ansiosa por saber la respuesta del señor Yu. Aslan me pasa el teléfono inalámbrico el cual pongo en altavoz y Ryo se coloca detrás de Aslan poniendo sus manos sobre sus hombros, todos nos miramos emocionados y expectantes.
T/N: "Buenas noches Yu, ¿Cómo estás?, te he puesto en altavoz con Ryo y Lynx... Dinos qué son buenas noticias por favor".
Haibara: "Hola familia, me encuentro bien y contento después de las buenas nuevas que he tenido con los tribunales. ¿Ya han elegido cuartos para los mellizos?, un pajarito me dijo que quisieran dormir juntos y al lado de Aslan en ese castillo... Felicidades familia Kamo, el Juez ha aceptado la solicitud de adopción de los niños; deben de venir mañana a las 10 am a la firma de documentos al Diana; los niños están de verdad emocionados. Buenas noches familia".
Ryomen y yo nos miramos a la cara bastante emocionados y felices pues ese estos meses que nos habíamos acercado más a los niños y convivíamos como familia nos habíamos encariñado mucho con ellos y ahora solo pedíamos que fuera efectiva la adopción; al mirar a Aslan el jovencito estaba cubriendo su cara con sus manos y se escuchan sus sollozos por lo bajo.
T/N: "Cariño ¿que pasa?, ¿porque lloras?...".
Aslan: "Es que estoy muy feliz, tenía miedo de que dijeran que no a qué los gemes vinieran con nosotros... Siento que se me sale el corazón... Son los mejores papás que pude pedir...".
Él se gira y en el proceso nos abraza a ambos, tanto Ryomen como yo estamos bastante sorprendidos, no por el abrazo, sino por como nos había llamado. Hace 6 meses cuando decidimos adoptarlo y él aceptará le dijimos que podía decirnos cómo quisiera; que podía llamarnos por nuestros nombres pues no lo obligaremos a llamarnos mamá o papá si él no se sentía cómodo, pero que podía hacerlo cuando estuviera listo y él escucharlo decirnos eso en este momento nos puso mucho más felices.
Después de celebrar un poco terminamos los pendientes que teníamos; Ryomen terminó de pasar la ropa a la secadora y doblaba lo que había salido con anterioridad. Aslan había terminado su tarea y estaba regando las plantas que teníamos dentro de casa pues habíamos descubierto con el tiempo que mis dos chicos compartían el gusto por la jardinería así que nuestra casa era tener muchas plantas hermosas dentro y fuera.
Cuando Ryomen y yo decidimos dar el paso de mudarnos juntos y asentarnos un tiempo aquí fue porque queríamos experimentar eso en pareja pues bien si pasamos tiempo el uno en la casa familiar del otro, era muy diferente hacerlo en nuestro lugar propio y hasta ahora después de casi un año nos iba muy bien; habíamos decidido que no tendríamos ayuda con la limpieza durante el día y hasta ahora nos funcionaba bien pues no había mucho que hacer, solo contratamos el servicio cuando nos íbamos de viaje y debía de quedar alguien a cargo, pero ahora sí que sería necesario que alguien ayudará así que debía hablar con Ryo y comentarle lo que pensaba respecto a eso.
Yo por mi parte termine con la limpieza de la cocina y me pase al despacho que tenía en casa pues debía de preparar unos papeles que necesitábamos para trabajar en la editorial y también debía de llamar a Edward.
-"Hola Ed perdona por la llamada fuera del horario laboral, pero necesito pedirte un favor..."

10 am en punto estábamos reunidos Ryomen, Aslan, el señor Yu Haibara y yo en el despacho de la directora del orfanato, la señorita Nora Jones; nos acompañaba el señor Samuel Smith quien era el representante de la corte para el proceso legal y la doctora especialista en menores, la señorita Meghan Truman. El señor Haibara y el señor Smith estaban hablando sobre todo los términos legales respecto a los menores; para nuestra suerte ya teníamos idea de todo pues con Aslan fue igual y no se nos complicaba entender pues aunque Aslan tenía 14 años en ese entonces seguía siendo menor de edad y aplicaban las mismas leyes. Los menores debían de tener revisiones mensuales con médicos generales, también en caso de necesitarlo debían de ser atendidos por un psicólogo para el buen desarrollo de su persona al menos los primeros 3 meses de integración. Los nombres que tenían eran los que les pusieron en el primer orfanato que estuvieron y al ser niños del sistema estos no tenían apellidos, así que podíamos hablar con ellos e incluso buscar algún cambio de nombre si ellos aceptaban, entre más cosas.
Cuando terminamos de hablar de todo eso, Thomas -el secretario- trajo a los niños a la oficina y ellos al vernos corrieron a nosotros quienes nos levantamos para recibirlos en un cálido abrazo. Yo y Aslan habíamos comenzado a llorar y la señorita Nora nos dio unos pañuelos.
-"Disculpen, soy muy sentimental y estoy muy feliz..."
-"No hay nada que disculpar señorita Kamo -comenta la señorita Nora- estamos de verdad contentos de que estos angelitos sean muy bien recibidos por ustedes quienes ayudaron muchísimo a levantar está institución y aún siguen haciéndolo... Los dejaremos unos minutos a solas para que hablen respecto a lo que comentamos hace un momento, nos avisan cuando podamos regresar. Permiso"
Cuando salen de la sala y solo el señor Haibara se queda con nosotros este procede a trabajar un poco en su portátil mientras nosotros hablamos un poco con los niños.
Aslan: "Estoy muy feliz de que puedan venir con nosotros, ahora de verdad seremos hermanos y vamos a ser muy felices... T/N es la mejor mamá que podremos tener, su comida es deliciosa y da los mejores abrazos del mundo; Ryo es el papá más cool de todos y me ha enseñado muchas cosas que yo no sabía y es el papá más protector y gracioso que podemos pedir"
Aslan estaba de cuclillas hablando con los mellizos y a ellos se les notaba en la carita la emoción que todos teníamos, Ryo y yo estamos a sus lados con lágrimas en los ojos pero demasiado felices.
Ryomen: "Hola copias -así les decía Ryomen de juego-, bienvenidos a la familia más llorona y alegre de todas... De verdad estamos muy felices de que nos aceptarán".
-"Mis niños... Ahora ya podrán quedarse en casa, nadie los va a separar. Hay algo que debemos de resolver antes de irnos y eso es sobre sus nombres...".
Cuando los niños aceptaron recibir un segundo nombre contentos con lo que eso significaba, voltee a ver a Ryomen en una muda complicidad.
Después del incidente del hospital hablamos más abiertamente sobre ser padres y como nos imaginamos que sería en caso de que comenzáramos a buscar instituciones y ser prospectos a adopción; pero a pesar de eso por uno u otro motivo nos había surgido muchísimo trabajo a ambos y lo dejamos de lado. A mi psicólogo le gustaba decirme que mi vida se había vuelto una serendipia y por eso las cosas llegaban a mi cuando no las estoy buscando pero si que las necesitaba, pues así pasó con Ryomen, con el orfanato Diana, con Aslan y posteriormente con los mellizos.
Siempre dijimos que queríamos darles unos nombres fuertes y con un gran significado a nuestros hijos si llegabamos a tenerlos, y estaba tan feliz de que se nos estuviera cumpliendo ese anhelo pues con el paso de los años comencé a sanar ese miedo en mi; ahora me creía capaz de poder brindarles a mis hijos todo el amor que tengo para ofrecer porque yo no era como ella. Y aún así a pesar de los trabajos que tenemos y todo lo que debemos de hacer por ellos, nunca cambiaríamos nada, ni la más mínima cosa sobre como nos han resultado los planes y por consiguiente la forma en las que comenzamos a tener a nuestros hijos y los nombres que habíamos decidido darles.
Cuando la señorita Nora y los demás regresaron a la habitación, firmamos lo documentos necesarios, nos tomaron la primera foto familiar y el juez finalizó un pequeño discurso.
"Por el poder que nos otorga el Estado, preserverando la integridad y felicidad de los menores, hoy es un placer reconocer como parte de la familia Kamo-Itadori a Minjun James, Mingyu Salvatore y también a Aslan Lynx".
***
Cuando iniciamos el mes de adaptación los niños podían salir del orfanato y quedarse en nuestra casa las veces que quisieran siempre y cuando regresarán a dormir a las instalaciones en base a las reglas de la institución y del Estado. Nosotros no tuvimos problema con ello y los niños se habían adaptado muy bien. Ryomen y yo a veces pecamos de confianza máxima pero estábamos seguros que la adopción sería un éxito, el señor Yu era tan bueno como el señor Nanami y nunca nos decepciona así que sabíamos que también ganaríamos en esta petición; por ende comenzamos a habilitar la habitación de los niños para cuando estuvieran con nosotros de forma oficial y así no demorar más de lo debido y pudieran instalarse rápido.
Les habíamos dado la opción de escoger habitaciones separadas pero Minjun y Minguy desistieron de ello y nos hicieron saber que querían seguir compartiendo habitación. La que habían elegido estaba del lado derecho a la de Aslan y era bastante amplia como para tener dos camas, un walking closet y baño personal; a Minjun le encantaba la tranquilidad de estar dentro de casa armando rompecabezas, legos y todo tipo de juego didácticos mientras que a Mingyu le gustaba la adrenalina y la aventura, cada día era una aventura nueva para él y poco a poco el patio delantero y el árbol se volvió su lugar favorito para pasar las tardes. Claro está que a pesar de tener gustos muy diferentes entre los dos hermanos, siempre hacían de lado eso para pasar tiempo juntos. Jun a pesar de ser más bajito físicamente pero el hermano mayo siempre hacia más por complacer a Gyu pues decía "Al ser el hermano mayor debo de cuidar siempre de Gyu, y es mi responsabilidad que él que no se sienta solito" y Gyu siempre parecía que tenia estrellas en los ojos cuando su hermano mayor hacía de lado sus juegos pacíficos y decidía acompañarlo en sus aventuras. Es por eso que no desistimos en separarlos y ayudamos a que su habitación fuera una combinación amena de las cosas que les gustaban a ambos.
Nuestra casa era grande pero no tan grande como mi casa familiar. Era de dos pisos donde el primero era donde estaban todas las habitaciones y el segundo se había habilitado para ser un gimnasio personal para Ryo, una terraza para reuniones y también había una pequeña piscina; no teníamos patio trasero pero el delantero era amplio y había un gran árbol donde decidimos colgar columpios a petición de los niños.El barrio donde vivíamos estaba rodeado por el mismo tipo de casas y era una zona bastante tranquila y segura y a los chicos les gustaba mucho porque podían salir a pasear en bicicleta, patines o patineta en el caso de Aslan y podían hacerlo libremente sin tener miedo a algún accidente.
Para este punto ya habían pasado 2 meses desde que la familia creció y nos estábamos adaptando a la nueva rutina. Yo había reducido mis horas de oficina a excepción de cuando tenía reuniones o presentaciones y Ryo había recibido una oferta de parte de Satoru para ser embajador de la rama juvenil deportiva de empresas Gojo y este había aceptado, también seguía llevando a distancia la directiva del centro deportivo para jóvenes de bajos recursos en Australia junto con su madre por ende hacia home office y era quien atendía a los niños después de clases; yo también trataba de hacerlo pero siendo sincera él era quien más apoyaba con eso. Seguía siendo el campeón invicto de su categoría y seguía entrenando para mantenerlo así que en ocasiones cuando debía hacer presentaciones, entrevistas, o alguna campaña era cuando yo me llevaba trabajo a casa y tomaba toda la responsabilidad.
Los mellizos y Aslan estaban en colegios donde su horario era de 8 am a 2 pm, yo me encargaba de llevarlos y Ryomen de recogerlos. Prácticamente nos la apañabamos bastante bien para mantener nuestras profesiones, nuestra vida familiar y nuestra vida de pareja; y aunque podía resultar un poco cansado en ocasiones no lo cambiaríamos por nada, los niños eran la luz de mis ojos y Ryomen me amaba y los amaba tanto que el simple hecho de vernos feliz ya era todo para él.
Era un viernes por la noche alrededor de las 2 am, los chicos ya estaban dormidos y Ryomen y yo habíamos decidido tener una noche de películas de Harry Potter; vimos solamente dos películas pero al apagar la luz no teníamos sueño así que decidimos llenar la tina de baño, poner burbujas y meternos un rato para relajarnos. Él estaba sentado en la orilla y yo estaba sentada entre sus piernas y recargada en su pecho, acariciaba mis brazos y yo simplemente sentía su respiración a un costado del cuello y mi oído izquierdo. Teníamos alrededor de 20 minutos así y en silencio pues no hacía falta decirnos nada, el momento íntimo que teníamos era para nosotros muy valioso y yo lo atesoraba en demasía.
Ryomen: "¿Qué te tiene tan pensativa?, tu respiración se siente diferente, más pesada... ¿es acaso sobre la llamada del detective lo que te tiene preocupada?"
Algo que me gustaba de Ryomen era que no me presionaba sobre hablar de temas que no podía en ese momento, él esperaba pacientemente hasta que yo decidía contarle pero él tenía un límite como cualquier persona; cuando sentía que esa situación me estaba tomando bastante espacio mental era cuando intervenía y me ayudaba a verlo desde otra perspectiva y así poder avanzar.
-"A veces siento que me conoces mejor que yo misma... si, es sobre esa llamada, y también sobre ese autor que es bastante exigente y no sigue los lineamientos del contrato de entrega virtual y eso estresa y causa problemas a todo el equipo. Pero sabes, mi mayor preocupación es que se acerca el cumpleaños 15 de Aslan y no se que debemos de organizar, será su primer cumpleaños con nosotros y quiero que sea especial, este y todos. Papá quiere también que vayamos y también tenemos pendiente el visitar a tu familia todos juntos... Extraño mucho a todos, no se cariño... están llegando esos días pesados del mes donde estoy muy sensible. No quiero que tengas que lidiar con todo esto porque son cosas sin sentido"
Ryomen después de escuchar atentamente y estrujarme en un abrazo me da la vuelta y hace que enrede mis piernas alrededor de su cintura mientras él me acerca más a su pecho.
Ryomen: "Nena no debes de ahogarte en un vaso de agua, si tienes problemas con ese autor solo hace falta hacer una reunión, que el tío Shigure venga y lo ponga en su lugar de forma políticamente profesional. Si simplemente quiere molestar hace falta que lo paren y tu eres muy complaciente con ellos; no niego que esa es la esencia de MUSA y por eso tiene el éxito que tiene pero también es por eso que ese jovencito se está saliendo con la suya, es un aprovechado. Sabes que a mi no me molesta ir y ponerlo en su lugar, pero no lo hago por respeto a ti y a tu trabajo asi que creo que debes de hablarlo con la junta directiva y exponer la situación por que ya van casi 2 meses que sigue haciendo lo mismo y está comprometiendo tu trabajo.
Respecto a Aslan, yo también lo había estado pensando pero es mejor si simplemente le preguntamos si quisiera hacer algo y con quien, debemos tener en cuenta que quiere él y no que creemos nosotros que quiere él, hay una diferencia muy grande en ello. Hmm.. nuestras familias... estamos bastante lejos los unos de los otros es verdad, creo que seria bueno si nos damos unas vacaciones, ir a verlos a todos y también tomarlo como su primer viaje de cumpleaños; debemos de aprovechar también el viaje para nuestros pendientes y compromisos. Los chicos tienen mes y medio libre, será emocionante si salimos de aquí y escapamos los 5 juntos, ¿no crees? y ahora lo más importante, si mi mujer extraña tanto su familia y su hogar, ¿por qué no nos vamos?. Simplemente debes de pedirlo, haría lo que fuera por ti y los niños te adoran y no dirán que no a una aventura así, simplemente debes de pedirlo nena, tus deseos son mis órdenes. No me gusta verte nerviosa o estresada o divagando y si el motivo es que estemos tan lejos, podemos irnos, te seguiré a donde vayas".
Tenía mis brazos alrededor de su cuello y acariciaba su cabello; él en cambio había comenzado a acariciar mi cintura y en cuestión de segundos nos estábamos besando como tanto nos gusta. Ryomen me acerco más a su cuerpo si eso era posible y yo comencé a moverme en un lento vaivén sobre él. Comenzamos a respirar agitados y sentía su agarre aún más fuerte, me gustaba tanto que no podía esperar a llegar a la cama, lo quería aquí y ahora.
"Tu realmente sabes como descolocar a una mujer, Sukuna, mira que llamarme tu mujer cuando me tienes en esta posición, habiendo dicho hace un momento las palabras más bellas y haciendo esas declaraciones tan comprometedoras... Tu, Ryomen; me pones de verdad la vida de cabeza y yo amo eso de ti, ahora haste cargo de tu mujer porque estoy tan jodidamente dispuesta para ti".
Y siendo las 2:45 am la situación me hacía volver a enamorarme aún más de lo que ya lo estaba de este maravilloso y sin igual hombre que tenía por prometido y cada dia me aseguraba que no debía de temer pues el siempre seria mi luz de día.