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18

Se estiró mientras recordaba las indicaciones qué le dio Julien para su entrenamiento.

Una sesión de estiramiento primero, Adagny empezó a calentar para luego hacer las posiciones correctas para mejorar su elasticidad.

― No se te vaya a salir un pedo por andar creyendote elastic girl. ― Se burló Karasu.

Ella desvía su mirada hacia él para reír. Segundos después, se le salió un pedo.

Ambos explotaron en risas por aquéllo haciendo que ella perdiera el equilibrio pero Karasu logró sostenerla.

― Te tengo. ― Ambos se miran con una sonrisa.

― Gracias, mi Príncipe. ― Agradeció mientras pestañeaba de forma exagerada.

Pero Karasu la dejó caer.

― 0/5 de estrellas, maldito. ― Dijo ella mientras se quejaba.

― Ja, ja. Graciosita, mejor sigue con tus estiramientos de elastic girl. ― Karasu le dedica una pequeña sonrisa burlona.

― Antes de irte, Karasu..― La voz de Adagny sonaba un poco más apagada.

Karasu volteó para escucharla.

― Gracias por estar siempre al pendiente de mí y protegerme. ― El alemán sonríe un poco mientras lo mira a los ojos.

Karasu suspira para luego reír un poco.

― Te diré la verdad, me haces sentir patético, Adagny. Este cursi sentimiento de querer protegerte y hacerte sentir bien es algo nuevo para mí. ― Los ojos de Kaiser brillaron al escuchar las palabras de Karasu.

― Karasu....Gracias, muchas gracias. ― Ella lo abrazó con fuerza.

Él se sorprende ante el abrazo del peliblanco, simplemente acarició su espalda y cabeza.

Cerró sus ojos durante unos momentos mientras disfrutaba de aquél pequeño momento.

― Ya sueltame babosa, la estupidez se pega. ― Karasu se separó del abrazo con pequeñas risas.

Pero Hanae tiene los ojos llorosos, alarmando a Karasu.

Ella lo tomó de las manos mientras lo mira con una gran sonrisa, haciendo sentir raro al japonés.

― Le doy gracias a Blue Lock, sin este proyecto nunca hubiera podido conocer a gente qué se hizo tan especial para mí. No te hubiera podido conocer a tí, gracias por llegar a mi vida. Hermano mayor

Karasu suelta un suspiro mientras besa la frente de Adagny para luego soltar una pequeña risa.

― Yo también agradezco venir a Blue Lock, pude conocerte a tí, Adagny. ― Ambos se dieron otro abrazo.

[...]

― Adagny, ¿Crees poder llevarle esto a Noel Noa?, debo seguir con el entrenamiento de los demás y ya qué terminaste tus asignaciones, ¿Podrías hacerme el favor? ― Pidió Julien amablemente.

Ella asiente con una sonrisa.

― Con gusto. ― Tomó aquellos papeles y una pequeña bolsa, empezó a caminar hacia el estrato alemán.

Nuevamente su pecho empieza doler recordando las palabras de Rin, deseando qué solo fuese una broma de mal gusto.

Al llegar al estrato, camino por los pasillos con una pequeña sonrisa hasta llegar a la oficina de Noel Noa.

En su trayecto, se encontró con Isagi quién trataba de decirle algo pero realmente terminó por no decir nada ya qué no tenía palabras.

Al ir realmente distraída, terminó chocando con alguien bastante fuerte qué casi la hace caer.

― ¡Lo sien....to...― Se quedó sin palabras.

Sus orbes azules miraron con asombro a quién estaba frente a ella. Sus labios empezaron a titubear mientras no podía creer lo qué veía.

― K...k....― Empezó a tartamudear mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

No podía articular ninguna palabra mientras sus piernas temblaban.

― ¡Kunigami! ― Porfin pudo hablar. Extendió su mano para tocar su rostro pero el la apartó de un fuerte manotazo.

― No me toques, estorbo. ― Dijo Rensuke fríamente.

Estorbo. Estorbo. Estorbo.

Su mente repitió aquélla palabra mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

― Soy yo, Hanae. ¿Acaso no me reconoces? ― Preguntó con desesperación.

― Sí sé que eres tú y no me importas. Apartate de mi camino, rarito. ― Kunigami hizo a un lado a Hanae de forma brusca.

Ella cayó al suelo por aquel empujón, sus manos temblaron mientras no podía ver correctamente, estaba llorando.

― ¡Espera, Kunigami! ― Ella intentó levantarse pero sus piernas le fallan.

Él ni siquiera volteó, siguió su camino cómo si detrás de él, no hubiese nadie.

Empezó a llorar en silencio mientras intentaba limpiar sus lágrimas para no mojar los papeles, recogiendolos.

― Déjame ayudarte. ― Ella levantó su cabeza para encontrarse con un muchacho con rasgos alemanes.

Él muchacho se sorprende al ver el rostro de Hanae pero ella se levanta rápidamente, tomando todos los papeles.

― Está bien, yo...yo puedo. ― Dijo ella.

Dicho esto, se fue rápidamente hacia la oficina de Noel Noa a dejar los papeles. El coach agradeció y le mandó otras cosas a Julien.

Adagny abrazo los papeles qué le dio Noel Noa mientras mantenía su mirada baja pero con cuidado de no chocar con alguien más.

― Oye, espera. ― El muchacho de hace rato la llamó.

Ella dirigió su mirada hacia él.

― Eres Adagny, Adagny Kaiser. ¿Cierto? ― Preguntó.

[...]

― ¿y se puede saber qué tiene Adagny? ― Preguntó Karasu.

Todos alzaron sus hombros al no saber lo que tenía la chica. Quién no salía de su habitación.

― Opino qué vaya Shidou-kun, a lo mejor a él le dice.

― Nop, no me quiso decir. Cuando le pregunté solo se puso a llorar más.

― ¿Rin?

Él negó.

― No me quiso decir tampoco. ― Respondió.

― ¿Nanase?

Él también niega.

― A mi tampoco quiso decirme, no quiero ni ir a sus entrenamientos, no quisiera qué Loki la regañe por eso...

Por otro lado, Charles. El compañero del equipo PXG quién se hizo buen amigo de Adagny era quién la consolaba.

― Y me llamó estorbo, ¡También me llamó Rarito! ― Ella vuelve a romper en llanto mientras lo abrazaba.

Charles le hizo pat pat en la cabeza mientras la ayuda a tronar sus mocos.

― Yo opino qué deberías contarle a los demás. Yo no conozco a casi nadie de aquí, así que imaginate. ― Dijo él.

― No quiero que se burlen porque estoy llorando solo porque me dijeron rarita...― Dijo en voz baja.

― Son tus amigos, son tu squad, son tus tilines. Yo pienso qué jamás se burlaran de tí. ― Él sonríe ":3".

Miró su teléfono para luego escribir por el grupo.

En menos de cinco minutos, todos estaban ahí. Ni siquiera los qué estaban en otro estrato faltaron.

Isagi era usado de almohada mientras ella se aferraba a él, llorando.

Yukimiya trataba de calmarla y limpiarle las lágrimas, Aryu casi se queda calvo al intentar pensar en una solución glam.

Ryusei y Chigiri tratan de contarle chistes a Hanae pero no sirve de nada.

Karasu se queda callado mientrad qué Otoya ahora es la nueva almohada de Hanae.

― ¿¡Es porque soy un estorbo de verdad?! ― Gritó entre lágrimas.

― ¡No, no, no digas eso! ― Dijeron los demás.

― ¿Qué sigue?, ¿Qué Michael esté aquí y diga qué me abandonó porque estaba harto de mí?

....

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