—Choi Beomgyu, ¿me darías el gran honor de ser tu novio?
Tras escuchar esa pregunta, era como si todo el tiempo se hubiera detenido para Beomgyu. ¿El perfecto y extraordinario Kang Taehyun se le acababa de confesar y proponerle un emparejamiento? Era como un sueño, y no sabía cómo sentirse al respecto, tan surrealista para Beomgyu que no lograba creérselo. ¿Por qué alguien amaría a un príncipe debilucho y llorón como él? No quiere pensar mal de Taehyun, por lo que su teoría rápida es que este seguía con los efectos del celo y se estaba dejando llevar.
Aunque por un lado está extremadamente halagado y feliz por recibir tan lindas palabras, realmente quería aceptar. Pero por otro lado tenía algo de miedo, ya no solo que podría tratarse de un arrebato inconsciente del menor, sino porque teme no cumplir con sus expectativas. ¿Y si acepta y luego Taehyun ve que realmente no era gran cosa? ¿O si acepta y cuando Taehyun vuelva a sus 5 sentidos se enoja con él por aprovecharse? O peor aún, ¿y si es el mismo Beomgyu quien pierde interés a los pocos días? Porque seguía sin aclarar su mente y Tae le había sorprendido de repente con esa confesión que sólo aumentó su confusión. No le ha dado tiempo para pensar correctamente.
Además, es su primera experiencia en el amor y de verdad que quiere hacer las cosas bien, con calma y cuidado, pero todo eso le había pillado tan desprevenido que no lograba encontrar las palabras adecuadas para expresar que aún no estaba preparado para responder sin arruinar el momento.
—Taehyun, y-yo... —no sabía qué decir exactamente, y por eso se le escapó preguntar: —¿Acaso sigues en celo? —con un tono dudoso.
El menor frunció el ceño con confusión—. No. ¿Qué tiene que ver eso?
—Q-Qué tal vez esto es un impulso por las hormonas que causa, como el beso... —admitió bajo y no muy seguro. Había leído sobre el comportamiento irracional de muchos animales cuando estaban en época de apareamiento, como el pelear sin razón o el emparejarse con cualquiera. No estaba del todo seguro de si Taehyun también seguía las leyes de la naturaleza, pero viendo que en esa semana fue como un niño pequeño buscando mimos desesperadamente cree que sí.
—Beomgyu, creo que estás malinterpretando un poco las cosas, el celo me vino después de besarte de manera voluntaria. Y aunque sí es cierto que durante este podría dejarme llevar un poco, sigo estando consciente de mí mismo —miró hacia otro lado un tanto avergonzado por el erróneo pensamiento del mayor—. Además, no estaría horas preparando todo esto por un simple impulso. Estoy muy seguro de mis sentimientos, y tengo más que claro que te amo... —lo último lo dijo con algo de timidez.
Al no escuchar alguna palabra más proveniente del rubio, quien estaba aún más sorprendido intentando procesar esa segunda confesión, Taehyun suspiró algo decepcionado, tomándose el silencio como una especie de rechazo. Y no solo eso, el que Beomgyu haya dudado de sus palabras aún con todo lo que hizo lo hirió un poco.
Su orgullo estaba algo dañado, la emoción del día anterior desapareció por completo, y los nervios que tenía durante esa confesión que creyó que sería aceptada había sido reemplazada por un creciente miedo a escuchar lo que sea que fuera a decir el mayor. No estaba preparado para el rechazo, por eso se transformó en búho y alzó el vuelo para huir rápidamente con la intención de prepararse un poco emocionalmente antes de escuchar nada.
—¡E-Espera! —exclamó Beomgyu mientras lo vió irse, pero este no se detuvo y ya era muy tarde. Al ser de noche y haber muchos árboles lo perdió fácilmente de vista.
No queriendo dejar las cosas así, Beomgyu corrió por donde Taehyun se había ido sin siquiera tomar alguna vela para ver mejor, tan solo la tenue luz de la luna para guiarlo en ese laberíntico bosque en una zona que no conocía muy bien. Definitivamente se perdería, pero debía buscar al pelinegro, pues no era tan estúpido como para no darse cuenta de que no ha reaccionado como es debido. Sabía que lo había lastimado un poco, y tenía que aclarar todo antes de que Taehyun se dedicara a teorizar cosas que no son. Se acabó eso de guardar sus sentimientos para sí mismo, le contaría absolutamente todo, algo que ahora mismo se arrepiente de no haber hecho desde el inicio.
—¿T-Taehyun? —preguntó en alto a ver si este volvía, pero no hubo rastro alguno del mencionado, así que siguió corriendo mientras observaba con desespero a todos lados.
Claro, estaba más atento a las zonas altas, forzando su vista para poder observar mejor en la oscura noche, y no se percató de la raíz que sobresalía del suelo, por lo que tropezó y cayó muy fuerte, aunque no se hizo mucho daño, solo un leve dolor en las muñecas por usar las manos para amortiguar el golpe.
Aún si salió ileso, quería llorar de impotencia por no lograr encontrar al menor. De repente se imaginó a sí mismo, tan patético y algo sucio por la caída, llorando por algo tan simple, queriendo rendirse ahí mismo y simplemente esperar a que Taehyun volviera por su cuenta. Con eso en mente realmente se pregunta cómo alguien tan genial como Taehyun puede amarlo, cómo diablos logró enamorarse de ese chico torpe e infantil incapaz de alcanzarlo. ¿De verdad él es lo suficientemente bueno para Tae?
Dándose cuenta de su repentina negatividad, negó con la cabeza. Pensó en los sentimientos de Taehyun, recordando cómo comentó que iba en serio y se golpeó levemente las mejillas, volviendo así a su misión de encontrarlo ahora mucho más determinado que antes. Beomgyu se tomaría ese esfuerzo como un primer paso para volverse una mejor persona. No se rendirá tan fácil, y así pasó largos minutos buscando sin éxito alguno.
En algún punto, su collar empezó a brillar con una cálida luz amarilla, y al Beomgyu tocarlo para ver por qué brillaba, este se empezó a impulsar con una fuerza débil, como una especie de brújula queriendo guiarlo a algún sitio. Confundido, Beomgyu siguió el camino que este indicaba, llegando así al borde del bosque que no puede traspasar, pero el collar seguía empujándolo hacia el otro lado. Obviamente no podía avanzar más, por lo que solo se dispuso a observar con detenimiento todo el otro lado.
No sabe si es porque se había acostumbrado a la oscuridad, por tener buena vista o por estar acostumbrado a ver esas plumas grises entre todas las negras, pero logró divisar a ese búho que tanto conoce en uno de los árboles que había al otro lado de la barrera.
—¡Taehyun! —llamó alegre de verlo, notando recién su cansancio y respiración entrecortada debido a la actividad física. Ahora que lo encontró, respiró profundamente sintiéndose aliviado, pero cuando vió que este hizo amago de huir de nuevo, rápidamente golpeó la barrera—. ¡Espera, espera, espera! —se apresuró a gritar—. ¡No te vayas, por favor! —rogó.
El tono desesperado de Beomgyu fue suficiente para convencer al pelinegro, quien voló hasta estar frente a él y se transformó de nuevo en el chico pelinegro, pero no podía mirarlo a los ojos así que se quedó mirando al suelo con su rostro sonrojado y una expresión un tanto triste.
—¿Puedes acercarte más? —preguntó al ver que el contrario seguía en el otro lado de la barrera, y como este no se movía, siguió rogando con un tono aniñado—. Por favorcito~
Taehyun dudó, pero al final sí se acercó un poco, y nada más cruzar la barrera para estar en el lado de Beomgyu, éste se le abalanzó encima, haciéndolos caer a ambos.
—Así no te puedes escapar de nuevo —bromeó luego de posicionarse mejor encima de un ruborizado Taehyun, quien empezaba a estar algo confundido por esa actitud. Pensó que iba a ser rechazado, pero ahora que ve a Beomgyu burlón e igual de cariñoso que siempre cree que quizás sacó conclusiones precipitadas—. Tienes razón, malinterpreté todo —admitió completamente serio—. Ahora te voy a ser 100% honesto, así que escucha con atención —avisó para luego tomar una fuerte bocanada de aire y empezar a soltar todo lo que llevaba tiempo reteniendo—. Ese día disfruté demasiado del beso, y me decepcioné tanto pensando que tal vez fue por el celo que luego me sentí mal, ya no solo por creer que no tuvo importancia por ser un impulso de tu parte, sino porque quería que se repitiera y sentía como si me quisiera aprovechar de tí cuando estás más vulnerable.
»Desde entonces he estado muy confundido porque siento demasiadas cosas, y mi cabeza va a explotar intentando aclarar todo. Realmente quería que hubiera sido algo real, y ni yo mismo me entiendo por ello, se supone que nunca te había visto como algo más que un amigo, pero mi corazón no deja de acelerarse con solo verte. Y... ¡Maldición! De verdad que intento entenderme, hago lo que puedo por averiguar mis sentimientos, pero lo único en lo que pienso es en volver a probar tus lab-
Taehyun lo interrumpió con un rápido piquito que tomó a Beomgyu por sorpresa, haciéndolo balbucear cosas sin sentido. No se esperaba ser atacado de esa forma y ahora su mente volvió a quedarse en blanco, ya no recordaba por donde iba.
—Espera, Beomgyu… —soltó Taehyun con vergüenza al no poder seguir el hilo de la conversación. Beomgyu estaba hablando tan rápido que apenas lograba captar algunas cosas—. Más despacio, ¿qué pretendes decirme con todo esto?
Con ello, Beomgyu decidió ir directo al punto y exclamó: —¡C-Creo que también me gustas! —mientras ocultaba su sonrojado rostro con las manos—. Pero quisiera poder decirlo sin el 'creo', por eso debo posponer mi respuesta hasta estar seguro de lo que siento. Además, quisiera conocer más de tí, porque lo único que sé es lo que he visto, ajeno a eso no te conozco. Me di cuenta de ello cuando dijiste que conociste a más gente, no tenía ni idea. ¿Qué te gusta hacer cuando sales? ¿Tienes algún lugar favorito? ¿Lograste tener un grupo de amigos? ¿Cómo era tu vida antes de la torre? ¿Tienes objetivos en la vida?
»Quiero saber eso y más, quiero ser capaz de leerte como es debido, porque de verdad que no me di cuenta de tus sentimientos hasta que lo dijiste, y me gustaría saber todo sobre tí para poder hacerte sentir bien, enorgullecerme de tus logros, apoyarte con tus sueños, llorar contigo si es necesario, animarte cuando estés mal, alegrarme de que conozcas gente, y sobre todo para poder pensar en tus sentimientos, ponerme en tu lugar y así saber cómo llevar la relación correctamente sin que ninguno salga perjudicado. Porque, lo siento, pero te amo demasiado como para dejarte ir, así que vas a tener que aguantar mis lloros, mimos y berrinches durante mucho tiempo, pero te aseguro que dejando eso de lado no pienso dejar que vayamos por un mal camino y me esforzaré por ser el mejor novio del mundo.
Tae rió—. Beomgyu, ¿eres consciente de todo lo que estás diciendo? —se le hacía divertido como el mayor empezó la charla pidiendo posponer la respuesta por no estar muy seguro para al final admitir que estaba dispuesto a ser su pareja.
—La verdad, no. Estoy hablando rápido y sin pensar para poder explicar todo antes de que huyas.
Taehyun se acercó al rostro del rubio para besar tiernamente su sien. El que Beomgyu estuviera siendo honesto le ayudó a recuperar toda la emoción que había sentido, y ahora vuelve a estar esperanzado con respecto a su posible noviazgo. Después de todo Beomgyu no se había percatado de sus palabras, pero literalmente admitió amarlo tanto como Taehyun lo amaba a él, y el que quisiera que la relación estable y duradera era la mejor prueba de ello, además de intentar tener en cuenta los sentimientos del menor.
Mentiría si dijera que Taehyun no quería saltar de la emoción, pero pudo controlarse al seguir con Beomgyu encima suyo.
—No me iré. Creo que ya escuché lo que tenía que escuchar —soltó con una tierna sonrisa en su rostro.
—Entonces... ¿Puedes dejarme unos días para pensar bien todo?
—Esperaré el tiempo que necesites —musitó feliz sabiendo que Beomgyu aceptará ser su pareja tarde o temprano, aunque todo apuntaba a que sería temprano pues técnicamente ya lo había aceptado, pero Taehyun no le dirá nada. Si Beomgyu necesitaba tiempo, él se lo daría.
Tranquilos que estos dos oficializan la relación dentro de poco, no pretendo que se alargue mucho.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro