一. ⊹ . CRUEL WORLD ꒱  ᰍ̱
Capítulo Once.

—. Jung Eun joo.

Eun joo estacionó el auto y bajo de este cerrandolo, a lo lejos vio a Do Yeong y Eun Jin hablando. Sonrió al ver aquella escena y se acercó a ellos.

Los dos sintieron la presencia de Eun joo por lo cual se giraron a verla, y sonrieron en forma de saludo.

—Lamento la demora, estaba resolviendo unos asuntos -dijo esta.

—Tranquila, llegaste justo a tiempo -dijo do yeong.

—¿Vamos? -preguntó Eun Jin.

Los mayores asintieron y se acercaron a la cancha donde estaban las niñas, las cuales no estaban muy lejos aún qué ye sol se veía decaída. Y sun hee trataba de animar a su mejor amiga.

—Ye sol -llamo do yeong.

Pero la pequeña no lo escuchaba,

—Ye sol.

La pequeña no lo escucho.

—Ye sol -llamo más fuerte, y la pequeña lo vio.

Do Yeong sonrió - Hola, princesa -abrió los brazos.

—¡Papá! -dijo la pequeña y corrió a los brazos de su padre.

Eun joo sonrió al ver el gran amor de ellos dos, la pequeña sun hee fue a abrazar a su madre con una sonrisa.

—Papá, lo siento mucho -se disculpo.

—No, princesa. No pidas perdón -respondió do yeong.

Ye sol lloraba desconsolada, hacienda qué el corazón de Eun joo doliera. La pequeña no tenía la culpa de nada.

—Nada de lo que está pasando...es culpa tuya. ¿Entiendes?.

—¡Papi!.

Eun joo giró a ver a otro lado aguantandose las ganas de llorar, pero realmente era muy difícil de aguantarse. Sintió unos sollozos los cuales eran de sun hee.

—¿Qué pasa cielo? -preguntó Eun joo.

—No me gusta ver a ye sol triste -dijo la pequeña sollozando.

Eun Joo y Eun Jin rieron ligeramente al ver el tan noble corazón de la pequeña sun hee.

Eun joo se acercó a Do Yeong quien la miro y asintió, la diseñadora acarició el cabello de ye sol. Y le dio una delicada sonrisa a la pequeña quien la miran.

—Ye sol, tendrás un futuro mejor. Y todas tu penas se irán, me encargaré de cuidarte lo mejor que pueda -dijo Eun joo.

Una lágrima callo por la mejilla de Eun joo, mientras aún acariciaba el cabello de ye sol.

—No dejare que nadie más, te vuelva a hacer daño ye sol -terminó de decir Eun joo.

Do Yeong bajo a ye sol, la pequeña se acercó a Eun joo y la abrazo. La diseñadora de igual manera la abrazo de vuelta.

—Gracias tía Eun joo, por siempre cuidarme -dijo la pequeña.

—No me agradezcas cielo, yo siempre te cuidare -respondió la mayor.

Se separaron de aquel abrazo y Eun joo sonrió.

—Cielo, ve con lo chicos un momento. Hablaré con tu papá un momento -habló Eun joo.

Ye sol asiento y fue con sun hee y eun Jin, la diseñadora se acercó a do yeong.

—¿Ya esta todo listo? -preguntó Eun joo.

—Si, ya hice todo los papeles del traslado. Mañana le pedire el divorcio a yeonjin -respondió do yeong.

—¿Ya te vas a divorciar? -preguntó sorprendida.

Do Yeong asintió, eun joo sonrió con felicidad y se abalanzó hacia do yeong. No pudo evitar su felicidad ante aquella noticia.

Beso a Do Yeong sin importarle la gente que los viera, do yeong sonrió entremedio del beso.

Por fin después de tanto serian felices como siempre lo desearon.

La noche había caído y ellos habían decidido quedarse en un hotel, después de todos ellos se irán. Eun joo dejo la casa al nombre de la señora choi y la agencia al nombre de hana.

Después de todo fue la únicas personas en las que pudo confiar de verdad.

—Reino Unido, es el mejor lugar -dijo Eun joo con una sonrisa.

—Si, a las niñas les gusta mucho el fútbol -dijo do yeong.

Eun joo asiento mientras se arreglaba para dormir, sintió las manos de do yeong en su cintura y un beso en su cuello.

—Señor Ha, las niñas están en la otra habitación -dijo Eun joo, dándose vuelta.

Lo abrazó del cuello y sonrió, do yeong la abrazaba de la cintura. Se dieron un tierno beso lleno de amor.

Hasta que las noticia de última hora los hicieron separase.

Noticias de última hora, la meteorologa Park Yeonjin es la culpable de la muerte de Son Myeong oh.

Tanto Eun joo como Do Yeong se vieron ante aquella noticia, vieron la tele y como yeonjin salía de siesta esposada con la policía.

Así que Eun joo no estaba equivocada de quien mato a al hijo de puta de Myeong oh.

—Do Yeong, esto no hay que decirle a ye sol. No hasta que tenga la edad suficiente -dijo Eun joo.

Do Yeong asintió, no era la mejor idea decirle a la pequeña que su madre era una asesina.

Con todo ésto más ganas de irse tenían, ya que no tenían nada más que hacer en este país.

—Creo que debemos agradecerle a Dong eun -dijo do yeong.

—¿Porqué? -preguntó Eun joo confusa.

—Por qué volvió a juntarnos, como queríamos hace años -dijo do yeong con una sonrisa.

Eun joo sonrió y apago el televisor, do yeong tenía razón sin Dong eun quien le abriera los ojos. No estarían como están ahora felices al lado del uno al otro.

Algunos tuvieron mala suerte y otros tuvieron buena suerte, como decían en todos lados el bien triunfa y el mal cae.

Eun joo triunfo tiene la familia que siempre quizo tener, cálida y feliz con el verdadero amor de su vida. El cual la respetaba y amaba como realmente se lo merecía.

Y gano otra hija la cual era un sol que se merecía todo y mucho más.

Eun joo tomo su teléfono por última vez y le dejo un mensaje a Dong eun.

Dong Eun, gracias por dejarme unirme a tu venganza. Se que el daño que te hicieron fue terrible y yo más al no hablar. No te merecías nada de lo que te paso.

Te deseo lo mejor de tu vida y que puedas volver a tener aquella linda sonrisa, con cariño Jung Eun joo.

Envío el mensaje y apagó su teléfono de forma permanente, ya no le iba a no lo iba a ocupar más de todos modos.

—Señora Ha, ya es hora de dormir. Mañana tenemos más de muchas cosas que hacer -dijo Do Yeong.

—Enseguida, señor Ha -respondió Eun joo con una sonrisa.

Dejo un teléfono en el estante y se acostó al lado de do yeong, este apago la lámpara y abrazo a Eun joo.

—Eun joo -llamó.

—¿Hm?.

—Te amo -soltó do yeong.

Eun joo lo miro, su corazón latía demasiado rápido, al escuchar aquella palabra que tanto deseó escuchar de los labios de su amado.

—Yo igual te amo, do yeong -respondió Eun joo.

Volvieron a darse un beso llenó de amor el cual ahora nadie ni nada, lo iba a interrumpir.