
Día uno
Tzuyu caminaba en silencio por la casa de Sana, mañana empezaría el celo de la castaña así que decidió ir a su departamento un día antes.
Eran las siete de la mañana del sábado y la alfa estaba completamente despierta. Solo Tzuyu se despertaba a las seis de la mañana y estaba de buen humor un sábado.
Dejó su pequeña maleta con ropa en la habitación de invitados y fue hasta la habitación de la menor, al entrar la encontró completamente dormida en la cama cubierta hasta el cuello.
Quién diría que esa cosita tan tierna le dio una patada en los huevos a un alfa que hasta lo dejó sin aire.
Se acercó y se sentó al borde de la cama, empezó a acariciar el sedoso cabello de la omega mientras la llamaba suavemente.
— Sha... Es hora de despertar.— Susurró dulcemente — Sana, tienes que terminar tus tareas...—Nada, la castaña parecía que no tenía intenciones de despertar —Sana vamos... ¡Minatozaki Sana despierta vaga de mierda!
—¡AH, LADRÓN! — Grito dándole un puñetazo justo en la mandíbula.
—¡Oh, mierda, Sana!— Grito colocando su mano sobre su mandíbula. —¡Para ser una omega tan delgada y pequeña, tienes mano dura!
—¡Tzuyu!, ¡Lo siento!— Dice arrodillándose en la cama y tomando entre sus manos el rostro de Chou. —Dios, ¡¿Por qué carajos me gritaste así!?, ¡Me asustaste! Además, ¿Cómo entraste a mi casa?
—Te recuerdo que me diste el código de seguridad — Dice sobando su área golpeada.
Sana soltó un bufido. —Ahora me arrepiento de haberlo hecho. Mierda, ponte hielo para que no se te hinche y en el baño hay unas pastillas para el dolor, es un bote azul.
—No te preocupes, estoy bien— Dice restándole importancia. —Te recuerdo que una vez me golpeé en la cabeza y no sentí tanto dolor.
—¡Una tipa te empujo y casi te rompe el cuello!
—¿Y?, ¡No sentí nada!
— ¡Por qué te desmayaste!
(...)
Chat con Momo
Momoring
¿Estás segura que vas a estar bien?
Tzuyu
Claro
No va a ser tan difícil, ¿No?
Momoring
Amh Igual te voy dejar una pequeña guía.
[PDF 🧾Tips para cuidar a Minatozaki Sana en celo]
Tzuyu
¿De verdad me mandaste un pdf?
O mejor dicho
¿De verdad hiciste un pdf para cuidarla?
Momoring
También hice un word
¿Quieres saber cómo cuidarla o no?
Porque puedo borrar el mensaje.
Tzuyu
Ya, ya
Lo leeré, gracias
Momoring
Bien.
Llámame si pasa algo.
Enviado a las 12:49 hrs.
Tzuyu presionó el PDF que Momo le había mandado y esperó unos segundos, pero como este no cargaba lo cerró restándole importancia, y guardo su teléfono en el bolsillo de su pantalón.
No debe ser tan difícil cuidar a Sanake, Momo es una drama queen.
Eran las cinco de la tarde y Chou se encontraba en la cocina preparando la merienda para las dos, Sana se encontraba acostada en el sillón viendo una película debido a que le dolía la cabeza. Preparó dos cafés y unas tostadas con crema de maní para las dos, coloco todo en una bandeja y con cuidado la llevó hasta la sala dejándola arriba de la mesa redonda.
―Gracias, Tzuyu― Agradeció la omega sentándose en el sillón.
— No es nada— Sonrió. —¿El dolor se fue?—
Sana asintió. —Algo, normalmente las omegas tenemos dolores de cabeza, dolor muscular o mareos antes de que nos venga el celo, incluso cólicos.
—Wow, ¿Momo cuidaba de ti antes?— La omega asintió nuevamente. —Y tú... ¿Nunca intentaste acostarte con ella debido a tu celo?
Sana se sonrojó. —Si, mi omega buscaba... Satisfacerse con un alfa y bueno, mi omega tomaba control y quería a Momo.... Ya sabes... Entonces ella me compro... Juguetes.
Tzuyu asintió con una sonrisa burlona, y no dijo nada al respecto.
(...)
El resto del día Sana se la pasó acostada en el sillón debido a los fuertes dolores en su cuerpo, Tzuyu tuvo que hacer los deberes de la casa mientras escuchaba los quejidos de dolor de su mejor amiga por los cólicos.
Cuando la noche llegó, cenaron una sopa y luego llevó a la castaña hasta a su habitación.
—¿Estás segura que puedes cambiarte sola? —preguntó mientras la ayudaba a sentarse en la cama.
— Si, ve a dormir tranquila— Le respondió. —Mañana por la mañana dame un supresor, pero triturado y mézclalo con un jugo o batido. En el celo mi omega se niega a tomarlo, así que hazlo de esa forma.
— Bien, entendió. Descansa.
— Tú igual... Gracias por ayudarme con mi celo.— Dijo y Chou sonrió.
—No es nada, eres mi amiga, yo siempre voy a estar aquí para ti—
Esta vez, Sana le sonrió.
(...)
A la mañana siguiente Sana se despertó con un fuerte dolor de cabeza y vientre, se retorcía en su cama soltando pequeños quejidos y sus ojos se llenaron de lágrimas debido al dolor. Se sentó en su cama y empezó a olfatear, sentía olor a alfa, pero... ¿Por qué su alfa no estaba con ella? Su labio inferior tembló y empezó a llorar.
Tzuyu, quien estaba en la cocina triturando el supresor, escuchó los llantos de Sana y soltó lo que tenía en sus manos para correr a la habitación de la menor. Abrió la puerta y la encontró sentada en su cama con el cabello despeinado y sus mejillas y nariz roja por el llanto.
— ¿Por qué lloras, cosita? — preguntó acercándose a la cama de la menor.
La omega alzó su vista cristalina y levantó sus brazos hacia Tzuyu, quería un abrazo —Alfa...
Tzuyu se sentó al lado de Sana y la tomó de la cintura sentándola en sus piernas para abrazarla.
—¿Pensabas que no estaba aquí?— La castaña asintió con un puchero —No me voy a ningún lado, cosita, estaba preparando el desayuno para las dos. Ve al baño y aséate para comer, ¿Si?
—No, con alfa. — Respondió.
—¿Quieres que vaya contigo?— preguntó con una sonrisa burlona, y Sana asintió. —Pero tengo que terminar el desayuno, te prometo que si lo haces tu solita yo te doy una recompensa, ¿Bien?
Sana asintió con la cabeza y se levantó de las piernas de su amiga para correr hasta el baño, Tzuyu río bajito, negando con la cabeza y fue nuevamente hasta la cocina.
A los minutos Sana apareció en la cocina con algunos mechones de cabello mojados, se sentó en la mesa y Tzuyu le entregó el vaso de jugo de naranja con el supresor disuelto, al igual que su desayuno.
— Mía.— Murmuró apoyando su cabeza en el hombro de la mayor.
—Si, toda esta comida es tuya, cielo.— Dijo con una sonrisa divertida.
Porque obviamente Sana se refiere a la cena, ¿A que más si no?
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