Día viernes, Félix con trabajos pudo terminar con sus tareas y proyectos, no pudiendo ir a la florería a trabajar pero su madre supo de la situación, tuvo que convencer a su abuela que no diga nada sobre su problema con el profesor de economía, tuvo horas agotadoras estando encerrado en su habitación después de clases, aprovechaba las horas libres pero HyunJin no permitía que él y JiSung sigan presionándose, que se tomaran un respiro, mencionando que el fin de semana es suya.

MinHo prefirió ir a la casa del rubio, ambos se encuentran en la habitación arreglándose, faltaban unos minutos para las ocho pero no es de mucha importancia, lo mejor de la noche comienza cuando las almas de la fiesta están presentes, los padres de HyunJin estarán ausentes el fin de semana, así que no hay problema alguno, solo cuidar que no rompan nada y que no encuentren alguna reliquia familiar.

Félix revisó su celular, el chico pelinegro no ha contestado, han comenzado con charlas amistosas pero es él quien tardaba en contestar, al saber que estudian en la misma universidad jamás tuvo la oportunidad de ir a buscarlo, además es la única pista será difícil si lo hubiese intentado, soltó un suspiros negando dichos pensamientos, terminaba viendo la foto de su perfil por alguna extraña razón, aún esos momentos cuando lo vio viajaban por su mente y eso le desconcentraba demasiado, quiere hablarle, quiere saber más de él, está confundido que puede aumentar si sigue sintiéndose de esta forma.

MinHo chateaba después de colocarse una playera y sus pantalones rasgados por los muslos, sus cabellos castaños goteaban poquita agua, el olor a shampoo y jabón llegaba a sus fosas nasales, dudó un poco si puede pedirle algún consejo, pero lo hizo.

—¿Tú crees en el amor a primera vista? — Soltó así de la nada, el contrario ha tardado en contestar, como si no le hubiera prestado atención.

—A primera vista... — Repitió murmurando antes de mirarlo. — ¿Por qué preguntas eso?

El rubio encogió de hombros, no sabe porqué lo dice si ni siquiera está enamorado.

—Solo... me da curiosidad.

—Le estás pidiendo la opinión a la persona que no tiene intereses amorosos.

—Pero si te gustara alguien ¿Qué harías?

—Hablar con esa persona, hacer lo posible para volver a verla y ser discreto con mis acciones hasta encontrar un punto donde me permita expresarme de forma amorosa. — Respondió directo, dejando su celular sobre el tocador, sacando de su mochila un perfume que le robó a HyunJin.

—Eso suena difícil.

—Y lo es, uno no sabe si le gustas a la otra persona.

Hizo una diminuta mueca mirando su celular, no puede confundir la amabilidad con lo romántico, no puede ser tan estúpido para considerar las cosas de forma contraria, quizás sea una atracción nada más, si... nada más.

Suspiró cerrando los ojos, MinHo examinaba las expresiones de su amigo, hay ocasiones que Félix actúa de esa manera pero es más que una simple frustración.

—¿Conociste a alguien?

—Si... — Dijo en voz baja. — Va en nuestra universidad y me sigo sintiendo raro desde la primera vez que lo vi.

—¿Cómo cuál?

—Solo lo vi entrar a la florería, se vio demasiado lindo y más cuando sonrió, yo estaba solo, es muy claro que era hacia a mí pero como una muestra de amabilidad, fue tan hipnotizante que no puedo olvidarlo.

—JiSung me ha contado de eso, hasta dijo que aún te acuerdas lo que pidió.

—Pidió claveles para su abuelita. — MinHo soltó una carcajada.

—Oye ¿Desde cuándo lo viste?

—Creo que el martes.

—Okay, no te acuerdas pero si lo que te pidió.

—Esto va hacer que me vuelva loco, MinHo.

—Lo que sientes es atracción, no creo que estés enamorado. — Respondió tratando de tomar esto en serio.

—¿Y si no es gay?

—Bueno, hay más chicos que puedes andar.

Era verdad, por estos días ha estado actuado como un idiota, se prometió asimismo no verle la cara a la próxima que lo vea, hay probabilidad que pueda actuar como esa vez.

—Además, si asiste a la fiesta, tendrás suerte.

—¿Crees que vaya?

—¿Quieres ligártelo o qué?

—N-No lo sé... soy pésimo en ligar.

—Creo que caíste tú en vez que caiga él.

—No es gracioso.

—Deberías invitarlo a salir cuando lo veas. — Propuso, animándolo. — Si tienes esa necesidad, hazlo.

Félix soltó una diminuta sonrisa, no sabe si es tan capaz pero hará el intento, nunca en su vida se ha atrevido en invitar o hablar a la persona que le llama la atención, simplemente observaba de vez en cuando, en espera que esa persona sea la primera, quizás es un buen momento de dar el primer paso.

La música resonaba por la habitación, el pelinegro se puso enfrente del espejo colocándose una playera blanca con estampado de un manga japonés, sus cabellos húmedos se apegaban un poco en su frente, se echó su perfume favorito antes de atravesar los dedos entre sus hebras oscuras, en estos dos días ChangBin logró acostumbrarse en su nueva universidad, el grupo de compañeros que le tocó son buenas personas y JiHyo le estaba ayudando, las tareas comenzaban en acumularse evitándole en buscar a Félix, aún no olvidada en que facultad se encuentra hasta que logró ir el día de hoy, lamentablemente el chico ya no se encontraba, también tuvo la idea de buscarlo en la florería notando que él no ha asistido, soltó un profundo suspiro sentándose en el borde de la cama, teniendo su celular en mano, no había respondido el mensaje.

Félix:
En la que vas tú, en la facultad de contabilidad.

ChangBin:
Lamento por no responder, andaba ocupado.

Escuchó que alguien golpeaba en su puerta, elevó la mirada encontrando a su abuela parada, teniendo su gata entre brazos.

—Tú nuevo amigo ha venido.

—¿Tan temprano?

—Se ve tan emocionado, has hecho muchos amigos en estos días.

—No es la gran cosa.

—¿En serio? ¿Qué hay del chico rubio que quieres ver? — El menor volvió a verla. — ¿Te gusta?

—No lo sé, solo me llamó la atención.

—Crees que es muy pronto.

—Lo es, tengo otros planes y... no creo que sea buen momento para tener una pareja.

—¿Aún piensas en tus padres? — Lo vio asentir. — Sé como te sientes, no es sencillo avanzar sin tus padres a tu lado, en algún momento tienen que aceptarte porque sigues siendo su hijo, aunque digan palabras que te dañaron, un perdón de ellos vendrá.

—No pienso mucho en eso, debiste ver la expresión de mi padre.

—Puedes hacer tu vida, ya eres un adulto y es tú turno de escoger lo mejor para ti. — Sonríe con dulzura. — Si ahora en la fiesta quieres besar a un chico o invitar a bailar a quien esperas, hazlo, diviértete.

—¿Quieres que me porte mal?

—Eso no, no vayas a consumir alcohol hasta perder la conciencia y llega antes de las dos. — Soltó antes de irse.

—Lo haré. — Alzó un poco la voz para que la mujer lo escuchara.

Si, hoy puede ser su día de suerte, no irá tan apresurado pero lo encontrará en ese lugar, se apresuró en colocarse su chaqueta favorita y desconectar su celular, tomó las llaves y su cartera antes de apagar las luces de su habitación para salir, acomodó sus cabellos oscuros mientras bajaba por los escalones, dio un casto beso en la mejilla de su abuela despidiéndose de ella, se colocó sus botas y salió de la casa, lo primero que encontró era el auto de SeungMin, quien lo esperaba dentro junto con JeonGin.

Al llegar a la fiesta, el mismísimo dueño del hogar los recibió, se encontraba en la entrada platicando con unas chicas mientras reían, ese era el Hwang HyunJin quienes hablaban, la música estaba todo volumen, mucha gente está por doquier, bailando, jugando, besando, fumando o bebiendo, las luces iluminaban dichos lugares. JeonGin jaló a sus amigos hasta la cocina, se ve que no es la primera vez que hay una fiesta en esta casa, supo que HyunJin es un alma de las fiestas, las que organiza él son las mejores, cuando da la medianoche las cosas se ponen buenas.

Buscaba con la mirada al chico de las pecas, tantas cabelleras rubias y no era él, hasta hubo chicas invitándolo a bailar, lo cual rechazaba.

—Hey, debiste aceptarle. — Habló SeungMin al contar la quinta chica.

—Estoy buscando a alguien, pero no estoy seguro si está aquí.

—¿Un ligue?

—¡Por Dios, ChangBin! Si recién llegas a Ulsan.

—No es un ligue.

—¿Entonces?

—Un amigo, supongo. — Murmuró lo último, tomando el vaso con alcohol que JeonGin le ha extendido.

Por el otro lado, JiSung zarandeaba el cuerpo de MinHo sin parar de gritar, el otro castaño no podía concentrarse en calcular para que la pelotita naranja atinara al premio mayor, Félix animaba a su amigo que no ha fallado en ningún tiro, habían personas viendo haciendo lo mismo, MinHo se sobresaltó al sentir la mano de su amigo golpear en sus glúteos, tirando la pelotita que rodaba por la mesa hasta caer a otro lado, fallando.

—¡JiSung no me toques el culo! — Refunfuñó el chico volteando a verlo, quien se echó a correr tomando al rubio por el antebrazo, el de cabellos castaños oscuros comenzó a perseguirlos tomando el dinero que ganó.

Yendo directo al jardín, MinHo logró atrapar a ambos antes que se perdieran entre un pequeño grupo, abrazándolos por sus caderas antes de poner sus manos en dichas áreas como venganza, JiSung soltó un pequeño grito de dolor alejándose de su amigo, ha sido el más fuerte que el anterior, en el jardín de su amigo es un poco más grande pero acogedora, y hablando de HyunJin lo han perdido de vista desde que comenzaron a jugar los juegos que hay. Para Félix se anda divirtiendo demasiado, el cansancio que emanaba ha desaparecido, ahora le importa disfrutar este momento y tomar un gran descanso en dos días.

—¡Oh, si hay mesa de golosinas! — Exclamó el rubio al desviar la mirada a un lado, los dos castaños sonrieron con un brillo de ojos.

Los tres corrieron de inmediato ignorando miradas extrañadas por su comportamiento, no habían tomado demasiado alcohol pero eso no afectaba en nada. JiSung tomó una brocheta de malvaviscos y lo llevó a la pequeña fuente de chocolate, Félix tomó una bolsa de chocomentas, ambos veían como MinHo le daba igual lo que dirán los demás acercándose a la fuente, llevando su boca hacia la corriente del chocolate, bebiendo una buena cantidad, saboreándolo.

—Deberíamos robarlo. — Sugirió JiSung riendo, Félix no tardó hacer lo mismo.

Los amigos rieron al haberse ensuciado las mejillas y las comisuras de sus labios.

—No creo que a HyunJin le moleste si lo tomamos prestado.

—Cada vez llega más gente, vayamos a jugar a la botella y el quien bese más gente se lleva esta fuente.

—No hay probabilidades que haya un perdedor, JiSung es adorable para las chicas, MinHo es atractivo.

—Y Félix solo es tímido.

—No es cierto.

—Solo que eres muy tranquilo.

El rubio suele ser social solo cuando le agrada el ambiente en el que está, no todas las personas son agradables, Félix es una persona pacífica y no le importa si tiene muy pocos amigos, más si son los más sociales del mundo, sus locuras hacen que se sienta mejor.

—¿Vamos a jugar a eso?

—O tienes miedo en seducir.

—Oh vamos, no todos saben seducir, MinHo.

Son las diez de la noche y el tiempo avanza lento, miró de reojo a un lado hasta toparse con un grupo de chicos, lo que menos esperó, es haber reconocido dicha persona a distancia.

Seo ChangBin está ahí.

Venía acompañado con gente que desconoce, tragó duro mientras prestó atención en sus amigos, pero no funcionó cuando JiSung lo tomó del mentón para que mirara a esa dirección.

—¿No es ese chico malo que me contaste?

—¿Chico malo? — Indagó MinHo confundido viendo al otro castaño señalando.

—Aunque no anda con gente de su clase, hasta hay chicas ahí.

—Félix ¿Es él chico que te sientes atraído?

El aludido entre abrió la boca, miró a su amigo y después a ese chico, buscando una buena respuesta en algo que no suele pensar, solo lo recuerda cada que lo ve o habla con él... o así de la nada. Negó con lentitud, ChangBin no notaba que tres pares de ojos miraban a esa dirección, él sonreía mientras hablaba, las mismas prendas oscuras que llegó a reconocer.

—No es la gran cosa, no va pasar nada.

—¿Cómo estás seguro si no lo has intentado? Siempre esperas que la persona que te llama la atención dé el primer paso, las cosas no se solucionan por arte de magia, Lee. — Aconsejó MinHo.

—N-No, mejor vayamos a jugar a eso.

—Te voy a retar que vayas a seducirlo. — Amenazó.

—MinHo ¿Estás consciente lo que dices? Ese chico puede ser una trampa.

—¿Cómo estás seguro?

—Habla con Lee TaeYong, es de los chicos que se juntan con motociclistas, le gusta andar en las calles y no sé como puede obtener buenas notas.

—Buen punto.

—Pero él es buena gente, los rumores solo es que pertenece en una pandilla.

Asintieron los tres al recordarlo, Félix soltó un discreto suspiro, pero no para MinHo, quien sonrió mientras un nuevo pensamiento aparecía en su mente, entiende que protegen a su amigo, y demasiado por obvias razones, deberían dejar de hacerlo de una manera tan sobreprotectora, con suerte HyunJin no invitó a esos chicos que suelen molestar a su amigo y si aparecen él mismo se encargará, podrían ver personas andando con los de su mismo género sin preocupación alguna, sin importar que sean pareja o solo un momento.

ChangBin terminó por conocer a más personas, otros pertenecientes de otras escuelas o de preparatoria, vaya que el tal HyunJin no le tiene miedo al éxito.

—¡Jackson Wang ha llegado! — Gritó una chica llamada JiSoo, abrazando a ese chico por los hombros para que todos los invitados gritaran. — ¡Ahora si empieza lo increíble!

—Es temprano para que esto comenzara. — Dijo JiHyo viendo la hora.

—La hora de divertirse es a las veinticuatro horas, iré a jugar a la botella ¿Vienen?

—JeonGin es muy tímido para querer besar a un desconocido.

—Si tú lo dices. — Volteó sobre sus talones para ir dentro, trotando hasta llegar.

—Igual yo iré a jugar.

—ChangBin no nos dijiste de tus preferencias. — SeungMin dio una liviana palmada en el brazo de su amigo cuando la chica se ha ido. — Hemos hablado de más, es tu turno.

—¿Te ha llamado la atención alguna chica?

El pelinegro teniendo ese líquido en su boca negó, lo pasó y soltó un sonido refrescante para hablar.

—De hecho, hay un chico que tengo en mente.

—Wow, así que te gustan los chicos.

—Pero recién llegas ¿Cómo quieres seducir a alguien? — ChangBin encogió de hombros.

—Ni yo sé porqué.

—¿Y podemos saber quién es el afortunado?

Señaló con su índice donde tiene el vaso en mano, a una dirección para que JeonGin y SeungMin miraran al mismo tiempo, justamente al chico rubio que se encuentra bebiendo el chocolate de la pequeña fuente, siendo acompañado por dos chicos castaños, había poca gente que les miraba raro y preferían alejarse de la mesa con golosinas.

—Oye, es el chico de la florería. — Afirmó el menor de los dos viendo al pelinegro. — Deberías invitarlo a bailar.

—¿Qué? — Los mayores soltaron al unísono.

—Puede que te haya gustado a primera vista.

—JeonGin, eso no existe. Es imposible que una persona se enamore a primera vista.

—Es muy complicado de explicarlo.

Sus dos amigos se enfocaron en su pequeña discusión, ChangBin ha visto a Félix desde que se acercaron a esa mesa, le pareció divertido la forma de como bebían el chocolate, hasta tuvo que fingir que no se daba cuenta cuando lo miraban, notando que no se olvidó de él, soltó una media sonrisa, ni él mismo entiende lo que está sucediendo, y sin pensarlo ya se encontraba caminando donde está el rubio.

SeungMin y JeonGin callaron al ver esa acción, prefirieron quedarse donde están para observar, sabiendo a la perfección que se tomó las cosas tan en serio, ese trío de amigos reían mientras planeaban de algo, pero cuando esos preciosos ojos posaron sobre el pelinegro, Félix no supo cómo reaccionar al ver ese chico dirigiéndose donde está él.

¿Existirá una conexión entre ellos?