
Capítulo 3
Escuchaba con tranquilidad la canción, miraba a través por el ventanal de como pasaban los edificios, Félix había amanecido preparado para entregar los proyectos, pero lamentablemente eran los extras del profesor que detesta demasiado, él y JiSung habían hecho el gran intento reportarlo para que lo despidan o esperar que termine el semestre, no es justo con lo que está viviendo, no puede estar suplicando por suerte o buscando la forma de pasar la materia solo por lo mismo, eso le agota.
Al llegar a la universidad, notó que esos chicos no se encontraban allí, siendo un buen comienzo para su día, era mejor evitarlos para que no le molestaran, aunque a la vez no es sencillo. Y como era de esperarse, su mejor amigo lo esperaba en la entrada, como saludo chocaron puños y después sintió como lo abrazaba por los hombros, caminando para ir directo a su aula.
—¿Listo para soportar la frase "Esto no va así, lo quiero perfecto" del profesor?
—Oh no lo menciones que me he levantado de mal humor.
—Hagamos el intento de que haya pruebas, igualmente aquí hay chicos homosexuales que pueden pasarles lo mismo. — El rubio hizo una diminuta mueca. — Recuerda el comentario repugnante sobre de una chica de la facultad de veterinaria.
—¿Y eso qué le tiene que importar? Solo es un viejo que dice las cosas por decir. Las indirectas hacia a mí me tienen cansado, de que me comparen con alguien o de igual manera de que compare a otros conmigo, no es justo.
—Podemos ver quienes son y unirnos para hacer en que lo despidan. — Félix encoge de hombros.
—Quiero quitarme un peso encima, no quiero soportar a él y al idiota de JungHwa y sus amigos.
—Para que se te suba el ánimo, vayamos a mi casa después de clases, juguemos el nuevo videojuego que compré. — Lo miró de reojo. — ¿Te parece bien? Después estudiamos juntos para el examen de mañana.
—Muy bien, avisaré a mamá si no tengo nada pendiente hoy en la florería.
Félix y JiSung son amigos desde la secundaria, JiSung supo de su gusto hacia los chicos siendo el primero en confesarle, ha sido una sorpresa y lo tomó tan bien que para Félix fue un alivio, desde un principio siempre lo ha apoyado, prometiendo que lo defenderá de la gente que se atreva a molestarlo por ser como es.
Desde el primer momento con el profesor de economía, el señor Jeong, Han para nada quedó con los brazos cruzados, hasta se atrevió en dejarlo en su lugar, restándole importancia que lo mandaran por un reporte por mala conducta y alzarle la voz a su docente, aunque lo segundo había sido muy exagerado. Félix de igual manera puede defenderse, siendo un buen equipo cuando les toca lidiar con momentos como ese, para nada quedarse callados y tratando de buscar una solución, JiSung tiene la gran idea de buscar personas para juntar demasiadas pruebas que el docente no es indicado para este sitio.
La vida de ambos es normal, solo que siendo polos opuestos, eso los vuelve más unidos, igualmente tienen su pequeño grupo de amigos, salen a divertirse como cualquier chico de su edad.
Ambos detuvieron sus pasos al ver que MinHo se acercaba a ellos, sonreía ya que intentaba tranquilizar la risa, ellos notaron que unos chicos no paraban de reír y había uno tirado, JiSung se alejó un poco de su amigo para saludar.
—¿De qué nos perdimos?
—Mark volvió a caer, no entiendo porque es fácil de caer de las bromas de JungWoo.
—¡MinHo invítalos para la fiesta de este viernes! — Escucharon el grito de Mark.
—¿Dónde va ser esta vez?
—En casa de HyunJin.
—Siempre son las mejores, sabes que estamos invitados. — Habla Félix. — ¿A las siete?
—Como siempre, para que olviden sus problemas con el viejo este y de los exámenes, sé que van a pasar esa materia.
—De verdad muchas gracias por tu apoyo pero tengo una buena idea.
—Piensa en obtener las pruebas suficientes para que lo despidan. — Responde Félix, MinHo asintió con lentitud al entenderlo.
—Cuenten conmigo, pero la fiesta eh, no olviden pedir permiso a sus madres y pasen la noche en mi casa. — Ambos chicos asienten.
—Dile a HyunJin que ahí estaremos, y que no olvide invitar al alma de la fiesta.
Félix tiene unos amigos increíbles, Lee MinHo es un chico que conocieron meses después, tan divertido, carismático y no falta cuando le invitan a una fiesta, y bueno está Hwang HyunJin, un chico sumamente extrovertido y amante de los videojuegos, le gusta ir de fiesta en los fines de semana, pertenece en el equipo de baloncesto de la universidad, sus notas son excelentes para tener la mayor confianza de sus padres.
Las clases habían comenzado, concentrándose en las explicaciones para los proyectos y los exámenes, todo de maravilla hasta que tocó economía, suplicando mentalmente que saliera todo bien, desvió la mirada en JiSung quien anotaba lo que está escrito en el pizarrón, no quiere entregar el trabajo que el señor Jeong pidió en que realizaran como castigo, recargó su mejilla sobre su mano continuando en escribir, escuchaban la explicación del hombre, no hay un día en que ese tipo se atreva molestarlo, y eso pasó cuando golpeó su mesa haciéndolo que sobresaltara.
El rubio de inmediato elevó la mirada, encontrándose a su profesor de economía reír discreto que ha sido notable para él, ninguno de sus compañeros se han atrevido a defenderlo, pero saben perfectamente lo que pasa cuando se acerca a Félix.
—Espero que los proyectos vengan como lo he pedido, no quiero decoraciones de niñas allí. — Dijo refiriéndose como si Félix hiciera eso. — Las chicas pueden ser una excepción, pero el chico que haga eso estará reprobado en mi materia.
Ninguno ríe por ese tipo de comentarios, eso lo agradece.
—Profesor, ¿Para cuándo vamos a entregárselo?
—Dentro de dos semanas, son dos temas que tienen que investigar. — Repitió. — Veré si el señor Lee y el señor Han hicieron bien su trabajo, sino para ellos será una semana. — El aludido volteó a verlo incrédulo, Félix ha entre abierto su boca, soltando un bufido después. — Así que, pasen sus trabajos.
Dijo yéndose al escritorio, ambos chicos asintiendo con lentitud mientras comenzaban a buscar su proyecto extra, si salen de esto no les sorprenderían que tengan una buena calificación, eso de "un punto extra" es en vano para ellos.
Les fastidiaba demasiado este silencio, para nada se atrevieron irse a sus asientos ya que el profesor no se lo permite, Jisung recargó su cabeza sobre la ventana al cruzar sus brazos, queriendo decirle algo a su amigo, dejándole todo para después. El hombre revisaba con tranquilidad, pasando el bolígrafo para calificar, han pasado unos cuantos minutos, unos miserables minutos estando parados en espera de una inútil opinión.
El señor Jeong miró a los chicos, dejando el folder sobre su escritorio para que los tomara, y así fue pero como siempre, dio su humilde opinión antes de que se vayan a sentar.
—Me sorprende que hagan las cosas bien. — Dijo acomodándose los lentes. — Y a ti... — Desvió la mirada en el rubio. — Estás mejorando, pero a la otra no intentes poner referencias repugnantes cuando no tienen nada que ver con el tema.
Félix no dijo nada, solo tomó su folder pensando que el hombre tomó ese tema a propósito.
—Disculpe, profesor. — Escucharon la voz de HyunJin, haciendo que voltearan a verlo. — Usted había pedido que leyéramos esa historia y diéramos nuestra opinión. — Se veía tan relajado, su espalda recargada en el respaldo de su asiento, el pelinegro de un ligero movimiento acomodó sus cabellos, sonriendo ladino. — ¿No le hace ver hipócrita hablar de un tema homosexual, después de que le pidieron por décima vez que respete a sus estudiantes que prefieren amar su mismo género? — Unos cuantos de sus compañeros hicieron expresión de asombro, mientras el hombre frunció el ceño. — Usted escogió el tema para fastidiar a Félix, diga, si su punto es darnos un buen ejemplo de respetar a esas personas ¿Por qué lo pidió cuando ni siquiera ha aprendido de esa lección?
El hombre se levantó de golpe y los alumnos habían hecho un sonido, la silla rechinó sobre el suelo cuando fue movida, colocó sus manos sobre su escritorio con una expresión de molestia.
—¿Te estás burlando de mí? — HyunJin encogió de hombros desinteresado.
—Solo estoy siendo sincero con todo, señor.
—¡Ustedes tres, fuera de mi clase y tienen una semana para que entreguen los proyectos! — Señaló hacia la puerta, Félix y JiSung no dijeron nada, solo se dirigieron a sus lugares para tomar sus cosas.
HyunJin rio seco, chasqueando la lengua antes de moverse. Ha sido la primera vez que decidiera defenderlos ante ese hombre, notando que el pelinegro no soportó de que traten así a su amigo, finalmente ellos salieron del salón sin decir nada, caminando con tranquilidad en los vacíos pasillos, Félix soltó un profundo y frustrado suspiro desanimado, JiSung se acercó a él para abrazarlo por los hombros, habían salido media hora antes de la hora del almuerzo.
Era lo que menos quería pero no era de esperarse, ese suceso había surgido de la nada cuando solamente Félix hacía como cualquier estudiante haría, y bueno JiSung se involucró para defenderlo para que tuvieran un trabajo más. Si es cierto que ese profesor de economía tiene unas cuantas quejas, cada que sucede eso suele fingir que aprendió la lección para burlarse después, ningún otro estudiante quiere hacer algo para detener esto.
—HyunJin, no debiste si no querías...
—Ni quise estar en la clase. — Interrumpió. — Es suficiente ver como trata así a Félix.
—Pero va ir contra ti igual.
—¿Y qué? Si todo el salón lo decidiera, sería contra todos.
—Quiero saber sobre el plan de MinHo. — Habló Félix cansado. — Supongo que le va pedir ayuda a RyuJin.
—Suena bien pedirle alguien del consejo estudiantil. — Soltó JiSung convencido. — No olvidemos cuando ayudó tu problema con ese chico.
—Félix, el día de la fiesta pásala tan bien como si fuese la primera vez. — Aconsejó el pelinegro. — Dentro de una semana, el señor Jeong no va estar aquí, así que te recomiendo que festejaras por ser tú mismo una vez más. — Sonríe ligero.
—Será mejor que conozcas a un chico. — Animó Han, pegándole con suavidad con su codo sobre el brazo ajeno. — Queremos verte más feliz de lo normal, ya es tiempo que te vuelvas a enamorar.
—Lo haría si todos mis problemas ya estuviesen solucionadas.
—Y lo van a estar, hablaré respecto de esos chicos. Sabemos que por una parte eso te atormenta y puede causarte inseguridades, vamos a impedirlo todo cueste lo que cueste.
Asintió con ánimo, eso ha sido una gran motivación, es cierto que intentaba ignorar los comentarios pero si terminan por afectarle, Félix será y va ser feliz como cualquier ser humano, con el hombre que se pueda enamorar lo será más, los amores diferentes son lo mejor que pudo vivir, tomando en cuenta los comentarios de sus amigos para pasar bien este viernes.
Ambos estuvieron de acuerdo las palabras de HyunJin en ir almorzar en un lugar cerca de la universidad, pensando lo que van hacer cuando sea después del almuerzo, su profesora aún no ha asistido a clases debido que está a punto de tener su segundo hijo, teniendo tiempo libre, y para su suerte MinHo va estar disponible.
Félix es feliz, está agradecido de tener a las personas correctas con él, simplemente es como los demás, solo que una manera de amar tan común, donde cualquiera le ve como algo anormal.
Eso no le importa, simplemente es él mismo.
El olor a manzana dulce emanaba por el lugar, el sonido del timbre se hizo presente, llamándole la atención a la mujer de la casa, lo cual tomó una toalla de manos para secarse mientras caminaba a la puerta principal, ha pasado unos días después del sucedido y sigue con la preocupación de como estará su nieto. Cuando abrió la puerta, sonrió con dulzura al ver que cumplió con su palabra, ChangBin correspondió, soltando su maleta para ir abrazarla.
Queriendo llorar un poco en ese entonces, se contuvo porque no quería que lo viera así, recordó las palabras de Bangchan cuando eso se trataba, si es necesario llorar que lo haga, solo está adolorido de que sus propios padres no lo apoyaran y le dieran la espalda, pero hizo bien escapar de casa sin un aviso.
—Bienvenido a casa, hijo. — Dijo la mujer separándose de su nieto, para dejarle pasar e irse a la cocina de nuevo.
El pelinegro tomó su maleta corrediza y se adentró, cerrando la puerta principal para ir a la sala, como recordaba las veces que la visitaba, el ambiente le tranquiliza demasiado y comenzó a buscar con la mirada la gatita que le ha regalado, encontrándola en uno de los sillones durmiendo.
—¿Por qué no dijiste que ya venías? — Indagó la mujer deteniéndose en la entrada de la cocina.
—Sorpresa, abuela. — La mayor negó con diversión.
—Tu madre empezó a llamarme para saber si sé de ti. — ChangBin jaló un banco de la barra para sentarse, recargando su antebrazo derecho sobre esta. — He mentido de que te fuiste con tu tía, ella ya lo sabe y fue mi cómplice.
—Ella me envió un mensaje diciendo que me apoyará en eso. — No le sorprende que su padre no quiera saber de él, pero le extraña demasiado que lo haga su madre. — No soporté estar en casa, al día después al volver, discutí de nuevo con papá ya que ha buscado una cita con una chica.
—¿Hija de alguna amiga de tu madre?
—Si, diciéndome que si no me hago hombre ahora, después me iría peor.
—Se sabe que no es correcto obligarte amar alguien quien no quieres, y más para "recuperar" el hecho que seas hombre. — Sinceró, abrió la llave del fregadero para lavar las naranjas. — Es difícil entenderlo si al final de cuentas sigues siendo hombre, solamente te gusta alguien de tu género.
—Abuela, me sorprende que sepas de este tema, has vivido una época donde ser gay es pecado y mal visto, todas esas cosas pero peor.
—ChangBin, en todos los tiempos, debió existir un amor así. Es lindo que sea entre un hombre y una mujer, es lo normal que uno ve. Pero no dejas de ser hombre por amar a otro.
—Y decidí pasar los días con mi mejor amigo. — Continuó. — Lo de la universidad está resuelto, hice mi inscripción en línea y comienzo este miércoles.
—Me dio tristeza que te fueras la que quisiste estudiar.
—Si decidiera vivir solo, sería más pesado trabajar y estudiar a la vez, tendría doble trabajo ya que dejarían de apoyarme con eso. — Soltó entristecido. — Es increíble ¿no? Que por tantos años, de tanta confianza y como debe suceder en las buenas familias, tus propios padres te den la espalda como si ser gay fuese un problema.
—Con suerte tienes algunas personas que son de tu familia apoyándote. — Asintió desanimado. — Tu tío Dae está dispuesto en ayudarte con tu carrera, cuando te gradúes, buscará un buen lugar en el hospital en el que trabaja. No creas que estás solo, hiciste bien en estar aquí y no torturarte de esa manera solo para cumplir tu sueño, hazlo pero sin la necesidad de romperte de esa forma. Me alegra de que tu abuelo te haya enseñado ser así.
—De verdad, me siento agradecido.
—Puedes ir a tu habitación y desempacar, no he movido nada de tus cosas.
Asintió el menor moviéndose, sin olvidar de agradecerle de nuevo, tomó su maleta y la cargó cuando comenzó a subir el primer escalón.
En sus años, en las vacaciones suele visitar a los abuelos y tíos, en especial en vísperas de navidad, de niño siempre le ha encantado viajar a Ulsan, de jugar con sus primos o comer las galletas mientras escucha un cuento, ver televisión o cuando leía un libro por su cuenta.
Al adentrarse la habitación donde siempre ha dormido en esas noches, finalmente se volvió suya a partir de ahora, echará de menos a sus amigos y unas cuantas cosas, esto es definitivo. Continuará su vida como si nada, teniendo a las personas que decidieron quedarse a su lado, doloroso es aceptar que haga lo que haga nada va regresar si intenta tener una buena convivencia con sus progenitores, al menos agradeció antes de irse a través de palabras de tener unos padres como ellos, ChangBin no quiere una vida miserable, solo ser libre con la persona que podía estar dispuesto amar.
Los juguetes que solía jugar aún seguían allí, muy pocos pero conservó sus favoritos de acción, así para dárselos a su futuro hijo. ChangBin tiene grandes sueños para su futuro como adulto, a pesar que no se vea esa clase de persona, piensa ciertas cosas románticas que le gustaría pasar.
Abrió su maleta, es suficiente grande para haber traído lo necesario, se dirigió al closet y recorrió la puerta de madera, así para comenzar acomodar su ropa.
ChangBin ama vestir de negro, tiene un buen estilo para combinarlo, al cumplir trece le perdió gusto a la ropa de colores, teniendo su gran obsesión hacia los colores oscuros, el blanco y el negro. Siempre es un buen chico, con notas excelentes, inteligente y de buenos amigos, de sus gustos musicales no importan ya que suele escuchar de todo, adora demasiado la lectura y dibujar, siendo sus grandes pasatiempos. Durante su adolescencia ha sido lo mejor, salidas a fiestas, pasar tiempo con los amigos, uno que otro el primer trago de alcohol a escondidas de los adultos, las bromas o las charlas mientras están sentados en algún parque o en la calle.
Ha tenido su primer amor y ha sido con una chica, solo han durado cinco meses, teniendo su primer beso a los dieciséis, su interés hacia los hombres comenzó cuando cumplió veinte, teniendo la idea de experimentarlo y si lo hizo, siendo su gran interés que decidió ocultarlo por un tiempo hasta hoy en día. ChangBin tuvo su primera relación con un hombre, ha sido a escondidas de sus padres y será mejor no decirlo, solo YuNa lo sabía, manteniendo eso en secreto, bueno, cualquiera puede cambiar a través de tiempo si la primera relación es alguien del género opuesto.
Tuvo la gran idea de conocer el vecindario al día siguiente, pasear por lo menos cerca de casa para después conocer el camino para ir a la universidad, su nueva vida ha comenzado.
Ahora en adelante aprenderá unas cosas para llegar al punto de ser independiente, un camino sin el apoyo de sus padres no significa que se tiene que detener y a llorar, solo continuará hasta cumplir todos sus objetivos.
Nuevos amigos, nuevo vecindario, nueva universidad.
Bueno, veremos qué pasa después.
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