
CAPÍTULO XXX - Maybe tomorrow
No puedo creer que se ha terminado, que te vas
¿No estábamos destinados a ser?
Debería de haber sentido el peligro, leer las advertencias justo frente a mi
Detente, vamos a empezar de nuevo
¿Podrías darme otra oportunidad?
Quizá mañana digas que eres mío
Te darás cuenta de que puedo cambiar
Te voy a demostrar que estoy en esto de por vida
Te recuperaré algún día, quizá mañana
Olvidé estar contigo, fui egoísta, puedo ver eso ahora
Debería de haberte conocido, de abrazarte cuando tus lágrimas caían
Detente, no me hagas rogar
Dime que te quedarás esta noche
Espera un minuto, solo escúchame
Esta vez te prometo, que serás mi prioridad
Date la vuelta ahora, mi corazón no puede permitir que te vayas
Haré lo que sea necesario
Hay muchas cosas que quiero decir ahora
Quiero vivir mi vida contigo (no te marches)
Hay muchas cosas que quiero hacer ahora
Solo quiero hacerte el amor
El juego de la botella se estaba poniendo cada vez mas intenso, los chicos cada vez mas ebrios y ninguno estaba dispuesto a ser el primero en rendirse.
Era el turno de mandar de Yoongi y su víctima era Hoseok.
—¿Verdad o reto?
—¡Reto!
— Te reto a que le des un beso en los labios al hombre que se te haga más atractivo de los que estamos aquí hoy.
— ¿Qué? Pero...
— ¿Qué dijimos al comienzo? No te puedes rajar solcito... ándale, ven y bésame de una buena vez. — dijo Taehyung seguro de sí mismo.
— Cumpliré el reto pero por favor cierren los ojos. Prometo que voy a cumplir.
Todos cerraron los ojos como favor a su amigo, lo que Hoseok no sabía era que todos hicieron trampa y todos pudieron ver cuando Hobi se levantó despacio de su lugar, se acerco lentamente, se agachó y deposito no uno, sino dos dulces besos en los labios de Taehyung, quien lo recibió con una enorme sonrisa y correspondió aquel acto.
Hoseok regresó a su lugar — Ya pueden abrir los ojos, juro que si cumplí.
Todos asintieron en sinónimo de confianza.
Ahora es Taehyung quien gira la botella y es él quien tiene que retar a Yoongi.
— ¡Ay flaquito de mi vida! Que hueva si dices verdad, así que mejor reto de una vez... te reto a que le des un beso apasionado a... Magic Mike o mejor conocido como Jimin, pero un beso de un minuto que le voy a poner a Alexa que cuente.
Jimin volteo a ver a Yoongi sugestivamente y se relamió sus propios labios esperando aquel contacto y con ambas manos le hizo una señal con sus índices para que se acercara.
Yoongi se deslizó hasta donde estaba Jimin y con una mano lo tomó del cuello y comenzaron a besarse, no cualquier beso, un beso lento, muy lento, se veía como estaban saboreándose, se veía como sus lenguas se rozaban provocativamente, se veía como sus labios se succionaban entre sí, la respiración entre los dos era acompasada, llevaba un mismo ritmo, en ningún momento necesitaron separarse para buscar oxigeno, el oxigeno era ese beso.
Los otros tres veían con morbo aquel beso que comenzaba a calentarlos de nuevo, la garganta de los tres espectadores estaba seca, mientras que la boca de Jimin y Yoongi exudaba humedad.
Todo mundo olvidó el cronómetro, realmente nadie sabía cuánto tiempo había pasado, pero llevaban casi 5 minutos siendo testigos de aquel acto.
Cuando de pronto fur Jimin quien rompió ese beso, al quitarse, bajó la mirada y chupó su labio inferior, su cuello aún era sostenido por Yoongi el cual solo sonrió, soltó a Jimin y volvió a su antiguo puesto.
Era el turno de Yoongi de girar la botella y ahora era Hoseok quien retaba a Taehyung, el reto era que Jungkook se acostara sobre aquella pequeña mesita, verterle tequila en su bonito ombligo y que Taehyung lo bebiera, después tenía que subir a su boca para quitarle el pedazo de limón que sostenía Jungkook en sus labios.
Jungkook se levantó su camisa y dejó ver su lindo torso, firme, marcado, su ombligo lo llenó Hoseok de tequila y de inmediato Taehyung absorbió la bebida, subió rápido y tomó con sus dientes el limón de boca de Jungkook, por hacerlo rápido la verdad es que no lo hizo ni sexy ni nada, solo fue apresurado y de cierta forma gracioso porque Jungkook no dejaba de reír al sentir el frío líquido sobre su piel.
Al girar la botella es ahora Jimin quien reta a Taehyung y le pone el mismo reto anterior pero ahora con Hoseok.
—¿Yo? — dijo señalándose a si mismo.
— Si hyung, tu... anda acuéstate en la mesita.
Todos sonreían expectantes incluso Hobi quien se quitó la camisa completamente quedando desnudo del torso.
Taehyung se acercó y con la punta de sus finos dedos rozó el abdomen, pasando por un pezón y haciendo el mismo recorrido de regreso pero del otro lado. La piel de Hoseok se erizo exageradamente al sentir el tacto de su amigo, así como sus pezones se endurecieron inmediatamente, Tae solo se rio con fingida inocencia.
Jimin vertió el tequila en el ombligo de Hobi y fue Jugnkook quien le puso una rebanada de limón en los labios.
Taehyung esta vez lo hizo diferente, absorbió lentamente aquel líquido, hundiendo su boca y su lengua en aquel precioso ombligo, después con su lengua se fue haciendo camino lentamente, lamiendo el abdomen, subió y subió, después lamió un pezón y descaradamente lo chupo y lo mordió haciendo que Hoseok soltara un gemido que ni él mismo esperaba.
Siguió lamiendo hasta subir por las clavículas, el cuello y por fin llegar a la boca, donde el limón fue lo de menos, devoró la boca de Hoseok descaradamente y después se justificó diciendo que no podía agarrar el limón.
Todos se quedaron en silencio observando aquello que fue demasiado sensual, pero a la vez demasiado íntimo, pero nadie se atrevió a decir nada.
Por su parte Hoseok se había mareado del placer que sintió pero a la vez estaba demasiado confundido, al ser consciente del estado etílico en el que estaba se dijo así mismo que era por eso, pero que no pasaba nada, y que si se sentía bien a quién le importaba.
Por su parte Taehyung sentía que el corazón le explotaría dentro del pecho, no podía creer lo que acababa de hacer con Hoseok, simplemente lo sobrepasó, y se sintió jodidamente bien, quería volver a hacerlo, quería volver a saborear la piel de su hyung, quería volver a devorarle la boca...
Ambos se voltearon a ver se regalaron una sonrisa, pero nadie más dijo nada al respecto.
Las bebidas alcohólicas se terminaron, apenas a las 3:30 de la mañana.
— Es mejor que nos vayamos. — dijo Yoongi extendiendo su mano para dársela a Jimin para que se levantara, lo cual no pudo hacer por que comenzó a tambalearse, Yoongi lo apretó con fuerza pero fue el menor quien lo jalo y ambos cayeron al suelo riendo.
— Están locos, aquí se quedan, no pueden manejar en ese estado, aquí hay lugar para todos.
—¿Te quieres quedar Minie? — dijo Yoongi susurrando al oído de Jimin para que solo él pudiera escucharlo.
Jimin sintió un escalofrío que lo recorrió de pies a cabeza, apoyó su mano sobre la pierna de Yoongi, cerca, peligrosamente cerca de su entrepierna, nadie lo notó porque eso pasó debajo de la mesita, y solo asintió tímidamente y sólo sus ojos se toparon con los de Yoongi, y el pálido conocía esa mirada.
— Nos quedamos entonces.
— Duerman en mi cuarto — dijo Hoseok — Es cama matrimonial, nosotros tres cabemos en la de Tete que es king size.
— Si, así le hacemos. — Tae estaba acomodando llevando botellas vacías a la cocina y demás.
— Bien, entonces ya vamos a acostarnos, que descansen tontos.
— Igual hyung, descansen. — Contestó Jungkook que estaba ya más dormido que despierto de lo ebrio que estaba.
De hecho fue Jungkook el primero de los otros tres en retirarse a la habitación de Tae guiado por Hoseok, el menor solo se quitó el pantalón y se aventó a la cama y en cuanto su cara tocó la almohada se quedó profundamente dormido.
— ¡Ya se durmió! Pobre... esta muy borrachito.
— También yo, estoy pedisimo... ¿Y tu sol?
— También, a ver como nos va mañana... no quiero ni imaginármelo.
Cuando entre los dos dejaron la sala y la cocina ordenada se dirigieron a la habitación, ambos chicos se quedaron solo en calzoncillos y se metieron bajo las cobijas, quedando en la izquierda Hoseok, en medio Taehyung y a la derecha un Jungkook muy dormido.
Pasaron un par de minutos, la habitación estaba en completa oscuridad y Taehyung no dejaba de moverse buscando su lugar, en una de esas veces que se giró, su cara quedó a milímetros de la de Hoseok.
Hobi no aguanto mas y sin dudarlo tomó con fuerza a Tae de la cara con ambas manos y comenzó a besarlo desesperadamente, Taehyung correspondió de inmediato, subiéndose a horcajadas al cuerpo de su amigo — Creí que nunca lo harías — dijo entre besos, aquellos labios encajaban a la perfección, aquellas manos acunaron su rostro como hechas a la medida.
Taehyung comenzó a frotarse sobre la entrepierna de Hoseok instintivamente, provocando en Hoseok cosas que nunca había sentido, mordiendo la boca de su amigo.
— Wey ¿Por que no me habías besado antes? Besas bien rico Sol... — decía Taehyung entre beso y beso.
— ¿Podrías callarte una vez en tu vida? — dijo Hoseok sonriendo con la boca contraria pegada a la suya — Ni a besos logró callarte. — Ambos chicos rieron por lo bajo.
Hoseok se giró, bajando de su cuerpo a Tae y ahora era él quien estaba medio subido al cuerpo de su amigo, lo tenía acorralado debajo de su cuerpo pero no estaba sobre él totalmente, seguían devorándose a besos, pero esos besos que empezaron siendo arrebatados y pasionales se fueron tornando en besos lentos y pausados, dejando un cachito de ellos mismo en cada roce.
Hasta que se convirtieron en besos de amor, no en besos lujuriosos y urgidos.
Ambos chicos se empezaron a sentir adormilados por las sensaciones que el contrario provocaba en su persona, hasta que Hoseok se acostó y acunó en su pecho a su amigo, por esta noche era al revés, y no era por llanto, era por algo más...
— Descansa Tete... — dijo dándole un beso en su frente mientras con su mano acariciaba su cintura y espalda.
— También descansa Sol... — dijo el menor alzando la cara y dejando un casto beso entre la mandíbula y barbilla de su amigo, quedándose los dos como Jungkook, profundamente dormidos.
Mientras tanto en la habitación de enseguida...
Jimin entró primero a aquella habitación, seguido por Yoongi, el mayor una vez que cerró la puerta iba a prender la luz pero fue acorralado por Jimin quien lo pegó con fuerza a la pared, impidiéndole prender la luz, y poniendo el seguro de la puerta y de un momento a otro comenzó a comerle la boca con desespero.
Brinco para subirse al cuerpo contrario y Yoongi lo cargó sin problemas, respondiendo de igual forma a la urgencia de contacto de su ex novio.
Se besaban con tanta desesperación, con tanta necesidad y deseo, Yoongi fue caminando hasta toparse con la cama y aventó el cuerpo de Jimin a esta, acto seguido se sacó rápido la camisa y volvió a subirse al cuerpo de Jimin para seguir besándolo.
Las manos de Jimin viajaban velozmente acariciando cada centímetro a su mano, el torso, la espalda, las nalgas, el cuello, mientras aprisionaba con sus piernas la cadera del mayor.
Yoongi se desprendió de la boca de Jimin y comenzó a desabrochar la camisa del menor y cuando al fin lo hizo su boca se unió como imán a los pezones de Jimin, chupando con devoción, lamiendo, succionando, robándole a Jimin un sin fin de suspiros, Yoongi chupaba, mordía y saboreaba cada centímetro de piel de Jimin, que era vida para el mayor, era gasolina pura, el podría vivir solo de probar la piel del contrario.
— Oh Yoonie... te necesito tanto... — dijo Jimin como un susurro, ambos procuraban no hacer ruido, no querían que los demás los escucharan.
Yoongi metió ambas manos por la cintura de Jimin y las dirigió hacia su espalda, una vez ahí levantó la espalda baja del menor para chupar mas fuerte su pancita, su vientre, sus oblicuos, su ombligo, Jimin arqueaba su espalda contra el colchón para pegar mas su piel a la boca de Yoongi mientras se agarraba con fuerza de los hombros o del cabello de su ex pareja.
Yoongi comenzó a desvestir a Jimin de lo que aun tenía de ropa, sacándole primero el cinto, después el pantalón y por ultimo la ropa interior, tomándose el tiempo para besarle las piernas tiernamente, dejando algunas mordiditas en el trayecto, besando con tanto amor los pies de Jimin dejando un dulce beso en cada pequeño dedo de dicha extremidad, para terminar metiendo todo el dedo pulgar en su boca y succionando de él, haciendo a Jimin retorcerse, tomar una almohada y tapar su cara para ahogar los gritos de placer que quería soltar en ese momento.
— No te tapes, solo no grites... — dijo Yoongi susurrando, mientras tomaba la otra pierna para hacer exactamente lo mismo.
Jimin no volvió a cubrirse la cara, pero suspiraba dolorosamente por todo el placer que sentía, soltaba pequeños gemidos y gruñidos, pero era difícil controlarse de no gritar desesperado por esas ráfagas de placer que solo Yoongi podía ofrecerle.
Siguió el mayor subiendo por su pierna dejando grandes marcas en las ingles, las cuales chupo, succiono y mordió con devoción antes de dedicarse completamente al inflamado miembro del menor.
Se dedicó a lamer toda la extensión con parsimonia, Jimin gozaba tanto, soltando suaves suspiros, acariciando la cabeza del mayor, inclinándose en sus codos para ver como era comido por aquel hombre al que amaba con toda su alma.
¡Dios! No existía imagen más erótica que ver a Min Yoongi devorándole el pene de esa forma, como si fuera lo más delicioso que hubiera probado en la vida, y a decir verdad para Yoongi lo era, Jimin era lo más delicioso que podría probar alguna vez.
Cuando el mayor sintió que el orgasmo comenzaba a formarse bajo la intensidad de la felación, fue bajando con su boca, dejando solo dulces y tronados besos, levantó las piernas de Jimin, quien las tomó con sus manos y las pasó detrás de su cabeza, era endemoniadamente flexible, de esa forma la rosada entrada había quedado totalmente expuesta a merced de Yoongi.
Jimin observaba todo con ansiedad, sentía el aliento de su ex novio tocarle en esa zona tan sensible cuando de pronto no fue solo el aliento, fue su lengua quien lo lamia completamente en su entrada, haciendo círculos, delineando todo el contorno, haciendo a Jimin echar la cabeza hacia atrás aun sin soltar sus piernas.
Yoongi comenzó a dejar sonoros besos en esa zona y a hacer pequeñas succiones, después introdujo su lengua despacio, sin prisa, tanteando la zona para que a Jimin no le doliera ni una pizca, quería hacerlo sentir rico en todo momento, sin nada de dolor y justo es lo que le estaba dando a Jimin en ese momento.
— ¡Santa mierda! — fue lo único que pudo decir el menor cuando sintió la lengua introducirse en su cuerpo.
Yoongi soltó una ligera risa, la cual se sintió vibrar fuerte en sus partes haciéndolo temblar completamente, mientras seguía chupando, lamiendo, comenzó a meter un dedo en el interior del menor, este ni siquiera se percató de aquello por lo excitado que estaba y por que estaba siendo correctamente estimulado.
— Suelta las piernas, no quiero que te canses, date la vuelta ¿Si? — pidió el mayor aun hablando en susurros.
— Pero no podré verte Yoonie...
— Pero podrás sentirme. — El mayor se incorporó y se acercó a la boca contraria para besarlo sensualmente mientras ahora dos dedos estaban dentro de Jimin y el seguía sin darse cuenta de nada.
Después de aquel beso tan persuasivo el menor se puso boca abajo poniendo una almohada en su bajo vientre para dejar su culo más alto y expuesto.
Yoongi siguió chapándolo y besándolo, de pronto pasaba su lengua por todo lo largo del miembro contrario, ya que Jimin había puesto su pene hacia abajo, Yoongi podía chupar el glande y lamerlo con gusto.
Cuando menos pensó Jimin ya tenía tres dedos dentro, y ni siquiera se quejaba, solo pedía por más jadeando, pedía por Yoongi.
Pasó un poco más hasta que Yoongi considero que era suficiente dilatación, y a decir verdad había sido más que suficiente, gracias al alcohol, a lo excitado y al trabajo arduo de Yoongi, Jimin estaba más que listo para recibir a su ex novio entre sus piernas.
— Date la vuelta bebé, quiero verte cuando entre en ti... — esto lo único que hizo en Jimin fue mojarlo más. Iba a pasar, estaba a punto de pasar, volvería a tener a su exnovio dentro de su cuerpo, después de 6 largos años volverían a estar unidos, nada sería más hermoso que aquello, la mejor despedida, aquella despedida que debieron de tener antes de que se fuera.
Cuando Jimin se giró Yoongi ya estaba desnudo y estaba masturbándose mientras seguía acariciando cada parte del cuerpo de Jimin. Iba a escupir sobre su miembro pero Jimin lo interrumpió.
— Déjame hacerlo... yo quiero mojarlo ¿Si?
Yoongi solo asintió, Jimin antes de bajarse a chupar el miembro de su ex novio se detuvo a darle otro beso en los labios, mientras con su manos acariciaba la cosa de su ex novio.
Jimin bajó lentamente dejando pequeños besitos en todo el torso del mayor, hasta que llegó al miembro, el cual estaba erguido en su máximo esplendor, duro como nunca y goteando.
Jimin tomó con su lengua aquellas gotas de presemen las cuales degusto con mucho deleite, acto seguido pasó su lengua desde la base del pene, lentamente, hasta llegar al glande, y de nuevo hacia abajo, sin apartar la vista de los ojos de Yoongi quien lo veía sin poder dejar de morderse el labio inferior, sintiendo todas esas caricias que el menor le daba con su boquita y su lengua.
Jimin engullo la punta de aquel miembro, y lo metió lo mas que pudo, ensalivándolo lo mejor que podía, en ese momento Yoongi cerró los ojos y respiro profundo, no quería correrse de esa forma, pero estuvo a punto de hacerlo.
Jimin se volvió a acomodar en la cama y abrió sus piernas como una invitación para Yoongi, quien se acercó lentamente, con una mano tomó el tobillo de Jimin para mantenerlo arriba y con la otra sostenía su miembro el cual dirigió a la entrada del menor.
Comenzó a rozarlo en esa zona haciendo a Jimin gemir con desesperación — Ya métemela...
Yoongi no quería hacer esperar más a Jimin, así que se fue enterrando poco a poco en el interior del más joven, para Jimin aquello era maravilloso, sin una pizca de dolor, placer puro en su máxima expresión, el placer más grande que se puede llegar a sentir y que tenía años sin experimentar, por su parte Yoongi no podía creer aquello, sentir a Jimin era lo más sublime que podría sentir en su vida... nada se comparaba con aquella sensación, quería llorar de la emoción y del amor que sentía pero a la vez quería joderlo tan duro para saciar todos esos años que añoro ese momento.
Una vez que Yoongi entró completamente, y su pelvis topó con las nalgas del menor, Jimin se sintió completo, lleno, y en cuanto el mayor se movió un poco y dio un par de embestidas suaves, Jimin se corrió con fuerza, sin tocarse, sin masturbarse, solo por tenerlo dentro de sí.
En cuanto el mayor vio aquello comenzó a embestir más fuerte, quería darle otro orgasmo a Jimin en ese momento, el menor lo veía a los ojos, un brillo único brotaba de estos, diciéndolo todo con solo mirarse.
Yoongi se sentia tan bien, hacer el amor con Jimin era perfecto, por que era la única persona en el mundo compatible con él, el sexo era maravilloso, era la única persona capaz de soportarlo dentro, capaz de dejarlo moverse, capaz de permitirle hacerle el amor como a el le plazca, tantos años de sexo frustrado, eran por fin recompensados al tener de nuevo a su pequeño chico, que sin dudas, no solo estaban hechos el uno para el otro en cuestiones del corazón, si no del sexo también.
— Oh Yoonie... amor... que rico... había olvidado lo bien que se siente tenerte dentro... — suspiraba Jimin hablando en un susurro.
— Nada se compara a ti Jimin, eres lo mejor que me ha pasado en la puta vida... te amo, te amo tanto...
— También te amo Yoonie... aaaggg... me vengo... — acto seguido Jimin volvió a tener un orgasmo, no con mucho semen pero muy intenso en sensaciones.
Hicieron muchas posiciones, Jimin boca abajo y Yoongi arriba de el, Jimin recargado en la cabecera de la cama y Yoongi detrás de él, abrazándolo posesivamente, rodeándolo con sus brazos mientras besaba con amor su cuello y sus labios, después lo hicieron de perrito, siendo esta una de las que se complicó un poco para Jimin pero aun así lo aguanto sin quejarse, por que esa aunque doliera, se sentía jodidamente bien.
Y por último volviendo de nuevo al misionero, para este punto Yoongi estaba cansadísimo, sostenía su peso con su antebrazo a un lado de la cabeza de Jimin mientras con la otra mano retiraba el cabello mojado por el sudor de la frente de su exnovio, lo veía a los ojos, lo besaba, y seguía embistiendo, suavemente, nunca dejo de mover su cadera de adentro hacia afuera.
— Jimin, me voy a venir bebé... — dijo Yoongi rozando su nariz con la de Jimin.
— Hazlo, quiero sentirte... vente Yoonie... — decía Jimin sintiendo su orgasmo también formarse en su vientre solo de escuchar a su ex novio decirle aquello.
Y de pronto Yoongi se corrió con tanta fuerza, llenando al menor por dentro, dándole una sensación única, el calor que le daba la esencia dentro de él lo hizo sentir mas placer y terminó corriéndose por cuarta vez, solo que esta vez una gran descarga de semen le baño el pecho y el abdomen.
Las respiraciones de ambos eran agitadas, estaban cansados, estaban complacidos y estaban muy enamorados.
Yoongi se tumbó sobre el pecho de Jimin, y exhaló profundamente mientras el menor lo acunaba, Yoongi escuchaba claramente el corazón de Jimin latiendo al máximo, como si fuera a reventarse, aquello lo hizo sonreír.
— Gracias Park. — dijo alzando la cabeza para encontrar su mirada con la contraria.
— Gracias a ti Min. — Yoongi volvió a poner su cabeza en el pecho de Jimin en lo que se regulaba su respiración.
El miembro del mayor fue perdiendo tamaño y dureza dentro de Jimin, y eso de cierta forma lo agradeció el menor, por que así no dolió cuando Yoongi lo sacó de dentro de él.
Ambos chicos se fueron al baño que tenía aquella habitación, se limpiaron y se lavaron con agua.
Jimin se sentó en la tapa del inodoro una vez que terminó de limpiarse para esperar ahí a Yoongi, quien al darse la media vuelta y verlo, fue y se subió a horcajadas sobre el menor, Jimin lo acunaba en sus brazos sosteniéndolo de las nalgas y Yoongi rodeaba el cuello de Jimin.
Ambos se vieron sonrientes, era raro encontrarse en esa situación, generalmente siempre era al revés, Jimin arriba de Yoongi, pero en esta ocasión no era nada sexual, ambos comenzaron a besarse.
Jimin lo besaba con demasiada ternura, mientras le daba dulces caricias en su cintura, en su espalda, en sus nalgas.
De pronto Yoongi sintió la humedad de las lágrimas de Jimin, de inmediato beso ambos ojos, tomando aquellas lágrimas.
— ¿Qué pasa? ¿Todo bien?
— Todo bien y todo de la mierda al mismo tiempo Yoonie...
En ese momento el mayor entendió a qué se refería, justo esa tarde habían quedado en que serían solo amigos. Un nudo en la garganta se le hizo al mayor el cual de nuevo se fue a besar a Jimin.
Se besaron sin prisa, con calma, con amor, diciéndoselo todo en ese beso.
Se pronto Yoongi se puso de pie, y se encaminó al cuarto a buscar su ropa interior, Jimin lloraba a lo lejos, limpiando sus lagrimas en cuanto estas salían.
El menor fue y tomó su ropa y comenzó a vestirse.
— Solo ponte los calzoncitos y así vente, durmamos un poco ándale... — dijo el mayor mientras levantaba las cobijas de la cama.
Jimin siguió poniéndose la ropa, haciendo como si no hubiera escuchado a Yoongi, las lágrimas seguían corriendo por sus ojos.
El mayor no se dió cuenta que Jimin lloraba, pero se le hizo extraño que se estuviera vistiendo, se acercó con cautela y lo abrazó por la cintura. Agacho su cabeza y comenzó a dejar besos en su cuello y a olerlo, con mucho cariño y ternura.
Cuando Jimin se giró para verlo de frente Yoongi intentó besarlo en los labios pero el menor se quitó.
— Lo siento hyung, debo irme... gracias por tan maravillosa despedida, jamás podré olvidarla.
Acto seguido abrió la puerta y se fue antes de que no pudiera hacerlo. Al cerrar la puerta tomó sus cosas y sus zapatos y salió de aquel departamento echo un mar de lágrimas, pero se sentía bien, se sentía fuerte, sabía que era lo correcto, y había vivido la mejor despedida de su vida, que ojalá hubiera sido el inicio de algo, pero aun así, se iba contento solo que eso no implicaba que no doliera.
Por su parte en cuanto Jimin se fue, Yoongi se tumbó en la cama, enterró su cara en sus manos y comenzó a llorar. — Has algo idiota, ve por él... no lo dejes ir... — se decía a si mismo, mientras el dolor lo consumía, pero algo en él lo retenía, el miedo era mas grande que todo el amor, y si quería luchar por Jimin debía vencer esos fantasmas que no dejaban de atormentarlo.
Espero que hayan disfrutado este momento, que aunque fue agridulce, al fin Jimin Y Yoongi se entregaron, hicieron el amor, dejando un poco de ellos en ese momento.
Si a ustedes les gustó tanto como a mi escribirlo regálenme una estrellita ⭐️ por favor
Gracias por leerme, les quiero mucho.
Momo ❤️
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