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A la mañana siguiente, Maia despertó con una gran sonrisa por la noche anterior.

Tomó su teléfono, que estaba cargando en su mesita de noche. Lo encendió y su sonrisa se hizo más grande al ver un mensaje de su, ahora, novio..

"Buenos Días, Bonita. <3"

Soltó un pequeño gritito de felicidad, una risa y le contestó, también dándole los buenos días.

-¿Como te fue?- Preguntó su madre, entrando a su habitación.

-Fue..- Suspiró con felicidad. -Fue genial. Es tierno, divertido y amable..

-Me alegro de que te haga feliz.. Deberías invitarlo a cenar algún día.

-Claro..

Ambas se dirigieron al comedor, allí se encontraba la pareja de su madre.

-Buenos días Señor Fernández.- Saludó Maia.

-Buenos Días, Maia.- Sonrió. -Ya te dije que puedes decirme Francisco..

-Lo tendré en cuenta Señor.. Francisco.- Riéron.

-Al ver tu cara, supongo que te fue bien en tu cita.- Comentó el mayor.

-Me fue super bien..

-Tendré que tener una charla con ese chico.- Maia negó con una sonrisa.

Los tres desayunaron, riendo y conversando. Maia preguntó por Gabo, Francisco dijo que tenía entrenamiento de Fútbol y que por eso no estaba allí, pero que si iría al dojo.

Por fin llegó la hora de ir al dojo, la chica se hizo sus características tranzas y salió. Se dirigió hasta la puerta de su chico y tocó, para irse juntos.

La puerta se abrió dejando ver al moreno, el chico al verla, le sonrió y cerró la puerta. Una vez que cerró, alzó a su novia en un abrazo, lo que provocó una risa en ambos. Se dirigieron a la camioneta de Maia y se encaminaron al dojo. Al llegar, se bajaron, se tomaron de la mano y se dieron un corto beso.

Entraron al lugar, aún de la mano y las miradas de los alumnos cayeron sobre ellos.

Hawk se acercó con una sonrisa a la pareja. Algo que a Maia le llamó la atención, fue que algunos chicos, incluido su mejor amigo, llegaron con moretones en la cara.

-¿Es oficial?- Cuestionó Eli, mirando a los latino con una sonrisa de lado.

-Es oficial.- Afirmó Miguel, levantando sus manos y Maia sonrió.

-¿Estás bien?- Preguntó Maia al ojiazul. -¿Por qué tienes moretones en la cara?

-Miyagi-Do nos atacó..- Mintió.

Maia sabía que algo no andaba bien, pero decidió dejar el tema ahí.

M&M se formaron para comenzar la clase. El sensei armó combates, Hawk y Maia estaban luchando.

Maia logró ganar el combate, aunque tenian casi la misma fuerza, la chica tenía más agilidad que Hawk.

-Buen trabajo, Castro.- Felicitó Johnny. -Saludo, vayan otra vez.

Hawk y Maia hicieron lo que el sensei ordenó, pero fueron interrumpidos por Daniel LaRusso, quien se veía furioso.

-¿Y a este que le pasa?- Susurró Maia.

-¿Que diablos crees que haces?- Cuestionó Johnny.

-Como si no lo supieras.- Contestó Daniel.

-Quítate los zapatos en la colchoneta y respetas mi dojo.- Ordenó Lawrence, acercándose.

-¡¿En serio?!- Cuestionó LaRusso, sarcástico. -¡¿Me vas a hablar de faltarle el respeto a dojos, después de lo que le hiciste al mio?!

-No se de que diablos hablas, no le hice nada a tu dojo.- Dijo Johnny, realmente confundido.

-¿Tampoco golpeaste a uno de mis empleados?- Johnny se quedó en silencio. -¿Sabes? Me sentí mal por ti en un momento, pero me haces muy fácil recordar quien es el malo en todo esto.- El rubio bajo la cabeza. -Te llamas sensei y ¡Ni siquiera sabes lo que es eso! Un sensei es un mentor, un sensei eleva.. ¡No enseña destrucción y falta de respeto!

-Ya dije que no se de que estas hablando, LaRusso.. Y tu tampoco lo sabes.

-Si, yo se que no ¡No ganas una medalla de honor al robarla!- Exclamó Daniel.

Maia conectó su mirada con Hawk, pero el chico, rápidamente desvío la mirada. La chica se dio cuenta que estaba bastante asustado.

-¡Y les diré algo sobre su sensei! Les puede enseñar como pelear, pero el no tiene la menor idea de como ganar en la vida.- Daniel le hablaba a los estudiantes. -Si quieren ayudarse antes de que sea tarde, las puertas de Miyagi-Do están abiertas.

-No ¿Vienes aquí a robarme a mis alumnos?

-Si.- Respondió de manera cínica. -¿Y que harás al respecto? Sabes que no golpeó primero.

La tensión en el lugar crecía cada vez más.

-Daré un paso al costado..

-Si, como quieras..

Algunos alumnos comenzaron a marcharse del lugar, entre ellos Gabo.

-Gabo.- Maia se acercó al chico. -¿Por qué te vas?

-Nunca me gustó este lugar..- Respondió. -Tampoco las personas que hay acá.- Le dio una última mirada a Hawk y salió del lugar.

Ante eso, Maia quedó bastante confundida. Comenzaba a sospechar que su mejor amigo tenía algo que ver en todo esto.

••

Johnny puso a sus estudiantes a hacer ejercicios. Todos estaban cansados, pero estaba claro que el culpable no hablaría.

-¡¿Quien destruyó el dojo de Miyagi?!- Cuestionó Lawrence. -LaRusso no me cae bien, pero esa basura no la enseñamos aquí.- Miró a Kreese. -Al menos ya no.. Se los preguntaré de nuevo ¿Quien destrozó Miyagi-Do?

-No fui yo, sensei. Nunca le faltaría el respeto a un dojo..- Habló el estudiante de mayor edad.

-¡Cierra la boca, gordo!- Ordenó Lawrence. -No busco excusas, busco respuestas.

-Sensei, de verdad no sabemos quien lo hizo.- Dijo Miguel cansado.

-Alguien sabe algo, la pregunta es.. ¿Quien va a quebrarse?- Cuestionó Kreese con los brazos cruzados y con su mirada fija en Hawk.

-No se detengan, podemos hacer esto todo el día.- Dijo Johnny, cuando su teléfono comenzó a sonar.

-Sensei, necesitamos un descanso.- Mitch Habló una vez que el rubio no estaba presente.

-Descanso de dos minutos.- Dijo Kreese y todos suspiraron aliviados.

-No siento mis piernas..- Habló Tory, acercándose a su amiga.

Ambas recargadas en la pared. Todos estaban agotados.. Johnny si que sabía poner castigos.

La latina apenas prestó atención. Su mirada estaba clavada en Kreese y Hawk, quienes conversaban en murmuros.

-Ya vuelvo.- Le dijo a su amiga de pelo rubio y se acercó al de Mohicano. -¿Sucedió algo?

-No, está todo bien.- Respondió y sonrió de lado.

-¿Me estás ocultando algo?- Hawk no respondió. -¿Sabes quien destruyó Miyagi-Do?- Se cruzó de brazos.

-¿Que quieres decir, Maia?- Cuestionó algo molesto. -No empieces con tus tonterías.- Le dijo, pasando al lado de la chica y chocando sus hombros.

Definitivamente, acá había gato encerrado.

Luego fueron a otra parte del dojo para seguir con el entrenamiento.

-¿Está bien si vomito aquí?- Cuestionó el gordo, mirando a Aisha.

-¡No!- Respondió Aisha.

-¡Los marinos vomitan todo el tiempo!- Exclamó.

-No vomites.- Ordenó.

-No va ceder.- Miguel le habló a Maia. -¡Tenemos que averiguar quien lo hizo!

-Seguro fue el idiota de Aliento de Gorila.- Habló Tory, uniéndose a la conversación.

-Vete a la mierda, Nichols.- Respondió el mencionado.

-Vete a la mierda tu, idiota.- Maia defendió a su amiga, bastante enojada por todo.

Maia se acercó amenazante al rizado y lo empujó con tanta fuerza que lo dejó en el piso, el chico se levantó rápidamente, dispuesto a poner en su lugar a la de pelo rojo, Pero Hawk puso su brazo enfrente del chico, para evitar que avanzara, Aisha y Tory hicieron lo mismo con Maia. Miguel se colocó en frente de la argentina, dispuesto a protegerla.

-¡Basta!- Interrumpió Kreese. -¿De verdad quieren saber quien lo hizo? Bien, fue Hawk.- La mirada furiosa de los estudiantes se posaron en el mencionado, pero Kreese siguió hablando. -Fue Díaz, Castro..- Miguel y Maia se miraron confundidos. -Robinson, Nichols, fue rollos.. Cuando uno de ustedes hace algo, todos lo hacen, viven y mueren con las consecuencias. Porque todos son Cobra Kai.. Dojo principal, cinco minutos. Comenzaremos con el entrenamiento real.

Kreese se marchó y los estudiantes aprovecharon esos cinco minutos para descansar.

-¿Quieres agua?- Preguntó Miguel a su novia.

-Si.. Gracias.- La chica recargo su cabeza en el hombro del moreno y este dejo un beso en su cabello. -Debería disculparme con Hawk, desconfíe de él.

-Bien..- Le dedicó una linda sonrisa.

Maia dejo un beso en la mejilla del latino y se acercó a su mejor amigo.

-Hawk.- Lo llamó y este se dio vuelta. -Quería disculparme. Lo siento, no debí desconfiar de ti..

-No te preocupes, todo está bien.- Le dijo con una sonrisa.

Maia sabía que Hawk no era capaz de hacer algo así y que tampoco le mentiría.. ¿No?

••

-¡Peleen!

Kreese había aprovechado el altercado que hubo entre Maia y Mitch, poniéndolos a pelear.

Con facilidad, Maia había derribado a Mitch proporcionándole una patada en la cara y luego en el estómago. El chico se quejó de dolor por el golpe, pero eso no le alcanzó a Kreese.

-Golpéalo de nuevo.- Ordenó y la latina lo miró confundida. -¿Tienes algún problema con eso? Una pelea termina cuando tu enemigo esté acabado. No le muestres piedad.

La latina asintió, dispuesta a cumplir la orden que le habían dado. Tomó impulso para acabar con Mitch, pero fue detenida a tiempo por Miguel.

-¡Espera!- Todos lo miraron. -Esto no es lo que el sensei nos enseña.

-¿Disculpa?

-Lo que quiero decir es que no hay honor en ser despiadado.- Miguel siguió hablando. -Maia consiguió el punto, por lo tanto, ganó.

El hombre pensó muy bien sus próximas palabras para seguir manipulando a sus estudiantes.

-El sensei Lawrence tiene razón, claro. En un torneo, acaba cuando consigues un punto, pero en la vida real, no se trata de sumar puntos.- Kreese se acercó al latino. -Se trata de ser un ganador o un perdedor. Y no hay perdedores en este dojo.

••

M&M se quedaron a hacerle compañía a Tory, quien quería seguir entrenando en el dojo.

-La lección de hoy fue una locura ¿No?- Dijo la peliroja.

-No tan loca.- Respondió la rubia y luego comenzó a patear.

-No les parece que parte de lo que nos enseña el sensei Kreese se siente.. ¿Muy mal?- Cuestionó Miguel, para luego dejar un beso en la mejilla de su novia. -¿Que la vida solo se trate de ganar?

Tory se quedó en silencio, mientras recordaba su dura vida. -Mi madre trabajaba en un restaurante cuando era niña. Traía las sobras a casa para que mi hermano y yo pudiéramos comer.- Comenzó a contar y sus ojos comenzaron a cristalizarse. -Cuando su jefe lo supo.. La despidió, Sin advertencia, sin previo aviso.- Maia bajo sus brazos. -¡Dijo que estaba en contra de sus políticas! No estaba robando, la comida terminaría en la basura. El mundo no muestra piedad ¿Por qué tenerla? Algunas personas lo tienen todo.. El resto de nosotros tenemos que luchar por cada centímetro de lo que es nuestro. No sólo para ganar un punto, es para todo.

-Si..- Murmuró Miguel.

-Levanta los brazos..- Dijo la rubia y la latina hizo caso.

Cuando la clase terminó, Maia se dirigió a Miyagi-Do para disculparse. Sentía que debía hacerlo.

Llegó y se sorprendió al ver a Gabo y Demetri allí. Todos se le quedaron viendo. Si las miradas mataran, ella ya estaría tres metros bajo tierra, gracias a la mirada de Samantha.

-¿Que haces aquí?- Cuestionó una Samantha bastante furiosa. -¿No les alcanzó con destruir nuestro dojo?

La castaña se acercó amenazante a la argentina. Sin embargo, Maia no retrocedió y levantó su mentón, demostrando que no se sentía intimidada.

-No vengo a pelear..- Habló. -Aún que no tuve nada que ver en esto.. Quise venir a disculparme con usted Señor LaRusso.. Y también quería decirle que Johnny no mando a destrozar su dojo.

Daniel se sorprendió al escuchar eso, nunca pensó que un Cobra Kai fuera capaz de disculparse.

Daniel no pudo evitar preguntarse ¿Por qué alguien como ella estaba en un dojo como Cobra Kai? Era un lugar lleno de bravucones.

-Acepto tus disculpas Maia..- Dijo Daniel con una sonrisa, haciendo que la de pelo rojo también sonriéra.

-¡Oh, vamos!- Exclamó Sam. -¿De verdad le creerán? Literalmente es la mejor amiga del bravucón que nos atacó en el centro comercial..

Ante esas palabras, Maia la miró confundida.

-Sam, cariño. No es momento para peleas..- Intervino Daniel.

-¿Que quieres decir?- Cuestionó Maia a Sam, realmente confundida.

-Hawk atacó a Demetri en el centro comercial..- Gabo finalmente habló. -Yo estaba allí, cuando lo persiguieron para Golpearlo.. Fue fácil reconocerlo, por su corte..

Maia quedó paralizada ante esa noticia, no podía creer que Hawk haya sido capaz de hacerle daño a uno de sus mejores amigos.

Su mirada cayó sobre Demetri, quien también la miraba.

-Yo..- Comenzó a hablar Maia. -Lo siento Demetri.. Yo.. No lo sabía. Lo hubiera detenido..

-Tranquila Mai, no fue tu culpa.- Tranquilizó Demetri, con una sonrisa. -Lo hizo Eli no tu..

-Tengo que irme..- Dijo Maia con una sonrisa débil. -Una vez más. Lo siento señor LaRusso.

-Las puertas de Miyagi-Do están abiertas.. Eres bienvenida aquí cuando quieras.- Daniel le dedicó una sonrisa.

Obviamente, Daniel no dejó pasar la oportunidad de traer una nueva alumna a su dojo, veía potencial en Maia.

-Me tienta señor LaRusso.- Sonrió. -Pero mi lealtad está con el sensei Lawrence, el trata de ser un buen ejemplo para sus estudiantes..

Lo único que tengo para decir es que ya terminé de editar la portada para la temporada 3, y puedo decir que es mi favorita hasta el momento.

Recuerden que pueden Votar y comentar, esto realmente me motiva a seguir con la historia ✨️

Nos leemos pronto!! <33

+10☆ Para Continuar.
Tali.