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Un día soleado en el Valle. Hawk, Maia, Moon, Demetri y otros chicos del dojo tuvieron la maravillosa idea de pasar el rato en la playa.
Estaban jugando voleibol. Maia y Hawk eran un equipo y Demetri, Moon y Bert otro.
Demetri lanzó la pelota, pero no pasó la red.
-Ahmm repito... Devuélvela.- Dijo.
-Mi pálido, sarcástico y querido amigo..- Maia se acercó y colocó una mano en su hombro. -Eso no se puede hacer.
-Descanso.- Demetri se acercó para agarrar una toalla.
-Cobra Kai.- Dijo una chica, viendo la toalla que Demetri usaba. -¿Ustedes ganaron ese torneo de Karate?
-Ahmm ¿El torneo All Valley? ¿El máximo en Reseda? Si, nosotros lo ganamos.- Respondió Demetri.
-Ni siquiera nos alentaste..- Habló Maia y Demetri lanzó la toalla por encima de su hombro, cayendo sobre la cabeza de la Latina. -Ya entendí, me callo..
-Genial.- Sonrió la morena. Había otra rubia, pero esta tenía sus ojos sobre la peliazul. -Vamos a nadar, pero ¿Jugamos más tarde?
-¡CQ!- Respondió Demetri, nervioso. -Eso significa 'Cuando quieras'.
La chica comenzó a reír.
-Adiós.- Se despidió.
La rubia, antes de irse, le guiñó un ojo a Maia, dejándola boquiabierta.
-Mirense, galanes.- Bromeó Moon.
-¿Que te puedo decir?- Habló Maia, de manera egocéntrica. -Despues de todo, soy tan maravillosa, que hasta yo podría enamorarme de mi.
-Si, claro.- Comentó Hawk, sarcásticamente. -Sería bueno que te ganarás el crédito de ser un Cobra Kai.- Le dijo a Demetri. -Dime cuando te inscribirás.
-Ah, no se. Disfruto el honor sin dolor.- Contestó Demetri, ganándose una leve risa por parte de la Latina.
Maia iba a acercarse a Moon, pero una voz hizo que se quedara donde estaba.
-Maia, Hawk.- Miguel apareció detrás de ellos, con una expresión seria.
-El Hombre.- Habló Hawk.
-¿Que pasa, Miguelito?- Preguntó la de ojos marrones, observando el rostro del chico.
El de Mohicano suspiró.
-No, ya no más con esto. Mira, es un hermoso día. La playa está llena de chicas.- Señaló con la cabeza a su amiga, quien no se dio cuenta de eso. -Deja de sufrir por Sam.
-El pelo duro tiene razón.- Habló Maia, ganándose un suave codazo, por parte de su mejor amigo. -Ay, no aguantas nada..
-No es por Sam, se trata del sensei.- Respondió el moreno. -Se trata de el y Robby Keene.
Al escuchar ese nombre, Hawk y Maia prestaron más atención.
-¿De qué hablas?- Cuestionó Maia, con el ceño fruncido.
-Encontré una foto de Keene en el refrigerador del sensei.. Y creo que el es su hijo. Nos lo ocultó.
En ese momento, la misma chica que antes le había guiñado el ojo a Maia, apareció, llevándose a la latina, para conversar. Esto dejó algo molesto a Miguel, quien quería pasar tiempo con la peliazul.
-¿Ves?- Habló Eli. -Si no golpeas primero, otro chico la invitara.. En este caso, una chica.- Dijo y palmeo el hombro. -¿Por qué no la invitas a salir?
-¿Y si no acepta?- Preguntó, mirando a la argentina a lo lejos, riendo.
-Inténtalo, no pierdes nada.- Animó, sabiendo que la chica aceptaría.
Al día siguiente, en el dojo. Maia estiraba, mientras que los otros dos estaban obsesionados con el tema de Keene.
-Estuve investigando en Internet y Miguel tenía razón.- Hablo Hawk. -El sensei es, sin duda, el padre de Keene.
Miguel suspiró con pesadez.
-No entiendo porque nunca nos lo dijo.
-Tiene sentido, nos castigó por Golpearlo en el torneo. No tengan piedad, salvo con su hijo. Con el tenemos que ser unas nenitas.
-¿Acaso no entienden que el sensei no está obligado a contarnos?- Cuestionó Maia, harta del tema. -¿Pueden dejar a Keene en paz?
-Oye, no lo defiendas.- Habló Hawk, algo molesto.
-No lo defiendo, pero lo que hicieron en el torneo..- La chica señaló a ambos chicos. -No estuvo bien, actuaron como unas nenitas.- Se encogió de hombros.
-Chicos ¿Ya vieron el comercial?- Interrumpió Aisha.
Al recibir una respuesta negativa, decidió contarles de que se trataba.
-El padre de Sam abrió su dojo y ataca a Cobra Kai.
Aisha les enseñó el comercial a los tres. Los chicos se veían molestos, Maia negaba con la cabeza.
Johnny decidió que lo mejor sería devolver el golpe. Así que comenzó a grabar su propio comercial.
-Se habla mucho en el Valle sobre Karate gratis.- Dijo el sensei. -Pero todos saben que en la vida, obtenemos lo que pagamos ¿Quieren patear a la competencia?- Cuestionó y luego pateó una maceta con un bonsái. -Entonces traigan sus traseros a Cobra Kai. Al diablo con esa porquería de la meditación, lo que necesitan es un buen Karate estadounidense, quiebra huesos, rompe caras.- Comenzó a golpear un muñeco. -Basta ya de defensa personal, aprendan ofensiva. No sean nenitas. Únanse a Cobra Kai y permiteme enseñarles el camino del puño.
-Y.. corte.- Dijo Aisha, dejando de grabar.
-Bien ¿Lo tenemos?- Cuestionó Lawrence.
-Creo que si.- Contestó la chica.
-Genial. Asegúrate de que aparezca la serpiente de Cobra Kai al final, quiero que destaque. Hazla cromada..- Dijo Johnny. -Y con Thunderstruck de fondo.
-Los derechos de esa canción costarán demasiado.- Intervino Maia.
-No, ya la tengo, el casset está en el auto.- Respondió Johnny, todos se miraron confundidos. -Y pon un Hashtat al final. Ya sabes Hashtat Team Cobra Kai o algo así ¡Y luego envíalo a Internet!
Johnny se marchó a una pequeña bodega que había en el dojo.
-Es un genio..- Dijo Maia, mientras reía.
El sensei Lawrence invitó a Maia y Miguel a comer unas hamburguesas para poder charlar. El latino estaba muy dolido con Johnny por haberle ocultado semejante noticia, mientras que a Maia no le importaba mucho. Según ella, no debían meterse en los problemas personales del sensei.
-El secreto es la cebolla cortada.- Johnny habló, tratando de romper la tensión. -La sal es simple. Nada de esa basura vegetariana.
-De pequeña quería ser vegetariana, pero me la pusieron difícil cuando hicieron un Asado y no me controle.- Contó Maia, encogiendose de hombros. -Ese día me comí como tres vacas.
Johnny soltó una leve risa, pero noto la mirada perdida de Miguel, así que tomo la decisión de contarles todo.
-¿Ven ese edificio de allá?- Señaló el hospital. -Ahí fue donde nació Robby.
La peliazul miró a Miguel, este comenzó a prestar atención. Maia decidió tomar la mano del latino por debajo de la mesa, este gesto hizo que el corazón de Miguel latiera con rapidez.
-04 de Febrero del año 2002. Era un lunes. Su madre tuvo un parto de 17 horas.
-Debió ser difícil..
Johnny asintió.
-Si, me imagino que así fue. Yo no estaba ahí.. Mi madre acababa de morir, yo era un desastre. Nunca conocí a mi padre.- Miguel apretó levemente la mano de la chica. -Ella era todo para mí. Luego, supe que iba a ser papá y me oriné del susto. Le fallé a mi hijo desde el primer día en este mundo y le he fallado todos los días desde entonces..
Maia decidió intervenir al ver que Johnny tenía los ojos llorosos, se le encogió el corazón al verlo así. Le dijo que no era necesario que le contara algo tan personal.
-No, yo.. Debí contarles hace mucho tiempo. Es una de las cosas más dolorosas de mi vida, pero uno de los mejores a sido enseñarles.- Maia sonrió. -Y quiero que sepan, que pase lo que pase, les prometo estar siempre a su lado y siempre querré lo mejor para ambos.
Miguel Agradeció, mientras que Maia se contenía unas lágrimas. Las palabras de Johnny le llegaron al corazón. Extrañaba a su padre, el se había ido y nunca más le mandó un mensaje, esa fue la primera vez que un hombre la había decepcionado.. Y fue su padre, el que se suponía que debía tratarla como su princesa, la había dejado como si nada.
Maia se levantó y abrazó a Johnny, sorprendiendolo por completo.
-Lo aprecio mucho sensei.- Confesó. Johnny, no sabía demostrar cariño así que lo único que hizo fue, asentír.
Maia volvió a su lugar y el teléfono de Miguel comenzó a sonar.
-¿Que pasó?- Cuestionó Johnny.
-Es Aisha.- Contestó el chico. -Escuchó que Miyagi-Do hará una demostración en el festival.
-¿En serio?- Preguntó Johnny, más serio.
-¿Como devolveremos el golpe, sensei?- Preguntó Maia, subiendo y bajando las cejas, ganándose una risa de Miguel.
Maia llegó a la feria. Acompañada de Miguel, este la observaba con curiosidad.
-Dime ¿Que quieres saber?- Cuestionó Maia, al sentir la mirada del chico sobre ella.
-Nada.. Yo.. ¿Que?- Comenzó a hablar nervioso, mientras miraba a todos lados.
-No soy tonta, Miguelito. Dime que quieres saber.
-La chica de la playa..- Comenzó a hablar. -¿Que pasó con ella?
-Ah.. Ella.- Dijo, con una sonrisa. -Es una chica linda y agradable..
-¿Te gustó?- La interrumpió, Maia solto una risa.
-Admiro a las mujeres, pero no son mi tipo..- Contestó y Miguel suspiró aliviado. -¿Por qué quieres saber? ¿Estás celoso?- Preguntó, elevando una ceja.
-Yo..- La mirada del chico se dirigió a un puesto de palomitas. -Mira, palomitas.. ¿Quieres unas? Yo invito.
Maia solto una carcajada, al ver como cambio de tema, pero lo dejo pasar y aceptó la invitación para comer palomitas.. Eso no se le niega a nadie.
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La demostración de Miyagi-Do iba bastante bien, el público los miraba con atención. Pero la felicidad de los LaRusso y Robby se esfumó cuando, escucharon el nombre de un dojo, llamando la atención del público.
-¡Cobra Kai! ¡Cobra Kai! ¡Cobra Kai!
Los estudiantes de Cobra Kai subieron a un escenario, con movimientos y luces mucho más llamativas e interesantes, el público se olvidó de Miyagi-Do y fueron a ver la presentación de las Cobras.
-¡Cobras, demuestren como se ve el Karate real!- Ordenó Johnny.
Todo comenzó con una pelea de todos contra todos, quedando así Hawk y Miguel al final, pero el latino fue el último que quedó de pie en el escenario.
Después, Aisha rompió tablas con los ojos vendados. El siguiente fue Hawk, quien rompió una tabla de una patada, mientras Demetri la sostenía bastante asustado.
La protagonista del siguiente acto fue Maia, quien debía romper un gran bloque de hielo.
El color de las luces se cambiaron al color de su cabello. La chica estaba concentrada, mirando el gran hielo, respiró profundamente y golpeó, el hielo se rompió dos pedazos, debido a la fuerza de la Latina.
Comenzaron a regalar artículos de Cobra Kai. Y para cerrar con broche de oro, Johnny partió en dos unos ladrillos que estaban prendidos fuego.
Los alumnos se acercaron a Johnny, orgullosos. Kreese miraba con satisfacción..
Para el, eso era Cobra Kai.
-Lo hizo, sensei.- Comentó Miguel, con una gran sonrisa.
-No, lo hicimos todos.- Respondió Johnny.
Miyagi-Do miraban enfadados a Cobra Kai.
Los estudiantes de Cobra Kai bajaron del escenario, bastante contentos.
-¡Oh, por Bruno Mars!- Exclamó Maia. -¡Eso fue increíble!
Todos comenzaron a conversar emocionados, pero llegó un momento donde Miguel tomó la mano de la peliazul, apartandola del resto.
-¿Está todo bien?- Cuestionó Maia, Miguel asintió con una sonrisa. -Después de esto, Sam no querrá vernos ni en figurita..- Una vez más, hablo sin pensar y se arrepintió al haber nombrado a la castaña. -Lo siento..
-No importa.. Samantha ya no me interesa.- Maia elevó las cejas, sorprendida. -Ahora me interesa alguien más..
Luego de decir eso, ambos conectaron miradas, perdiéndose en los ojos cafés del otro.
Parecía que el tiempo se habia detenido, todo a su alrededor iba en camara lenta y un brillo, muy especial, apareció en los ojos de los dos.
En ese momento sintieron una extraña, pero linda, conexión entre ellos, como la que sintieron el día que se vieron por primera vez.
Ninguno despegaba su vista del otro, sus pupilas se dilataron y una sonrisa inesperada apareció en la cara de ambos.
Estuvieron así por unos segundos que parecían minutos, y podrían seguir así, pero fueron interrumpidos por Hawk, quien los arrastró a ambos para disfrutar de la feria.
Luego de ese momento ninguno salía de la mente del otro.
Una relación, más que de amistad, comenzaba entre ellos y esta vez no negarán sus sentimientos..
¡EL CLICK HACIENDO DE LAS SUYAS! 😭✨️
Este capitulo es algo corto, pero me encanta..
Estoy pensando en hacer dos actualizaciones por semana, serían los sábados y los miércoles.. ¿Les parece bien?
Espero que les guste tanto como a mi y no se olviden de Comentar, Votar y si gustan pueden seguirme..
Nos leemos pronto <3
+10 ☆ Para Continuar.
Tali.
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