—¿Cuándo exactamente dices que cumples años?

Yoongi hizo la pregunta sin despegar los ojos de la pantalla de su teléfono. Jimin a su lado, estaba completando sus apuntes mientras conversaba con el mayor.

—13 de octubre.

Jimin había respondido tan a la ligera que Yoongi tuvo que procesar sus palabras para darse cuenta que esa fecha era demasiado próxima. Por fin despegó su mirada del móvil y la fijó en Jimin, quien seguía demasiado concentrado en sus apuntes.

—Eso es la próxima semana.

—Ah... ¿sí? No estoy seguro.

—¿No piensas festejarlo?

Jimin agitó su cabeza, frunciendo sus cejas un poco.

—No tengo tiempo, tenemos prueba y una perrita en observación a la que se le han abierto los puntos de la cesárea.

Yoongi arrugó un poco el rostro al imaginarse eso. Él tenía un perro pero por suerte jamás lo había tenido que llevar al veterinario por un problema como ese, sólo a sus vacunas y listo. Podía entender lo atareado que Jimin se sentía, el primer año podía ser realmente duro y más cuando sumado a tus clases, debías asistir a las reuniones del equipo de bienvenida y escoger un club adicional para acreditar tus materias.

Sin embargo, Yoongi quería hacer su cumpleaños un momento especial ya que Jimin desde aquel día en que confesó sus sentimientos, había vuelto la vida de Yoongi sumamente feliz. Y aunque Min no sentía lo que podríamos llamar un enamoramiento por Jimin, aún quería regresar toda la dulzura que él le daba.

La conversación acabó ahí pero el ambiente seguía siendo cómodo para ambos. Había una buena amistad entre ambos que se había fortalecido bastante desde hace ya un mes, avanzando con buen ritmo al parecer. Incluso ya habían uno que otro rumor en la universidad acerca de su repentino acercamiento.

Por ejemplo, el que estaba leyendo ahora mismo Yoongi en su inicio de Facebook.

Una página famosa de su universidad, llamada "About Boys" que se encargaba de chusmear sobre todo lo que ocurriera entre los chicos de la universidad, principalmente sobre los más guapos y queridos por las chicas.

En uno de sus más recientes post se hablaban de ellos dos, así que Yoongi leyó atento debido a que se le había etiquetado varias veces en los comentarios.

About Boys
Hace 3 hrs.

¿Un veterinario y un abogado? ¡Qué combinación más nueva!
Aplausos para el valiente y adorable veterinario que ha ido tras el caliente y solicitado abogado. ¡Chicas, mantengan sus garras fuera pues parece que nuestro callado Lic. ya está tomado!

❤ 1.2mil        💬 967        ➡️ 346

Seokjin Kim
@Min Yoongi @Jimin P ¡!

Wheein Jung
@Jimin P habla de ti, ¿cierto?

Tae Kim
@Jimin P ahora son famosos tú y el hyung

Seung Hyub
@Min Yoongi @Jimin P

Miya Miya
@Min Yoongi TE TIENEN EN LA MIRA

Incluso gente que él no conocía estaba etiquetándolo en la publicación. También había muchísimos comentarios de chicas quejándose, otras apoyándolos y otras que parecían lamentarse el nunca haber intentado acercarse a alguno de los dos con anterioridad.

Estaba algo avergonzado de saber que había gente observándolos pero, extrañamente le hizo sentir satisfecho el saber que todos estaban enterándose que él y Jimin estaban coqueteándose, por lo que sería estúpido que alguien se atreviera a ir tras Jimin.

—¿Has leído la publicación sobre nosotros? —preguntó Jimin de repente, notando que Yoongi se había ensimismado mucho en su teléfono.

—¿La has visto ya? —preguntó de vuelta el mayor, Jimin asintió con su cabeza mientras coloreaba unas palabras para resaltarlas.

—Hay personas que incluso nos han dado un nombre de pareja.

—¿De verdad alguien hizo eso?

—Sí, nos llaman la pareja YoonMin. En lo personal me parece lindo, han juntado nuestros nombres.

—Ya veo.

—También dicen que nuestra relación es algo dulzona e infantil, pero no sé si eso sea bueno o malo.

—No le prestes atención.

—Hm —asintió—. Mi atención sólo está puesta en ti.

Esta vez, Jimin alzó la mirada para conectarla a la de Yoongi. Ambos se observaron unos segundos antes de que Yoongi apartara la mirada primero con timidez, haciendo a Jimin reír.

Jimin era simpático y agradable, tenía una manera única de coquetearle pues el menor podía ser sumamente adorable y enternecedor que haría a cualquiera querer abrazarlo, pero también podía ser pícaro y descarado, soltando frases seductoras a diestra y siniestra cuando menos te lo esperaras, logrando sonrojar a alguien tan serio como lo era Min Yoongi.

Jimin no era alguien vergonzoso, si algo le gustaba lo diría, de igual manera si algo le molestaba él lo haría notar. No tenía miedo a ser señalado pues él tenía la suficiente confianza como para saber qué de lo que hacía estaba bien y qué no.

A Yoongi le gustaba eso de Jimin, creía que era admirable y llamativo. Era bien lo que todos podían llamar su otra mitad, pues un todo siempre debía estar construido de partes opuestas que se complementaran. Ellos eran el Yin-Yang, uno siendo el complemento del otro, para bien y para mal.

Yoongi apoyó su mejilla contra su mano, acomodándose para mirar al chico a su lado que volvía a concentrarse en sus apuntes, llevando su vista de su cuaderno lleno de texto, esquemas y dibujos al grueso libro que había notado llevaba consigo a diario.

Jimin no sólo era un muchacho brillante de personalidad, también lo era de mente. Yoongi admiraba siempre la importancia que el menor le daba a sus estudios y el enfoque que ponía cuando debía hacerlo. Yoongi era muy bueno en su clase, uno de los mejores según sus profesores, por lo que le gustaba estar en compañía de alguien que también disfrutara del estudio y supiera darle la importancia que merecía.

Cada día, Yoongi encontraba más puntos de Jimin que le agradaban. Y sin darse cuenta, estaba sonriendo ensimismado observando al castañito escribir.