֎i love you֍

Seulgi maldice a voz populi una vez más desde que salió del dormitorio, la camioneta se ha vuelto a apagar por quinta vez en los siete kilómetros que apenas lleva recorridos. Maldice tanto por la frustración de llegar a su destino con la eficacia deseada, así como porque Seungwan tiene razón respecto a las fallas de su proyecto de vida. Si no pisa el centro de los pedales, la camioneta se apaga.

Ha pasado los últimos cinco años de su vida intentando traer la gloria de regreso a la pick up blanca de su padre, quien se la dió para que tuviera un recuerdo de él durante el tiempo que estuviese en la universidad y lejos de casa, pero no ha podido siquiera hacerla un poco más funcional que antes.

Pero no es su fallida misión de restauración que la hace romper en llanto sobre el volante, puede que sea el detonante aún así la verdadera explosión tiene cabello tan oscuro y brillante como un cielo nocturno vestido de estrellas, y labios rojos que asemejan cerezas en temporada.

ㅡEres una idiota, Kang. ㅡla castaña se repite a sí misma una serie de veces hasta que puede calmarse lo suficiente para intentar encender la camioneta. Lo cual sorpresivamente sucede.

Seungwan se fue del dormitorio un poco después de que el sol se ocultó y Seulgi fue en busca de consuelo un par de horas después, luego de que las paredes de la pequeña habitación no fueron suficientes para contener su golpeado corazón de romperse en millones de piezas.

Dentro de la cabeza de Seulgi se repite la discusión con Wendy como si fuese una cinta dañada, todo lo que dijo la pelirroja fue cierto. Ella nunca dejó a la morena atrás ni siquiera en sus más significativas relaciones, pudo amarla como siempre lo ha hecho aún amando románticamente a alguien más y Joohyun le está ofreciendo el único cielo al que piensa podrá entrar, y aún así Seulgi logró leer todas las señales de manera errónea.

Podía tener a la chica que adora y la chica que ama con la facilidad de simplemente tomarse algo de tiempo para pensarlo, pero tuvo que hacerse el camino difícil.

Un pequeño suspiro de alivio brota desde lo más profundo de la frustración de Seulgi cuando el aquel decadente bar se levanta ante su mirada con gracia. Ha llegado a su destino.

Seulgi descubrió este lugar en una escapada de medianoche a solas en busca de una distracción de lo agotador que la universidad puede ser, además de algo de inspiración para sus canciones. Así como Seungwan le ocultó sus andanzas con las chicas más populares de la facultad, Seulgi le ocultó las múltiples aventuras que tuvo en este bar y dieron luz a un par de las mejores canciones que la morena está orgullosa de haber escrito.

ㅡDame una jarra de tu mejor cerveza negra y un "no eres estúpida, Seulgi. Solo estabas confundida", por favor. ㅡsentándose frente al bartender con quien ha podido simpatizar con el paso del tiempo, Seulgi llega a la barra. ㅡPuedo pagar extra por lo segundo si logras convencerme.

ㅡAquí está tu cerveza. ㅡTaeyong, con la rapidez que le ha proporcionado la experiencia, sirve la jarra y se apoya sobre la barra para escuchar la historia que ha estado esperando toda la noche. ㅡPero te conozco así que sé que eres lo suficientemente estúpida como para no justificar tu confusión sobre un tema que desconozco pero estoy dispuesto a ayudarte solventar.

Algo que el rubio ha aprendido en sus años como bartender de este bar de mala muerte es que las historias de amigos y extraños siempre serán más interesantes que las propias. Sin embargo, Taeyong se asusta cuando es testigo de como Kang Seulgi se bebe la jarra entera de una de las cervezas más fuertes de un solo trago y sin tener que respirar en el proceso.

ㅡTe haré la historia larga corta mientras me sirves otra. ㅡla castaña regresa la jarra. ㅡHace como dos meses Seungwan y yo nos emborrachamos en una fiesta, conocimos a una chica con el rostro más hermoso y simétrico del mundo, ella es doctora y se dió que cuenta que Wannie y yo estábamos a un trago más de pasar al más allá, así que nos cuido esa noche, la semana siguiente llegó con la bebida favorita de las dos, intercambiamos número, comenzamos a salir seguido tanto a solas como las tres juntas, Seungwan y yo nos enamoramos de ella pero ninguna dijo nada por miedo de lastimar a la otra-

ㅡAun así, se dieron cuenta que los sentimientos son demasiado para seguir cuidándolos y ahora se pelearon por querer ser la elegida de la Diosas del Olimpo que me describes. ㅡTaeyong completa la oración con sus propias suposiciones al entregar la jarra llena nuevamente.

ㅡAguanta que te va a sorprender el desastroso desenlace. ㅡy así de fácil Seulgi hace fondo blanco una vez más. ㅡLa Diosa del Olimpo llegó borracha a nuestro dormitorio y dijo que se había enamorado de las dos. De Wendy y de mi. Pero sabía que no iba a funcionar porque ella cree que Seungwan y yo no la aceptaremos por, supuestamente, respetar a la otra. Cinco días pasaron y hoy tuve una pelea con Seungwan porque ella fue a buscar a la chica de nuestros sueños y yo le reclamé porque tengo miedo de que me reemplace pero Wannie me demostró que no lo ha hecho antes y no lo haría ahora.

La voz de la morena comienza a quebrarse hasta que rompe en llanto, pero esta vez sobre la barra. ㅡY me di cuenta de lo egoísta que fui con Seungwannie, con Hyunnie y conmigo misma. Ahora lastimé a Wannie y no tengo el valor de ir a ver a Joohyun. Así que dime qué no soy estúpida, que solo estaba confundida.

Una tercera jarra llega a manos de Seulgi y hace lo mismo que con las primeras dos, un solo trago y Taeyong tiene de regreso el envase vacío. Sin embargo, esta vez el rubio no la llena inmediatamente, deja que la mujer frente a él llore parte del alcohol que ha consumido en menos de diez minutos.

Por casi cuatro años Seulgi ha frecuentado este bar, Taeyong la ha escuchado hablar de sus infinitas aventuras junto a cierta petisa así como de las metas individuales que tiene la morena; la ha visto reír, llorar, pelear con el señor panzón que parece vivir en la mesa del fondo e incluso cantar en el pequeño escenario del local, pero nunca la había escuchado o visto así de rota. Esas grietas no son profundas, muy fáciles de reparar a decir, pero corren por toda la existencia de Seulgi, dejándola en riesgo de que un mal movimiento la destroce por completo.

ㅡSi crees que lastimaste a Wendy, deberías darle un poco de espacio. ㅡel hombre dice mientras sirve un trago para otro cliente. ㅡAunque no deberías perder tiempo con esa famosa Joohyun, tal vez no hoy porque ya no estás en tus cincos sentidos, pero el reloj tampoco va a jugar a tu favor.

ㅡEso lo sé... ㅡSeulgi da media vuelta en el taburete para poder apoyar la espalda contra la barra. ㅡPero si no funciona, si no sé cómo lidiar con todo esto de que Joohyun también estaría con Seungwan. No soy del tipo celoso, aunque todavía suena raro para mí, ¿no lo crees?

ㅡEn parte tienes razón, no todos los días tienes a alguien diciendo que está enamorada de ti pero también de alguien más. ㅡfinalmente Taeyong vuelve a llenar la jarra de Seulgi. ㅡAunque sería una experiencia diferente y definitivamente memorable. Además, ese alguien más es tu mejor amiga, tu alma gemela como tanto la llamas. Estarías confiando a Joohyun en alguien que te ama y nunca haría algo para lastimarte.

Si algo Seulgi ha aprendido a valorar y a adorar son los detalles de Joohyun. Memorizó el tono favorito de púrpura de la doctora y lo emocionada que se pone cada vez que le regala algo de ese color, o como Hyun frunce el ceño cuando come algo delicioso, así como llena sus mejillas de aire cuando está concentrada haciendo esos complicados cuestionarios de salud. Todo eso tiene que ver con la felicidad de Joohyun, y si Seulgi tuviera que poner en manos de alguien más velar por esos detalles, sin duda sería a Seungwan.

Y la pelinegra misma lo dijo, ella quiere individualmente lo que el par tiene para ofrecerle y si bien Seungwan estaría dentro de la ecuación, Seulgi solo deberá concentrarse en ella y Joohyun.

Tal vez no sea tan trágico como Seulgi pensó sería.

ㅡ¿Entonces si soy una estúpida?

ㅡLa más grande que conozco.

ㅡAprecio el cumplido. ㅡla morena vuelve a atascarse la cerveza. ㅡSirveme otra.

Taeyong deliberadamente finge no haber escuchado eso y se va a atender otros clientes del otro extremo de la barra, pero su gran idea para controlar el consumo de Seulgi es corrompida cuando la susodicha salta la barra y ella misma se sirve la cerveza, incluso llenando la jarra más allá de lo adecuado y el valor de la bebida.

ㅡ¡Eso no se hace. Seulgi mala. Seulgi mala!

La castaña pasó de la barra a ser castigada en la mesa del fondo junto al señor panzón con el que peleó la última vez que vino, quien resulta ser muy bien oyente y disfruta de los relatos de Seulgi, los que auténticamente sucedieron y los que la castaña de ha inventado en el transcurso de la noche. Seulgi no sabe con exactitud cuánto tiempo ha pasado, que tanto ha hablado o cuántas cervezas ha bebido entre los shots de tequila que le ha ofrecido el señor panzón. Es solo cuando llega su salvadora de expresión combinada de fastidio y asco que la mujer puede aproximar lo mal que está.

ㅡPark Sooyoung, siempre tan oportuna. Por favor, siéntate. ㅡcon un acento elitesco, Seulgi le ofrece una silla a la pelinegra. ㅡLe estaba contando a mi amigo de la vez que tuviste que sacarme a mi y a Wannie de la cárcel.

ㅡ¿Ya llegaste a la parte donde todavía me deben el dinero que pague de fianza? ㅡSooyoung escupe las palabras bañadas de acidez. ㅡVine a buscarte, Seungwan unnie me dijo que te llevara de regreso al dormitorio.

ㅡ¿Seungwan te dijo que vinieras por mi? ㅡSeulgi dice con emoción que pronto se marchita al recordar lo que pasó en la tarde. ㅡElla no quiere saber nada de mi, al menos no por hoy. Ni siquiera quiso que la llamara si algo sucedía.

ㅡEl bartender la llamó diciéndole que ya estabas pasada de tragos y que debía venir a buscarte. ㅡno es muy tarde pero es notorio el cansancio de Soo al estar en medio de esta situación, otra vez. ㅡEstá preocupada por ti pero su diminuto orgulloso trasero no quiso darse por vencido así que me mandó con la promesa de darme todos sus créditos en la cafetería. Y me dijo que estaba ocupada, hablaba bajito por alguna razón.

ㅡEstá con Joohyun, eso es seguro.

Sooyoung quiso quejarse al respecto pero la sonrisa de Seulgi al entender que las cosas funcionaron entre las dos más bajitas y que Wendy todavía se preocupa por ella, le dicen a la pelinegra que está vez su mayor no está viendo las cosas de manera negativa.

Brindando una última vez, Seulgi se despide de su nuevo amigo y vuelve a saltar la barra para robarle una última cerveza a Taeyong, no sin antes dejar dinero suficiente para cubrir su cuenta y la próxima. Entró al bar con el mundo cayéndose alrededor de ella y sale del mismo local bailando entre las ruinas con la esperanza de armar todo otra vez cuando la ebria neblina en su mente se disipe.

ㅡ¿Estás bien? ㅡla más alta pregunta viendo en el retrovisor como Seulgi comienza a llorar en el asiento trasero de su auto. La camioneta se quedó en el bar.

ㅡEstoy bien.

Es la mentira más grande que puede salir de sus delgados labios pero es suficiente para convencer a la menor. No está bien. Aunque tiene la esperanza de que podrá estar mejor.

Cuando la mañana llega Seulgi finalmente siente el impacto negativo del alcohol en su sistema y puede suponer que el impacto positivo tuvo que haber sido aún peor porque Sooyoung y Roseanne están durmiendo en la cama de arriba, y Junmyeon está acostado en el suelo.

Lo que sea que haya hecho ebria es algo que su sobria persona no se hará responsable.

Sin embargo, si hay algo de anoche que se ha quedado con la morena además del olor a licor barato. Tiene que darle espacio a Seungwan, e ir con Joohyun. Así que sin tener la decencia de despedirse o siquiera dejar una nota avisando que saldría, Seulgi se va del dormitorio.

Hyunnie

Sé que he tardado más deㅏ
lo adecuado, pero...ㅣ

Estás en casa?ㅏ

ㅓSi. Vas a venir?

Voy en caminoㅏ

Tengo algo que decirte ㅏ

Al no tener su auto, Seulgi tiene que tomar el autobús, aprovechando el considerablemente largo trayecto para poner en orden sus ideas y las palabras que quiere decir para no cometer el mismo error que tuvo con Seungwan. Esta vez no puede equivocarse.

Primeramente tiene que decirle a Joohyun sobre sus sentimientos, lo bien que la hace sentir y sobre lo jodidamente enamorada que está de ella. Consecuente a esto debería discutir su desconocimiento acerca de este tipo de relación, pero que está dispuesta a intentarlo. Luego sobre sus propios deseos y de más y... y... y...

Cualquier cosa que Seulgi pudiese estar pensando se borra de su mente tan pronto se da cuenta que sus pies la han traído frente a la grandiosa casa, dónde Joohyun luce más pequeña de lo normal sentada en la entrada. La pelinegra golpetea con sus pies los escalones más bajos al ritmo de una canción que solo ella puede escuchar y suena justo como Seulgi.

Suave, tranquilo, justo como el sol sonaría si pudiera cantar. Así suena Seulgi en los oídos de Joohyun.

ㅡU-unnie. ㅡla castaña intenta no tartamudear al llegar con la mayor, fallando miserablemente. ㅡ¿C-cómo estás?

ㅡMucho mejor ahora que he vuelto a verte.

ㅡUstedes dos son las personas más patéticas cuando a la hora de romance se trata. ㅡSeungwan exclama desde la ventana del salón, viendo todo el espectáculo que la ha decepcionado. ㅡNecesitan clases de la maestra, o sea, yo.

En un santiamén la pelirroja está en la puerta, mirando a Seulgi con menos dolor que ayer aunque sin poder olvidarlo del todo. ㅡCreo que debo darles su tiempo a solas. Nos vemos más tarde, Hyunnie. ㅡle da un beso en la frente a la doctora todavía sentada en la escalera. ㅡEspero no estés haciendo esto por un impulso ebrio de valor.

Seulgi no puede retener la expresión de dolorosa molestia, aunque puede entender de dónde viene tan amargo comentario de Seungwan. La pelirroja se acerca lo suficiente para tener a la contraria a una extensión de mano de distancia, pero quién alcanza es Seulgi a Seungwan, tomando una de las pequeñas pero fuertes manos de la otra.

En ellas está su vida e historia, y en ellas seguirá. A pesar de que no todos los capítulos son de felicidad, Seulgi quiere apostar a un final donde pueda seguir contando con Wendy para escribirlo.

ㅡPor favor, mátame si llego a hacerlo. ㅡla morena hace una pequeña reverencia de súplica. ㅡPuedo escribir una carta de suicidio para que nadie crea que me asesinaste, Wannie.

ㅡOsa estúpida. ㅡla menor despeina el, intencionalmente, desprolijo flequillo de Seulgi con la más brillante sonrisa que le ha visto en días, antes de subirse a la moto. ㅡTe espero en el dormitorio para cenar.

Ahora con la esperanza de que podrá recuperar la parte de su corazón que ella misma lastimó, Seulgi se queda a solas con Joohyun quien le ofrece un amor nuevo para sumar al primero. Con pasitos pequeños y una sonrisa suave, la pelinegra camina hasta encontrarse con la más alta al pie de los escalones de la entrada.

Es adorable la serie de diferencias entre las dos mujeres. Cómo Seulgi a pesar de ser apenas unos cuantos centímetros más alta que Joohyun luce mucho más alta, como la pálida piel de la doctora contrasta tan bien con la de la morena cuando toma sus manos, y como los labios de Joohyun sonríen tan lindo mientras los de Seulgi se mantienen en una línea recta al perder todo sentido de que hacer.

Si así se siente estar enamorada, Seulgi espera poder hacer su mejor esfuerzo para que Joohyun sea de quién esté enamorada por un buen tiempo.

ㅡ¿Qué es eso tan importante que tienes para decirme que no pudiste hacerlo por el teléfono? ㅡJoohyun susurra como si tuviese miedo de que el más mínimo ruido pudiera despertarla del sueño del que cree está atrapada desde ayer.

ㅡQue soy una jodida idiota, pero más idiota estoy por ti, Hyunnie.

֎ain't that the worst thing you ever heard?֍