📍Barcelona, España

Abril 2022

Tras una noche difícil, al día siguiente Camila retomó su rutina de todos los días, ir a sus clases por la mañana, que los miércoles solo tiene una, después ir a cubrir las tres horas de sus prácticas y por la tarde trabajar en la cafetería. Una rutina que puede sonar agotadora, pero a la que la joven española ya está acostumbrada.

Camila entrega las órdenes a las mesas correspondientes, para después volver a la barra y seguir mirando el partido del FC Barcelona, cabe mencionar que Èric es titular, así que, aunque lo negará, su interés es notorio. A pesar de todo lo sucedido, muy en el fondo, quiere que todo vaya de maravilla con él, pues sabe a lo que se ha enfrentado esta temporada. Sin embargo, para Camila el hecho de imaginar que Ana está viendo el partido, cambia radicalmente las cosas, no puede negarlo, siente celos, mezclados con decepción y enojo.

¿Qué tiene Ana que ella no para que Èric se enamorara de ella?, resulta imposible no hacerse esa pregunta.

Al final, el partido terminó en un simple empate, así que siguió con su trabajo hasta el mismo horario de siempre. A diferencia del día anterior, está vez nadie la esperaba en el estacionamiento. Camila condujo hasta su departamento, dejó el auto en el mismo lugar de siempre, usó el ascensor para llegar más rápido al piso donde se encuentra su departamento, posteriormente abrió la puerta y se dejó caer sobre su pequeño sofá, por fin el día ha terminado. Un momento después, va a ducharse, se pone el pijama para, al fin, poder dormir más de 4 horas, pero antes mira su teléfono y con ellos los mensajes de Èric, que aún seguía ignorando.

"Hiciste un buen partido, felicidades."

Envía rápidamente el mensaje y sale de WhatsApp, no sabe si hizo lo correcto, pero sentía, de alguna manera, que tenía que hacerlo. Abre instagram y una vez más su corazón se rompe al ver los estados de su prima, ella viajó a Alemania para el partido y peor aún, tenía fotos con Èric después del encuentro.

El dolor en su pecho vuelve como aquel día que explotó todo, limpia las lágrimas rápidamente y por su bien cierra toda red social donde pueda ver rastro de ellos dos.

Sonará egoísta de su parte, pero algo dentro de ella quería que terminarán su relación de la peor manera, y es que, si pudiera pedir un deseo en esos instantes, eso pediría sin dudarlo dos veces.

— Ojalá fuera ella... para poder estar a tu lado en cada momento importante... — murmura con los ojos llorosos.

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En otra perspectiva, Èric baja del avión que trajo al equipo de vuelta a Barcelona, son cerca de las 4 am, así que iría a casa para dormir algunas horas y por la tarde ir a la ciudad deportiva a su entrenamiento, ya que este fin de semana tienen un juego de visitante, por lo que viajarán nuevamente, solo que esta vez será una ciudad española.

En lo que espera a Nico, observa su teléfono y se lleva la sorpresa de ver el mensaje de Camila, rápidamente lo abre y esboza una sonrisa. Un simple mensaje de ella la alegra el día entero, y más con lo acontecido la última vez.

"Gracias, Cami. Me alegra saber que estás bien, ojalá algún día me perdones."

Lo envía y justo en ese instante llega Nicolás, así que sin más salen del aeropuerto en busca del automóvil de Valentina.

— Se tardaron. — expresa.

— No seas exagerada, hermanita. — Èric ríe. — Vas a la parte de atrás.

— ¿Qué? — Èric hace una mueca.

— Que vas en la parte de atrás, mi novio va adelante.

— ¿Es en serio, Valentina? — regaña.

— Claro que es en serio, así que cómo vas.

Èric gruñe y se baja del auto, mira de mala manera a Nico para después acomodarse en el asiento de atrás.

— Quita esa cara, Èric, que no me tienes tan contenta.

— ¿Qué? ¿Tú también estás enojada conmigo por Camila?

— Por supuesto que sí, pero no tendremos esa charla ahora, literal son las 4 am y pelear a esta hora no es lo mío, debería estar dormida.

— Pero si viniste porque Nico te lo pidió, a mí me ignoraste. — se queja.

— Te lo mereces, además no iba a dejar a mi novio solo.

Nico simplemente ríe por la pequeña discusión que tienen los hermanos García. Valentina conduce hasta su casa, al llegar, ella y Nico se van a su habitación a dormir, algo que, por supuesto, no le gustó a Èric en lo absoluto. Él también se va a su habitación a dormir, aunque sea unas dos horas o tres.

••••

Ese mismo día, pero más tarde, Camila sale de la universidad y se detiene en el supermercado más cercano, ya que tiene que hacer la compra, porque su despensa está más que vacía. Hecha al carrito todo lo que marca su lista, algo que caracteriza a Camila es que cada vez que viene al supermercado hace una lista de lo necesario, así no gasta dinero innecesario. Ella hace sus compras tranquilamente hasta que se detiene por ver a Ana y Èric, que no duda ni un segundo en acercarse a ella, así que Camila sale de allí rápidamente con su carrito de compras.

— Camila... — el español logra alcanzarla.

— ¿Qué quieres Èric? — suspira.

— Hablar, quiero hablar contigo.

— Creo que fui clara la última vez, y también lo fuiste tú, no hay nada que aclarar.

— No estuvo bien lo que dije y lo siento mucho, es solo que hablaste mal de mi novia, Camila tienes que entender que yo amo a Ana. — ella nada más asiente para ocultar su dolor. — La amo y mucho, tienes que entenderlo.

— Lo hago, pero eso no quita el hecho de tu traición.

— Las personas cambian.

— Sí, eso lo sé, tú eres el mejor ejemplo, cambiaste por ella y ahora me tratas como la mala del cuento.

— No digas eso.

— Es la verdad, pero eso ya no importa. Olvida todo, ¿quieres? Desde el mensaje de ayer en la noche hasta que nos conocimos por primera vez.

— No...

— Hazlo, Èric.

— No quiero hacerlo...

— Èric, por favor, olvídate de mí. Sé feliz con Ana, la amas, ¿no?

— Claro que la amo, pero tú eres mi mejor amiga y quiero estar bien contigo. Ser los mejores amigos como antes, pasar tiempo juntos, contarnos cosas...

— Èric, eso es el pasado, yo no puedo, no con saber que estás con ella...

— Estás siendo un poco egoísta, Camila. — Ana interrumpe. — Si Èric te importa o te importó en algún momento tienes que entenderlo, uno no elige de quien enamorarse.

— Tal vez no, pero él sabía lo que tú y Jimena me hicieron, si me quería como él dice, hubiera pensado las cosas antes de enamorarse de ti.

— Solo lo dices porque Èric no te eligió a ti. — Ana la mira con desprecio. — Èric no te ama y nunca lo hará, tienes que entenderlo. Si lo consideraste tu mejor amigo en algún momento, como dices tú, te importaría un poco su felicidad.

— Ana...

— No, amor, es la verdad. Siempre fuiste una egoísta, Camila, al final, no eres la inocente niña que todos creen.

— Cállate, Ana. — la amenaza.

— Camila...

— Y ahí vas a defenderla, déjame decirte Ana, sé que Èric no me ama, lo sé desde hace meses y viví todo este tiempo con ese dolor. — Èric mira a Camila. — Sé que no ama y nunca lo hará, porque no soy el tipo de chica que le atrae. — baja la mirada. — y no sabes el dolor que se siente al vivir con eso, porque por más que intentes sus sentimientos jamás cambiarán, créeme, lo intente por dos meses, pero no sirvió de nada. Así que, decidí reprimir mis sentimientos cada vez que estaba con él, no quería perderlo, así que fingí que nada pasaba y me guardé todo, yo sola por meses. Ahora, lo perdí, a pesar de todo lo que tuve que soportar yo sola, pero eso ya no importa. No tengo otra opción que aceptar que Èric se fue de mi vida, y eso estoy tratando de hacer, pero créeme, no ayudas con tus mensajes y llamadas. — lo mira. — Lo lamento, pero si estás con ella yo no quiero saber nada de ti, tal vez te suene egoísta, pero no soportaría ver eso, quiero estar bien ahora que saqué todo lo toxico de mi vida, todo lo que me hizo daño por muchos años.

Tras ese pequeño discurso, Camila se aleja de la pareja y va directo a la caja a pagar por sus compras, sale del supermercado, mete todo a su auto y espera unos minutos para calmarse y estar bien para poder conducir bien.

A pesar de lo difícil que han sido las últimas semanas, Camila siente que logrado sobrellevar todo de manera correcta y sana, porque eso es lo que ella quiere, estar bien por primera vez en su vida. Cuidar de ella y su salud mental.