[A solo un capítulo para finalizar]

Después de gritar, Minho corrió y tomó al menor de la cintura para dejarlo de aquel peligroso lugar.

Felix pataleaba y le decía que se fuera, cosa que claramente no haría. No se iría de ahí y mucho menos si el menor se quedaba en ese lugar.

— Felix,¿qué estupidez ibas a hacer? — el mayor aún tenía al pequeño entre sus brazos.

— No quiero vivir. — sollozo en su hombro. — Quiero desaparecer, no quiero ser un estorbo para ustedes, están mejor sin mi, hasta tú.

— Lixie, tú nunca seras un estorbo para mi, ¿entendiste? Eres mi sunshine, el niño que me hace sonreír cuando lo necesito. Si tu estás bien, yo también lo estoy. — abrazo al menor, el cual aún hipaba.

— Tú...¿lo dices en serio? — este asintió, dejando un corto beso en su mejilla.

Se quedaron unos momentos así, Minho esperaba a que el menor se calmara y cuando menos se dio cuenta, un peso se hizo presente en su cuerpo, el menor se había quedado dormido.

Tan lindo, pensó.

Entró con él y lo llevo a la habitación que antes compartían, la cual solo tenía una cama, no había ningún inconveniente con eso. Ya habían dormido juntos antes.

[✞︎]

Chan sonreía mirándolos, estaba despertando a los demás. Y cuando entro al cuarto de Minho, este se aferraba a su menor.

Eso quería decir que ya habían hablado, nuevamente habría más alegría en esa casa. Minho y Felix hacían diferentes actividades , las cuales eran muy ruidosas en algunas ocasiones.

— ¡Channieeeeeee! — el otro menor le sonrió mientras iba hacía el.

— Oh, Seungie, ¿qué te trae por aquí?

— ¿Ah? Tú nos llamaste. Si quieres me encargo de despertar a Minho. — el mayor rápidamente negó.

— No, no. Mejor déjalo dormir un rato más, el luego despertará. — cerró la puerta y se llevó al menor de ahí.

— ¿Estas bien? Te noto raro. — pregunto su menor.

—Estoy bien, mejor ayúdame a preparar el desayuno.

[✞︎]

Felix abrió los ojos con lentitud, analizando el lugar donde se encontraba, esa era la habitación de Minho, quien en ese momento dormía cómodamente mientras le abrazaba, se miraba lindo.

Alejo con cuidado las manos ajenas de su cintura, pues no quería despertarse al otro y fracasó en el intento.

— Lix, despertaste. — el mayor jalo la mano del contrario para que este volviera a acostarse.

— Min, debemos levantarnos porque ya es tarde, bueno, no. — trato de levantarse pero Lee se lo impidió, dando besos por todo su rostro repetidas veces.

— Otro ratito más, por favor~ — Felix negó y su mayor volvió a llenarlo de besos. — ¡Por favooooor~!

— Eres demasiado bueno para convencerme, pero solo cinco minutos más y ya. — al finalizar de decir aquello, volvió a acostarse y cubrió a ambos con la sábana.

— Te amo, sunshine. — estrujó su cuerpo y beso su cabeza. Había extrañado mucho estar así con él.

— Minho, tú tienes pareja-

— Terminaré con Jisung, no quiero lastimar lo y sé que también lo hice, le debo una disculpa. — mencionó, entrelazando su mano con la ajena. — Así le de miles de oportunidades, nadie puede quitarte de mi corazón, tú eres el único que entra ahí.

Tomó la cara de su pequeño entre sus manos y luego le beso. Recibiendo una queja por parte del otro ya que aún no habían cepillado los dientes.

Definitivamente, lo había extrañado y necesitado mucho.