→   CAPÍTULO VEINTITRÉS.

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— ✧ LONDRES, INGLATERRA.
SEPTIEMBRE, 1973. ✧ —

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❝ el dorado me recordaba egoísmo, avaricia, fama y superioridad. jamás fue de mis colores favoritos.

o no lo era hasta ahora.

hasta que tu lo eres.

porque en realidad, el dorado también es asociado a un premio, a una victoria que aleja los miedos e inspira hasta lo más profundo de tu alma.

y al pensar en eso, al pensarte, siento que obtengo un triunfo inmerecido pero completamente maravilloso

tú.

y me encuentro a mí mismo separado de todos mis temores por primera vez, inspirado, ilusionado, emocionado... enamorado, tal vez.

eres el único dorado que puede gustarme.

y sé que aún no he tomado tu mano, pero te siento como un trofeo.

y sé que aún no he estado a tu lado, pero eres mi reina.

y sé que aún no he visto tu rostro... pero sé que brillas como un amanecer majestuoso, porque eres la preciosa luz dorada que ilumina mi oscura vida.

— r.t ❞

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y faith no supo cómo reaccionar a sus honestas y cálidas palabras. la sinceridad y la poesía de ellas, la habían envuelto en una burbuja brillante de la cual no quería salir jamás.

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