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✧ Ni-ki ✧

—Ni-ki, debo enseñarte algo.

—Primero que nada, hola SunWoo. Segundo, ¿Qué haces en mi casa un fin de semana? Quería dormir todo el día. Y tercero, no quiero que me enseñes nada, porque claramente no me gustará.

Hizo un puchero y se me acercó con su rostro de angelito —Eres un grosero Nishimura, le dire a tu papá que me tratas mal— dio un golpe en mi pecho —Dejame entrar, no es bueno que me dejes aquí afuera, aparte hace frío.

Suspire, esto de tener pareja sí que cansa, me hice aún lado y paso a mi lado con una gran sonrisa dando un pequeño, pero sonoro beso en mi mejilla.
Cerré la puerta y lo mire subir las escaleras, comencé a seguirlo, ¿Tanta confianza de repente?

Entro a mi habitación y dejó su pequeña mochila en mi silla, cerré la puerta mirándolo un poco cansado, se subió a mi cama y comenzó a dar brincos, me acerqué a él y jalé de su muñeca, lo cual lo hizo caer en la cama, ¿Por qué no se calló en el suelo? Así se hubiera quedado quieto por el dolor que eso le causaría, de acuerdo, ya no pensaré eso porque si se hubiera caído al piso hubiera llorado y sería más molesto.

Me acosté en la cama y lo abracé, él comenzó a moverse con intención de soltarse, así que lo abracé un poco más fuerte.

—Oye, suéltame Ni-ki

—Durmamos un rato, solo quiero dormir unos segundos.

—Pero yo no quiero dormir, aparte quiero mostrarte algo.

—Tenías frío hace unos minutos, así ya no tendrás frío y lo que me quieras enseñar puede esperar un rato.

Cerré mis ojos, me removí un poco, recargue mi rostro en la cabeza de SunWoo, el asintió al fin aceptando dormir un rato, el aroma de su cabello es muy dulce, así que recargue más mi rostro a su cabeza.

—¿Qué haces Riki?

—Tu cabello tiene un aroma agradable, es solo eso, ahora déjame dormir.

Asintió, apuesto a que sus mejillas están muy rojas.

No pasó ni siquiera un minuto cuando SunWoo comenzó hacer ruidos extraños con su boca, me separé de él aún con los ojos cerrados, debía calmarme o terminaría sacándolo de mi casa.

—¿Ya no quieres dormir Ni-ki?

—No, ya no quiero dormir, mejor muéstrame lo que quieres que vea.

Abrí mis ojos para verlo asentir feliz y sonreír, se levantó de la cama, tomó su mochila, recargue mi espalda en el respaldo de la cama, lo mire venir con una sonrisa y dando pequeños saltos, abrió su mochila y sacó... ¿Unas pegatinas? Es SunWoo no podía esperar más de él.

—HeeSeung-Hyung me las regalo ayer, mire, son de ositos, son tan tiernas que quería enseñárselas.

Se sentó frente a mi, lo mire un poco disgustado, ¿Solo para eso vino a mi casa y me interrumpió mi siesta? No lo sacó de mi casa solo porque lo quiero mucho, solo por eso.

—Se ve que te gustan demasiado los osos.

—Si, mi familia me llama osito, mi abuelito me llamaba así desde que era pequeño, recuerdo que tuve que vestirme de oso para una obra en la escuela, era en el jardín de niños.

—Eso es muy bonito SunWoo, así que desde pequeño eres un osito, mi osito, ¿No es así?

Asintió, sonreí un poco. Comenzó a despegar una pegatina y la miro en sus dedos, me miro con ojos brillantes, comenzó acercarse a mi con esa sonrisa característica de él.

—No hagas lo que creo que vas hacer, Kim.

—Déjame ponerte las pegatinas en tu rostro, te verás muy tierno Ni-ki, por favor, no seas mal humorado.

Ya estaba frente a mi, se sentó en mis piernas esperando a que dijera que si, di leves empujones para que se retirara de mi espacio personal pero este simplemente se acercó más a mi.

—Bien, ponlas, pero que no sean muchas, no me gustan los osos.

—¿Entonces no te gusto yo?

—Solo me gustas tú, los demás ositos no me gustan, solo me gusta un osito llamado Kim SunWoo.

Comenzó a reír un poco, se acercó y me dio besos en mi rostro, tomó las pegatinas y comenzó a ponerlas en todo mi rostro, soltaba unas risas cada que ponía una de esas pegatinas, no podía evitar sonreír cada que él rostro de SunWoo aparecía en mi vista, tomé unas de esas pegatinas y comencé a ponérselas en su rostro igual, hizo un puchero en el cual dejé un beso.

—Ya se terminaron Ni-ki— me miro todo el rostro —Pero que bonito te ves Nishimura, solo falta tomarte una foto, será solo de recuerdo.

Tomó su celular y comenzó a tomar fotos, ¿Por qué permito estas cosas?

—Ya son muchas Kim, por eso mismo también te tomaré fotos a ti.

—Yo no, no salgo bonito, tú si sales bonito.

—Si, no sales para nada bonito— bajó su rostro triste, se iba a quitar de mis piernas a si que lo sostuve para que me mirara —No sales bonitos Kim, sales hermoso, incluso precioso, no pienses cosas tontas como esas, jamas, ¿Bien? Pero si algún día lo olvidas entonces yo te lo recordaré.

—Recuérdamelo todos los días Ni-ki.

Lo abracé de su cintura, sonreímos —Todos los días entonces— di besos en sus labios, uno tras otro.

Comenzó a jugar con mi cabello a lo que le di una palmada en su espalda y comenzó a reír, no es gracioso, no me gusta que toquen mi cabello, tampoco se lo permitiría a SunWoo.

Lo abracé más, su rostro lleno de pegatinas se veía tan tierno y gracioso a la ves, di besos en cada pegatina, mire ahora todo su rostro, sus ojos estaban cerrados, me acerqué y di un beso en sus lindos labios rosados.

–¿Puedo dar otro beso Sunoo?

Con sus mejillas pintadas de carmesí asintió, comenzó a jugar con las tiras de mi sudadera, me acerqué lentamente a él atrapando sus delicados labios.

Bien, ya no me quejaría si SunWoo viene a mi casa todos los fines de semana, su compañía incluso puede ser medio agradable, solo un poco.

...

—Cada que es navidad mi familia y yo vamos a casa de mi abuelita, está un poco lejos de aquí, tal vez no pasemos navidad juntos Ni-ki, eso me pone triste.

—SunWoo, faltan 3 meses para navidad, ¿Por qué sacas ese tema ahora?

—Porque no hablas nada, eso fue lo único que se me ocurrió, aparte aún falta para llegar a mi casa y es incómodo cuando no hablamos de algo, siento que te aburro.

Un poco, bueno no aburrir, solo que hablas mucho, no me molesta, pero tampoco me agrada.

De acuerdo, amo cuando habla de cualquier cosa, eso es lo bueno de estar cerca a SunWoo, si no tienes algo de que hablar él siempre tendrá algo que aportar.

—No me aburres.

—Fingiré que te creo.

Tomó mi mano con fuerza y recargó su cabeza en mi hombro, mi papá no llegó en todo el día, lo que agradezco mucho porque no quería que estuviera preguntando sus cosas de nuevo, solté su mano cuando llegamos a su casa.
Di un beso como despedida.

—Entra, hace frío.

—Está bien, ve con cuidado, no tires las pegatinas a la basura o me enojare contigo.

—Las tiraré aún así, son muy feas.

—Grosero.

—Así te gusto, ya ve a dentro.

Me abrazo y entró a su casa.
Me di vuelta y comenze a caminar a mi casa, después de minutos de caminar llegué a mi casa, ahora todo estaba en silencio, así estaba mejor, sin ningún ruido.

Subí a mi habitación y mire las pegatinas en mi escritorio, todas estaban pegadas una sobre otra, las tomé, no las tiraría aunque quisiera, mire la pared donde mi cama estaba, comencé a pegarlas allí y después me tiré a la cama. Saqué mi celular topándome con el contacto de SunWoo, escribí un mensaje de texto.

¿No podrías quedarte más seguido? Haces sentir más feliz mi casa.
Enviado 9:30 pm

Desde que SunWoo llegó, podría decir que el silencio ya no me gustaba, porque cada que Sunoo invadía tu lugar, tu vida y tu corazón, él te hacía amar su compañía, fuera o no ruidoso, él te hacía necesitarlo de día y noche.

Mire mi celular.

Kim Sunoo

Mañana salgamos, ¿Si? Después
al siguiente día en el instituto pasemos todo el descanso juntos y así todos los días. ♡︎
Enviado 9:35 pm

Definitivamente SunWoo es el ruido que quiero escuchar siempre.

————

El capítulo de hoy es tan- <3

Es que de verdad morí de ternura al leerlo ╥╥