El tiempo junto a Aolany pasaba demasiado rápido. Durante este último mes tanto Juan como yo volvimos a hacer streams aunque más cortos mientras mi suegra cuidaba de la bebé

-¿Estás segura de que estarás bien?.- Juan me sacó de mis pensamientos

Estábamos abordando el avión que nos llevaría directo a la ciudad donde se celebrarían los Esland.

-Prefiero no pensar mucho o me bajaré del avión.- respondí mientras me sentaba

-Aolany estará bien.- intentó calmarme -Mamá estará con ella, además solo serán dos días.-

Suspiré con una pequeña sonrisa, habíamos recortado el viaje lo más que podíamos, debía intentar descansar de toda la locura en la que se había convertido mi vida

Juan abrochó mi cinturón, siempre que viajabamos él se aseguraba de que fuera segura, era un gesto tierno

-¿Este será nuestro último viaje solos?.- cuestioné y él carcajeó

-Posiblemente sí.- respondió y despeinó un poco mi cabello, yo lo miré mal -Te diría que lo disfrutes pero te conozco y estarás muy estresada.-

-Lo disfrutaré aún con todo mi estrés.- sonreí

Saqué mi celular para tomarnos algunas fotos, hace bastante no tenía fotos con mi esposo

-¡Mi vestido!.- recordé de pronto y me miró sin entender -¡Lo dejé en casa, no lo guardé en la maleta!.-

No tendría nada que ponerme, él lo entendió por como me miró algo preocupado. Él avión despegó y yo sabía que tenía que buscar alternativas

-Podemos comprar uno en alguna tienda.- dijo y yo negué

-Normalmente los vestidos de las tiendas son ajustados.- conté -Y yo necesitaba uno abultado.-

-Pero ¿por qué?.- cuestionó intentando pensarlo -Cualquier cosa te quedaría perfecta.-

-Había estado usando cosas holgadas para que no notaran que Aolany ya estaba con nosotros.- recordé y pareció entenderlo -No tenemos muchas opciones.-

-Tampoco podemos pedir milagros, solo tendremos una noche para buscar el mejor vestido en las tiendas.- exclamó

-Que optimista.- bufé

-No se trata de optimismo, se trata de ser realista.- dijo y en el fondo sabía que tenía razón -Si no encontramos un vestido que cumpla con lo que quieres tendremos que comprar otro aunque la gente note lo de Aolany.-

Suspiré resignada, aún no estaba del todo lista para dar la noticia del nacimiento de Aolany, quería privacidad para ella

-Cambiando de tema.- exclamó y lo miré -Quiero darte algo.-

Ví como sacó una hoja perfectamente doblada y me la dió, yo estaba confundida

-La escribí hace años.- confesó -Fué incluso antes de que nos casaramos.-

-¿Y por qué me la das ahora?.- pregunté y él sonrió

-No recordaba que la tenía guardada y apenas la encontré cuando revisé un folder con documentos.- contó -Es que no encontraba mi pasaporte y lo busqué por todos lados.-

Ambos reímos un poco por eso último

-Leela cuando estés sola.- pidió -Sé que llevamos años juntos pero todo lo que está escrito aquí son sentimientos del Juan del pasado, me dan un poco de pena.-

-Está bien.- sonreí -Lo leeré cuando no estés conmigo.-

Pasamos un tiempo platicando y viendo películas desde su celular. Pasaron dos horas y Juan estaba durmiendo, era la magia de los vuelos nocturnos.

Lo hice a un lado y con cuidado saqué la carta que me había dado, tenía mucha curiosidad por saber que había escrito y aprovecharía ahora para leerla

-¿Qué haces?.- susurró Juan y yo de inmediato escondí la carta

-Estaba..- intenté inventar una excusa -Voy al baño.-

Los baños de los aviones no me gustaban, eran espacios muy pequeños y podía sentirme asfixiada

-Pero nunca vas al baño durante los vuelos.- dijo y recostó su cabeza en mis piernas -Mejor hay que dormir un rato, aún falta rato para aterrizar, es de noche y tengo sueño.-

Acaricié su cabello con delicadeza, lo amaba demasiado. Estos momentos con Juan me hacían sentir tan feliz.

Un pequeño ronquido me anunció que nuevamente se había quedado dormido así que con delicadeza saqué de nuevo la carta

"Hola, nunca fuí bueno escribiendo sobre amor pero ahora me inspiré mientras te veía diseñar con tanta pasión, no puedo creer que tenga una novia tan dedicada y tan linda.

Estoy tan agradecido contigo porque me viste como algo más que solo 'Juan el streamer', conociste mis virtudes y defectos y aún así te quedaste conmigo, me demostraste lo lindo que es que te eligan una y otra vez

______, no sé que tan lejos nos lleve la vida pero espero que podamos estar juntos pase lo que pase. Yo no quiero ser el hombre que tiene detrás a una gran mujer, yo quiero ser el hombre que está a la par de mi gran mujer, tú.

Haré lo posible para mantener una sonrisa en tu rostro y para ser lo suficientemente bueno para que me sigas eligiendo. No soy perfecto pero soy divertido, creo que eso compensa un poco las cosas ¿no?

Con amor; Juan, el hombre que más te ama en este y todos los universos"

Terminando de leerla no pude ocultar mi gran sonrisa y las ganas inmensas de llorar por la ternura que me daba esta carta.

-No sé que tan lejos nos lleve la vida.- murmuré acariciando su cabello, él seguía durmiendo -Pero estoy segura de que nuestra historia siempre tendrá un final feliz.-

Algo me hacía pensar que después de los Esland tendríamos tranquilidad, podríamos cerrar ya esta historia