No soy como las otras chicas... Y mejor
❝ Decir que "no soy como las otras chicas" es solo otra forma de decir que "no tengo la capacidad de entender y aceptar la diversidad de las mujeres". ❞
Este apartado está dedicado a nocturnallity y JoaquinGabaldon .
Bueno, gente, bienvenidos a la quinta ola feminista del Wizarding World, donde aparentemente odiar el color rosa y menospreciar a las mujeres que se arreglan y se maquillan, se ha convertido en nuestro pasatiempo favorito. Por supuesto, también nos encanta burlarnos de aquellas que solo disfrutan de la compañía de otras chicas y tienen la audacia de hablar de los chicos que les gusta. Pero eso no es todo, porque criticar a las mujeres que tienen una vida sexual activa es nuestra especialidad, porque claramente son 'fáciles' y carecen de amor propio. Ah, y no olvidemos nuestra demanda más importante: ¡usar pantalones en Hogwarts! Porque, como todas sabemos, eso nos convierte en unas auténticas superfeministas, mucho más fuertes y poderosas que el resto de las mortales.
No me malinterpretéis: yo soy feminista. Adoro la diversidad entre mujeres, desde las que llevan tres capas de maquillaje, hasta las que llevan una semana sin ducharse y usando la misma ropa; desde las que les encanta salir de fiesta y hablar de su skin routine mañanera, hasta las que prefieren agarrar un libro y encerrarse en una biblioteca hasta el cierre; desde las que siempre llevan falda, hasta las que siempre verás con pantalones; desde las que cantan y bailan, hasta las que practican deportes; desde las que jugaban con barbies, hasta las que crecieron con montones de cajas de LEGO. Porque ser feminista significa celebrar y respetar las opciones y elecciones individuales de cada mujer, sin juzgarlas ni imponer estereotipos sobre ellas.
Pues bien, parece que en el Wizarding World, los magos y brujas no solo van retrasados en los inventos que ha traído la modernidad como la televisión o el teléfono, sino que, además, ideológicamente, también destacan por ser unos auténticos rancios. Supongo que aún están esperando el mensaje de lechuza para enterarse de las últimas novedades. ¡Ay, queridos magos, qué modernos sois con vuestros sombreros puntiagudos y vuestras varitas mágicas! ¿Acaso el progreso os da miedo? ¿O simplemente preferís seguir enviando señales de humo en lugar de mensajes de texto? Seguid así, que el mundo muggle os mira con envidia y fascinación mientras nosotros avanzamos a pasos agigantados en el siglo XX-XXI.
Bien, ¿por qué el prototipo "feminista" de los fanfics de Harry Potter me supone un problema? Porque, además de, precisamente, destacar por ser unas expertas en la práctica del "feminismo selectivo" (lo aplican cuando les conviene y luego lo guardan en un cajón polvoriento), son unas verdaderas maestras en el arte de la contradicción. Son capaces de alzar la voz por la igualdad de género mientras desprecian a otras mujeres por no encajar en su definición de "mujer empoderada". O, al mismo tiempo, la autora presenta a la protagonista como una feroz defensora de las causas justas y una valiente luchadora por la igualdad, pero luego permite que sea menospreciada por los merodeadores cuando decide unirse a su grupo, porque, ¡oh, sorpresa!, ¿qué hace una chica aquí, verdad?
Parece que en el Wizarding World, ser una mujer audaz y decidida está permitido siempre y cuando no te atrevas a cruzar el umbral de los territorios masculinos. Es como si el lema fuera: "Lucha por la igualdad, pero mantente en tu sitio". Claro, porque todas sabemos que las mujeres solo tienen habilidades mágicas para servir de interés romántico o ser objeto de protección, ¿no? Ay, perdón, perdón. No quiero adelantarme, ya que eso es material de otro apartado. Bueno, centrémonos en los merodeadores.
Recordemos cuál es la función de los cuatro mosqueteros de la historia (James, Sirius, Remus y Peter). Ahora, ¿qué pasa cuando una chica entra en su grupo?
A. James y Sirius (Remus no, porque es como "una chica" y la aceptará sin problemas, y Peter, si no habla, ni te enteras de que está ahí) entrarán en estado de shock porque no toleran una presencia femenina en su selecto círculo. ¿Y qué hará la protagonista? ¿Mandarlos a la mierda por tener unos valores anclados al siglo pasado? ¿Buscarse a otro grupo con gente más abierta y hospitalaria? ¡NO! Nuestra valiente protagonista optará por lanzar su dignidad a la basura y empezará a inventar travesuras estrambóticas y hacer todo tipo de payasadas para encajar y ser aceptada en el grupo. Porque, una vez más, "yo no soy como las chicas con las que habláis: yo soy un chico más en vuestro grupo" ¡Esto es el verdadero feminismo, sí, señor!
B. La increíble heroína de este fanfic se presenta como una mujer fuerte, independiente, con un carácter duro y una madurez desproporcionada para su edad. Pero, ¿qué ocurre cuando cae rendida ante los encantos de un machista, acosador y bromista como James o Sirius? ¡Pues claro, pierde la cabeza por ellos! ¡Totalmente lógico, ¿verdad?! ¿Quién no desearía a un individuo que no hace más que insultarte (perdón, quise decir "declararte la guerra" porque suena más aesthetic), que apenas te conoce, pero ya te está pidiendo el número de teléfono, que salta de una chica a otra sin pensarlo dos veces y que es más infiel que Tristan Thompson?
Tu problema, querida autora, son dos cosas: la primera, no radica en el hecho de que tu protagonista tenga valores feministas y justos, no, no. El problema está en presentarla como LA ÚNICA chica con esos valores, mientras que el resto de las mujeres están a años luz de su nivel de inteligencia y necesitan que alguien las menosprecie para despertar y unirse a la causa. Y encima, fardando de que "por ser la única chica entre chicos" es mejor que las demás. En fin.
La segunda cosa es que todos sabemos muy bien que tienes un crush por uno de esos tres merodeadores (perdón, cuatro, siempre se me olvida el pobre Peter). Pero, si vas a crear un personaje con valores tan sólidos y, al mismo tiempo, sigues perpetuando el fanon tóxico de retratar a James y Sirius como machistas y acosadores, ¿por qué diablos los emparejas? ¿No te das cuenta de que la imagen femenina que has creado, basada en cómo tú quisieras ser en el Wizarding World, simplemente no encaja con esos valores, ni los de la protagonista ni los de ellos? Algo no cuadra, querida autora, algo no cuadra en absoluto.
Pero, bueno, no soy psiquiatra ni tengo la responsabilidad de lidiar con las mentes retrógradas y un tanto peculiares de ciertas personas. Así que, hoy lo dejo aquí, y muy pronto volvemos a la carga.
¡Adéu, adéu!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro