—Dios mío, quiero lanzarle una piedra para que se calle. —Se quejo Jeno a su lado.

—Te ayudaría pero no hay piedras por aquí.

—Tus botas, dame tus botas. —Rió Jeno.

—Las bromas sobre mis botas de militar ya pasaron de moda, Jen.

—Bueno, si tú lo dices... 

Ignoró a su amigo posando su atención en el profesor de música y en su explicación sobre las partituras, lo cual quiso hacerle reír, pues durante el total de seis tardes se la había pasado hablando con Chenle sobre la manera correcta de leerlas, había sido un trayecto largo y complicado pues Jaemin no sabía lo complejo que había sido aquello.

Había intercambiado números con Chenle para "pedirle" ayuda con las dudas que tenía sobre su interés en la música, sus conversaciones solo se basaban en eso, lo cual le hacía sentirse aún más tonto.

Dios, estaba literalmente adquiriendo una nueva personalidad para así lograr agradarle al bibliotecario.

Lo único que agradecía de estar comportándose como un buen lame botas era pasar tiempo con Renjun, el peli-rosa le platicaba sobre su día, Renjun hablaba mucho, siempre tenía algo que decir por lo que Jaemin lograba entretenerse mucho al lado del peli-rosa.

Decidió sacar su celular ya que la platica del maestro le había aburrido desde el principio y como se sentaba al fondo podía camuflarse con los demás. Entro al contacto de Chenle y decidió escribirle, tal vez podía verlo hoy para volver a aclararle cómo se escribía Fa menor.

Hey...
Chenle, quería preguntarte si hoy podía ir a la biblioteca para que así puedas volver a explicarme sobre la Fa menor.
10:30am

Chenle
Eres un cabeza hueca, creo que te lo he explicado toda una tarde.
10:35 am

Ah si...soy olvidadizo :D Pero, ¿puedes hacerlo?
10:36 am

Chenle
Si puedo, ven a la misma hora de siempre
10:37 am

Gracias Chenle, juro que esta es la última vez que te molesto con eso.

10:37 am

Chenle
Ajá, siempre dices eso.
10:38 am

Esta vez lo cumplo ;D
10:38 am
Leído.

Jaemin guardó su celular en su bolsillo para seguir atendiendo a la clase que para su sorpresa ya había finalizado. Tomó sus cosas guardándolas y siguió a Jeno mientras este arrastraba sus pies cansado.

—Voy a morir de cansancio. —Dijo Lee bostezando.

—Si tan solo dejarás de jugar Minecraft hasta tan tarde...

—Lo hago por Chaewon —Sonrió nuevamente bostezando—. Es bonito hablar con ella mientras descubrimos diamantes.

—Esa chica te ha flechado —Empujó a Jeno riendo—. Eres todo un simp.

—No me puedes tachar de simp si tú finges que te interesa la música solo para hablar con Chenle.

—Touché.

Ambos se rieron mientras se dirigían a su siguiente clase. En el camino Renjun y Chaewon se les cruzaron, a lo que el peli-rosa no pudo desperdiciar la oportunidad para saludar a Jaemin y tal vez conversar un poco, para que así pueda contarle sobre su avance con su primo.

—Jaemin. —Saludó ondeando su manita.

—Hola Renjun. —Devolvió el saludo con una sonrisa.

—¿Cómo te ha estado yendo? —Preguntó ladeando su cabeza inconscientemente, al igual que un cachorro.

—Uh, bien. Chenle y yo hablamos por mensajes más seguido.

Hablando sobre notas musicales, tonto. Se dijo a sí mismo.

—Oh ya veo —Asintió—. Me alegro mucho. Uhm ¿Puedo preguntarte algo?

—Ya lo estás haciendo.

—Ya~ —Rió—. ¿Te gustaría venir a mi recital? —Coloco su mochila en su pecho para así poder sacar el folleto junto a un boleto de cortesía—. ¡Quedé en el papel principal!

Jaemin tomó el folleto entre sus manos e inspeccionó el boleto junto a este, Jeno a su lado miró el folleto con una sonrisa cómplice que compartía con Chaewon.

—Oh, es a la próxima semana... —Comentó desanimado.

—Sip.

—Yo creo que no podré ir. —Trato de devolver el folleto a Renjun mientras el peli-rosa lo miraba decepcionado.

—Eh, Jaemin, que un día no vayas a la biblioteca por Chenle no te hará daño. —Bromeó Chaewon.

—No es eso —Rodó los ojos—. Mis abuelos vienen de visita a la próxima semana y tengo que ayudar a mi mamá con la atención a ellos.

Volvió a extender el folleto junto al boleto hacia Renjun, el cual no lo acepto y negó con la cabeza.

—Quédatelo, tal vez puedas hacerte tiempo y puedas ir —Le sonrió—. Igual si no puedes ir no importa.

Jaemin se sintió mal, pues el brillo con el que Renjun le había ofrecido el boleto se había extinto en cuanto le dijo que no iba a poder. Y no era mentira, su madre lo iba a tener atendiendo a sus abuelos toda la semana, no podía escaparse de aquello, lo cual le puso triste.

Triste porque él nunca pensó en no pasar tiempo con sus abuelos y triste porque quería ver cómo era Renjun en el papel principal.

Guardo el boleto junto al folleto en su mochila tratando de darle una sonrisa a Renjun, la cual fue correspondida.

Y dios que alguien le eche agua fría, podría moverle la cola a Renjun cada vez que sonreía, le gustaba mucho como sus ojos formaban unas medias lunas y como sus mejillas se hacían más esponjosas.

—Bueno, nos vemos —Se despidió Renjun tomando a su amiga de la mano para ir a su nueva clase.

—Ay, el amor~ —Canturreó Jeno.

—¿Qué? —Preguntó Jaemin.

—Lo digo por mi —Sonrió—. Y tal vez por ti.

Jaemin rodó los ojos mientras Jeno lo abrazaba por los hombros para así volver en su travesía a su nueva clase.

Al igual que muchas tardes Jaemin se encontraba adentrándose a aquel lugar, había llegado unos minutos más tarde de lo acordado pero todo había sido por el gran tráfico que había.

Y nuevamente se volvió a preguntar cómo es que hacía todo esto para una persona, no es que se viera un gran futuro con Chenle pues solo quería llegar a ser algo con él, algo insignificante y tal vez divertido, nunca había hecho todo eso por nadie, ni por la más bonita del colegio.

Así pasas más tiempo con Renjun. Esa vocecita llamada conciencia hizo acto de presencia.

Puede que sea así, pues disfrutaba más la compañía de Renjun que la de su primo, sobre todo porque Renjun era más cálido con él, tratándolo con confianza y siendo un parlanchín de primera, en cambio Chenle era más frío y distante, siempre yendo al grano.

Dejo de pensar en aquello y entro a la biblioteca, lo primero que capto fue que Chenle no estaba en el mostrador de siempre, supuso que estaría acomodando los libros de literatura inglesa, se encaminó a aquellos pasillos mientras trataba de encontrarlo con la mirada. Siguiendo caminando por estos se topó con algo que... Definitivamente no se esperaba.

Chenle dándole un beso corto a un chico más alto mientras le sonreía.

Aquello más que lastimarlo lo sorprendió y también causó cierto enojo en su interior.

Pues lo que rebotaba en su cabeza era saber si Renjun sabía sobre aquello.

¿Lo sabría todo este tiempo? ¿Le ayudó sabiendo que Chenle tenía a alguien más? Si es así ¿Por qué lo hizo?

—Jaemin. —La voz de Chenle lo sacó de sus pensamientos.

—Hola. —Murmuró.

—Pensé que no vendrías —Sonrió—. Uh, que vergüenza que me hayas encontrado... Así.

—¿Así?

—Con mi novio —Sonrió cual enamorado.

—Te lo presento, Jisung él es Jaemin, el muchacho que he ayudado con sus dudas sobre la música.

—Mucho gusto. —Habló Jisung extendiendo su mano hacia Jaemin, quien la tomó estrechándola.

—Entonces...espérame en alguna mesa y yo vengo a ayudarte con lo que necesitabas. —Dijo Chenle.

—No... Está bien, quédate con tu novio, puedes ayudarme otro día. —Sonrió.

Chenle sonrió asintiendo y agradeciéndole a Jaemin por darle tiempo a solas con su novio.

Jaemin salió del lugar con una sensación extraña en su pecho, no era dolor que sentía, sino que enojo y confusión.

¿Renjun lo sabía?

Si era así, si Renjun sabía que Chenle tenía un novio ¿por qué lo impulsó a hablarle?

Quería creer que era algo que Renjun no tenía conocimiento pero era poco probable pues el mismo Renjun le había dicho que eran casi como hermanos, además iba todos los días a dejarle algún tipo de bocadillos, era imposible que no supiera.

Aquello revolvió su estómago, la sola idea de Renjun mintiéndole o burlándose de él le hizo revolver su estómago sintiéndose mal consigo mismo. Queriendo una explicación.