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⋅ ⋯ ୨ baile de peleas ୧ ⋯ ⋅
💓. ꦿꦶ 🆆🅸🅻🅻🅾🆆 apenas había tenido tiempo para descansar, menos de una semana, quizá menos que eso. En un abrir y cerrar de ojos, los preparativos para el baile de primavera ya estaban en marcha. Jane, como líder del Club de Arte, estaba a cargo de la organización, pero Alice había decidido intervenir y ofrecer su ayuda, justificando que "no quería que fuera un completo desastre". Jane no pareció muy convencida, pero aceptó.
Para Willow, levantarse temprano un día de semana era ya una tarea difícil; saber que tenía que hacerlo también un sábado era una verdadera tortura. Aun así, quedarse en casa era peor. Desde el día en que su hermana Rosemary había revelado la relación entre Willow y Rosalie a su madre, todo se sentía extraño. Rosemary estaba distante, como si evitara cualquier conversación, y los intentos de Willow por obtener una explicación habían sido en vano. Por otro lado, su madre, Belinda, no había expresado comentarios negativos, pero el cambio en su actitud era evidente. Aunque no hablaban directamente del tema, el ambiente seguía siendo incómodo, casi sofocante.
Por eso, estar en su casa se había vuelto insoportable para Willow.
━¿Quieres venir hoy a casa? ━preguntó Rosalie casualmente mientras ambas almorzaban en la cafetería, apartadas del grupo habitual de Willow. Rosalie, como siempre, prefería evitar a los amigos de su compañera si es que podía━. Emmett no deja de molestar preguntando cuándo vendrás. Además, quiero que estés allí.
━Oh… bueno. Me parece bien. No es como si quisiera quedarme en mi casa de todos modos.
Rosalie la miró con interés, ladeando ligeramente la cabeza.
━¿Pasa algo? Es raro no verte cerca de Rosemary últimamente.
Willow se tensó.
━No… creo que no. Ella dijo que todo estaba bien… gritando, pero según ella no pasa nada.
━No suena como si todo estuviera bien ━comentó Rosalie, acercándose más. Jugueteó con un mechón del cabello de Willow entre sus dedos, un gesto reconfortante que hizo que Willow exhalara largamente.
━Ah ━Willow soltó un suspiro cargado de frustración━. Rosemary le contó a mamá que tú y yo estamos saliendo. No es que me moleste que lo sepa, no me avergüenzo de nosotras ni de ti, para nada. Pero quería decírselo yo.
Rosalie asintió, dejándola continuar.
━Mamá no dijo nada malo, pero… desde entonces nuestra relación se volvió rara. Es como si todo hubiera cambiado entre nosotras. Y lo de Rosemary es aún peor. Se alejó de mí completamente. Intenté preguntarle por qué le contó algo tan personal a mamá, pero no me da respuestas, solo me evita.
Rosalie llevó una mano al rostro de Willow, acariciándolo con suavidad.
━Está bien, linda ━susurró, intentando calmarla━. Quizá deberías intentar acercarte a ella en el baile. Tal vez, fuera del ambiente de la casa, con algo más de distracción, esté dispuesta a escucharte.
━Puede ser… Quizás es porque mamá está cerca y eso la incomoda. No lo sé. ━Willow suspiró de nuevo, aunque esta vez algo de alivio se reflejaba en su rostro. Finalmente, sonrió recordando algo repentino━. ¡Ah, casi lo olvido! Tengo algo para ti.
Rosalie arqueó una ceja, curiosa, mientras Willow buscaba en su mochila. Sacó un pequeño ramillete de flores azules para la muñeca y se lo extendió con nerviosismo.
━Jess dijo que era una tradición llevar uno de estos al baile. Casi le da un infarto cuando le dije que no tenía idea de que había que dar uno.
Rosalie tomó el ramillete con delicadeza, observándolo con atención.
━¿Lo hiciste tú?
━Sí, bueno… Jane me ayudó un poco ━admitió Willow, un poco avergonzada.
La vampira lo examinó con cuidado, sus ojos apreciando cada detalle.
━Nunca antes había recibido algo hecho con tanto cariño para mí.
━¡Oye! ━protestó Willow, empujándola ligeramente mientras una sonrisa avergonzada se formaba en su rostro━. Es solo un detalle.
Rosalie sonrió genuinamente, dejando entrever una ternura que rara vez mostraba en público. Luego se inclinó hacia Willow y depositó un beso suave en su mejilla.
━Gracias ━dijo, con un brillo en los ojos que hizo que el corazón de Willow latiera un poco más rápido.
El timbre que marcaba el final del receso resonó por los pasillos, y ambas chicas se levantaron.
━Te esperaré a la salida, Rosita ━le informó Willow con una sonrisa cálida, dándole un corto abrazo antes de dirigirse a su próxima clase.
Por la tarde, Willow estaba sentada en el porche delantero de la casa de los Cullen. El lugar siempre le brindaba una sensación de tranquilidad; se sentía cómoda y relajada, sobre todo porque la constante actividad de la casa la mantenía distraída. Aunque en ese momento estaba sola, no le molestaba la quietud. Rosalie, por su parte, estaba con Alice, probándose peinados para el baile del día siguiente. Emmett y Jasper habían salido a cazar, y Esme, como era habitual desde la llegada de Willow, estaba en la cocina preparando algo, aunque nadie realmente lo necesitara por lo que Willow acababa comiendo todo gustosa.
El crujir de la madera bajo unos pasos hizo que Willow levantara la vista. Carlisle salió al porche con su característico andar tranquilo y una sonrisa serena en el rostro. Se sentó junto a ella en la hamaca donde descansaba, con las manos apoyadas sobre sus rodillas.
━¿Estás bien? ━preguntó con suavidad.
Willow suspiró y encogió los hombros, tratando de parecer despreocupada.
━Supongo.
Carlisle la miró con paciencia, esperando, y finalmente añadió.
━Rose me comentó algo.
La rubia bajó la mirada y se rindió con un suspiro pesado.
━Bueno, sí... En realidad, no estoy muy bien ━admitió, su voz quebrándose un poco.
━Puedes contarme si quieres, Wills. Ya sabes que eres parte de esta familia ━dijo Carlisle con calidez, colocando una mano en su hombro en un gesto de apoyo.
Willow exhaló lentamente, mirando sus manos.
━Le dije a mamá que estaba saliendo con Rosalie, y no se lo tomó de la mejor forma. No es que me dijera algo directamente, pero... puedo sentir su rechazo, ¿sabe? Desde entonces no volvió a dirigirme la palabra como antes ━sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas contra su voluntad. Aunque siempre había sido sensible, hasta ese momento había logrado esquivar el peso emocional del tema━. No sé si hubiera preferido una reacción negativa más evidente. Al menos habría sabido qué sentía realmente. Pero este silencio, esta indiferencia... duele. Y no hubiera dejado de salir con Rosalie, pero... ━su voz tembló, rompiéndose finalmente━. Me duele saber que no me acepta como soy.
Carlisle no dijo nada al principio, simplemente la rodeó con sus brazos en un abrazo reconfortante. La sostuvo con suavidad, permitiéndole liberar sus emociones sin prisas. Después de unos segundos, Willow se apartó ligeramente, limpiándose los ojos con el dorso de la mano.
━Willow, a menudo las emociones de nuestros padres no se expresan de la manera que esperamos o necesitamos ━comenzó Carlisle con un tono cálido━. A veces, el silencio o la distancia no son rechazo, sino confusión o miedo. Tal vez tu madre no sepa cómo procesar lo que le contaste.
Willow lo miró con una mezcla de vulnerabilidad y atención, mientras Carlisle continuaba.
━Sé que esto no alivia completamente lo que sientes ahora, pero quiero que recuerdes algo: tu valor no depende de la reacción de nadie, ni siquiera de tu madre. Lo que hiciste, ser honesta contigo misma y con ella, requiere mucha valentía. Y aunque pueda parecer que no te acepta ahora, el tiempo tiene una forma de suavizar las cosas. No estás sola, Wills. Tienes a Rosalie y a todos nosotros aquí para apoyarte.
Willow inhaló profundamente, intentando calmar el nudo en su pecho, y luego dejó escapar una pequeña sonrisa.
━Supongo que solo tengo que aprender a ser paciente... y fuerte. Es solo que... a veces desearía que alguien como usted fuera mi padre ━se sonrojó de inmediato al darse cuenta de lo que acababa de decir━. Es decir, parece saber siempre qué decir, y...
Bajó la mirada, jugando nerviosamente con sus manos.
━Gracias. De verdad. Por escucharme.
Carlisle sonrió con calidez, despeinando un poco su cabello en un gesto paternal.
━Siempre que necesites hablar, estoy aquí para ti. Y no te olvides: ya eres fuerte, más de lo que crees.
Antes de que Willow pudiera responder, Alice apareció en la puerta con su habitual energía.
━¡Wills! ¡Ven! También tengo que probar peinados contigo ━dijo emocionada, y luego miró a Carlisle con una sonrisa traviesa━. A menos que tú también quieras.
Carlisle levantó las manos con una sonrisa divertida, negando con la cabeza.
━Eso no es para mí.
Willow soltó una pequeña risa, agradecida por el cambio de ánimo, y siguió a Alice al interior de la casa.
Al día siguiente, Willow no estaba demasiado entusiasmada con el baile. No porque no disfrutara de ese tipo de actividades, sino porque debía levantarse temprano un sábado para ayudar con los preparativos en el gimnasio. Como miembro del Club de Arte, tenía ciertas responsabilidades que no podía evitar.
Jane, pasó a buscarla en su auto. Aunque acababa de aprender a conducir, lo hacía con cautela extrema, manteniéndose siempre a baja velocidad.
━Es raro venir al instituto un sábado. No me gusta ━declaró Willow en cuanto bajó del auto, cruzando los brazos.
━Sí... no es mi actividad favorita, pero al menos hoy terminaré con todo lo relacionado con este baile ━comentó Jane con una sonrisa sin mostrar sus dientes. Se dirigió a la parte trasera del auto, abrió el maletero y sacó sin esfuerzo las pesadas cajas llenas de decoraciones.
El estacionamiento estaba casi vacío, apenas unas cuantas bicicletas y autos ocupaban los espacios. No había rastro del bullicio habitual de estudiantes, lo que hacía que el lugar se sintiera inusualmente tranquilo. Dentro del gimnasio, unas quince personas trabajaban dispersas, ajustando guirnaldas, organizando mesas y colocando adornos. En el centro del caos se encontraba Alice, quien sostenía un cuaderno y dirigía a todos con precisión.
En cuanto Willow y Jane cruzaron las puertas, Alice levantó la vista y se acercó rápidamente, su rostro iluminándose al reconocer a la rubia.
━Willow, me alegra que estés aquí. Jannette... ━al dirigir la mirada hacia Jane, su tono cambió, volviéndose más frío. Incluso su expresión perdió parte de su calidez habitual, transformándose en una máscara de seriedad. Era extraño para Willow escuchar a Alice hablar con tanta frialdad, especialmente hacia alguien como Jane, que, a pesar de su sarcasmo y humor mordaz, resultaba difícil de no querer.
━Vaya, pareces toda una organizadora de bodas —se burló Jane, sonriendo mientras le arrebataba el cuaderno a Alice con un movimiento rápido. Sin esperar una respuesta, empezó a hojearlo mientras se dirigía al centro del gimnasio.
━¡Tú... Jannette! ━exclamó Alice con indignación, siguiéndola de cerca para intentar recuperar su cuaderno.
━¿Y ellas qué traen ahora? ━murmuró Willow, ladeando la cabeza mientras rebuscaba en una de las cajas buscando cinta adhesiva, chinches y otros artículos útiles.
El gimnasio lucía completamente transformado. El escenario había sido removido para dar más espacio al evento, y en su lugar, en el ala norte, se había instalado una pequeña plataforma donde la banda del colegio tocaría durante el inicio de la fiesta. Después, el DJ tomaría el control. En el ala este, una mesa alargada cubierta con un mantel azul marino estaba destinada al ponche y los aperitivos, tanto dulces como salados. Las gradas, ahora decoradas con guirnaldas y luces sutiles, añadían un toque festivo.
En el ala suroeste se habían dispuesto mesas y sillas blancas, cada una adornada con manteles azul marino y elegantes centros de mesa que parecían más propios de una boda que de un baile escolar. Pero lo que más llamaba la atención era el techo: justo en el centro colgaba una bola de disco enorme, cuyo brillo se intensificaba con los rayos de luz que entraban por las ventanas superiores. Willow no podía evitar preguntarse de dónde Alice habría conseguido el presupuesto para algo tan extravagante.
Aunque no había una temática oficial, la paleta de colores —azul marino y blanco— creaba un ambiente armonioso, casi mágico. Telones negros cubrían las paredes del gimnasio, ocultando los aros de baloncesto y las marcas del suelo, mientras estrellas colgantes de papel metálico daban la impresión de un cielo nocturno estrellado. Willow estaba segura de que, al caer la noche, el lugar se vería aún más espectacular con las luces y los reflejos de la bola de disco.
En la parte trasera, un enorme inflable se estaba terminando de inflar. Jane, había contratado aquello en secreto, como una broma para romper con la formalidad de la decoración de Alice. Cerca de la entrada del gimnasio, se habían colocado algunas bancas blancas para que los estudiantes pudieran tomar aire entre canción y canción.
━En serio, no sé de dónde sacaron el presupuesto para todo esto... ━comentó Willow mientras terminaba de acomodar una última caja y miraba a su alrededor con curiosidad. Luego añadió, con una pizca de confusión━. Esto definitivamente no lo pagaron solo con lo que juntaron en la escuela, ¿verdad?
Jane se acercó con una sonrisa triunfal y pasó un brazo sobre los hombros de Willow, mirando satisfecha el inflable.
━Claro que no. Pero ¿quién diría que tu cuñadita tenía tanto dinero escondido? Ni te imaginas cuánto costó esa bola de disco. Solo con eso se nos iba todo el presupuesto inicial ━explicó con aire despreocupado.
━Lo imaginé... ━murmuró Willow, cruzándose de brazos mientras volvía a contemplar el lugar.
Alrededor de las cinco de la tarde, Willow llegó a casa para prepararse. Se dio una ducha rápida, dejando que el agua tibia relajara sus músculos tras la jornada de trabajo en el gimnasio. Aunque intentó no pensar en ello, no podía evitar sentirse insegura. Nunca había sido buena maquillándose; no tenía práctica porque rara vez lo hacía. Solía recurrir a Rosemary para estas ocasiones, pero considerando que estaban "peleadas", descartó la idea de pedirle ayuda.
Con el cabello aún húmedo, se miró en el espejo, contemplando sus opciones. Su conocimiento sobre peinados era limitado: coletas, trenzas simples o un rodete improvisado. No tenía idea de cómo hacerse un recogido elaborado, pero tampoco estaba segura de necesitarlo.
En poco menos de media hora, Willow se vistió con el vestido escotado de azul cobalto que Alice le había elegido para la ocasión. Decidió dejar su cabello sencillo después de secarlo con la secadora; le pasó un poco la plancha para darle suavidad y, para agregar un toque especial, se colocó una diadema blanca que hacía juego con sus sandalias de suela plana. Intentó hacerse un delineado frente al espejo, pero tras varios intentos frustrados terminó desistiendo. En su lugar, se limitó a rociarse un poco de perfume y, resignada, se sentó en el borde de su cama esperando.
Sabía que su madre no estaría en casa, ya que tenía que cubrir un turno en el hospital. Y aunque una parte de Willow deseaba que estuviera presente para conocer a Rosalie, otra sabía que era mejor así. El pensamiento de un encuentro entre ambas le resultaba incómodo, pues temía que su madre pudiera decir algo que estropeara el ambiente. Era mejor de esa manera.
Una bocina interrumpió sus pensamientos. Willow miró el reloj y dedujo de inmediato que se trataba de Rosalie. Antes de abrir la puerta, alisó su vestido con las manos y acomodó su cabello con los dedos. Cuando finalmente giró la perilla y abrió, quedó boquiabierta.
Allí estaba Rosalie, deslumbrante, vestida con el impecable vestido blanco que combinaba con el suyo. Su cabello rubio caía en perfectos bucles sedosos, su piel brillaba bajo un maquillaje sutil pero impecable, y sostenía un ramo de flores azules tan grande que hizo que Willow sintiera sus mejillas arder al instante.
━Se te va a caer la baba, linda ━le recordó Rosalie, aguantándose la risa.
Willow cerró la boca de inmediato, pestañeando varias veces como si intentara recuperar la compostura.
━Te ves hermosa ━dijo al fin, tomando el ramo entre sus brazos e invitándola a pasar━. Pasa, pasa. Voy a poner estas flores en agua, y podemos irnos después.
Rosalie asintió y, al entrar, echó un vistazo rápido a los alrededores. No tardó en notar la ausencia de Belinda en la casa, pero no hizo ningún comentario. Sabía que aquel tema seguía siendo delicado para Willow.
Mientras colocaba un jarrón con agua en la cocina, Willow sintió cómo unos brazos rodeaban su cintura.
━Ya sé que luzco apetitosa, pero no siempre tienes que acercarte así ━dijo Willow con diversión, aunque su voz se cortó cuando Rosalie rozó suavemente sus labios contra su cuello. Luego, la vampira subió un poco más y dejó un beso delicado en su mejilla.
━Me gusta tu aroma ━confesó Rosalie.
━¿Ah, sí? ¿Y a qué huelo? ━preguntó Willow, volteándose para dejar el jarrón en la mesada y mirarla directamente a los ojos.
━A primavera ━contestó, sin dudarlo.
Cuando llegaron al evento, el estacionamiento estaba lleno, como en cualquier día normal de colegio. Había grupos de estudiantes afuera, pero la mayoría ya comenzaba a entrar. Una vez dentro, Rosalie se ofreció a buscar ponche para Willow, mientras esta se reunía con sus amigos.
━¿Y tú con quién viniste? —preguntó Willow a Jane.
Jane hizo un movimiento de cabeza señalando a Alice, y Willow abrió los ojos con sorpresa.
━Sí, ni yo lo entiendo. Cambiemos de tema. ¿Tú y Rosalie ya salen oficialmente? Están hasta combinadas.
━Sí, aunque le dije que la próxima vez que me pidiera ser su novia no fuera en la puerta de mi casa después de un día de colegio.
━Deberías pedírselo tú hoy ━sugirió Jane con naturalidad.
━¿Tú crees? No le compré nada ━respondió Willow, sintiéndose un poco avergonzada. Pero en cuanto dijo eso, recordó que Rosalie seguramente podría escuchar la conversación desde la distancia, así que dejó el tema. Además, supuso que Jane desconocía el secreto de los Cullen, o de lo contrario habría hecho algún comentario más significativo━. ¡Amo esta canción! ¡Baila conmigo, Jane!
Sin esperar respuesta, Willow arrastró a Jane al centro de la pista, donde ya estaban bailando Jessica y Angela. Pasaron algunos minutos entre risas y movimientos torpes, hasta que la banda donde tocaba Rosemary subió al escenario.
Cuando Willow vio a su hermana menor tocar, decidió aprovechar el momento para acercarse y hablar con ella. Sin embargo, apenas terminó la presentación y trató de abordarla cerca de la mesa del ponche, Rosemary la ignoró deliberadamente, pasando a su lado sin decir una palabra.
━Deberías esperar a que se calme un poco ━le sugirió Rosalie, que había llegado a su lado en ese momento.
━Está bien ━murmuró Willow con un suspiro, tomando una copa de ponche de la mesa. Dio un sorbo y puso una mueca de asco━. Puaj, creo que Jane le agregó alcohol sin que nadie la viera.
Rosalie tomó la copa de inmediato y la dejó sobre la mesa con un gesto serio.
━Odio el alcohol ━comentó la vampira.
Justo en ese momento, comenzó a sonar una canción lenta, y Willow, olvidando momentáneamente su preocupación por Rosemary, tomó a Rosalie de la mano para llevarla al centro de la pista junto con las demás parejas.
Mientras bailaban, Willow colocó sus brazos alrededor del cuello de Rosalie y descansó su cabeza en su pecho. Rosalie, por su parte, la rodeó por la cintura, y ambas se movieron al ritmo de la música con total naturalidad.
━Me alegra que entre nosotras todo haya salido de manera natural y sin forzarlo ━dijo Rosalie en voz baja. Willow sintió una punzada de culpa al escucharla━. Desde el día en que te vi, supe que eras tú. Me alegró tanto cuando aceptaste que fuéramos amigas.
━¿A qué te refieres con "natural"? ━peguntó Willow, sintiendo cómo un nudo comenzaba a formarse en su garganta.
━Ya sabes, todo entre nosotras. Estoy agradecida de que, incluso sabiendo lo que soy, hayas decidido quedarte a mi lado.
La sonrisa de Rosalie era tan hermosa que Willow no pudo soportar más el peso de la culpa. Le dio un beso corto, pero luego se apartó.
━Me estoy ahogando aquí. Voy a buscar algo para tomar ━dijo rápidamente antes de alejarse, dejando a Rosalie en la pista sin entender del todo su reacción.
A solas, Willow suspiró mientras apoyaba las manos en una mesa alejada. Sentía que el vestido comenzaba a sofocarla, que el collar pesaba demasiado y que su cabello le hacía cosquillas insoportables.
Alguien a su lado se sirvió ponche.
━Eso tiene alcohol ━indicó Willow con tono neutro, pero su mirada no ocultaba el reproche.
━Lo sé. Por eso lo tomo ━respondió Rosemary, llevándose el vaso a los labios y dándole un largo trago sin vacilar.
━¡Mary! ━exclamó Willow, alarmada al volver a verla.
La menor no respondió y comenzó a caminar hacia el exterior, donde el aire fresco reemplazaba la sofocante atmósfera de la fiesta. La mayoría de los alumnos estaban en la pista de baile, dejando los alrededores del gimnasio prácticamente desiertos. Aunque el ruido de la música seguía presente, llegaba distante, como un eco lejano que no podía distraerla de lo que sentía.
━¡Habla conmigo! ━rogó Willow desesperada, alcanzándola justo antes de que cruzara la puerta. Le sujetó el brazo, impidiendo que siguiera.
━¡Que no, Willow! ━gritó Rosemary, girándose de golpe━. Todo siempre se hace como tú quieres. ¡Solo por esta vez acéptalo!
━¿De qué carajos hablas, Mary? ¡Dímelo! No puedo entenderte si no lo haces.
━¡No! Porque parece que tú nunca entiendes nada.
━¿Esto tiene algo que ver con mamá? ━preguntó Willow, tratando de sonar calmada y comprender.
━¡Sí! Tiene que ver contigo, con mamá, ¡con todo! ━Rosemary la miró con rabia y frustración contenidas, y su voz se rompió en un susurro amargo━. Me sorprende que te haya tomado tanto tiempo darte cuenta. Cuando rompiste tu promesa, jamás dije nada. ¡Prometiste ayudarme a buscar a papá y Eva! Íbamos a usar a los Cullen para eso, ¿recuerdas? Pero en cuanto te acercaste a Rosalie, olvidaste todo nuestro objetivo. Y, ¿sabes qué? De alguna manera, me cambiaste. Ahora pretendes que todo está bien, como si nada hubiera pasado, incluso cuando sabes que Elena nos está buscando.
━¿Qué esperabas que hiciera? ━replicó Willow, sintiendo un nudo en la garganta━. ¡No entiendo qué quieres de mí!
━¡Cumplir lo que prometimos! Pero no. Tú siempre haces lo que quieres, nunca lo que debes hacer.
━¿De qué está hablando Rosemary, Willow? ━interrumpió una voz tras ellas. Rosalie estaba de pie en el umbral, mirándolas con el ceño fruncido━. ¿Nos usaron todo este tiempo?
Willow se dio la vuelta con expresión de sorpresa de verla allí.
━¡No! ¡Espera, Rosie! ━intentó explicarse, pero la vampira ya había comenzado a alejarse, con la mandíbula tensa. Antes de cruzar la puerta, se detuvo un instante y señaló a Rosemar━. Tú te quedas aquí. No terminé de hablar contigo.
Rosemary solo se encogió de hombros, como si no le importara.
━Ve tras ella, como siempre. Ya estoy acostumbrada a que me dejen por un vampiro.
Willow vaciló, pero finalmente siguió a Rosalie hacia el exterior. El aire frío la golpeó de inmediato, calando en su piel expuesta.
━Rose, yo... ━comenzó a decir, pero la vampira se giró rápidamente, interrumpiéndola.
━¡¿Por qué me mentiste?! ━espetó Rosalie, sus ojos dorados brillando con el sentimiento de la traición━. Pude haberte ayudado si me lo hubieras dicho. Cualquiera de mi familia lo habría hecho.
━No lo habrías hecho si yo no fuera tu compañera ━negó Willow con un hilo de voz.
Rosalie pareció dolida por esas palabras, pero no apartó la mirada.
━¿En serio, Willow? ━respondió, cruzándose de brazos y mirándola fijamente━. Sabes que no es cierto. Ya conocías la existencia de los vampiros. Entonces, ¿qué? ¿Solo necesitabas protección?
━¡Apenas y me hubieras dejado acercarme a ti! ━replicó Willow, levantando la voz por primera vez━. ¿Qué esperabas que hiciera? ¿Que llegara y te dijera: "Hola, necesito que tú y tu familia me protejan de una vampira loca que ha estado obsesionada con nosotras desde que nacimos"? ¿Sin nada a cambio?
━¡Sí! ━Rosalie respondió sin dudar━. ¿No te das cuenta de la gravedad del asunto? Por supuesto que lo hubiera hecho. Yo te elegí, Willow, porque quise. Eso no hubiera cambiado nada.
Willow intentó soltarse del agarre de Rosalie, sintiéndose sucia de mentirle.
━Dios, Rose. Dime algo más, ¡grítame! Aléjate de mí. Haz algo.
Rosalie la miró con una mezcla de tristeza y resolución.
━No puedo. Sé que me mentiste al principio, pero lo de ahora es real. ¿Me amas, cierto? ━preguntó con voz insegura, buscando sus ojos.
El corazón de Willow se apretó con fuerza.
━Claro que lo hago. Pero...
━El "pero" anula todo lo que dijiste antes. Con eso me basta ━interrumpió Rosalie, entrelazando sus manos con las de Willow y atrayéndola hacia sí en un abrazo firme.
━Un abrazo no arreglará que te mentí, Rosie ━susurró Willow, aunque no hizo ningún esfuerzo por soltarse.
Rosalie inclinó la cabeza, dejando un beso en su cabello, y acarició su espalda desnuda con delicadeza.
━Entonces, cuéntamelo todo.
Rosalie se sentó en las bancas ubicadas fuera del gimnasio, en la parte trasera, mientras el sonido distante de las actividades escolares llenaba el aire. Willow la imitó, tomando asiento a su lado y, casi de inmediato, apoyó la cabeza en el hombro de la vampira, buscando consuelo en el contacto.
Durante unos segundos, el silencio las envolvió, roto únicamente por el sonido del viento y el tenue roce de los dedos de Willow, que jugaban nerviosamente entre sí.
━Primero quiero que sepas algo ━comenzó Willow, su voz suave, casi un susurro━. Rosemary y yo… ya sabíamos lo que eran. O sea, ya sabes, vampiros. ━titubeó un momento, buscando las palabras adecuadas antes de continuar━. Fue una completa casualidad encontrarnos con ustedes al venir a Forks, te lo juro. De verdad. Al principio, Mary y yo pensábamos que ustedes eran… ya sabes.
━¿Monstruos? ━interrumpió Rosalie con naturalidad.
━¡Sí! Bueno, no, no de esa manera ━aclaró Willow de inmediato, alzando las manos con un gesto nervioso━. Solo que tuvimos un accidente... y cuando llegamos aquí, pensamos que, tal vez, ustedes podrían estar relacionados con Elena. O que podrían ayudarnos a encontrar algo sobre ella. Pero luego, cuando escuché a Carlisle hablar sobre ella, supuse que no. Aun así, Mary fue quien más investigó.
Willow bajó la vista hacia sus propias manos, pero Rosalie las tomó con suavidad, entrelazando los dedos y acariciándolas para transmitirle calma.
━Cuanto más Mary quería saber sobre Elena, más miedo sentía yo. Temía por nosotras ━Willow tomó aire antes de proseguir━. Elena es un vampiro, por Dios. Si alguna vez llegábamos a encontrarla, probablemente estaríamos condenadas.
━¿Y para qué querían encontrarla? ━preguntó Rosalie, con genuina curiosidad.
━Bueno… ━Willow vaciló, mirando hacia algún punto lejano como si las palabras estuvieran ahí, esperándola━. Es una historia un poco larga.
━Está bien. Hay tiempo.
━Todo empezó mucho antes de venir a Forks. El primer día que llegamos aquí, escapábamos. Escapábamos de nuestra antigua casa, contaminada por los recuerdos de un pasado que queríamos dejar atrás.
》Según mi mamá, esta historia realmente comenzó cuando yo era solo un bebé. En ese entonces, Eva tenía alrededor de diez años.
Eva era mi hermana mayor, aunque técnicamente era mi hermanastra porque teníamos diferente padre. Cuando apenas comenzaba a entender el mundo, papá ya tenía una relación extramatrimonial. Pero no era una relación común y corriente… era con un vampiro. Más específicamente, con Elena.
Elena no solo era su amante; también lo utilizaba. Se alimentaba de él cada cierto tiempo. Mamá no lo notó al principio, pero comenzó a sospechar cuando papá empezó a ausentarse cada vez más seguido. Cuando regresaba, tenía un aspecto enfermizo: marcas extrañas en el cuerpo, un cansancio extremo y un aire ausente.
En esos días, Eva tomó el rol de suplente de padre. Siempre me cuidaba cuando mamá trabajaba, porque papá estaba demasiado ocupado cayendo bajo los encantos de Elena. Ni siquiera el hecho de tener una familia estable lo detuvo.
Dos años después, nació Rosemary, la viva imagen de mi padre. Era un calco perfecto: su cabello, sus ojos, su tez. Pero su nacimiento marcó un punto de quiebre. Elena notó algo que cambiaría todo: Rosemary, al igual que Eva y yo, compartía el mismo tipo de sangre que papá, un tipo que la volvía adicta. Para Elena, era un deleite irresistible.
A partir de ese momento, comenzó a manipular a mi padre aún más. Le rogó que no se separara de mi madre, porque su plan iba más allá: quería que nos escapáramos los cuatro. Para Elena, no éramos una familia; éramos "reservas vivientes", bolsas de sangre que le permitirían alimentarse a su antojo.
Mamá, sin embargo, no era ingenua. Un día, descubrió a papá y a Elena en un motel, y creyó que todo se trataba de una infidelidad común. Pidió el divorcio de inmediato. Desde entonces, solo veíamos a papá los fines de semana. Uno de esos días, nos presentó a Elena. Incluso siendo una niña, recuerdo cómo ella nos miraba… como si fuéramos comida. Eva, al ser mayor, entendió enseguida que algo estaba mal. Se negó a seguir viendo a papá porque le aterrorizaba estar cerca de Elena.
Entonces llegó el día en que todo se desmoronó. Fue un caluroso sábado en Arizona. Elena, finalmente, manipuló por completo a papá. Le prometió que, si escapaban juntos, lo convertiría en vampiro. Incluso le prometió que también lo haría con nosotras cuando llegáramos a la edad adecuada.
Papá, cegado por su deseo de inmortalidad, aceptó sin dudarlo. Elena logró convencerlo de que nosotros tres éramos parte de ese futuro "perfecto" que él imaginaba junto a ella… pero Eva y yo sabíamos que todo era una mentira.
Ese día, papá nos secuestró. Pasamos unos días infernales junto a Elena, ya que nuestro tipo de sangre parecía atraerla más de lo que podíamos soportar. Sin embargo, mamá no dejó de buscarnos ni un solo momento. Su incansable esfuerzo llevó a que múltiples patrullas se movilizaran en nuestra búsqueda. Cuando finalmente nos encontraron, Elena no tuvo más opción que dejarnos ir. No podía arriesgarse a que su naturaleza como vampiro fuera descubierta. Pero nuestra libertad tuvo un precio: se llevó a mi padre y a Eva, dejándonos solas y con un vacío imposible de llenar.
Con los años, la ausencia de papá y Eva se volvió un peso constante en nuestras vidas. Cada cumpleaños, cada festividad, era un recordatorio de lo que habíamos perdido. Solo Rosemary y yo conocíamos la verdad detrás de todo. Lo explicamos muchas veces: a los policías, al psicólogo al que nos obligaron a asistir después del secuestro… pero nadie nos creyó. Éramos apenas unas niñas, y asumieron que nuestra historia sobre vampiros era solo un trauma que nuestra mente había inventado para lidiar con la experiencia. Mamá también evitaba hablar del tema; le dolía demasiado. Así que, con el tiempo, Rosemary y yo aprendimos a callar. Dejar de mencionarlo frente a ella se volvió un acto de supervivencia emocional, aunque el silencio nunca apagó nuestra determinación de buscar respuestas.
Seguimos buscando durante años. Investigamos en secreto, intentando conectar las piezas del rompecabezas. Pero todo cambió cuando nos mudamos a Forks. 《
━Sabíamos que eran vampiros desde el primer momento que los vimos ━continuó Willow, su voz apenas un susurro mientras miraba a Rosalie━. Se veían igual que Elena. Pensamos que podrían estar relacionados con ella o que quizás sabrían algo sobre papá y Eva. Pero luego aprendimos sobre las jerarquías de los vampiros y descubrimos que Elena estaba con Aro. Nos dimos cuenta de que no había conexión directa con ustedes, así que dejamos de insistir... al menos yo lo hice.
Willow hizo una pausa y bajó la mirada, su expresión cargada de incertidumbre.
━Pero Rosemary... ella nunca dejó de intentarlo. Sigue creyendo que convertirse en vampiro es la única forma de encontrar a nuestro padre y a Eva... si es que aún siguen vivos.
Rosalie se quedó en silencio, mirándola como si intentara procesar cada palabra. Parecía congelada, como una estatua incapaz de reaccionar. Willow, notando su inmovilidad, sonrió con suavidad y apretó su mejilla.
━Hola… llamando al planeta Rosalie… ━dijo en tono juguetón, intentando aligerar el ambiente━. Siento mucho todo esto, en verdad. Prometo que, aunque al principio nos acercamos a ustedes buscando información o protección, mis sentimientos hacia ti y tu familia siempre fueron auténticos.
Rosalie reaccionó de inmediato. Sin decir nada, la abrazó con fuerza, como si quisiera transmitir todo lo que no podía poner en palabras.
━Siento que hayan tenido que pasar por todo eso, Wills ━murmuró contra su cabello. Luego se apartó lo suficiente para tomar a Willow por las mejillas, obligándola a mirarla a los ojos━. Pero quiero que sepas algo: jamás permitiría que te ocurriera algo como lo que Elena te hizo pasar. Nadie en mi familia lo haría. No somos como ella, te lo prometo. Desde ahora, estaremos aquí para protegerte. A ti y a Rosemary. Siempre.
━Lo sé, Rosie. Desde el primer momento en que no me mordiste, supe que podía confiar en ti. Incluso antes de eso.
Rosalie torció el gesto, como si lamentara no haber podido hacer más por ella. La volvió a abrazar con fuerza.
━Ojalá hubiera podido evitar todo aquello…
━Pero no se puede, y está bien, Rosie. Estoy bien. Ya pasó hace mucho tiempo.
Ambas permanecieron en silencio, abrazadas bajo el frío aire nocturno. El contacto entre ellas era suficiente para calmar los recuerdos dolorosos. Sin embargo, no duró mucho. Cuando Willow comenzó a estornudar, Rosalie soltó un bufido divertido y la arrastró de vuelta al gimnasio, insistiendo en que no podían seguir fuera o se enfermaría.
Pero lo que ninguna de las dos sabía era que no estaban realmente solas. Entre las sombras del bosque, alguien escuchaba atentamente cada palabra. Una sonrisa burlona, cargada de diversión y malicia, se dibujó en su rostro retirándose de inmediato.
re deje d actualizar,
sepan disculpar 😔.
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voten, besos !
by Tori 💓.
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