Un lastimero gemido salió de la boca del omega, un espasmo con frenesí recorrió todo su cuerpo en cuanto sintió el filo de los dientes de su Alfa rozar la zona de su cuello. Xiao Zhan ya no sabía que hacer, tampoco estaba seguro de cuanto tiempo había pasado ya desde que comenzaron a hacerlo.

Lo único que sabía era que su espalda y entrepierna dolían mucho, su Alfa se había encargado de destruir la poca fuerza que le quedaba.

Estaba exhausto hasta la muerte, ese Alfa entre sus piernas no había parado hasta que lo llenó por completo, las primeras dos veces le había recordado usar protección pero después de eso ni siquiera supo que fue lo que pasó.

Ya no tenía ni aliento para quejarse con él.

La marca aún no estaba hecha, Yibo había estado dudando entre ese lapso de tiempo sobre si hacerlo o no, aunque Xiao Zhan se lo hubiera pedido el omega se podía dar cuenta de que su Alfa dudaba sobre lo que estaba por hacer.

Xiao Zhan subió sus manos sobre la espalda del Alfa, dándole suaves caricias para después aferrarse a él. Dejó un beso sobre su hombro y sintió como Yibo mantenía su rostro escondido entre cuello. Lo entendí, no quería hacerlo, estaba dudando mucho en esta decisión.

Pero, ¿entonces que caso tenía para él haber vivido durante tanto tiempo a lado de este Alfa? Si al final, no iban a quedarse juntos.

-Por favor.

Sus palabras fueron casi como una súplica llena de dolor e impaciencia, quería decirle que estaba bien, que se quedaría a su lado a pesar de todo lo que pasara.

Originalmente ya habían ideado un plan para terminar con todo esto, el problema es que dejando de lado sus planes, ahora mismo lo único que quería era ser marcado por su Alfa, y quedarse junto a él.

Yibo soltó un pequeño quejido, se separó sólo un poco del cuello de Xiao Zhan, lo suficiente para dejar un beso en aquella zona. El omega se relajó al percibir el aroma de su Alfa, el mayor desprendió sus feromonas para calmarlo, creyó que tal vez lo hacía para despistarlo de la situación.

Pero en un segundo, las feromonas se volvieron más fuertes y por un instante sintió su corazón detenerse. Sus ojos se abrieron y se cerraron al instante con demasiada fuerza, mordió su lengua evitando gritar o quejarse. Dolía, dolía mucho, los dientes de su Alfa se estaban clavando en su cuello, sintió algo bajar desde su cuello hasta su pecho, mojándolo por completo, el olor a sangre se mezclaba con las feromonas y un increíble éxtasis lo llenó.

Yibo quiso contenerse, de verdad quiso hacerlo, pero en cuanto sus dientes se clavaron en aquel lugar ya no pudo hacerlo. De repente, quiso seguir haciéndolo, mordió con fuerza para crear su lazo sin importar cuanta sangre salía. Una marca no era tan bonita como aparentaba.

La carne de Xiao Zhan estaba levemente abierta y se sintió feliz internamente, su mirada se nubló exactamente como hace rato. Tomó las manos de Xiao Zhan y las agarró con fuerza, el omega sintió un ligero cambio en el ambiente.

Abrió sus ojos y miró al Alfa encima de él, no había brillo, no había luz en sus ojos.

-Yi... ¡mmm!

No pudo llamarlo para cuando el Alfa lo besó con fuerza, mordiendo sus labios sin cuidado alguno, sus manos aún estaban atrapadas entre las del Alfa. Su corazón se aceleró, ni siquiera iba a darle un respiro después de haberlo marcado, su herida dolía demasiado y Wang Yibo no ayudaba.

Sintió como una de las manos del Alfa lo tomaba con fuerza y lo ponía de espaldas, así rompió el beso que se estaban dando, trató de respirar con normalidad sintiendo la debajo de su pecho, ahora mismo se estaba ensuciando aún más tendido de esa manera sobre la cama.

El Alfa apreso sus manos alzándolas por arriba de su cabeza, mientras que con su otra mano tomaba del cuello al omega. Xiao Zhan cerró los ojos y gimió en el momento que sintió como el miembro del Alfa lo penetró fuerte y sin cuidado.

-Ah... es- espera... espera...- sabía que era inútil llamarlo, sabía lo que estaba pasando, pero no podía ignorar el dolor de su cuello. -¡Agh! más cuidado...

Pidió casi en un susurro, pero no fue escuchado por el Alfa. Yibo sostuvo su cuello y mientras aumentaba las embestidas contra su entrada, apretaba cada vez más aquella zona. Xiao Zhan sentía que no podía respirar, pero el aire le faltaba más por otra cosa que por estar siendo ahorcado.

Cerró sus ojos y por un instante dejó de sentir dolor, sólo pudo sentí placer al estar siendo penetrado una vez más, ya ni siquiera sabía cuantas veces lo habían hecho, pero era increíble como aún tenía suficiente para derramar.

-Yi-Yibo... ¡Ah! ¡ah! - ¿de donde carajo te sale tanta energía?

Sus manos se libraron del agarre del Alfa, apretando con fuerza las almohadas de la cama, hundió su rostro en una de ellas y soltó los gemidos que estaba reteniendo con dolor, los cuales no fueron tan audibles pues sonaban más como lloriqueos.

Estaba siendo sobreestimulado, su entrada se contraría y se apretaba tan bien al miembro del Alfa, el cual no podía dejar de moverse, se aferraba más a su cuerpo, abrazándose y reclamando lo que era suyo.

El Alfa volvió a morder aquella zona, provocando que Xiao Zhan gritara, esta vez fue de dolor y probablemente un poco de placer al sentirse nuevamente lleno por el Alfa. Ya no tenía fuerzas, ya no podía seguir, lo único que necesitaba era dormir.

Sus ojitos se cerraron casi al instante en el que sintió su orgasmo llegar, ya no podía soportarlo más, se estaba muriendo de cansancio. Lo último que sintió antes de caer dormido fue algo mojar su espalda, pero ya no prestó atención de lo que era.

Cuando se despertó ya era de tarde, su cuerpo se sentía pesado y aún estaba adolorido. Su cabeza dolía un poco pero eso no le impidió levantarse, pero al hacerlo, se dio cuenta de que ya no estaba en la habitación que compartía con Yibo, estaba en una nueva habitación.

Talló sus ojos y bostezo con fuerza, aún se sentía adormilado así que no le presto tanto atención a esto, probablemente la otra habitación había quedado hecha un desastre después de la noche anterior.

Oh, la noche anterior.

Con una de sus manos tocó lentamente su cuello, sólo entonces se dio cuenta de que tenía un parche cubriendo la mordida que su Alfa le había hecho. Una leve sonrisa se asomó por sus labios, entonces cayó en cuenta de que tenía ropa nueva y cómoda y que no se sentía para nada incomodo, lo que le daba la idea de que tal vez Yibo lo había ayudado a limpiarse para poder dormir bien.

Una gran felicidad llenó su pecho, se sentía cálido y feliz, se sentía amado por el Alfa, no tenía ni idea de como describir lo que estaba sintiendo, tal vez eran los nervios o la sensación de saber que ahora, pertenecía a un Alfa de por vida.

Se levantó de la cama cuando sintió las suficientes ganas de salir, su cuerpo dolía demasiado e incluso sus piernas dolían. Aún así, se puso unos zapatos para poder salir de la habitación a buscar al Alfa.

Bajó por las escaleras que se encontraban fuera de su habitación hasta llegar a la planta baja, la mayoría de los que acompañaban a Yibo estaban ahí. Se sintió un poco cohibido cuando los vio, principalmente porque antes ellos lo ignoraban o simplemente lo saludaban, pero ahora, todos ellos bajaron la cabeza y lo saludaron con respeto, evitando verlo a los ojos.

Xiao Zhan estaba confundido por un segundo, pero simplemente les devolvió el saludo y siguió su camino hasta donde estaba el Alfa.

Antes de entrar tocó la puerta para así no interrumpir tal vez algo importante. La puerta se abrió y JiYang lo dejó pasar, Xiao Zhan entró en aquella habitación y observó a su esposo como a Yubin. Lo que le resultó aún más extraño fue que Yubin evitó verlo en cuanto entró, casi al igual que JiYang quien mantenía la mirada baja.

-Ah, ya estas despierto, ¿desayunaste?- preguntó Yibo casi evitando verlo al igual que los demás.

-No... aun no he desayunado. - respondió mirando confundido a los tres hombres en la habitación, se sintió tan extraño porque era la primera vez que se encontraba con Yubin y JiYang tan callados.

-Bien, entonces vamos a desayunar juntos.

Aunque estaba feliz, al ver el rostro del Alfa no pudo encontrar ni una pizca de felicidad, y eso hizo que su corazón doliera por unos segundos. ¿Qué estaba pasando? Algo no se sentía bien desde que se despertó.

-Ustedes dos se pueden ir y... no olviden recibir su castigo al salir de aquí- habló, ambos tanto el alfa como el omega escucharon con atención sus palabras y asintieron para después irse.

En definitiva, eso le hizo asegurarse a Xiao Zhan de que algo había pasado, por mucho tiempo que llevaban viviendo en la misma casa, JiYang y Yubin nunca se habían comportado de esa manera. ¿Un castigo? ¿castigo de qué? ¿qué estaba pasando?

Xiao Zhan suspiró, creyó que tal vez estaba exagerando en sus pensamientos y caminó hasta el Alfa, le sonrió tranquilamente y algo hizo clic en Yibo por fin. Fue difícil para Xiao Zhan ignorar el rostro de pánico que puso en segundos.

-¿Estás bien?- el omega lo tomó de los hombros. Fue entonces cuando Yibo reaccionó y apartó las manos de Xiao Zhan.

-Estoy bien- le sonrió para poder tranquilizarlo. -Espérame aquí un segundo, necesito hacer algo, no tardo.

Se apresuró a salir de aquel lugar, buscando rápidamente a JiYang y Yubin con la mirada, sólo unos segundos después se dio cuenta de dónde estaban, pues se escuchaban algunos azotes. Caminó rápidamente al jardín trasero de aquélla zona en el hotel, y los vio arrodillados en plena luz del sol con el torso descubierto y marcas rojizas en la espalda.

Yibo entró en pánico y caminó para detener lo que sea que había hecho.

-Basta, basta. - sus otros hombres dejaron de azotar aquellas tablas contra el cuerpo de los chicos en el piso, Yibo soltó un fuerte suspiro lleno de frustración. -Mierda, ya, levántense del suelo ahora.

Yubin titubeó unos segundos, pero en vez de levantarse sólo se dejó caer al liberar la respiración, había estado conteniendo la respiración para evitar sentir dolor y dejar salir sus quejidos.

En cambio, JiYang no se inmutó.

-Ayuden a Yubin, dénle algo para que se calme, ya no es tan joven como antes. JiYang tú...

-No pienso levantarme de aquí, si van a seguir sugiero que sea ahora, aún me faltan quince golpes más. - fue todo lo que el omega dijo.

Yibo cerró los ojos sintiéndose preocupado por un instante, tomó del brazo a su amigo y lo ayudó a levantarse, pero JiYang lo apartó con fuerza.

-¡Mierda, suéltame!- su grito hizo que los pocos hombres que estaban ahí se quedarán callados y quietos, para no alterar la situación aún más.

-JiYang...

-No me hables, podremos ser amigos desde hace mucho tiempo, pero no voy a dejar que una persona como tú sea mi líder. Si vas a tomar tu pose como tu padre, entonces hazlo y no te retractes de tus decisiones en el último momento. - el omega habló con tanta seguridad y enojo, pero sus ojos brillaron queriendo soltar lágrimas.

JiYang tomó la ropa que se había sacado y salió de la vista de ellos en un instante. Siguió con la vista a su amigo, dándose cuenta de que en su dirección, estaba él. Sí, debió suponer que Xiao Zhan no sería capaz de quedarse en el lugar donde le dijo.

Evitó mirarlo, no quería verlo y ver la decepción en sus ojos, no quería eso de la persona que amaba.

Pero Xiao Zhan sólo sintió su corazón doler, no por lo que Yibo había hecho. Ahora lo entendía, ahora entendía a lo que se referían con esto, Yibo por naturaleza era un Alfa fuerte y dominante, era parte de él ser como su padre. Y no había nada que pudiera hacer para evitarlo.

Sí, por fin entendía a lo que se referían todos. Su corazón dolía por Yibo, porque podía ver lo arrepentido que estaba por todo, porque podía ver el reflejo de su padre en él, pero no podía hacer nada, porque entonces probablemente él también sufriría las consecuencias.

Todo este tiempo su Alfa había sido la fortaleza de su relación, tal vez era el momento de ser fuerte por él.