Cuando Wang Yibo conoció a Xiao Zhan, en realidad sintió enamorarse en ese momento, creyó que tal vez, era posible que su oprimido corazón, volviera a sentirse libre de amar a alguien una vez más. Después de todo lo que había pasado con Song Weilong, con su familia y la muerte de aquélla niña. No tenía pensado que en algún momento volvería a sentir esa necesidad de tener a alguien, de cuidarlo, de quererlo y velar por esa persona.

Pero, cuando conoció a ese omega, se dio cuenta de que no quería volver a pasar por lo mismo.

Fue difícil para él dejar ir todo lo que alguna vez tuvo con Song Weilong, su primer amor, la primer persona con la que compartió muchas cosas en común o con quién a veces tenía desacuerdos. Con él aprendió que se podía tener tranquilidad y amor a pesar de tener una vida tan podrida.

Por esa razón, después de todo lo que pasó a lado de ese Alfa, y a lado de aquella niña, tuvo que reprimir muchas cosas en su corazón. Una de ellas era no enamorarse de Xiao Zhan.

Pero después de todo fue muy difícil, incluso cuando intentó alejarse de él, se dio cuenta de que fue demasiado tarde. Sobre todo ahora, podía tenerlo a su lado y ahí permanecería sin dudarlo, tenía la oportunidad de volverlo suyo por completo, sin necesidad de pensar en que algún día se separaría de él.

Sus recuerdos invadieron su cabeza, volviendo a aquellos años cuando todo parecía más fácil. La pálida piel desnuda del omega se restregaba contra la suya, el cálido ambiente en el que ambos estaban envueltos los hacía sentir más ansiosos. En el baño, las feromonas de ambos, Alfa y Omega, se combinaban entre ellos haciendo que el deseo siguiera creciendo.

El corazón de Xiao Zhan latía con fuerza, una parte conciente de su cabeza le repetía que, lo que había pedido no estaba bien. Pero su lobo, su lobo en esos momentos deseaba que sucediera, había pasado mucho tiempo desde que su lobo había aclamado por algo como esto, principalmente porque era bueno ocultándose.

El omega sintió su cuerpo reaccionar ante las caricias que el Alfa le estaba dando, sus manos, que por cierto eran grandes, más grandes que las de él, se movían por toda su espalda, acariciando y tocando todo lo que podía, incluso más abajo de que espalda.

Estar en una situación así no les convenía a ninguno de los dos, a pesar de que en esos momentos ellos no mandaban sobre sí mismos, sino al contrario.

Sentía un fuerte dolor en su entrepierna, Yibo jadeo al darse cuenta de que tener a Xiao Zhan tan cerca no le estaba ayudando. Trató de ser cuidadoso, y lo cargó para salir de aquel cuarto de baño.

Xiao Zhan sintió su cuerpo doler, las feromonas ya no eran tan fuertes debido a que habían salido de aquel lugar. La habitación que se supone compartían, estaba cerrada, las ventanas y la puerta, todo estaba casi a oscuras.

El aroma de aquélla omega se había ido hace mucho tiempo, y todo lo que podía sentir era el aroma de su Alfa, un aroma que lo envolvía y hacía que su mente se nublara como nunca. Era como si pudiera tocar el cielo, y aunque quiso reaccionar, no podía hacerlo, su lobo, sus ganas y las feromonas de su Alfa lo tenían débil, dispuesto a hacer lo que quisiera.

Pero, el Alfa de Yibo se sentía peor que él. No lo sabía, pero el lobo de aquel chico era el más reprimido de todos, Yibo hizo bien en mantener su cordura durante tanto tiempo, supo dominar a su lobo porque al final de cuentas era un Alfa, y sabía como manejar la situación de su incontrolable deseo.

Pero cuando escuchó las palabras de Xiao Zhan, y segundos después ya estaban ambos enredados, besándose sin control alguno, y con ganas de llorar por el placer, no pudo evitar que los deseos reprimidos todo este tiempo, junto con su lobo, salieran a flote.

Si bien, aún tenía una pizca de conciencia, pero esa poca aún no daba indicios de querer detenerse.

Su corazón también saltaba, incluso más que el de Xiao Zhan, lleno de adrenalina y necesidad, queriendo deborar al omega que estaba debajo de él, ese omega que tanto quiso y que tanto esperó. Necesitaba marcarlo, poseerlo y dominarlo. Quería que sólo le perteneciera a él, su lobo necesitaba tenerlo, llenarlo y atraparlo en un sólo lugar del que no podría escapar nunca.

Sus ojos, su boca, sus cejas, amaba cada parte de él, tanto que el reflejo de su juventud se vio ahí mismo.

Quería enseñarle que, no importaba cuanto tiempo tuvo que esperar, por fin lo había conseguido. Sería suyo y de nadie más, no lo dejaría ir, no quería soltarlo.

Quería poseer cada parte de su cuerpo y amarrarlo a su lado para siempre.

Fue entonces que, la imagen de su padre le vino a la mente.

Y sus palabras: "Algún día harás exactamente lo mismo que yo" le hicieron despertar de golpe de aquel deseo atrapado.

Se alejó, se alejó tan rápido como pudo del cuerpo de su omega, tanto que Xiao Zhan también se sorprendió.

Yibo lo miraba como si hubiera cometido un crimen, y por un momento el Alfa volvió a tener el completo poder sobre sí mismo.

Miedo, sí, eso se reflejaba en su mirada.

Era igual que su padre, y eso nunca lo podría cambiar. Podía amar, podía sentir tristeza y su corazón sería bondadoso, pero nunca cambiaría su destino, quisiera o no, el linaje de su familia siempre fue así. Y él no podía acabar con eso, a menos que se detuviera ahora mismo.

¿Qué fue eso de hace un momento?

Su corazón dejó de latir mientras pensaba en Xiao Zhan, mientras su lobo tomaba el control. Sí, ya había olvidado por completo que, él podía tener sentimientos, pero cuando su lobo tomaba el control, no había sentimientos dentro de él.

Era extraño, como si fueran dos cosas completamente diferentes.

Por esa razón, Yibo nunca dejó de su lobo saliera a la luz.

Lo sabía perfectamente bien, la razón por la que su linaje de sangre pura era tan famosa, era porque todos sus antepasados siempre seguían exactamente lo que su corazón de lobo pedía, no es que sus lobos fueran malos, tampoco significaba que ellos lo fueran. Simplemente era la sed de poder que había en sus clanes, era su naturaleza.

Sólo él (hasta ahora) había sido capaz de separar su corazón de su lobo, no es que en cualquier momento aquel felino tomaría el control, él podía manejarlo sin problema alguno, pero cuando se trataba de su omega, y de hacer un lazo a través de una marca, su lobo salió necesitando tomando su lugar en el árbol genealógico de su familia.

Marcar a Xiao Zhan sólo haría que su omega viviera amarrado a él de por vida. Y no, no de una manera bonita, en su mundo podía existir tener citas y darle un beso de buenos días, ser feliz a su lado y mantenerse junto a él, pero también podía existir el dolor, el daño emocional y físico, se volvería loco al marcarlo, creyendo que ya era parte de él, sabiendo que ya lo poseía como su omega, y entonces todo se complicaría.

Xiao Zhan no sería feliz de esa manera.

Pero también existía la opción de ser amargamente feliz, estando con él sin necesidad de marcarlo, no quería terminar de cavar su tumba.

Su voz tembló con cierto miedo, diablos, ahora mismo debía verse terriblemente mal. Sus manos sudaban y quiso salir corriendo, quería huir, no quería quedarse ahí.

-Y-yo... No puedo, no puedo, no puedo- Xiao Zhan no entendía la razón del comportamiento de Yibo, pero escuchaba la desesperación en su voz, el dolor en su mirada, podía sentirlo -, no puedo hacerte eso.

El rechazo fue lo que sintió su lobo, el omega escuchó el llanto interno y segundos después, el dolor fue para él, su corazón dejó de latir con esa emoción de antes, ahora, un amargo sentimiento se instaló en su pecho.

Sí, sabía que algo como esto pasaría.

Yibo se sentía como un idiota, pero Xiao Zhan se sentía aún más por haberlo pedido.

Sin decirle algo, se levantó de su lugar para encerrarse en el baño. Yibo sintió la agonía de su lobo, y se culpó por todo lo que había sucedido. Soltó un suspiro, su cuerpo aún estaba mojado porque minutos antes habían estado en la regadera, se sentó sobre la cama y no dejó de sentir que algo había hecho mal.

Era la primera vez que Xiao Zhan pedía algo como eso, a pesar de estar juntos por tanto tiempo, el omega había tenido un poco de valor en pedir algo tan íntimo, algo que él arruino.

Después de unos minutos, Xiao Zhan salió del baño, su mirada ni siquiera se dirigió al Alfa. Quería darle explicaciones, pero Xiao Zhan tampoco quería escucharlas, porque ya sabía lo que le diría, no era su culpa, nunca lo sería. Había sido él pidiéndole algo imposible, y después cayendo al mar sin fin del que nunca escaparían.

-Saldré un momento, regreso luego.

-No puedes-

-Le pediré a Yubin que me acompañe.- fue todo lo que dijo, antes de escuchar las típicas palabras que su Alfa tendía a decirle. Era mejor salir con Yubin que no salir y quedarse encerrado ahí, odiando la terrible situación en la estaban.

El omega salió de aquélla habitación, dándose cuenta de que en la planta baja estaban la mayoría de los trabajadores de Yibo. Yubin estaba sentado a lado de JiYang, no le dijo nada, pero sintió la mirada de todos ellos. Principalmente porque estaba saliendo completamente solo y a paso apresurado.

Yubin miró hacia la parte alta y observó al Alfa recargarse contra la barandilla, Yibo le hizo una seña y él asintió, levantándose de su lugar para comenzar a seguir a Xiao Zhan.

Le dio su espacio, comprendió que tal vez algo había pasado, algo no tan bueno, así que lo siguió de lejos, pero sin perderlo de vista. El omega se dejó caer en el césped, justo detrás de unos arbustos que daban vista hacia un gran jardín con un estanque de peces.

Xiao Zhan suspiró fuertemente y abrazó sus rodillas hacia su pecho, recargando su mandíbula entre ellas. El dolor de hace unos momentos volvió a dispersarse, necesitaba mantener su mente en otra cosa, quería pensar que lo que estuvo a punto de pasar era un error. Pero tampoco podía negar que lo deseaba, hasta cierto punto deseaba tanto pertenecer al Alfa.

Pero eso no sería posible.

Sintió como alguien se sentaba a su lado, sin embargo, no lo miró en ningún momento, ya sabía quién era.

-¿Estás bien?- Yubin quiso golpearse por haber preguntado tremenda tontería, pues ya sabía que no estaba bien, sólo que no se le ocurría algo más para decir.

Xiao Zhan negó.

-Sabes... cada vez que siento que Yibo y tú avanzan un paso en su relación, pasa algo que los hace retroceder como diez.

No era bueno dando ánimos, pero al menos Xiao Zhan estuvo de acuerdo con eso.

-Es así. - Xiao Zhan respondió, tratando de su voz no sonará tan apagada.

-No sé qué es lo que pasa, pero he sido tu único amigo desde que llegaste a vivir con él. Si puedo ayudarte en algo, dímelo y lo haré.

El omega sabía que Yubin era siempre así de agradable, a veces sentía que no merecía tanta amabilidad en este mundo. Pero Yubin existía.

-¿Puedo...- dudó un poco por la energía del momento, no quería cometer un error -¿Puedo preguntar por qué es tan difícil para un Alfa marcar a su pareja? ¿Tú tuviste el mismo problema?

Yubin se congeló en su lugar por un momento, ¿marca? ¿acaso Xiao Zhan estaba pensando en ser marcado? pero, viendo el estado de ánimo del omega, se dio cuenta de que algo estaba mal.

-No es difícil, depende mucho de quien seas.

-¿A qué te refieres?- Xiao Zhan se confundió por un momento, Yubin vaciló al momento de querer decírselo. -¿Cómo puede estar bien para unos y para otros no?

El Alfa suspiró, a veces no podía cerrar la boca cuando era necesario. Pero al parecer a Xiao Zhan aún no le quedaba claro muchas cosas.

-Mira...- Yubin se rascó la nuca, ahora mismo se sentía como un idiota -, tú no lo sabes, ni siquiera Yibo lo sabe. Creó que los únicos que sabemos esto somos Bowen y yo, porque empezamos a trabajar de la mano del padre de Yibo.

Xiao Zhan estaba confundido pero algo ansioso al escuchar sobre ese señor.

-No vas a creerlo, pero existió un tiempo en donde Wang Feizhao era un Alfa igual que Yibo. Lo conocimos cuando era un joven adulto, y aunque se veía un poco roto, más bien dicho, dañado, a veces aquel chico solía sonreír demasiado bien, en realidad, si Wang Feizhao te sonreía en aquellos tiempos, era fácil para él engañarte. La familia Wang ha sido una familia de sangre pura durante muchos años, demasiados para ser sincero, lo sé porque es básicamente lo que los hace famosos. Tomaron el control de su clan al ser los sangre pura más fuertes, y hacer que sus omegas esposas dieran a luz a puros lobos alfas, su linaje era sagrado y ellos siempre cuidaron de su linaje. Pero... - Yubin suspiró al recordar aquellos tiempos -, Wang Feizhao intentó cambiar eso, en realidad lo hizo, todas las novias que tuvo antes de la madre de Yibo, nunca fueron marcadas por él. Al contrario, él se rehusaba a marcarlas.

¿La razón de todo eso? es fácil, durante años la familia Wang se consideró la más fuerte no sólo por ser sangre pura, sino porque se dieron cuenta de que su poder podría traerles miles de beneficios.

Ellos sólo creían en la idea del poder, sus lobos estaban unidos a ellos, la sed de deseo de un lobo Alfa los hacía sentirse complacidos, así que realmente jamás les importó si algo estaban haciendo mal.

Wang Feizhao intentó más de una vez rehusarse a marcar a alguien, no quería aferrar su linaje, no quería que su familia siguiera creciendo. Pero su padre, el abuelo de Yibo, le obligó de mil maneras a marcar a su omega. Fue entonces cuando, el linaje de la familia siguió creciendo, y con ello el poder de deseo y dominación que la familia Wang había mantenido por años, siguió creciendo de la mano de Wang Feizhao.

La marca para muchos significa estar unido eternamente a lado de tu destinado, vivir una vida plena y feliz, tener una familia y todo lo que alguna vez deseaste.

Wang Feizhao una vez le prometió todo eso a Fang Xiulan, también fue de esos alfas que fingió estar enamorado de muchas omegas para despistar a su familia, pero al final, nunca puedes engañar a tu corazón cuando se trata de encontrar a tu destinado.

Fue obligado a marcarla, y se odió tanto a sí mismo, aunque quiso detenerse, no pudo hacerlo. No hubo manera de luchar contra toda su familia sólo por una mujer, ¿qué era mejor? ¿no marcarla y ver como alguien más lo hacía con ella? ¿era mejor ver como su padre sería quien le haría daño? ¿verla morir lo haría sentirse mejor? No, no podía, su corazón tan egoísta le obligó a hacerlo.

Fang Xiulan fue quien le cedió el permiso. Le dijo que no importaba que pasara después de eso, ella se quedaría hasta el final con él.

Esa era la razón por la que la madre de Yibo nunca pensó en huir, nunca pensó morir o buscar paz en otro lado, fue porque le había prometido algo a su Alfa, porque ella sabía que nunca fue su culpa, no era culpa de nadie. Y así podrían pasar los años, décadas y milenios, Fang Xiulan nunca se arrepintió de nada, incluso si hubo un momento en el que odió a su esposo, el odio era más grande para la familia de Wang Feizhao.

Xiao Zhan sintió su corazón tan abrumado. ¿Era posible que existiera un corazón tan fuerte como el de la madre de Yibo? Si ella... fue capaz de dejar su vida con tal de estar a lado de su destinado. ¿Él también sería capaz de hacerlo?

No, nunca podría hacer algo como eso.

Incluso ahora que su corazón sabía lo que había pasado, sentía que nunca sería capaz de ceder ante el Alfa. Pero, ya lo había hecho, ya había decidido que incluso si sonará como un estúpido, sabía que Wang Yibo no era como su padre, él no era como todo su estúpido linaje de mierda.

Yibo estaba durmiendo sobre la cama, de alguna manera el cansancio mental lo había terminado por romper, haciendo que se quedara dormido. Xiao Zhan se sentó a su lado sobre la cama, una de sus manos se dirigió al rostro del Alfa y acarició con la yema de sus dedos todo su rostro.

Esta acción hizo que el Alfa se removiera un poco, Xiao Zhan lo miró detenidamente durante varios minutos, frunció el ceño y suspiró. Bien, si era un idiota, lo sería toda su vida.

Se inclinó para dejar un beso sobre la frente del Alfa, no fue nada cuidadoso en realidad, pues quería que el Alfa se diera cuenta de su presencia. Yibo sintió que reaccionó ante el leve aroma del omega. Sus ojos se abrieron y miró algo sorprendido al menor.

-Zhan... ¿qué-

-¿Sería muy estúpido de mi parte si te digo que quiero pasar el resto de mi vida contigo? ¿Es muy estúpido si te pido que me marques y reclames como tu omega incluso si eso significa que todo acabará?- Xiao Zhan no vaciló ni un segundo, tuvo un poco de temor al inicio, pero ya no lo tenía.

-No... no sabes lo que estas pidiendo.

Yibo se negó a creer lo que estaba escuchando.

-Sé lo que estoy pidiendo, lo sé perfectamente bien, y tal vez no debería hacerlo, pero lo quiero... porque yo...- ocultó su mirada, lejos de la de Yibo -, yo... te a-amo.

Cuando dijo aquello, Wang Yibo pensó que había escuchó algo realmente mal, su corazón se detuvo por un segundo y un brillo singular se reflejó en sus ojos.

"Te amo."

Xiao Zhan... había dicho esas dos palabras, por fin. Había escuchado esa palabra salir de su boca. Y él no pudo asimilarlo a tiempo.

-E-espera... ¿qué... ¿qué acabas de decir?- Yibo se levantó, sentándose sobre la cama, aún con Xiao Zhan sentado a su lado.

-Te amo, lo diré todas las veces que quieras, pero... déjame permanecer a tu lado. Ya me cansé de ocultarlo, yo quiero estar contigo, incluso si eso significa dejar mi vida de lado para estar contigo, quiero hacerlo.

Pegó su frente con la del contrario, su voz tembló al momento de decir eso. Ya no había vuelta atrás, ya había tomado una decisión. Y se aferraría a ella.

Yibo tomó de su cuello, acariciando la parte de su nuca, dándole suaves caricias, mientras tomaba su otra mano para dejar un beso sobre ella. Su corazón dolió por un instante, pero jamás se había sentido tan vivo como en esos momentos.

-Lo haré, pero si tu renuncias a tu vida, yo haré lo mismo.

Wang Yibo tenía algo diferente a los otros alfas de su familia, a pesar de ser un sangre pura, sabía que si en algún momento de su vida, era capaz de lastimar a Xiao Zhan, también sería capaz de acabar consigo mismo. Y es que había algo que todos ignoraban, Xiao Zhan no era un simple omega, no era el juguete de un Alfa. Xiao Zhan era ese punto de quiebre y fuerza interna que Wang Yibo consideraba su salvación entre lo bueno y lo malo.

Y así permanecería.

Lean toda la nota si quieren entender que pitos escribí jaja.

1.- Para empezar, wow, escribí más de 3k de palabras, me sorprende jaja. En fin, quería avisar que ayer se supone debí haber sacado este capítulo, lamentablemente mis clases ya comenzaron y lamentablemente comencé a realizar mis practicas de la carrera, así que resultará un poco difícil actualizar cada semana. Lo siento, ya estoy por terminar la universidad y es obligatorio para mi hacer todo eso:(

2.- Les quiero explicar un poco lo de "La marca" en la Familia Wang, y ¿por qué la marca resulta ser algo malo en vez de bueno? Pues bien, la familia viene siendo un linaje muy especial desde su origen, desde que eran un clan se dedicaron a ser poderosos especialmente por ser alfas de sangre pura, estos alfas podían tomar a quien quisieran como omegas, ya fueran sus predestinados o no. El caso es que necesitaban procrear para así mantener su linaje intacto. Con él crecimiento de su clan, desarrollaron la mala idea de dominar todo lo que les fuera posible, y como se sabe, cuando marcas a tu omega, ya sea predestinado o no, se vuelve algo poderoso porque estás creando un lazo irrompible, muy fuerte.

Sí, un omega puede romper su lazo al marcar a otro Alfa que no sea su predestinado, pero esto solo afecta para quienes no son sangre pura, en el caso de los Wang, si Xiao Zhan es marcado por Yibo y luego XZ va y rompe su lazo marcando a alguien más o dejándose marcar por otro Alfa, entonces no tendría caso porque Yibo es un sangre pura, por lo que es muy poderoso y su lazo es difícil de romper. Ahora bien, la marca en la familia nace como un pacto de sangre. Ellos se dan cuenta que al ser alfas sangre pura tienen muchos beneficios y mucho poder, por lo que la marca les hace generar ese control a sus omegas, es decir, incluso si el padre de Yibo era bueno y toda la onda, cuando marcó a la madre de Yibo, su lobo despertó ante el deseo de poseer a su omega, lo cual lo hizo volverse agonizante de dominio y poder, porque ese es el pacto de sangre que el clan hizo desde sus inicios.

La marca les brinda el poder y la fuerza para dominar, por lo que eso hace que sigan creciendo cada vez más. Por lo tanto, la marca es mala para la familia Wang, claro, sólo la consideran buena porque les trae beneficios a ellos.

Pero, si Xiao Zhan no puede procrear, ¡tan tan!, se acabó su linaje y se acabó todo lo malo que han hecho e hicieron en su vida, WUUUU.

Por lo que, Xiao Zhan y Yibo vivirían felices, ya que sin herederos, su linaje termina y pum, vivieron felices por siempre.

Jajaja nocierto, bueno sí, pero tampoco crean que es así de fácil. Se los confirmo desde aquí: En este fanfic Xiao Zhan NO tendrá hijos. Principalmente por la trama y también porque ya me aburrí de hacer que siempre tengan hijos y todo muy soft y cuanta mamada, también pueden ser felices sin necesidad de procrear jaja.

3. ¿Entendieron o les quedan dudas?

En fin, espero que les haya gustado el capítulo de hoy, tómenlo con calma que se viene lo fuerte. En sí, me gustaría decirles que tendrá final feliz, pero probablemente sea un final feliz un poco amargo, pero será feliz(?

Gracias por leer, los quiero mucho. Esperó que mi manera de escribir no los este enredando mucho, es que me gusta crear cosas nuevas jaja.

Nos leemos luego.💗