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La casa de Raquel estaba demasiado cerca de donde nos encontrábamos, por ende nos fuimos caminando. Como dije, todo el camino James venía platicando con Charlotte, su amiga del gran abrazo. Podré ser una persona muy celosa, pero también se reconocer cuando a alguien le gusta alguien y es claro que ella se muere de amor por James. Trataba de voltear varias veces a verlo durante el camino, pero por alguno razón nunca dejaban de platicar. 

Pero bueno, yo vine platicando en el camino con Raquel, quién es en verdad una muy linda persona. Es mayor por dos años y me contó que conoció a James porque ella antes vivía en la misma calle que el. Prácticamente todos ellos, pero que Raquel decidió independizarse y ahora vive sola. Es por eso que la reunión es aquí en su casa.

- ¿qué piensas? ¿no crees que todos son las personas mas agradables que has conocido? - James me pregunta una vez que llegamos y yo tan solo asiento con la cabeza. - no tienes una idea de las ganas que tengo de darte un beso en estos momentos. - dice sonriendo como un bobo y no pude evitar yo también sonreír.

De nuevo pensé en que podría hacerlo, ellos no afectan en nada sobre mi futuro así que, creo que podría hasta aprovechar eso. Fui yo quién me acerqué un poco mas a el para besarlo cuando nos vemos interrumpidos por Charlotte.

- ven James, tienes que contarme mas de tus días en ese internado. - ella abraza de su brazo y recarga su cabeza en su hombro. - ¿te molesta si me lo llevo un rato? tu estas todo el año con el y a nosotros solo nos queda por verlo unos días.

- adelante. Todo tuyo. - le dije con la sonrisa mas falsa posible y ella se lo lleva al sillón de la sala de estar.

- ¿tomas? - me pregunta Raquel mientras la sigo hasta la cocina. - estoy segura de que si, si Jamie lo hace, tu también. - asentí con la cabeza. - bien, vas a ocupar un buen trago para soportar el intenso coqueteo de Charlotte hacia James.

- a mi no...

- oye, yo no nací ayer. - ella me interrumpe. - no solo tu estas enamorada de el, sino que el de ti. No por nada te trajo con nosotros. - sonreí ante ello. 

- ¿el y Charlotte...?

- no, nunca. - ella ríe, mientras me pasa una copa de vino. - alguna vez se besaron, si. Pero fue porque fue un reto y porque ella fue la que inicio el beso. Pero Jamie jamás la ha visto de esa manera. 

- bueno, supongo que eso me calma un poco mas. - reí nerviosa. - por cierto, tu casa es increíble.

- no tan increíble como la de mis padres pero si... funciona. Perfecta para vivir sola. - ella ríe y en ese momento, el hermano de Charlotte se acerca para darle un beso. Dustin, si no mal recuerdo ese es su nombre. 

- hola. - Marty, el tipo de cabello rizado y claro se acerca a la silla donde yo estaba. - ¿qué estás tomando?

- me sirvieron... - no sabía con exactitud que vino era así que dije la respuesta mas obvia. - vino. 

- de acuerdo, yo me serviré lo mismo. - el ríe y su hermano se acerca para tomar de varias copas. - llevémosle a los dos tórtolos.

- ¿te refieres a James y a ella? - pregunté y su hermano asiente. - solo son amigos.

- si pero ¿alguien mas lleva hablando así toda la noche? - Marty me dice y toma de su copa y de otra. - ven, vamos, platiquemos todos juntos.

Tu puedes Ginny, tan solo respira hondo. Tu fuiste quien tomó esta decisión, no nadie mas. 

- hola. - dije mientras me sentaba justamente enfrente de James y ella. - ¿cómo va todo? 

- le estoy contando de la vez que Peter se estaba ahogando con una galleta. - James ríe y yo le sonreí. - ¿es para mi? 

- por supuesto, hermano. - su amigo le entrega una copa de vino y su hermano la otra copa a Charlotte. - oye Ginny ¿te gusta el futbol?

- Ginny es perfecta para... - estoy segura de que James iba a decir algo sobre quidditch, y por eso fue que pausó. - para el futbol.

- no tanto. - dije porque es cierto, casi no lo juego. - realmente no...

- ¡juguemos! aquí amamos el futbol. - Marty toma de mi mano para ponerme de pie. - tu serás de mi equipo entonces.

- ¿James? - le pregunté para que el viniera y cuando esta por ponerse de pie, ella lo detiene.

- tan solo que termine de contarme esta historia, y vamos con ustedes. - Charlotte dice y no me quedaba de otra mas que aceptar eso. 

De mala gana, dejé la sala de estar y me fui al patio trasero para jugar con todos los demás. Pero ese era mas que nada el problema, el que cada uno de nosotros estaba afuera, mientras que ellos dos estaban con vino y platicando solos. Sin que nadie mas los moleste. Estaba llegando a mi limite pero me contuve y mas que nada porque... porque no tengo ni una sola razón por la cual estar celosa.

Estoy segura de que si veo a un amigo al cual no he visto en bastante tiempo, también hubiera querido hablar con el toda la noche. Así que lo deje pasar y me enfoqué en el juego. Donde por cierto, me la estaba pasando por fin bien. Raquel estuvo conmigo todo el rato y como siempre demostrándome lo agradable que es. Ella y su novio. Son increíbles personas y con tanta personalidad. Me reía de todo lo que decían.

De hecho, jugar futbol me gustó demasiado. Terminé super cansada y el partido terminó después de unos cuarenta minutos. 

- okay, eso si que fue cansado. - le dije a Raquel mientras recuperaba mi aliento. - pero al menos ganamos.

- fue trampa porque tu eres jugadora estrella. - dice Marty riendo. - Jamie tenía razón, si que juegas muy bien.

- ¿estás segura de que no quieres ser mi novia? - bromea su hermano, Tyler y Raquel me voltea a ver para ver que contesto, claro sabiendo como me siento respecto a James.

- chicos, una mujer tan guapa y buena onda como Ginny seguramente debe tener a alguien en su vida.  - Raquel contesta por mi.

- iré por agua ¿alguien quiere? - pregunté y todos negaron con la cabeza. 

- yo si pero déjame recupero aire y entro. - dice Dustin. - igual todos ahorita entramos. 

Asentí y me metí directo por la puerta de la cocina, porque de verdad me estaba muriendo de sed. No fue hasta que recordé el porque estoy en esta casa. Oh si, claro, vine con James. Con el cual no he pasado ni un solo momento desde que llegamos. Así que claro que mi primer instinto fue querer ir a ver si seguían en la sala de estar, pero ni fue necesario moverme de la cocinada que ambos estaban ahí teniendo una conversación. 

- hey, ya no fueron a nuestro mini partido. - dije mientras me acercaba al refrigerador en busca de algo para tomar. Pero fue inevitable ver como ella jugaba con el cuello de su camisa, a muy poca distancia de hecho. 

- estamos teniendo una conversación aquí. - ella me dice y cerré de golpe el refrigerador una vez que tomé el agua que estaba ahí. - a lo que voy es que si puedes retirarte...

- ¿y como por qué rayos te voy a hacer caso? - yo me reí, y lo siento pero no pensaba dejarme. 

- bien, seguimos con nuestra conversación en la sala, realmente no me importa. - ella dice mientras se retira para ir a sentarse. Y aproveché el que James seguía aquí para hablar con el. 

- ¿cómo les fue en el juego? - el se acerca a mi pero yo me hago hacia atrás. - ¿qué?

- ella no me cae bien. 

- es agradable, te lo juro solo que... 

- solo que fue grosera conmigo y lleva siéndolo toda la noche. No me agrada y no la soporto. 

- ¿nos vamos? prefiero realmente pasar tiempo contigo ahora. Podemos ir a cenar si así lo quieres. - yo asentí.

- ¿no me odiaran tus amigos? realmente me agradaron todos. - a excepción de Charlotte.

- los veré luego durante las vacaciones. - ya es tarde y como quiera deberíamos regresar a la casa. - el sonríe y se regresa a la sala de estar. 

Estaba por irme yo igual cuando regresa Charlotte por lo que creo que es su copa con vino.

- olvidaba esto. - ella dice mientras la tomaba. - también, aprovechando el que estoy aquí, aléjate de James.

- ¿disculpa?

- seguramente ni siquiera eres pelirroja natural y lo hiciste porque sabes que a el le gustan. - me reí ante eso. - ¿dije algo chistoso?

- mas bien algo muy estúpido. - me volví a reír pero ella me miraba con seriedad. - oh, lo decías en serio. - ella asiente. - entonces lo que dijiste no es estúpido, sino que tu eres la estúpida.

- ¿cómo me llamaste?

- soy pelirroja natural ¿De acuerdo? - me reí y avancé para irme de ahí pero ella me detiene tomando con fuerza de mi mano. - ¿qué? 

- hablo en serio, aléjate de el o...

- ¿o qué? - dije poniendo me a la defensiva. - demonios, cálmate un poco linda.

- zorra. - ella dice después de tomar de su copa y se regresa de nuevo al sofá.

Yo no voy a estar aguantando esto. No gracias. Vieja loca si cree que puede hablarme así y no solo eso, sino que amenazarme. Hasta me causaba gracia. Fue por eso que hice algo que no se si era lo correcto pero si lo que quería hacer en ese momento. Todos ya estaban en el sofá, al menos la mayoría. Como siempre Charlotte a un lado de James y atacando se de la risa con lo mas insignificante que el pudo haber dicho. 

Puso los ojos en blanco ante ello y me senté en las piernas de James. Estaba de mas explicar como es que la famosa Charlotte me miró. 

- de acuerdo, ahora entiendo todo. Tu no puedes ser mi novia porque estás saliendo con Jamie ¿cierto? - dice Tyler.

- ¿le pediste que fuera tu novia con tan solo un día de conocerla? - James le pregunta, mientras me abraza de la cintura y me pega hacia el. Estoy segura de que el hizo eso en un acto de celos pero me encantó que fuera así.

- ¿puedes culparme? - Tyler ríe, y básicamente todos en la habitación. - no, entonces felicidades, hermano. 

- ¿entonces si son pareja? - Raquel me pregunta y voltee a ver a James antes de decir la verdad, el me mira con ilusión y asiente varias veces.

- lo somos. - dije y abracé de su cuello. 

- no sabes lo feliz que hace venirlo escuchar de ti. - James me toma del rostro y me acerca a el para darme un beso en la mejilla.

- ¿y por qué no dijeron nada? - Charlotte pregunta. - ¿te avergüenza admitir que el es tu novio o algo?

- no para nada, de hecho todo lo contrario. Fascinada con que el sea mi pareja. - dije y ella se pone de pie para irse a la entrada. Si no me equivoco a fumar.

- oh, yo también quiero. - dice Marty y se va a la entrada.

- felicidades Jamie. - le dice Raquel y yo sonreí ante ello. - deberían venir un rato a la casa después de navidad. Trae a tus amigos de siempre.

- si, trae a Sirius, es super buena onda. - dice Dustin. - a todos.

- de acuerdo, si. Vendremos a pasar un rato. Pero... ya nos tenemos que ir. - James, aun tomando de mi cintura, me levanta para que el pudiera ponerse de pie y luego me baja. - pero me encantó verlos, en serio.

- nos veremos pronto de nuevo ¿okay? - le dice Raquel y estos dos se abrazan para despedirse. - Ginny, fue un placer conocerte. Eres increíble y esperamos verte aquí siempre.

- si, ven el verano. - dice su novio. - tenemos planeado el irnos a Italia todos.

- sería increíble Ginny, así puedes visitar a tu familia de allá. - me siento tan mal por haberle mentido a James sobre eso pero no me quedó mas que asentir con la cabeza. 

Ambos nos fuimos a la salida, donde ahí estaba Charlotte. 

- ¿ya se van? - ella nos pregunta. - ¿o vas a dejarla a su casa y luego regresas Jamie? - ¿cómo puede seguir en ese mismo plan?

- no, de hecho nos vamos los dos. Ginny se esta quedando en mi casa y creo que iremos a cenar.

- bueno... ¿nos ponemos de acuerdo para ir a desayunar o algo? - ella le dice y yo la miré con el ceño fruncido. - nosotros dos.

- luego vemos. - no se si James lo dijo por compromiso o en verdad lo decía de esa manera pero no dije nada. Ella se acerca a el y le da in gran beso en la mejilla, pero esta de mas decir lo cerca que estaba de sus labios. 

- adiós Lily. - ella me dice y esa fue la gota que derramó el vaso. - perdona, me confundí. Es que... pareciera que fuiste la que James consiguió de ultimo minuto por no poder con la otra chica. 

- Charlotte. - James la mira molesta. - no deberías decir cosas así, mucho menos si no son ciertas. ¿qué rayos esta mal contigo?

- descuida James, es cierto. Desgraciadamente yo no soy ella. - le dije mientras me acercaba a James y abracé de su cuello para después besarlo. Unir mis labios con los suyos y saborear de ellos y su muy usual sabor a cereza. James me abraza por la cintura y por igual me regresa el beso. Uno el cual prosiguió lo suficiente para hacerla sentir incomoda. Hasta que me separé y tome de su mano. - pero tu no eres yo, y tu no puedes hacer eso.

- eres una...

- que pases una buena noche. - le dije y me fui de ahí agarrada de la mano de James.