Paso uno: Apariencia y olores.

Atención: Todo lo enseñado en este libro es por mi experiencia trabajando junto a la familia Kim.

El primer paso para poder llamar la atención de un Kim es cuidar tu apariencia y olores; nada de vestir como un vagabundo, oler a desayuno o almuerzo. Cualquier tipo de comida, para resumir. Ellos odian eso.

Tu vestimenta siempre debe ser elegante pero sin exagerar (que son quisquillosos los niños), un traje o vestido, dependiendo de tus preferencias, yo no discrimino (a veces), un maquillaje suave, nada demasiado llamativo, colores pasteles u oscuros.

Pss, eh, chicas, un tip, los labiales los prefieren intensos. De nada.

Y ahora ustedes se preguntarán ¿por qué hago yo esta estúpidez?

Bueno, hay una simple explicación con un lindo nombre; Kim NamJoon a.k.a. el dueño de mis sueños, pesadillas y fantasías -para que negar- sexuales. Y sí, lo voy a enamorar a través de mis conocimientos gracias a los años que trabajé junto a ellos, conozco cada una de sus mañas, manías, gustos, feti-. . .

—Jimin —la grave voz me trae de vuelta a mi trabajo y rápidamente cierro la pestaña donde escribía mi próximo éxito—. Necesito que vengas con nosotros al próximo viaje, ya sabes —solamente asentí perdido en sus ojos, labios y movimientos. Mordí mi labio inferior y un limpia vidri... digo, carcajada se escuchó.

—Lo siento, lo siento —se disculpó SeokJin.

—Bien —NamJoon asintió intrigado y ojeó su celular—. En este viaje sólo seremos tú, SeokJin, YoonJi y yo —comentó y estuve a punto de volver a asentir como un idiota si no fuera por el penúltimo nombre.

—¿YoonJi? ¿Y TaeHyung? —me levanté de mi asiento.

Bien, momento de poner en práctica el paso 1: Mi elegancia y aroma.

Me acerqué a ellos con pasó tranquilo, sacando a relucir mi pasado en las pasarelas, estuve lo suficiente cerca de él para que oliera mi nuevo perfume y ladee mi cabeza.

—¿No recuerdas que le aplastaste un pie con tu vehículo? —esta vez SeokJin habló y lo miré con enojo. Pronto mi cara estaba completamente roja.

—Eso es verdad, además —NamJoon olfateó cual can— ¿qué es eso que huele tan mal? —y salió de mi oficina cual cascarrabias seguido por SeokJin quien me regaló una sonrisa (burlesca, por cierto) antes de girarse.

Cerré la puerta para luego olerme un poco, vamos, mi perfume no olía para nada mal, quizá no era yo lo que NamJoon había olido. Supongo.

Volví a mi laptop dispuesto a escribir cómo había resultado la primera parte del tutorial.

Como lo esperaba, el primer paso funcionó de maravilla (lo digo porque recién lo apliqué) y Kim cayó como un tonto ante el aroma de mi perfume, la elegancia de mi vestimenta y caminar.

¡Hasta aquí el primer paso!

•Kat🐾